"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

viernes, 10 de octubre de 2014

El Ébola y las economías de escala

El gran esperpento del Ébola tiene una causa de fondo que nadie, creo, se ha molestado en señalar. Este tipo de servicios punteros, con proyección internacional, tiene que estar gestionado y financiado por el gobierno central. Muchos otro servicios no deberían haberse descentralizado.

Soy cada vez más centralista: expongo mis razones. Hay montones de servicios públicos que deben aprovechar al máximo las economías de escala naturales de que goza un gobierno central frente a uno regional. Es absurdo que un caso como el Ébola haya ido a parar a un hospital con pretensiones, pero que hace años fue relegado a la Comunidad de Madrid. En realidad el lastre que ha hundido las finanzas de todas la CCAA es la sanidad, y la misma Esperanza Aguirre, antes de intentar privatizarla, dijo que era más racional devolverle las competencias al gobierno, pies así se ahorraba dinero.

Pero no. En plena vorágine centrifugadora, acelerada con el efecto del Estaturo catalán sobre el resto, era imposible la racionalidad. Se siguió adelante con una carga que sólo el gobierno debería sobrellevar. Pero a ver quién es el macho que dice no a una competencia.

España tiene urgentemente que recuperar, recentralizar, competencias; las primeras, las que han supuesto un aumento del gasto y de la deuda de las CCAA por una centrifugación absurda. Y creo que las primeras por empezar deben ser las de menos carga política. Porque por mí, habría que recentralizar la educación urgentemente.

Yo comprendo que hay servicios, como los bomberos, que naturalmente deben ser locales. Pero en general lo que es del estado y afecta a todos los ciudadanos, debe ser centralizado y pagados con el mismo sistema fiscal, sea este progresivo, proporcional, o lo que sea. El día que se descentralizó la sanidad se metió la mata hasta el corbejón.

A eso hay que añadir las chorradas que han hecho las CCAA con el dinero, como aeropuertos sin viajeros, ciudades de la cultura fantasmas, parques acuáticos sin terminar, etc. El paraíso a la vuelta de la esquina. No sé muy bien por qué, la población baja la guardia más cuando ser trata de su Comunidad que cuando se trata del Gobierno. Se supone que debía ser al revés (más cercanía más control ciudadano) pero en España al menos no, es al revés: se teme más al poder cuanto más cercano está. Es más, la imposición de inmersiones liguisticas, no sólo en Cataluña, en Baleares, en Valencia (como nos cuenta Pablo Bastida), en contra del sentir de la mayoría de la población, no ocurrirían desde el gobierno central.

En resumen, hay dos razones para que muchos servicios, los más importantes, buelvan a manos del gobierno: por economías de escala, y por justicia distributiva de cargas fiscales y beneficios. Estos dos criterios son muy superiores a los que generalmente se aluden, como el de justicia ínter territorial. Una falacia.

2 comentarios:

Pablo Bastida dijo...

"se teme más al poder cuanto más cercano está."
Recuerdo las palabras de Mel Gibson en El patriota, después de oír que uno de sus vecinos pedía alzarse contra "un tirano que vive a 3000 millas de aquí": "Prefiero a un tirano a 3000 millas de mi casa que a tres mil tiranos a una milla".

www.MiguelNavascues.com dijo...

Sí, no me cabe duda que es así, en contra de la la falsa teoría que justifica la descentralización.