"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

martes, 18 de octubre de 2011

Los mercados aman la inflación


FRED Graph
1. Bonos corporativos BB y B. Expectativas de inflación
EEUU. En el gráfico de arriba, Escala izquierda, los  rendimientos (spreads sobre bonos del Tesoro) de bonos corporativos BB (línea roja) , y B (verde). Escala derecha, línea azul, expectativas inflacionistas (tipo de bono a 10 años menos idem protegido de inflación). Se detecta una relación funcional entre las variaciones de las expectativas de inflación y las de los rendimientos de bonos privados. A mayor inflación esperada, menores rendimientos exigidos a las empresas (en comparación con el bono público), y al revés, como se aprecia. Obsérvese el violento sube y baja en la zona de recesión (zona gris).
En el gráfico dos, vemos cómo las mismas expectativas de inflación (azul, escala derecha) también parecen actuar sobre  la bolsa (roja, escala izquierda), y bajarla cuando se desinflan.
Conclusión: las expectativas de inflación, en determinado contexto como el actual, de debilidad e incertidumbre, se correlacionan positivamente con los precios de los activos privados.
FRED Graph
2. Índice S&P y expectativas de inflación
Esto podría interpretarse en dirección opuesta, pero sería más complicado. Lo más natural es pensar que las expectativas de inflación van unidas a expectativas de mayor PIB, y eso reduce las primas de riesgo sobre los activos que, a diferencia del bono del Tesoro, contienen un considerable riesgo de capital. A la vez que aumenta el apetito al riesgo,  ciertamente se disipa el interés por el bono del Tesoro.
Los mercados son sensibles a los signos de inflación en determinado contexto. O, como Dice David Glasner
"investors don’t fear inflation, they yearn for it", o más aún, "Markets love inflation", (aquí).
No es nada nuevo. Simplemente, hoy no se considera relevante. Se ha borrado de la memoria colectiva. La inflación ahora es el mal absoluto, el PIB real el bien absoluto. Como dice Tim Bond (citado en Glasner):
"The underlying defect in QE is that it stirred investors’ fears of monetary inflation, whilst stimulating the wrong sort of inflation in the wrong places. The early positive economic effects were subsequently overwhelmed by a negative inflationary blowback that played a key role in disrupting the recovery.
Mentira.
Dedicado con todo amor a los economistas españoles de las telas de araña en los ojos que no les dejan ver la araña.

No hay comentarios: