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DECADENCIA DE OCCIDENTE

sábado, 2 de febrero de 2013

Corrupción entonces y ahora. Exceso de democracia

Rajoy I el Magnífico ha dicho que él no recibió ni repartió dinero negro. Ha consolado a Ana Mato, cuya vinculación a la trama de corrupción es escandalosa ("tranquila Ana, todos sabemos por lo que estás pasando").

Muy emotivo y conmovedor, pero:

Como pueden ver aquí, en el País, y en la imagen inferior (que pueden ampliar en el original), hay una coincidencia entre la contabilidad del PP gallego y la contabilidad negra de Bárcenas. Dinero que sale de allá y va a ingresar la cuenta del PP de nacional. Una imagen vale más que mil palabras.

Como explica el diario:

"Aunque la dirección nacional del PP ha desacreditado la contabilidad secreta de Bárcenas que ha publicado EL PAÍS, indicando que se trata de falsedades que no responden a la realidad, ese apunte de 21 millones de pesetas en mayo de 1999 coincide milimétricamente con el que apareció, y está incorporado al sumario del caso Gürtel, en la contabilidad del PP gallego hallada por la policía en una caja de seguridad que Pablo Crespo tenía en un banco de Pontevedra. El registro policial se produjo en 2009, cuando Crespo fue detenido por orden del juez Garzón como cabecilla de la trama Gürtel.En esa documentación incautada por la policía a Crespo figuraba un apunte, fechado en mayo de 1999, que decía así: “21.000.000. Sede Nacional. Pago deudas pendientes”. Esa misma cantidad, ese mismo mes de mayo de 1999, fue registrada por Bárcenas en su contabilidad particular de entradas de dinero en el PP con la siguiente anotación: “P. Crespo. 21.000.000”.
La Fe mueve montañas, pero también las inmoviliza. Rajoy ha tomado el camino del inmovilismo, esperando que el pueblo español, sobre todo sus votantes, le crean.

Es posible, porque todo esto se debe a que somos un pueblos borreguil, a la par que anárquico ( lo que es casi un oxímoron). La democracia española en su peculiaridad - dictadura de los partidos sobre Parlamento y la Justicia- se debe en realidad a que nos sienta como un guante. Somos especialmente propensos a adorar, o confiar, en ídolillos como Rajoy & Zapatero, quien ganó dos elecciones. Y les apuesto que Rajoy el Magnífico es capaz de ganar otras, pese a ser un fracasado nato.

Ahora bien, hoy mismo, desde la Corona hasta el más pequeño ayuntamiento hay corrupción. Y ya no hay esperanza de alternativa, porque nadie se salva. Todo esto ha hecho saltar en mil pedazos líneas rojas que, si no se respetan, es muy difícil la convivencia estable y normal. Por ejemplo, el principio de autoridad. Primero, porque ya no es claro quien es la autoridad desde que la jerarquía natural se rompió con las 17 autonomías, que representan un poder muy fuerte frente al Gobierno y dentro de los partidos. Segundo, porque nadie se libra de sospecha.

Mi generación creció en una dictadura; siento decirlo, pero esa dictadura era muy austera y poco corrupta: los alcaldes desempeñaban su cargo gratis. Las generaciones actuales ven normal que el alcalde de unos cientos de habitantes tenga asesor de imagen y coche oficial, y un sueldo de ministro. No existía las Autonomías, con lo cual no existían 17 parlamentos corruptos que han hundido a las Cajas de Ahorros y han hinchado la deuda hasta ser casi impagable.

Cuando la infame dictadura, una Caja de Ahorros tenía unos créditos inferiores a los depósitos de sus impositores (y eso siguió así hasta muchos años después. Raimundo Poveda). Los presidentes de las Cajas se limitaban a dar créditos a los más necesitados, pero con riguroso criterio vigilado por el Banco de España. Por supuesto que había corrupción, pero de una proporción risible en comparación con la de ahora. La Deuda Nacional que dejó el dictador era ridícula, inferior al 20% del PIB. Ese legado se ha dilapidado en 37 años, ahora debemos más que nunca, y yo creía que este gobierno era el único capaz de de enderezar la situación de quiebra. ¿Cómo van a exigir nada a la gente, si están hasta las cejas de porquería? Es más, como se va a respetar algo tan esencial como la propiedad, si el Gobierno la conculca con gran alegría? Sabíamos que el PSOE, como partido de origen marxista, la propiedad no estaba en sus prioridades. Hoy sabemos que el PP, de derechas, no respeta la propiedad, lo que viene a ser lo mismo.

Todo esto no lo digo en honor del dictador -ni sugiero una solución de ese tipo-, sino en descrédito de nuestra capacidad para gobernarnos sensatamente. Es bochornoso que así sea, pero es así. La democracia española esta a punto de perecer por exceso de democracia.

Me parece cada vez menos lejano, como mal menor, es una solución a lo Monti, que pudiera reformar lo más urgente: las autonomías. Pero he de decir que no me entusiasma, pues es una solución impuesta de fuera, y temporal.

Yo criticaba a Rajoy por otras cosas, pero le suponia honrado. No me esperaba esta cochambre.

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