La Reserva Federal ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento, y ha anunciado que no seguirá reduciendo su cartera de activos, actualmente valorable en 2,054 billones de $. Para ello adquirirá bonos del Tesoro, para compensar los activos que van venciendo. (activos hipotecarios que se reducen a la tasa de 10-20 mm de $/mes). Este anuncio ha producido una nueva bajada de los rendimientos del tesoro, hasta el 2,78% a 10 años.

Más o menos era lo que se esperaba: Teóricamente mantiene fija la cantidad de liquidez, que por razones de vencimientos estaba bajando lentamente, y deja la puerta abierta a mayores compras del bonos del tesoro si las cosas empeoraran.
En la imagen, el balance de los principales bancos centrales, tomado del
wsj.com/article
No hay comentarios:
Publicar un comentario