Triste, justo cuando la tristeza que produce ver al memo de Obama soportar la zafiedad de Raúl Castro, el vigilante del cementerio que es Cuba... Occidente está acabada... no sé cuándo empezó esta melifluidad, este refitolerismo de patatas fritas simbólicas, vaya idea, a quien se le ocurre, celebrar muertos con patatas fritas. Ya no hay formas, no hay solemnidad, sólo ganas de tapar el dolor pensado que será la última. Pues no será la última, queridos inanes, como no lo fue París, porque no tenemos ganas de enfrentarnos a la verdad. La verdad es que es el Islam el que alimenta esto, no hay una barrera infranqueable entre islam e islamistas. Estoes una pesadilla, de la que uno no se cura siguiendo dormido. Y ante tanta banalidad, yo diré "je ne suis pas Bruxelles".
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Ponga Ud. lo que quiera, Muestre su airada y justa indignación, su santa Ira, pero respete un mínimo sentido del decoro. Tenga en cuenta que las opiniones son libres, los sentimientos ofendidos dignos de reparo, pero serán tanto más respetados cuanto su expresión esté más alejada de lo vulgar.