"Cada vez más creo que la tesis de la burbuja, en contra de la Hipótesis de la Eficiencia de los Mercados, se basa nada más que en la superstición. Las supersticiones son causadas por las ilusiones cognitivas; creemos conocer reglas y patrones más de los que realmente existen. Usted tiene el sueño de un hijo en un accidente de tráfico, y al día siguiente sucede. Crees que ha sido premonición. Olvidas los otros 10 mil sueños que no han predicho el futuro." (Scott Sumner).
Estoy de acuerdo con la gran influencia de la superstición, que confundimos con ideas contrastadas. La superstición domina nuestras vidas, decide elecciones, decide carreras, decide cosas impensables. Creemos, porque lo oímos (opinión avalada por la autoridad competente), que Bernanke está generando una hiperinflación, porque se lo hemos oído a un periodista o economista. Pero no nos molestamos en ver si es verdad. Identificamos Dinero = Inflación, y eso se queda en nuestra mente para respondernos a la realidad cambiante. Bernanke va tomando tintes negros en nuestra mente, mientras Merkel, que hace más daño a nuestro futuro que Bernanke, que debería ser lapidada como esas pobres adúlteras musulmanas, tiene una imagen bastante aceptable. Somos tan masoquistas que nos echamos la culpa de nuestros males, de todos, y no es así.
Hay que decir que no tenemos tiempo de verificar toda la información que nos embaulan.
El otro día vi a Eduardo García Serrano (que no me parece una lumbrera) decir tan serio que "el catolicismo es la cuna de la democracia", o algo parecido. Es otra falsedad que no suena mal, así que la metemos en un rincón de la memoria hasta que salga el tema. Luego la gente queda a cenar, y después de hablar de fútbol, de trapos, de niños y de lo mal que está España, hablan muy serios de "hay que ver el catolicismo, cómo ha acunado a la democracia". Y se quedan tan panchos.
Así, como un engranaje lento, oxidado,que se va moviendo aunque parece parado, va formándose la Opinión Hay supersticiones acertadas y otras no. Pero lo importante es su difusión, no si se ciñen a la verdad.
Hay un Teorema cuasi olvidado, de un premio nobel de economía -Arrow- que la democrcia es incosistente, no puede ser la suma de las preferencias individuales, pues estas son incongruentes. Supongamos que las preferencias individuales son de éste orden:
Persona 1: A > B > C
Persona 2: B > C > A
Persona 3: C > A > B
Este engendro no se puede sumar. Es la base de la afirmación de que la democracia es el peor de los sistemas, exceptuando todos los demás. Pero solemos creer ciegamente que es representativa, que es chupi, que es guay. Superstición.
No pensamos que es una fase histórica; que igual que vino se puede marchar; que no está determinada en el genoma humano; que de hecho, en la Europa de entre-guerras, se esfumó. Antes de la democracia se soñaba con el Imperio, modelo romano.
"vivimos instalados en las creencias", decía Ortega; a lo que se puede añadir otra suya: "El hombre no tiene naturaleza, sino historia". A lo que se le podría encajar lo de Montaigne: "la vida es ondulante" (cambiante: nada hay fijo) ; a lo que yo añadiría lo de Hayek: "el hombre, la sociedad, son evolución" (algo que deberían pensar los que quieren regresar al pasado del patrón oro). Todo es evolución y superstición, lo que hace dicha evolución aleatoria. "Stuff of dreams", O "la vida es sueño", por ir a lo literario. No es tan nuevo, después de todo.
Los sueños no predicen el futuro, pero resulta que el futuro está formado de sueños.
"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James
There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)
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