"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

jueves, 22 de julio de 2021

Florentino Pérez, la pasión más humana

Florentino Pérez ha perdido el sentido de la ilusión de crear un gran equipo que gane títulos. Florentino está enroscado a una vil pasión, la pasión de pasar a la historia, de dejar huella en los hombres, cuando él no esté.
Es una pasión generalmente desatendida, de la que no se habla, pero que a partir de una cercanía a la muerte, se vuelve incontenible, más cuanto más se niega. 
A Florentino no le interesa más ganar otra copa de Europa - Champions, se dice ahora -. Se le acaba el tiempo y tiene otras obsesiones, como haber construido el mejor estadio del mundo ( que luego ineluctablemente será superado por otro). Yo no descarto que no ceda a la tentación de ponerle su nombre, lo que sería una gran traición a la historia del RM.
La pasión por pasar a la historia es negada por los que la padecen, e incluso no es muy estudiada por los psicólogos de hoy, aunque fue un gran tema en el Renacimiento y los Clásicos. Para los grandes hombres del Renacimiento era común la legitimidad, incluso la obligación, de buscar la gloria, gloria que debía extenderse al más allá, por los medios lícitos o no que fueran. Léase a Maquiavelo. Pero léase sobre todo a Unamuno, en “El sentimiento Trágico de la vida”, donde se explica que esta pasión está correlacionada con el vacío y el tedio de la vida que se adivina en el más allá, del que no se espera nada bueno. La pasión de sobrevivir en el más allá es el origen de esta incontrolable pasión, y no hay que descartar que estuviera presente en los grandes santos, mezclada con el ansía de vida eterna declarada. ¿No dejó santo Tomas una Summa Teológica que es un monumento en la historia? ¿Y san Agustín, con ese monumento a la filosofía y teología que es “Las Confesiones”?
Florentino se ha embebido en su nuevo estadio, confiándole a él su perenidad... y ha abandonado a su equipo, que ya no le interesa, porque está más atento a esa llamada de la muerte que su presente. Éste le aburre, le pone nervioso, y le quita fuerzas para su Gran proyecto que, al fin y al cabo, sólo consiste en darle un óbolo a Caronte.
Cuando uno siente que se le acaba su aliento vital, guarda las fuerzas para cosas menos materiales, y las otras pasiones habituales se apagan. El sexo empieza a aburrir, e inconscientemente uno se entrega al “Sentimiento trágico de la Vida”, sea creyente o no. 

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno, excelente

www.MiguelNavascues.com dijo...

Muchas gracias, anónimo desconocido
Antonio, encantado de hablar contigo.

Calixto dijo...

Hola Miguel.

La construcción del nuevo estadio me recuerda más a la construcción de un mausoleo faraónico. Por otro lado, no imagino a Florentino dándole un óbolo a nadie; lo más probable es que, llegado el momento, le proponga a Caronte que no le cobre por llevarlo al otro lado de río y a cambio construirá un puente de peaje sobre el río Aqueronte para repartirse las ganancias.
Un saludo desde la capital del condado rebelde del Reino de Aragón.
Calixto Badesa

www.MiguelNavascues.com dijo...

Hola Calixto, que buen reencuentro! Cuanto tiempo! Que es de ti?
Sí, el nuevo estadio es una pirámide faraónica, ciertamente...
cuantos recuerdos! Casi consigues que me caiga del sillón con tamaña sorpresa.
¿Cómo te va en la capital de los reinos rebeldes? Mira que sois, iros a Barcelona a trabajar, con lo bien que se está aquí. En vuestro cuerpo purgaréis el pecado.
Bueno, aparte de eso ¡cuanto me gustaría un encuentro contigo, y me contaras...
un abrazo asfixiante, Calixto for ever, hu, hu, hu...

www.MiguelNavascues.com dijo...

Un besazo de Miguel y Moni

www.MiguelNavascues.com dijo...

Tengo una botella de cava en la nevera. Esta noche la beberemos en tu recuerdo.