El primer escrache de la historia se pierde en la oscuridad del fondo de los tiempos. Pero el tipo de escrache que hoy vivimos, tiene un antecedente escalofriante en el comienzo de la persecución de los judíos por los nazis.
Todo empezó cuando Hitler, llegado al poder por las urnas, legalizó el escrache a los judíos, siguiendo sus programa máximo marcado con sangre en su Mein Kamfp. Siempre se atuvo con gran fidelidad a lo que expresó en ese funesto libro, y nunca ocultó sus intenciones.
Los judíos habían llegado a ser un grupo social integrado en la sociedad, hasta el punto de que fueron a luchar, como los demás, al los frentes de la primera Gran Guerra. Por eso no entendieron nada cuando la policía iba a sus casas y mostraban orgullosos su cartilla militar: no les sirvió de nada.
Una vez declarada la caza libre al judío, se empezó a vivir lo que es el escrache de baja intensidad, para ir inmediatamente al "hard scrache": signos degradantes, expulsión de ciertos círculos, ataques la propiedad, acoso a la familia... Todo lo que vemos hoy aquí e formas aparentemente inconexas, pero en realidad con un empuje común.
Me imagino a esa tal Colau, gran profesional de este tipo de acciones, que dirige este movimiento: ¡pero nosotros no somos racistas, no escracheamos nada más que a lo políticos responsables! etc, etc... Uds. Desde un punto de vista de esos derechos consagrados en los países decentes, están haciendo exactamente lo mismo que hiciesen con esos judíos alemanes que de repente se encontraron acosados, luego perseguidos, luego acorralados sin poder huir, y luego finalmente sacando billete hacia un horno crematorio. El coste de su liquidación lo pagaban ellos con sus bienes y la venta del producto de sus restos.
No digo que Uds. serán los que sigan ese proceso hasta el final. Sí, es verdad, Uds. No han hecho más que mostrar la punta del Iceberg. Pero detrás de Uds. Vendrán otros que proseguirán, que iniciarán las siguientes fases. ¡Hay un gran futuro en el escrache! En realidad no se le ve fin; el gobierno actual está débil, (como lo era el gobierno alemán de la República de Weimar) y al caos y al vacío de poder se ha unido entusiásticamente el PSOE, un partido de arribistas, hundido por su fracaso en la legislatura anterior, sin liderazgo, sin ideas más que romper el reglamento de esa democracia de la que ellos se jactan de ser los únicos defensores auténticos. Si es que no dirigen directamente el escrache, pues para ellos vale todo, incluso sacar partido a un atentado con 200 muertos en pleno estupor de la gente, explotando el dolor de las víctimas y de los sentimientos convulsos en esa situación. Sólo eficaces en la propaganda tenebrosa.
El escrache es un síntoma de un estado social en descomposición imparable. Es un síntoma de debilidad de la autoridad legítima, debilitada y acosada por muchos y variados frentes. La debilidad gubernamental es el peor síntoma que puede haber en una sociedad. En ese vacío se está formando el futuro. Un futuro que se forma en el caos, la inanidad de la ley, la desesperación, la ley del mas fuerte, no sabemos como será, pero sabemos que no será benéfico, ni justo, ni bueno. Los escracheadores son juguetes, en realidad, de ese futuro que no conocemos. Son los parteros de ese futuro que ella creen que será suyo.
Todo empezó cuando Hitler, llegado al poder por las urnas, legalizó el escrache a los judíos, siguiendo sus programa máximo marcado con sangre en su Mein Kamfp. Siempre se atuvo con gran fidelidad a lo que expresó en ese funesto libro, y nunca ocultó sus intenciones.
Los judíos habían llegado a ser un grupo social integrado en la sociedad, hasta el punto de que fueron a luchar, como los demás, al los frentes de la primera Gran Guerra. Por eso no entendieron nada cuando la policía iba a sus casas y mostraban orgullosos su cartilla militar: no les sirvió de nada.
