En todo caso, Sánchez ha dado un paso de gigante hacia su futuro; se ha quitado de en medio a los incordiantes nacionalistas/carlistas. Ha puesto el pie en CATALUÑA y será difícil que lo quite.
Siempre se sospechó que el nacionalismo de alta clase del PSC era mucho más fetén que el de los “locos furiosos”. Illa, ¿no es increíble su triple salto mortal desde su ministerio de Sanidad (infame, por cierto, su gestión de la pandemia) a ser investido president, con su Concierto fiscal? Estamos asistiendo a nuevos tiempos, con sorpresas inauditas que un día vuelan un puente u otro una acrisolada fortaleza, sin tiempo para asimilar el sintagma.
Salvador Illa, president, con su cara de seminarista mosquita muerta que no quiere romper nada. A Puigdemont ya no le queda más que hacer el salto de la cabra, mientras la trompeta la toca Sánchez.
A ver cuánto dura el invento. Sospecho que las demás comunidades van a querer meter la cuchara. Entonces veremos si todo salta por los aires.
3 comentarios:
Los socialistas nos han puesto una bomba lapa en.los bajos que estallará cuando pillemos el primer bache (la próxima recesión, tal vez). Va a ser divertido. Y lo mejor de todo: DEBEMOS HASTA LA CAMISA!!! A lo mejor nos cabe el honor como españoles de cargarnos el puto invento de Uropa.
De lo que no cabe duda es que los parásitos de la partidocracia no sabrán parar a tiempo de comerse al estado y la nación. Son como el escorpión ese del cuento. No pueden evitarlo. Mejor dicho, no saben hacer otra cosa.
Así son. El ejemplar Oscar Puente, por ejemplo. Del criadero de la PSOE.
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