Esto es una práctica que suele ser usada en momentos muy señalados. Por ejemplo, lo hizo EEUU para desde 1945 pagar la inmensa deuda de guerra. El objetivo era que los tipos de interés no subieran hasta el riesgo de recesión, que además podría haber durado varios años. La Reserva Federal intervenía en el mercado de liquidez y de deuda para mantener los tipos sensiblemente más bajos que los de mercado. En el gráfico siguiente vemos como, en poco tiempo, durante los años 1950-60, la deuda se vio reducida a mínimos gracias a esa manipulación de mercado, con el acuerdo implícito de los dos grandes partidos de gobierno. Luego la deuda volvió a dispararse y se convirtió de nuevo en problema. Solo que ahora no se puede hacer represión porque sería atacada inmediatamente por los mercados).
Sin esa represión o compresión de deuda, la amortización hubiera durado más y con costes financieros más altos. Por otro lado, la inflación se contuvo y el PIB creció a buen ritmo… es decir, la caída de la deuda/PIB fue sobre todo gracias al crecimiento del PIB. En el siguiente gráfico, vemos el PIB real y el nominal, y hasta el año 1970 aproximadamente, no hubo problemas común la inflación- probablemente porque entonces había un alto grado de “ilusión monetaria”.
La compresión de los tipos oficiales beneficiaron a la inversión privada, y fueron grandes años de la economía de todo los países occidentales.
¿Justifica esto lo que hace ahora Lagarde, comprimiendo los tipos de interés de la deuda? Primero hay que decir que entre los objetivos del BCE está la preservación del euro, que ya en 2012 tuvo una crisis “existencial”, cuando muchos países perdieron la confianza de los mercados y se dispararon los diferenciales de interés de Deuda entre los miembros del euro respecto a los países centrales. Eso era una manifestación de la debilidad de euro que los mercados no desaprovecharon para especular contra él vendiéndolo en corto. Draghi, recién nombrado Presidente del BCE, pronunció su famosa frase haremos “what ever it take”, lo que quería decir que el BCE estaba dispuesto a comprar sin límite deuda de los países bajo sospecha. Inmediatamente se frenó la especulación y volvió la normalidad; nunca del todo, pues ya para siempre han quedado diferenciales entre deudas según qué países.
Y ahora es una de las obligaciones de Lagarde: comprando deuda de según qué país cuyo tipo de rendimiento llega a separarse más de lo aconsejable y podría crear problemas a la ejecución de la política monetaria. Aunque esta expresión sea un poco retórica, pues si se disparan los diferenciales más de una línea, interferirá en la política monetaria, sobre todo cuando ésta es antiinflacionista y deben subirse los tipos de interés: pues si a la vez tiene que comprar deuda para frenar los diferenciales, estará emitiendo más liquidez de la aconsejable monetariamente; a menos que simultáneamente vendiera deuda de otro país para neutralizar el efecto de liquidez indeseado. Es cuestión de que una cosa no invada a la otra. Pero siempre es una amenaza larvada contra el euro y una sospecha de que el BCE no es del todo independiente, al menos a partir de ciertos niveles de tipos de interés reales (es decir, tipos deflactados de inflación), si llega a a ser inferiores o superiores a lo requerido por uno de de los objetivos (aunque Lagarde nunca reconoce el objetivo segundo).
En el gráfico, el PIB nominal y real de los países euro. Es patente que no se han controlado las presiones inflacionistas totalmente, medidas ola la diferencia creciente entre el nominal (verde) y real del PIB (marrón).
En otras palabras, no habrá problemas mientras no haya orejones inflacionista que obliguen a subir tipos y comience a aumentar el diferencial entre países. La siguiente imagen muestra la evolución de la inflación, que se desbordó en 2022 por la pandemia, pero luego no se reduce del todo, manteniéndose en un nivel alto hasta recientemente se ha reducido al 2,2%
Año,Tasa de Inflación Promedio (%)
2019,1.2%
2020,0.3%
2021,2.6%
2022,8.4%
2023,5.4%
2024,2.4%
2025,2.2% (hasta marzo)
Por su parte, el balance de BCE ha evolucionado así:
La barra verde es el activo de deuda pública compara con fines de expansión monetaria(“Quantitavity easing”), cuya contrapartida es la franja roja de abajo, depósitos abonados a los bancos por la venta de su deuda pública. Como ven, ahora hay en el BCE un volumen mucho más grande de deuda pública que en hace diez años, cuando empezaron las operaciones de Quantitavity easing dom Draghi para lichar contra la deflación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario