"El problema de la derecha española es que al no tener casta, ni clase social, tampoco tiene sentido de lo patrimonial, y es capaz de prescindir de una de las inteligencias más fértiles que ha dado la política española desde la recuperación de la democracia. Sería como si para poner un spa en su lugar, derribáramos la casa que Coderch construyó en el jardín porque era amigo del abuelo.
"Si el PP fuera realmente un partido de derechas, de derechas como Dios manda, Alejo tendría rango de noble, de patriarca; y sería invitado a discrepar siempre que lo considerase oportuno, y sus reflexiones no serían temidas con recelo, sino celebradas como una lección de estilo. Personajes como Alfonso Alonso le sujetarían el abrigo.
"Si la derecha española tuviera clase, y una idea clara de lo que es y significa el patrimonio, presumirían de Alejo Vidal-Quadras, procurarían hacerle caso. Y cuando no pudieran, por oportunismo electoral o cualquier otra bajeza, asumirían sus postulados, le escucharían con respeto, le aplaudirían la valentía de no sucumbir y de permanecer combatiente y libre, sin otra fidelidad que la que guarda a su honestidad intelectual. Le agradecerían que fuera digno de dedicarse a la política.
"Si tuviéramos una derecha con estructura moral y deseo de mundo mejor, Vidal-Quadras no sería apartado de ninguna lista ni, todo hay que decirlo, estaría aparcado en Europa. Pero como en España no tenemos derecha sino un cámping un poco menos cutre que el otro –y a veces ni eso–, lo que acaba siendo noticia son las pequeñas deposiciones de un tal Alfonso Alonso, que jamás ha hecho la menor aportación ni a las ciencias ni a las letras, ni a la retórica ni a la oratoria, ni a ninguna otra disciplina intelectual o artística, y es simplemente un mindundi más con el que una derecha invertebrada, sin prestigio ni honor, chapotea en el descorazonador lodazal socialdemócrata."
A lo que añado:
El problema no es de la derecha o de la izquierda, es de España, atrapada en la tela de araña tejida en la famosa Transición, que fue un proceso de saqueo de la libertad de todos los españoles por una nueva clase política cada vez más impenetrable. Todos se protegen a todos, su saqueos y corrupciones, por eso nunca acabará el caso de los ERES o el caso Bárcenas, ni sabremos nada del 11-M. Algunos pagarán pena judicial; pero el tinglado extractivo seguirá funcionando.Lo peor es que se tapan su mediocridad, su bajeza moral y su falta de representatividad. Incapaces de gobernar, no tienen más que cumplir con pereza lo que les mandan en Bruselas, sin pasar la raya roja que marca Berlín. Total, mientras no nos intervengan los cien mil hijos de san Luis... No tenemos más que agachar la cervical. ¿Para qué querríamos las palancas de poder político y económico, si los que están ya no sabrían usarlas? Que gobiernen ellos, que es más cómodo. ¿Política monetaria? Ufff, no jodas, que trabajo, mejor que piensen ellos. Con que no nos dejen quebrar...
No creo ni por un momento que estos mismos sean capaces de regenerarse a sí mismos. Imposible. O que se dejen sustituir por otros que lo hagan, porque lo primero sería mandarlos a la fosa séptica. Por eso es tan molesto Vidal Cuadras, porque es de los únicos que quedan capaces de enderezar a su partido y al España.
2 comentarios:
Me temo que aqui no hay quien enderece nada
Eso e temo yo
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