Desestresando China

Desde hace tiempo nos vienen acojonando con un estallido de China, que arrastraría al resto del mundo. Roger Bootle, el el Daily Telegraph, nos dice que no hay niguna razón para entrar en pánico. ¿La razón principal para tranquilizarnos? La bolsa China es una de las que más bajas capitalización representa respecto al PIB, un simple 30%, cuando en la mayoría de los países supera al 100%. Recuerden la bolsa de Nueva York, en el gráfico.

Un 130% sobre PIB. Recordemos que este es el indicador más fiable para Warren Buffett.
 
Nos dice Bootle que, por otra parte, sí hay problemas en la economía real. China está creciendo al 7% anual, pero con la contribución alucinante de una inversión que es el 50% de PIB, que no se va a sostener. Con el tiempo, china deberá cambiar la composición de su demanda interna a más consumo, y a más importaciones. Sin embargo, esto no supone un problema de brusco estallido de los mercados. Además, el gobierno chino tiene a su disposición amplio margen monetario y fiscal para sustituir al sector privado; con la "ventaja" a corto plazo que la banca es publica, es decir, que si hay que dar crédito, se da por decreto.
 
Entonces, ¿por qué nos dan tanto el coñazo y nos meten el susto en el cuerpo? Porque, primero, del cambio de expectativas algunos sacan dinero. Se trata de mover un poco la cotizaciones, y sacarle una plusvalía. Además, por la puta manía de emplear el instrumental de los países desarrollados a países diferentes. Es como lo de medir Grecia cono si fuera Alemania. China es un país que lleva décadas creciendo bajo un gobierno totalitario, con un cultura diametralmente opuesta, y para su análisis no se puede aplicar el standar occidental.