"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

domingo, 14 de enero de 2018

Rodrigo Rato

Rodrigo Rato hizo una exhibición en la comisión del congreso de indignacion profunda, chulesca... y fuera de tono. Rodrigo Rato no tiene derecho a nada. No fue un buen ministro de economía, pues España creció por la burbuja, debida a que el euro permitió bajar mucho los tipos de interés en toda Europa, sólo porque le venía bien a Alemania. Alemania salía de una larga recesión por la Unificación alemana, y le venía de perlas que el tipo de interés  fuera bajo. Bien, lo que pasa es que recién instaurado el euro y el BCE, ese tipo de interés se impuso en toda la zona euro, lo que puso muy barata la especulación en países como España. A ello se unió un hecho irracional: el euro hizo creer firmemente a los mercados que en caso de tensiones, Europa ayudaría a todos, lo que rebajó las primas a riesgo a cero, tanto la de Holanda  como la de Grecia. Eso era totalmente descabellado, pero se dejó creer. Champán par todos. La chulería de Aznar y Rato, presumiendo de que “España va bien”, no era más que un cinismo (o a lo mejor eran tontos) de crupier de casino. 
Cuando hubo problemas y las primas de riesgo, repentinamente se pusieron a desbocarse, Rodrigo Rato estaba cómodamente sentado en la poltrona del FMI, de la que se apeó cuando empezó la crisis para venir a España a que le dieran un cargazo. Recuerdo una entrevista en la radio en la que ponía por las nubes la película del Ché Guevara, “porque le recordaba su juventud revolucionaria” (con un par).
Es decir, ha ido huyendo según le convenía cada vez que su sillón olía a chamusquina. A todo esto, encima de presumir de ser un mago de la economía porque en España crecía sin medida, y la inflación  también, gracias a la burbuja inmobiliaria. Pero él tuvo el santo descaro de darse un doctorado por la Universidad Complutense con una tesis que era, literalmente, la evolución de la economía española bajo su mandato. 
Mientras, no dejó de trasegar dinero ilegal como un poseso, ya desde que era ministro e incluso en la Dirección del FMI. 
Luego vinieron los tiempos de Bankia (el cargazo con el que soñaba), que sacó a bolsa cuando era una ruina, y él lo sabía. Encima engañó a los depositantes cambiándoles sus depósitos por un enjendro llamado “preferentes”, un engaño como la copa de un pino, pues no eran recuperables en caso de quebranto. Esas preferentes se fueron por el sumidero, y los que las compraron se arruinaron. Si hubo un caso de fallo garrafal en cadena de todas las instituciones protectoras del ahorrador modesto, desde la CNMV al BdE, fue ese. 
Esas instituciones están para remediar la asimetría en la información que hay entre el ahorrador y los bancos. Pues no sirvieron para nada. 
A Rato sólo le faltó ser Gobernador del BdE. Qué pena. 

1 comentario:

Enrique dijo...

No puede ser más acertado lo que se dice aquí (incluída la precisión sobre el doctorado).
No es menos cierto que es preocupante el estado policial que ha instaurado Soraya.