Una vez declarada la caza libre al judío, se empezó a vivir lo que es el escrache de baja intensidad, para ir inmediatamente al "hard scrache": signos degradantes, expulsión de ciertos círculos, ataques la propiedad, acoso a la familia... Todo lo que vemos hoy aquí e formas aparentemente inconexas, pero en realidad con un empuje común.
Me imagino a esa tal Colau, gran profesional de este tipo de acciones, que dirige este movimiento: ¡pero nosotros no somos racistas, no escracheamos nada más que a lo políticos responsables! etc, etc... Uds. Desde un punto de vista de esos derechos consagrados en los países decentes, están haciendo exactamente lo mismo que hiciesen con esos judíos alemanes que de repente se encontraron acosados, luego perseguidos, luego acorralados sin poder huir, y luego finalmente sacando billete hacia un horno crematorio. El coste de su liquidación lo pagaban ellos con sus bienes y la venta del producto de sus restos.
No digo que Uds. serán los que sigan ese proceso hasta el final. Sí, es verdad, Uds. No han hecho más que mostrar la punta del Iceberg. Pero detrás de Uds. Vendrán otros que proseguirán, que iniciarán las siguientes fases. ¡Hay un gran futuro en el escrache! En realidad no se le ve fin; el gobierno actual está débil, (como lo era el gobierno alemán de la República de Weimar) y al caos y al vacío de poder se ha unido entusiásticamente el PSOE, un partido de arribistas, hundido por su fracaso en la legislatura anterior, sin liderazgo, sin ideas más que romper el reglamento de esa democracia de la que ellos se jactan de ser los únicos defensores auténticos. Si es que no dirigen directamente el escrache, pues para ellos vale todo, incluso sacar partido a un atentado con 200 muertos en pleno estupor de la gente, explotando el dolor de las víctimas y de los sentimientos convulsos en esa situación. Sólo eficaces en la propaganda tenebrosa.
El escrache es un síntoma de un estado social en descomposición imparable. Es un síntoma de debilidad de la autoridad legítima, debilitada y acosada por muchos y variados frentes. La debilidad gubernamental es el peor síntoma que puede haber en una sociedad. En ese vacío se está formando el futuro. Un futuro que se forma en el caos, la inanidad de la ley, la desesperación, la ley del mas fuerte, no sabemos como será, pero sabemos que no será benéfico, ni justo, ni bueno. Los escracheadores son juguetes, en realidad, de ese futuro que no conocemos. Son los parteros de ese futuro que ella creen que será suyo.
3 comentarios:
Te pagan por escribir estas memeces? O sea es lo mismo ir a mostrar tu queja al responsable de que te lo quiten todo o al politico que puede cambiarlo, con ir a donde los Judios por que son Judios y matarlos? Tu eres tonto no? Espero que te quedes sin casa y con una deuda monstruosa con el bacno, que te quedes sin trabajo y los intereses desorbitados e usureros te dejen sin nada, a ti y a tu familia, a ver que dices luego mendrugo. Los hijos de los politicos no pueden ver como protestan a sus padres , pero los hijos de los obreros pueden ver como 50 policias les sacan a todos arrastras de casa y se quedan en la calle. Eres un sinverguenza y espero que te arruines.Para pedir que se te respete en los comentarios respeta tu a la gente NAci de mierda.
Evidentemente, tu tono y ru violencia verbal me dan la razón en lo que digo. Eres una muestra "anónima" de la cobardía que se ampara en el anonimato para agredir indiscriminadamente, incluso a una simple opinión. Me alegro que te hayas acercado, pues eres una prueba palpable de los tiempos que se avecinan si la ley no vuelve a inperar. El terror de los incivilizados.
Por cierto, que me parece que he denfendio varias veces a las víctimas de los abusos bancarios. Baje la mirada un poco, hasta el post Bail in, si no es demasiado complejo para sus aguerridas neuronas.
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