La tecnología cambia hábitos. Una estampa. Hoy, tomando el aperitivo en un chiringuito. Llega una familia -él, ella- yo lo que parecen cinco hijos, todos adultos, es decir, mayores de dieciocho. Entre esa edad y digamos treintaitantos.
Se sientan. Piden de comer, e, inmediatamente, cada uno de los hijos sacan su phone y se ponen, ceñudamente, con enorme aplicación, a mirar fijamente cada uno su aparato, como los monos cuando se escarban la pulgas. Lo de los monos he de decir que me surge de que van todos los cinco medio vestidos, con camisetas de tirantes, es decir, el sobaco al aire y no depilado, bien peludo, por el contrario.
Una escena habitual, me dirán Uds. Yo estoy hasta los mismísimos de verla en variadas circunstancias: playa, barrio, patada del autobús, metro, taxi, tren, etc.
Me llaman la atención dos cosas: la pérdida de la estética (sobacos peludos al aire, barbas sucias, cabello mal arreglado, no arreglado, arreglado mal, o yo qué sé... Por supuesto, pantalón corto) y la pérdida total de la comunicación directa con el entorno. Esto es literal: les da igual el sitio, la comida, que más bien parecen circunstancias transitorias, lo que les importa es el silencio de los demás que les permita meterse en faena, escarbar la pulgas al aparato que se consideró un día una aportación tecnológica increíble a la humanidad. Y lo es, sin duda.
La visión del mundo a través de una mini pantalla. Cualquier rincón del mundo accesible a través de una superficie de una cajetilla de tabaco. Uau!!! A todo esto, tengo entendido que en su comunicación con el exterior ( a través del artefacto) ya no hace falta saber palabras, ni ideas, menos esquemas mentales. Simplemente monosílabos bastan. No lo crítico, igual están inventando un lenguaje mejor, más intuitivo, sin reglas, en constante evolución... Lo que me temo es que sólo útil para el vis a vis, no para comunicar una novedosa idea al mundo, en fin, no sé.
¿Ortografía? Cero. Pero ¿no descubrirán al final que es un estorbo? Sintaxis? Ídem. Un estorbo de los viejos.
Llega la comida, y entonces dejan por un momento su amado artefacto a un lado y comen. Entonces sí se permiten hablar entre ellos. Es decir, la comida es una molestia que interrumpe lo que realmente les apetece, sea comunicarse con su choni o con sus coleguis, o sea jugar a unos de esos sesudos juegos que cuando los he probado han acabado con mis nervios, o sea lo que sea lo que es traen de ahí.
Pero comen rápido, sin guardar formas, que ralentizarían la ingesta. De repente, a uno le llaman por el cacharrín, y eso le devuelve a su realidad: se levanta y se va a 20 metros para hablar, como si fuera un alto ejecutivo en una comunicación estresante. Mmmmm! Se nota un poco de tensión en sus gestos! Parece un personaje de serie de Tv, pero en gayumbas y rascándome el sobaco peludo. Cuelga y se queda pensativo un nano segundo. Vuelve a comer distraídamente. Algo ha pasado, ya no es el mismo, y los demás ¡no se enteran! No se dan cuenta que a ese chico le ha pasado algo realmente importante! Ha podido ser cualquier cosa: que su novia le ha dejado por otro, que le han echado del curro, que ha ganado el premio Nobel, pero eso, ¿como se dice a los demás?
Supongo que tendrá que decirlo a través de internet, anunciarlo a todos, en Twiter, joder es más fácil y lo pilla el mundo entero, millones de colgados, mientras otros tantos millones están colgando lo mismo. Así se entera antes "los-que-le-siguen" que su madre.
Lo que no entiendo es: si tiene el Mundo en sus manos, por qué viajan cada vez más. Cada vez más gente va a sitios panorámicos, de guía turística, millones, miles de millones, contaminan un huevo, defecan, dejan residuos (que no sé por donde ni a donde se evacuan, no veo tanta ventaja en atraer turistas, todos vienen a esar su mierda aquí, u cada vez es más caro porcesarla según las reglas que sus países no cumplen) y todo para hacer lo mismo: llegar, sacar el cacharro, y hacer click, una foto, mientras se rascan el sobaco. Todos la misma. Mil millones de la misma foto que se puede ver mejor en cualquier página de Google. Luego viene la parienta por detrás y dice: pero no has enfocado bien, déjame a mí, y zas, otra foto idéntica. Por ai acaso "no ha salido" se repite la operación. Luego llegan a casa y hay que evitar encontrarse al vecino que quiere enseñarte las fotos de la vacaciones, qué paliza.
Y todos con las mismas chancletas. Hemos llegado a la uniformidad comunista a través del capitalismo. Eso, ni Mao se lo creería. Chancletas, Bermudas, camisetas de sobaco al aire y maquinita... yo espero que un día sean capaces de rasurar, entonces me compraré una.
Y eh! Que conste, yo le veo inumerables ventajas. Por ejemplo, lo fácil que es quedar con alguien y no tener que decir nada. Eso sí, hay que montar otras estrategias para ligar. Si consigues quedar con alguien, debes ayer su número de móvil para hablar preferentemente a a través de él. La parejas se sentarán frente a frente y harán el amor a través del phone. A veces se montarán uno sobre el otro, como los monos, pero puede pasar que sea otro el que se monte sobre tu pareja y no te enteres. Tampoco ella se enterará que ha sido otro. Es lo bueno, técnicamente no hay adulterio.
"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James
There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)
3 comentarios:
Jajajajajajajajajaja
Espectacular!!!!!!
Hola, has legado ya a Zara?
Nein, me he leveraged en Marbeille...mira, otros postmodernos, los deflatjapos...puedes hacer otro post como este
http://japandailypress.com/tokyo-clinic-launches-live-snail-facial-therapy-1532285/
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