El Problema

Última Carta de Pedro J Ramírez a El Mundo, que éste no ha publicado, para bochorno de su director, Casimiro G.A. La carta es despiadada con Rajoy; ha de leerse. En ella P.J. define a Rajoy como un estafermo, artilugio giratorio como el de la figura, con el que se entrenaban los caballeros para el torneo. El muñeco sólo se mueve como reacción al golpe recibido en el escudo, y gira y puede golpear a su vez al caballero si éste no es ágil. (La imagen la del mismo texto de P.J.)

Bueno, pues nada, esta es probablemente una de las últimas acciones liquidadoras de Rajoy el Estafermo, como lo llama en la carta PJ. Digo de las últimas, porque creo que se le está acabando su fuerza política. La fuerza empieza por la confianza de los suyos, y los suyos ya murmuran contra él.

La ironía de esto es que ahora, como decía en el post anterior "Chismes", la mano derecha del Estafermo -Soraya SdS- esté tonteando con J L Cebrián para quitarle de en medio. Parece de locos, pero cuando las cosas van mal, suelen sudecerse estas locuras. Sucede, me digo, porque nadie de valía quiere tomar el poder, aparte de que sospecha que no le van a dejar llegar. Este es un sistema de cooptación muy cerrado. Es una aparente democracia, de la que sólo conserva el nombre. (Parece mentira, un tipo medio liquidado, Cebrián, resucitado por el estafermo en uno de sus giros.)

Claro que liquidar a Rajoy el liquidador no quiere decir que quién le suceda vaya a ser mejor. Lo que si se puede prever es que con Soraya -, sobre todo como marioneta de Cebrián- las cosas irían peor y antes llegará don Pablo Iglesias a la Moncloa. Es casi una operación aritmética.

Antes decía que mañana empieza otra historia de España. No lo digo en plan grandioso, como una definitiva trayectoria. Lo digo como giro respecto a los últimos 80 años, justo cuando se líquidó el régimen de la Restauración (exhausto) y estalló la República que se convirtió ella misma en problema. Quiero decir que me parece que la farsa de referéndum de hoy no se va a quedar como una anécdota en el camino, un tropiezo sin más consecuencias, que luego sale en la letra pequeñita de la Historia. Que sea un giro definitivo depende de cosas imprevisibles, como es la Historia, una sucesión de consecuencias no buscadas a la acción y reacción de unos y otros.

Pero sí veo posible que gracias al estafermo (Rajoy), empieza un fase de liquidación de régimen. Rajoy no ha dado la cara, se ha quedado en las sombras, esperando que la economía y los jueces, y el soborno, hicieran su trabajo. (Eso sí, antes ha sido capaz de asfixiar a las voces molestas, las voces que le habían impulsado al poder.) Si él no ha sido capaz de arriesgar lo más mínimo, no se ve a ningún sucesor capaz de hacerlo.

¿Soraya, Pedro Sánchez, el Coletas? ¿Cataluña, la deuda, la economía, el paro? Son problemas esquinados que se enganchan unos con otros. Todos ellos juntos son El Problema. No pueden abordarse desde el punto de vista técnico, uno por uno. Hace falta aunar una voluntad política decisiva. Es decir, hace falta liderazgo, algo que ha desaparecido de la faz de la tierra española. Liderazgo es capacidad para aunar voluntades y confianza. Lamentablemente, en el páramo en que vivimos, sólo Artur Mas lo ha demostrado para desgracia nuestra y de Cataluña.

Es decir, que El Problema es no sólo un conjunto trabado de problemas, sino también la ausencia en el horizonte de liderazgo para encauzar el camino de decisiones.

Detrás de el liderazgo debe haber una clase intelectual preparada: debería empezarse con una coincidencia general ( que no unanimidad) de las clases dirigentes, de las inteligencias, en definir el problema. Sinceramente, creo que la desorientación de las clases dirigentes es de tal magnitud, hay tal grado de intrusismo, que no veo de donde va a salir la clarificación necesaria en el punto de partida.

Sobre todo porque el problema concierne a Europa, y la clase intelectual se ha encastillado en una consigna muy alejada del problema europeo. (Ver post siguiente.)