Collé a la Peau. Pegado a la piel

.Si alguien duda de los fines del Islam, que se pasee por blogs como:
- "Gates of Vienna" o
- the Conservative Beach Girl,
 y sus entresijos y derivaciones, conexiones, y documentaciones.
El Islam. como dice Mark Steyn, "no es una religión". Sus fines proselitistas no son inocentes y exentos de estrategia, como demuestra el intento -cada vez más contestado, afortunadamente- de hacer una Mezquita en la Zona Cero de NY. No se puede pensar que es simple torpeza. Cualquier otro -como hizo hace poco la Iglesia, en su intento de hacer un convento cerca de un campo de exterminio alemán- rectificaría ante la contestación crecciente. Y Obama, con su apoyo al proyecto-mezquita, se ha metido en un avispero.
En "La Puerta de Viena" (clara alusión a las veces que estuvo Viena a punto de caer en manos sarracenas, y, quizás, al nombre del entonces pujante imperio turco: Sublime Puerta), se exhibe un link a una página de intenciones del Imám Abdul Rauf, que  es quien promociona la edificación de la Mezquita (que se iba a llamar "casa de Córdoba")
http://bigpeace.com/files/2010/08/http___174.132.114.190_arkdev__qcontent_shariah-index-project.pdf
como se lee negro sobre blanco, se trata de un proyecto de expansión de la Sharia, en el que no falta la elaboración de un índice de países según su acercamiento mayor o menor. como si no hubiera pruebas de la difusión del terrorismo desde las mezquitas acogidas en países occidentales.
Todo esto se está tomando a broma.Pues no lo es. EEUU, el país más orgulloso -con motivo- de sus Fundamentos, está cayendo en la debilidad de creer que la libertad religiosa es ilimitada. La Libertad religiosa, base de la edificación de ese país, y de sus libertades, está ofuscando a la izquierda, hasta el punto de que un intelectual judío como Krugman está a favor de la Mezquita (con el argumento de que él ha experimentado el oprobio al judío que  no deben probar los musulmanes).
Afortunadamente, la mayoría de los americanos han reaccionado contra el proyecto, pero los políticos están apoyándolo.
¿Es posible confiar en que la expansión del Islam tiene fines pacíficos? A esa pregunta contesta el finado rey de marruecos, Hassan II, en un vídeo impactante, en un francés perfecto, colgado en "Gates of Vienna" (y aquí):
"Un dirigente de un país musulmán no puede ser laico. Si lo afirma, ya deja de ser musulmán. Los musulmanes tenemos "pegado a la piel" nuestro código religioso (la Sharia) tanto en el plano del derecho civil como del derecho público".
 Collé a la Peau: Pegado a la piel. no lo olviden.