"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

viernes, 17 de septiembre de 2021

No hay ni ha habido mercados libres. Ha de decirse mercados habilitados

Dedicado a Polavieja & all (Juandemariana)
No es que yo no crea en el mercado. Lo que no creo es que fue el principio de todo, como parecen creer Hayek, Mises y todos los denominados “Austriacos”. Como Duncan Austin, creo: 

El defensor del "libre mercado" se encuentra en la posición disonante de desear que los actores del mercado sean los únicos conferidores de los nuevos derechos de propiedad y al mismo tiempo depender del gobierno para defender una norma general de derecho que es la condición necesaria para que la propiedad sea significativa. De hecho, debido al carácter indispensable del estado de derecho, deberíamos ser más precisos con nuestra terminología. Nunca tenemos "mercados libres". Solo hemos tenido "mercados habilitados", mercados habilitados por una autoridad capaz de defender el estado de derecho que da sentido a la propiedad. El idioma importa. “Mercados libres” es un término muy engañoso, que se utiliza habitualmente como un principio universal inexpugnable para encubrir una agenda más parroquial. Con demasiada frecuencia, lo que los defensores del "mercado libre" realmente defienden es un sistema de "mercados habilitados donde los queremos y no donde no los queremos". O, dicho de otra manera, el lema de trabajo del neoliberalismo ha llegado a ser: “algunos mercados son la solución; el gobierno es el problema.”

Y como Polianyi, creo: 

“Permitir que el mecanismo del mercado sea el único director del destino de los seres humanos y su entorno natural ... resultaría en la demolición de la sociedad ”.

Es decir, creo en que Maquiavelo y Hobbes estaban más cerca de la verdad cuando dicen que toda asociación de humanos es posible si sólo si hay una autoridad que marca ciertas reglas, reglas que con el tiempo se van haciendo  más complejas y acaban protegiendo leyes generales que defienden la propiedad privada y los derechos de contrato. 
Creo en el mercado protegido por La Ley, fruto del Estado.
El mito de hombres libres intercambiando bienes y aumentando así la eficacia de la acción humana es eso, un mito, que además se rompe en pedazos cuando se introduce el dinero, generalmente también protegido por el Estado, porque es difícil imaginar un dinero sin protección de la fuerza. El supuesto de los austriacos no es cierto. Adam Smith claramente no creía en él, y comienza su defensa del mercado sólo con la presencia de un estado. 
El estado puede ser, obviamente perverso, pero resulta ser la fuente del derecho.
Sin embargo, las creencias son libres, ¿no es cierto? Aunque no sean verdad.  Aunque no sean verdad. Pero hay que decir que estas creencias son de raíz roussionanas, que llevan, como dice Polianyi, a la implosión de la sociedad.

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