En The Corner en inglés
Pablo Bastida me manda el siguiente artículo del Spiegel en el que los alemanes niegan que ellos sean culpables de la situación actual de lao países del Euro.
Sofisterias alemanas que no son muy sutiles, porque son eso, alemanas. Demuestran que Alemania no tiene un buen modelo económico, o lo tiene muy burdo. Los malo es que ha conseguido venderlo a los demás países, y estos se lo han comprado. Por eso nos aguantamos. El que no se aguanta es Wolfgang Münchau, que es alemán y no comparte la política que nos están haciendo.
Dicha política es bien fácil: se trata de enaltecer todo lo que le va bien a Alemania, y negar que tenga efectos negativos sobre los demás. Es como decir que la política de China, durante décadas, de mantener débil su tipo de cambio para mantener un superávit exterior, no era altamente perniciosa para los demás. Exactamente igual. Y, de la misma manera, China lo negaba. Pero China era un país subdesarrollado. Alemania es un pais tecnológicamente muy desarrollado.
Todo país tiene el derecho a desarrollarse tecnológicamente como quiera. Pero esa no es la razón de su excedente exterior permanente. La razón es su exceso de ahorro forzado por motivos monetarios. Las exportaciones pueden crecer mucho, pero si el gasto en el resto del mundo crece igual, no habría excedente exterior acumulado.
¿Cuál es el truco? El truco está en que antes, Alemania tenía su moneda, que tendía a ser la más fuerte del mundo. Eso frenaba su superávit exterior a un nivel razonable. Cada vez que subía excesivamente, se apreciaba el Marco, aumentaban las importaciones, disminuían las exportaciones, y se equilibraban las balanzas de pagos del mundo. En el gráfico se puede ver que Alemania nunca tuvo un superávit/PIB tan alto como ahora.
Ahora la moneda de Alemania es el euro, que es demasiado fuerte para países como España y demasiado débil para Alemania. Alemania se beneficia de eso, y le importa un bledo que sea a costa del parón de los del sur.El euro es un sistema de tipo de cambio fijos. Como tal, exige un comportamiento de los miembros, una lealtad a la reglas de juego. Esas reglas implican que cuando hay tipos de cambio fijos, en el país con superávit entra dinero, y eso aumenta la demanda interna, los precios, lo que a su vez tira de las exportaciones de los demás países.
A su vez, el dinero sale de los países deficitarios, que sufre una contracciones en su demanda interna, bajan sus precios, caen las importaciones, y las exportaciones suben por el tirón del paso oponente u superávitario.
Alemania impide que el dinero se expanda en su interior (y en resto se la zona) mediante su control del BCE. Así el BCE no mantiene la cantidad de dinero mínimo necesario en la zona. Si lo hiciera, el dinero iría preferentemente a los bolsillos alemanes, que gastarían más. Al gastar más, acelerarían la recuperación de los demás países.
Cuando se instauró el euro, este mecanismo de ajuste no se tuvo en cuenta. Al revés, se suprimió toda referencia a él. Si se iba quitar el mecanismo alternativo (tipos de cambio ajustables), no sé realmente en qué estaban pensando los mandatarios que estaban firmando el tratado de Maastricht. Se dejaron birlar la cartera sin exigir nada a cambio. Y ello, pese a las advertencias de muchos economistas anglosajones, que decían que eso no podía salir bien si no se establecían mecanismos de compensación.
Sólo vieron el lado político/propagandístico del asunto, y, adelante, lo firmaron con su facundia habitual. Los economistas españoles demostraron su incuria diciendo que España estaba más que preparada para el sacrificio. Si alguna vez ha habido una conjura de necios enrolados, ha sido esa.
Pero la incuria se ha multiplicado por mil. Una vez en el euro, ya no se podía dar marcha atrás. Nuestras deudas están denominadas en euros, salir haría que se multiplicarían por mil. Bien, puede ser verdad, pero eso no excusa que hay otra política alternativa, que no se hace porque Alemania lo impide.
Ahora toda la zona está entrando en deflación, como se ve en el gráfico de la izquierda.
La inflación está muy por debajo del objetivo del 2%, aunque ya vimos anteayer que ese objetivo es un máximo. Por lo tanto, oficialmente no hay riesgo de deflación, y el BCE no tiene por qué tomar medidas contra eso. Sin embargo, puede que la semanas que viene, el jueves, haga un gesto. La deflación quiere decir que el tipo de interés nominal de equilibrio tendría que bajar, pero el tipo del BCE está ya en el 0,5%, así que o tiene mucho margen de caída. Si siguiera los pasos de la FED, bajaría al 0,25% y declararía que iba a estar así mucho tiempo, intentando concretar el plazo. Además, podría decidir medidas de QE, o expansión de su cartera de activos. En cualquier caso, no lo hará. Lo más que hará será dar nuevos créditos a 3 años a los bancos, para que sigan comprando deuda.
NOTA: el BCE ha bajado los tipos (para gran disgusto de Rallo), ha cambiado su "Forward Guidance" y ha renovado lao créditos a largo plazo (LTRO). No me he equivocado en mucho, salvo UE la reunión era hoy, no la semana que viene. Draghi:
AT the same time, inflation expectations for the euro area over the medium to long term continue to be firmly anchored in line with our aim of maintaining inflation rates below, but close to, 2%. Such a constellation suggests that we may experience a prolonged period of low inflation, to be followed by a gradual upward movement towards inflation rates below, but close to, 2% later on. Accordingly, our monetary policy stance will remain accommodative for as long as necessary. It will thereby also continue to assist the gradual economic recovery as reflected in confidence indicators up to October.Second, following today’s rate cut, the Governing Council reviewed the forward guidance provided in July and confirmed that it continues to expect the key ECB interest rates to remain at present or lower levels for an extended period of time. This expectation continues to be based on an overall subdued outlook for inflation extending into the medium term, given the broad-based weakness of the economy and subdued monetary dynamics.Third, we continue to monitor closely money market conditions and their potential impact on our monetary policy stance. We are ready to consider all available instruments and, in this context, we decided today to continue conducting the main refinancing operations (MROs) as fixed rate tender procedures with full allotment for as long as necessary, and at least until the end of the 6th maintenance period of 2015 on 7 July 2015. This procedure will also remain in use for the Eurosystem’s special-term refinancing operations with a maturity of one maintenance period, which will continue to be conducted for as long as needed, and at least until the end of the second quarter of 2015. The fixed rate in these special-term refinancing operations will be the same as the MRO rate prevailing at the time. Furthermore, we decided to conduct the three-month longer-term refinancing operations (LTROs) to be allotted until the end of the second quarter of 2015 as fixed rate tender procedures with full allotment. The rates in these three-month operations will be fixed at the average rate of the MROs over the life of the respective LTRO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario