"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

miércoles, 11 de abril de 2012

Las disfunciones del euro

(En The corner, "only-debt-problem", en inglés)
Un error de diagnóstico puede ser fatal para el enfermo. Sobre todo si el médico es alemán (o español de la escuela alemana/Bundesbank). La inflación es mala y el déficit público idem. Tengamos a toda la población discutiendo si tal o cual partida debe o no recortarse, que si las pensiones o la inversión pública, el IVA sí o no, mientras la economía se contrae más y más y el paro aumenta. Mientras, el diagnóstico invariable dice: ¿Véis? es que no habéis recortado lo suficiente, cuando lo hayas podado todo a ras de tierra, y echado sal, entonces seréis puros (sin deudas) para crecer.
Este es el diagnóstico que se emite desde Alemania, del Bundesbank mismamente, mientras se frotan las manos porque a ellos les va MUY bien. Y tanto: todo el dinero que sale de Alemania vuelve a toda pastilla, pues las aguas de fuera y los aires son apestosos. Por eso tiene prisa porque el BCE suba el tipo de interés... pero si lo hace, se agudizará el problema.
Tenemos un problema: ese problema es las disfunciones del euro.El euro no nos deja devaluar, pero hay más. Sus emisiones desde el banco central no se distribuyen por países como sucedería dentro de una nación. Ergo, hay naciones en las que el crédito se estanca, luego cae a plomo... porque no entra un euro en ellas.

En Bruegel, hacen una estimación de los componentes de financiación externa de los países Euro, mediante la identidad Balanza de cuenta corriente = movimiento de capitales.
y sale el siguiente gráfico:

En el que se ve, sobre todo en la parte de la derecha, que 500 mm de euros de financiación de los países PIIGS viene del programa TARGET (acumulación de impagos en la liquidación del sistema de pagos centralizado). En la parte de la izquierda se ve cómo España es el segundo receptor de fondos TARGET, después Italia. Un incómodo dato, pues según creo, no aparece en cifras oficiales como pasivo. Por otra patre, es una prueba de que la política monetaria no se distribuye uniformemente al tipo de interés oficial: ergo, los bancos de los países PIIGS tienen que pagar más por su liquidez total, o recibir un hair cut más fuerte en el BCE cuando acude a él... El capital privado sale unidireccionalmente, de sur a norte; el capital oficial y la suspensión de facto del TARGET han impedido la quiebra del sistema; el ajuste financiero es lento porque no hay devaluación cambiaria...
Lo que decíamos: el BCE es un Zoombie. El dinero sale de unos países y vuelve a los Ricos. Gracias al TARGET2 y su no liquidación de esas deudas crecientes entre bancos centrales del sistema, se ha taponado el "sudden stop" del capital privado, como se ve en el gráfico siguiente:


Una cuestión que planea Bruegel es si la salida neta de capital privado es sólo por la crisis soberana (deuda pública) o también afecta al sector privado. Sobre eso:
Luego no es solo un problema de deuda pública. Es un problema de disfunción de política monetaria, que por ese sesgo no restablece la confianza en los países averiados. No se puede compensar la pérdida de confianza con inyecciones de liquidez, porque esas inyecciones son atraídas como por un imán desde Alemania & Co. La alternativa es que Alemania & Co inviertieran masivamente en España & Co en invesiones permanentes: en inversiones directas. ¿Pero cómo se hace eso? inyectando confianza. ¿Como se inyecta confianza? no inyectando liquidez, como vemos.
Y sí, esto se traduce en que las compras de bonos españoles por el BCE bajan la prima de riesgo (como hoy) pero no se traducen en un aumento de capital y liquidez hacia España.
Detrás de todo esto ¿saben que hay? la teoría de las Áreas Monetarias Óptimas. Un área monetaria óptima es Extremadura con el resto de España. Supongamos que Extremadura entra en un "bucle melancólico" como hoy España, comienza a deprimirse, y las inyecciones de liquidez del BdE no llegan a Extremadura (como ahora no llegan a España). Eso duraría poco si los movimientos de precios y de factores restablecieran el interés en invertir en Extramadura, que recibiría un flujo neto de capital privado directo. También habría entradas netas de asyudas a los desempleados. Además, también podría haber programas de infraestructuras públicas del gobierno que aceleraran ese movimiento. Pero entre España y Alemania NO hay movilidad de factores, ni flexibilidad de precios. ni hay programas de infraestructuras, ni gastos fiscales anticíclicos, como subsidios al desempleo. JJ Toribio: la UE no es EEUU, contra lo que ud. afirma. Y no es la deuda pública el problema principal.

PS: una nota a don Juan José Toribio (y tantos otros), que sigue defiendo al euro como si nada hubiera cambiado: Por favor, tenga en cuenta esto cuando habla del tema: el euro es cada vez más un problema, sobre todo tal como es gestionado. Si, simplemente, hubieran dejado una puerta de salida, el trauma hubiera sido de menor importancia y manejable. Pero Ud, como todos, defendió que fuera irreversible, ¿No es cierto? 
Si ingenieria social es inventar instituciones que intentan malear la naturaleza humana, el euro es una gigantes operación de ingeniería social. Y como tal condenada al fracaso. 

1 comentario:

Bororo dijo...

Estamos en desacuerdo sobre muchas cosas sobre qué aspectos son relevantes para el bienestar humano a largo plazo.. pero a corto Keynes y Friedman tenian razon... todo es quien imprime dinero, a quién se da y cómo se organiza (o a quien se dje ade pagar deuda en su caso). Si no se integra una unidad monetaria o no se deja fluctuar libremente a las monedas, cualquier otro tipo de ajuste o reestructuración provoca la destrucción del capital industrial y humano a grandisima escala.

El euro, el BCE y Europa son una absoluta calamidad.