"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

lunes, 21 de enero de 2019

Nuevas perspectivas geoestratégicas con el Brexit

El final de la II Guerra Mundial configuró el nuevo orden, que más o menos ha durado hasta hace poco. EEUU era la gran potencia, y los paises europeos occidentales eran sus aliados naturales; todos ellos se unieron formalmente en torno a la OTAN. EEUU hizo lo posible para reforzar esa alianza y a Europa, por ejemplo con el Plan Marshall, que la URSS desdeñó y obligó a desdeñar a los demás países del Este. La Comunidad Europea, luego la UE, tiene parte de su sentido estratégico en su alianza con EEUU en la OTAN, organismo de defensa que protegía a los paises europeos del aliento de la URSS en nuestro cogote. 
La caída del muro de Berlín y de los paises comunistas quitó casi todo su sentido a la OTAN, que ha venido sobreviniendo más mal que bien, gracias a la voluntad expresa de los paises europeos, sobre todo los nuevos miembros provenientes del antiguo comunismo, huyendo de los horrores del comunismo sovietico impuesto desde Moscú. 
La integración de estos países del Este - antiguo Pacto de Varsovia -, en la OTAN sentó muy mal en Rusia, que tras unos años titubeantes con Boris Yeltsin, llegado Putin se ha convertido en un poder militar hostil a Occidente, probablemente por el estrechamiento de su franja fronteriza que le permitían éstos países en torno a ella. 
La emergencia reciente de China no ha venido más que a complicar las antiguas alianzas estratégicas, y más desde que Trump está en La Casa Blanca. Trump no engaña a nadie y ya ha dicho que no se fía de los europeos, a los que desdeña como aliados - lógico si se tiene en cuenta que sólo Reino Unido ha mantenido un poder tecnológico-militar brillante, y que hay altas posibilidades de que salga de la UE. Reino Unido se alinearía con EEUU, como factor negociador de las nuevas alianzas, y Europa se quedaría en una posición totalmente decadente, por muchos esfuerzos que hiciera para construir un entranado militar suficiente. Países del Este como Polonia y Hungría se sentirían más a gusto junto a EEUU que en su posición actual en una OTAN a la que Trump está deseando darle la patada. 
Si eso llega a suceder, sobre todo si el Brexit sigue adelante, nos encontraríamos con una UE descompuesta y tironeada desde todos sus rincones, sin ningún valor fundamental para nadie, y con un triunfo de los grupos y partidos que están deseando romperla. La fragilidad de la Unión aumentaría exponencialmente.
EEUU se sentiría más libre para negociar un status quo a tres bandas con China y Rusia: una, como dice Enrique Navarro, nueva guerra fría a tres polos. Nosotros (Europa, pero especialmente España) no pintaríamos nada. Y no me vengan con vocación de neutralidad. Suiza es neutral porque le conviene a las potencias mundiales, no depende de la puerilidad de uno. 
 Ya dije ayer que la posición internacional de un país es básica para su tranquilidad y bienestar internos. Lo lógico es pensar que España se quedaría en satélite de no sé quién, porque la orientación de Estado en uno u otro sentido no está clara. Las palabras no bastan, y decir que pertenecemos a Occidente son palabras huecas si no hay hechos detrás, pero me temo que ni a los hunos ni a los otros les importa un pimiento la cuestión. Nunca nos ha importado la política exterior, y menos ahora que estamos ensimismados con las Autonomías, Andalucía y sus elecciones (¡creen ha cambiado algo!) y las próximas elecciones autonómicas y locales de mayo. 
Es lógico que cuando el poder se dispersa el interés común disminuya. Pues eso. No se ha sabido compartir autonomías con intereses de todos, y así nos va. 
En todo caso, se acerca un mundo bien distinto al que conocemos, y para nosotros, en nuestra esquina europea, será un mundo - creo, y ojalá me equivoque - decadente. No me canso de repetirlo: Ojalá esa decadencia sea lenta. 

1 comentario:

interbar dijo...

Trump dice en voz alta lo que ya pensaban en tiempos de Obama e incluso de Bush hijo.