"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

lunes, 1 de mayo de 2017

El día en que Tsipras traicionó a su pueblo

2015. Se acababa de celebrar el referéndum Griego sobre si se aceptaban o no las condiciones requeridas por el Eurogrupo para rescatar de nuevo (la tercera vez) a Grecia. Tsipras, primer ministro, había convocado el referéndum para reforzarse en su enfrentamiento con la UE. Para sorpresa de todos, el pueblo Griego votó un rotundo NO a las condiciones draconianas. Para mayor sorpresa de todos, Tsipras decidió volver a negociar y rendirse en todos los frentes, aceptando unas condiciones peores aún que las votadas en el referéndum. ¿Que pasó en esas 24 horas? 
 Según lo cuenta Varoufakis en su reciente libro,  "Adultos en la sala" - del que el Telegraph entresaca algunos capítulos -, Tsipras sufrió un  ataque de cangüelo, le insinuó algo de un posible golpe de estado, y decidió dar la vuelta al sentido del referéndum, rindiéndose incondicionalmente ante los burrocratas de Bruselas. 
Varoufakis no se lo podía creer. Una tragedia griega con todos sus aditamentos convertida en una docudrama vergonzoso. 
Pueden leer lo demás en el Telegraph, en donde hay también un artículo de Evans-Prichard sobre el tema. 
El domingo, en Francia, podríamos asistir al mismo docucrama si Marine Le Pen se lo pone difícil a Macron en la segunda y definitiva vuelta. Macron tiene casi todas las de ganar, pero no todas. Esta vez los perdedores de la primera vuelta no cerrarán filas en torno a él, y si la abstención es alta, Le Pen tendría algunas posibilidades. García Domínguez ha hecho sus cábalas, que le conceden alguna chance a Marine. Una alta abstención reflexiones rezaría la fidelidad del voto garantizado. 
Entonces, Marine se vería acosada por un muro invisible, pero cierto, de presiones de todo tipo - de Europa y de dentro - para que renuncie a su objetivo estrella de cargarse el euro. Se podría ver en la misma posición que Tsipras, lo que daría lugar a situaciones peculiares e imprevistas... ¿sería capaz Le Pen de dar un giro de 180 grados por la presidencia de Francia? Yo creo que sí. Sobre todo si los mercados desatan todas las furias.
En fin, que no esperan días entretenidos... 

2 comentarios:

Pablo Bastida dijo...

Por cierto, ¿quien es el entrañable caballero de la foto?

www.MiguelNavascues.com dijo...

Paul Léautaud