Tanto siglos de "lucha de clases", de emerger en la sociedad, de equiparación, para darse cuenta de que el que llevaba la manija hasta hace poco (o eso creía) es un ser inmaduro. Y es verdad, que es lo peor. Menos mal que ellas le han quitado al macho el mando a distancia, ¡justo a tiempo!
A todo esto, el varón no se ha enterado, porque, como les ha pasado a todos a la vez... No hay más que oír una conversación entre dos "inmaduros" en su salsa (donde no ha féminas); el gimnasio, por ejemplo. Las conversaciones no son ya como antes, no. Ahora se intenta aparentar responsabilidad, madurez: se pregunta por la parienta, pero no así ¿qué tal la parienta? si no: ¿qué tal Carla, o María José, o Raquel? y por los niños se pregunta por sus nombres; ya no se dice, ¿que tal la tropa, o la infantería?
Ahora se cuentan con pelos y señales los problemas de salud de la parienta, con gran respeto y unción beatifica: que tal su operación de...? -bien pero ya sabes, es latoso, tiene que pasar unos meses de baja, los puntos la tiran... yo me encargo de todo, la comida, los niños, el colegio, los deberes...
¡Si, ya, y un cuerno! si fuera verdad, no te llamarían inmaduro, mentiroso!! es que mentimos como bellacos... inmaduros.
Pero ese rol que nos asignamos, incluso cuando ellas no nos ven, demuestra que no las tenemos todas consigo. Es decir, tenemos miedo de que las paredes tengan oídos, y exageramos -sí exageramos-, aún inconscientemente, nuestra sumisión. Esto sí que es un cambio, ¡atención! antes intentábamos hacernos los machos mandones, ahora no: ahora somos modositos que da gusto, rechazamos ese papel de antes, ¡taannn vulgar!
Cuando un hombre tiene una idea romántica, por ejemplo, se le llama inmaduro. El otro día estaba viendo una telenovela, una escena de los más trivial, de un separado que va a visitar a su hijo. Está hablando con la ex (que le está poniendo los puntos sobre la "ies", como debe ser), y de repente, él ¿quién si no?siente un cosquilleo y le dice un piropo y que por qué no... -¡¡Ay, Jorge, mira que eres inmaduro!!!!
No: Jorge, señora, no es inmaduro, es simplemente hombre. O, si lo prefiere, todos somos inmaduros.
Jorge es que vive en las nubes, como todos (versión más amable, no les parece?).
Y es que no podemos, nos es imposible, estar a vuestra altura de responsabilidad. Desde que tenés la manija,
Tenía un amigo genial que, cuando su "pareja" le cantaba las cuarenta, él decía: "¡Ay, déjame en paz, Carmen, que estoy resolviendo problemas mundiales: el hambre, la guerra, el paro, no me vengas ahora con que el sofá está roto! (ese sí que era un inmaduro vocacional)
El mundo es vuestro, por dos razones: porque es vuestro, y además porque no lo admitís. Estáis en la "revolución permanente", un sueño Troskista (un pobre hombre soñador que murió de un hachazo en la chola, por
Veréis que apenas hay oposición a ese movimiento continuo. Es que nadie se ha enterado, todos hemos asumido el nuevo rol sin grandes traumas, como debe ser. ¿Qué vendrá luego, en dos o tres generaciones?
4 comentarios:
Bueno no estoy seguro de entender todo bien, pero igual dare mi opinion. En todo esto no habra un abandono de obligaciones?. Si ya no quieren tener hijos ...todo esta sobrando. Sobran los hombres pero las mujeres....mucho mas. No se puede entender la realidad de mujeres que no quieren tener hijos. cuando yo andaba por los Llanos venezolanos, una razon que cerraba toda dicusion, era 'ese es un hombre de familia', es decir eso ya era un plus y habia que rendirse a tal evidencia. Luego una mujer...bueno no seguire en este sentido. Para ciertas cosas yo estoy en mi mundo desde el que no desciendo. Charlete
charlete, ¡en qué mundo es ese que vives!
Bueno exagero un poco, claro, pero lo que he visto es lo que he visto
WOWWW...Luis, pues yo aqui vivo, en el palomar, en to' lo alto. HUM!!!, amigo, tiempo difices. Charlete
Mucho
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