"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

lunes, 25 de noviembre de 2013

El aquelarre

Hoy hay un excepcional artículo de Federico Jiménez Losantos sobre la "regeneración" del PSOE. Mientras fuera del PSOE hay un gran escepticismo, dentro se están produciendo fenómenos que se acercan a la ebullición entusiasta por el choque alocado de partículas que van cuajando en lo que podría asemejarse a proyectos. Asemejarase no se asemejan mucho, pero a ellos les parece que sí. Y es que se ha llegado a una cierta masa de algo así como el entusiasmo en torno a la nada que siempre ha sido la esencia de este partido, cuya acción ha sido decisivamente nefasta en la historia de España. La masa ilusionada cuaja porque, naturalmente, hay que salir de la montaña de basura que Andalucía y la UGT está poniendo delante del horizonte.

Dicen los sabios, y deben llevar razón, que España necesita dos grandes partidos que estructuren la democracia. El problema es qué se entiende por partidos grandes.

El PSOE, como dice FJL, siempre ha sido lo que ha querido, porque inmediatamente se ha considerado en posesión de la verdad. Y su única idea de verdad es que la verdad es de izquierdas, y que la derecha es el fascismo disfrazado. Esto ha sido siempre así, desde los primeros vagidos de Pablo Iglesias. Siempre ha sido un partido desdeñoso de la legalidad pero jugando dentro de ella, para poder destruirla impunemente. Obsérvese que una vez conquistada esta cota intelectual, da igual ser marxista, leninista, socialdemócrata, o lo que se tercie: la estrategia será siempre aniquilar a la derecha por las buenas o por las malas. Por las malas fue el método de Largo Caballero e Indalecio Prieto en la República que ellos mismos se diseñaron, para que no entrara la derecha, y cuando entró, se sublevaron contra ella en la revolución de 1934. Esa revolución condiciono ya totalmente la deriva hacia la guerra civil.

Recuperado el poder, forzaron tanto las cosas que consiguieron convertir la malhadada república en una cáscara vacía bajo la cual se producían diariamente las peores atrocidades. Largo Caballero, que había aprendido leninismo en su breve estancia en la cárcel, se empeñó en acabar con la república "burguesa", y lo consiguió. Fue presidente de gobierno en cuanto estalló la guerra.

Después de la Transición, el PSOE estaba como hoy, a punto de desintegrase desde que Felipe lo abandonó. Llegó un posible Salvador, Josep Borrell, un socialdemócrata bastante competente que ganó las primarias. El "aparato" le líquidó sin contemplaciones a base de expedientes. Entonces sí que, además de descabezado, el partido quedó desorientado, hasta que en una jugada del azar llegó Zp como mal menor.

Fue erróneamente dado por amortizado por todo el mundo. Inmediatamente la derecha le adoptó como un perfecto oponente, nada temible. Alfonso Guerra, ese que dicen ser tan listo, le llamó "bambi", víctima propiciatoria.

Pero Bambi se descubrió un maestro en aprovechar como un estratega leninista de primer orden los acontecimientos. La guerra de Irak fue su trampolín. Si Lenin cedió a Alemania en la primera GG mundial medio territorio ruso para ganar la revolución, Zp cedió el poder a la calle: una jugada maestra. Pero le faltaba el último empujón, que vino a ser el atentado del 11-M, dos días antes de la elecciones. Eso sí que fue una lección de como dar un vuelco electoral manipulando todo lo manipulable. Debería escribirse un manual de tácticas de revolcón electoral con este ejemplo paradigmático. Si Lenin viviera, se sentiría orgulloso por el grado de perfección alcanzado por estos discípulos que dos días antes parecían tontos y que nunca llegarían al poder.

Mientras seguimos sin saber quién fue el autor de la masacre, el PSOE volvió por sus fueros, no sólo por el golpe electoral, sino por como después se dedicó a destruir sistemáticamente el entramado institucional salido de la Transición. Magnífica obra de zapa, aunque ahí Lenin habría fruncido el ceño porque él no hubiera seguido ese camino de descentralización, muy al contrario: él, si destruía, era para ganar poder, concentrarlo, no para dilapidarlo.

Pero eso al PSOE le da igual, porque en realidad nunca ha tenido estrategia. Ni para sí mismo ni menos para España. Es como Polifemo ciego, dando estacazos a su alrededor, con tal de masacrar al que esta delante, que suele ser la derecha. Al fin y al cabo siempre será sospechosa de venir de Franco.

Como dice FJL, después de haber metido en el zulo a Zp, porque molestaba, ahora lo resucitan. El aquelarre se va a celebrar de nuevo en torno a ese espíritu Dracwin, del todo vale mientras salga un Moisés que les lleva a la tierra prometida del poder. Da igual que sea Carmen Chacón o Susana Díaz, o Madina, porque acabarán apoyando al PSC en sus tentaciones independentistas, al PSV en sus negociaciones con ETA, y seguirán sacando a la momia de Lenin cuando les venga bien. Yo creo que deberían dar un salto cualitativo sorprendente y que fuera un o una homosexual. Total para lo que queda de España...

No hay comentarios: