"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

domingo, 27 de octubre de 2019

El Estado, en la cuerda floja

Es claro, para los que no estén ciegos, que lo que pasa en las calles de Cataluña es gravísimos para España. Si Cataluña consiguiera eventualmente la independencia, no duden ni por un segundo que el Pais Vasco seguirá después; si no al mismo tiempo, pues como se puede leer en Jesús Cacho  hay negociaciones muy avanzadas entre ambos para conseguir un estatus de paridad, de igual a igual, con el Estado español y a partir de ahí, a volar.  
A esto añádase la ñoñería y melifluidad, acompañada de impotencia, del Estado español. Un estado que ha vendido a los españoles el cuento “Aquí no pasa nada”, y que además está trufado de simpatizantes con la izquierda cañí que siempre ha visto con buenos ojos las ambiciones nacionalistas, pues la palabra federal no les es ajena.
¿Consecuencias de ese avance hacia la separación de dos (o más: no se puede eludir que en valenciano y Baleares se está cociendo el mismo guiso) CCAA? La desintegración del tinglado institucional, montado en la Transición, español, del rey abajo, hasta la última coma. Sería inevitable. Para empezar habría que hacer una nueva Constitución, ¿y quien asegura que no fuera republicana?
El separatismo está en correlación con la tolerancia que ha mostrado siempre el PSOE, y ahora más. El PSOE, que no sé si lo ha quitado  su estatuto, ha sido siempre “federal”: nunca le ha hecho ascos a la denigración de España, a la que siempre ha identificado con la derecha, desde los tiempos de Pablo Iglesias. 
No estamos a salvo, pues, de una República similar a la I República Federal, que acabó en una caos de violencia, hasta que llegó Alfonso XII de la mano de Cánovas, dos Grandes políticos que lograron la Paz y la estabilidad durante casi medio siglo, hasta el golpe de Estado de Primo de Rivera en 1923. Sólo que esta vez me temo que la cosa va más en serio. 
Me gustaría pensar lo contrario, pero por algo firmo mis artículos con el sobrenombre de Casandra. Y lo malo es que ahora la senda que vi venir el fúnebre 11 de marzo de 2004, que propició la llegada de Zapatero al poder, se ha ido cumpliendo con peores designios que yo preveía. 
Han pasado 15 años largos, y si comparamos aquella España con ésta, no se puede negar el avance hacia el abismo. 

5 comentarios:

Miguel E. dijo...

Si la teoría es cierta, no hay solución posible.

El bloque de derechas sumará menos que el de izquierdas seguro (en términos nacionales).

Los nacionalistas tendrán la llave seguro.

El resultado va a ser parejo izquierda-derecha con algo de ventaja a favor de la izquierda y los nacionalistas entre medias.

Si Pedro Sánchez quiere cargarse España no hay solución.

www.MiguelNavascues.com dijo...

Cierto.

Pablo dijo...

¿Y quién se hace cargo de la deuda soberana, el Bundesbank, quizá? ¿Y de las pensiones? ¿Trump?

Miguel E. dijo...

Default. Y las pensiones muuuy recortadas.

Pablo dijo...

Default en el decimocuarto PIB del mundo, quinto de la castigada Europa. O sea, como dicen los americanos, un Lehman Brothers "on steroids". Por eso creo que no nos van a dejar caer.