David Beckworth y Paul Krugman se rasgan las vestiduras ante la aseveración de Bill Gross de que el bajo tipo de interés está incordiando a la banca, pues le impide realizar el deleveraging...
Eso merece un comentario sobre las buenas noticias del mercado de deuda española de hoy: no es más que el efecto esperable de las palabras de Rajoy. Los mercados se han anticipado al buen recibimiento de esas palabras por la prensa, pero, para que haya continuidad, Rajoy debe sacar la estaca. Y no lo hace. Dicen que es el estilo Rajoy. Pues no será suficiente. A mí lo que no acaba de inspirarme confianza es que dice que quiere negociar con todos: autonomías, sindicatos, empresarios... No hay nada que negociar. Negociar con unos es poner sobre aviso a los otros: hay decisiones suyas, no de concertación social o política. Y me da miedo que el estilo Rajoy (o el estilo Soraya, o Glez Pons) no sea lo que necesitemos.
at the zero bound, banks no longer aggressively pursue deposits because of the difficulty in profiting from their deployment.Krugman dice que no sabe lo que dice, y realmente es curioso que El jefazo de una de las mayores inversoras en renta fija (PIMCO) diga eso. El tipo de interés cero sólo es para activos públicos, y nada impide a los bancos buscar inversiones más rentables... salvo el riesgo, claro.
But there’s nothing stopping banks from making loans at profitable rates to firms that want more credit; the zero bound applies only to safe official assets. The zero rate isn’t a price ceiling; it’s what happens when you push rates on safe assets as low as possible, precisely to encourage people to buy other things instead.En David hay un gráfico de Credit Suisse que explica bien lo que pasa:
El gráfico enseña cómo gradualmente han ido desapareciendo activos seguros en los que invertir, de manera que los ahorros mundiales han ido concentrándose en los cada vez menos activos disponibles calificados como seguros. Si consideramos que Francia está en riesgo de perder su AAA, resulta que sólo la mitad de los activos que había en 2007 están disponibles hoy. ¿Razones?
The cyclical dimension is that the demand for and disappearance of safe assets was intensified by the failures of the Fed and the ECB over the recent business cycle. In the early-to-mid 2000s, the Fed exacerbated the asset-shortage problem as its loose monetary policy got exported via fixed exchange rates to much of the emerging market world which in turn recycled it back to the U.S. economy via the “global saving glut” demand for safe assets. (For more on this point see this post and my paper with Chris Crowe.) Since late 2008, both the Fed and the ECB have worsened the asset-shortage problem by failing to first prevent and then restore nominal income in each region to its expected path. In other words, since 2008 both the Fed and the ECB have passively tightened monetary policy and this has caused some of the AAA-rated securities to disappear. (Yes, some of the AAA-rated MBS and sovereign debt would have defaulted on their own, but some of them like French sovereigns would have maintained their safe asset status were it not for insufficient aggregate demand caused by passively tight monetary policy.)Por eso los tipos están tan bajos en los bonos del Tesoro americano: es de los pocos activos todavía con vitola de seguros, pese a la bajada de AAA a AA+ que hizo S&P. Los bajos tipos de interés no son el reflejo de una política monetaria demasiado holgada, sino de la búsqueda de seguridad por encima de todo. Y los bancos centrales hacen bien en intentar mantenerlos bajos, para que las alternativas de riesgo sean más demandadas. En realidad, como dice David, la búsqueda de activos seguros denota una demanda por posiciones líquidas, y si los activos sustitutos desaparecen, los inversores se trasladan a liquidez, por lo que ésta desaparece de los mercados.
Eso merece un comentario sobre las buenas noticias del mercado de deuda española de hoy: no es más que el efecto esperable de las palabras de Rajoy. Los mercados se han anticipado al buen recibimiento de esas palabras por la prensa, pero, para que haya continuidad, Rajoy debe sacar la estaca. Y no lo hace. Dicen que es el estilo Rajoy. Pues no será suficiente. A mí lo que no acaba de inspirarme confianza es que dice que quiere negociar con todos: autonomías, sindicatos, empresarios... No hay nada que negociar. Negociar con unos es poner sobre aviso a los otros: hay decisiones suyas, no de concertación social o política. Y me da miedo que el estilo Rajoy (o el estilo Soraya, o Glez Pons) no sea lo que necesitemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario