"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

martes, 22 de septiembre de 2015

El suicidio catalán

Este país es sorprendente. Cuando faltan cuatro días para el plebiscito catalán, ahora se empiezan a descubrir las catástrofes que sucederán en cadena si declaran unilateralmente la independencia.
 
No menos sorprendentes son las respuestas de los responsables del suicidio colectivo, que consiste en echar balones fuera y minimizar esos problemas a nada, o incluso a un problema para lo queda de España, como las pensiones que, aseguran, deberá seguir pagando España, mientras que la deuda a España no, esa deuda Cataluña la dejaría de pagar. Es escalofriante ver economista de bien ganado prestigio decir lastonterías que dicen por estar encima de la ola.

Como digo, quedan cuatro días, si contamos la jornada de irreflexión. He buceado por la prensa, y me he encontrado con un artículo de Luis Garicano, bastante completo sobre las consecuencias de la ruptura.
 
Como dice Garicano, el problema no es quién paga los saldos pendientes, sino la enorme, incalculable, pérdida que supone la ruptura de un sistema nacional integrado. Pone el ejemplo de los trasplantes de órganos. España es el país mejor organizado del mundo, de tal manera que la conexión entre donante y paciente se hace rápidamente, porque es una organización nacional. Si una región deja de ser parte del sistema, el sistema en su totalidad se resiente, como se puede comprender si se imagina uno que repentinamente los trasplantes fueran regionales: gran parte de la oferta de órganos se perdería por no encontrar un donante dentro de las fronteras regionales.
 
Esto no es más que un ejemplo de los que pasaría con otra muchas cosas entrelazadas a nivel nacional, que además ha llegado a eso de manera natural, por interés común. Los lazos comerciales se viene estrechando desde hace siglos, y su ruptura no será fácilmente sustituida por un nuevo mercado fuera de España. Eso propiciará deslocalización de empresas, pero no sólo por la pérdida de clientes, sino porque la subida de impuesto en Cataluña forzosamente va a ser enorme, como veremos más adelante.
 
Garicano pone sobre la mesa el problema de las pensiones, que es exactamente como los demás casos comentados. Las pensiones en España tienen una caja común, y además, está caja, siempre deficitaria, (es un sistema de reparto, no de acumulación de capital) se complementa con la aportación de Estado central. Es de cajón que si se rompe el sistema se van producir problemas administrativos enormes, pero sobre todo un déficit inmediato que tendrá que cubrir el nuevo gobierno soberano. El cual ya arrastra una deuda importante. O suben los impuestos y cotizaciones, o bajan brutalmente las prestaciones.
 
Este nuevo agujero no se limita al caso de las pensiones. En realidad es fácilmente comprensible que el nuevo estado estará en quiebra -quiebra financiada a coste cero por España, por el FLA y otros artilugios -, y necesitará, a largo plazo, inversiones extranjeras que rellenen el agujero de las empresas deslocalizadas, y a corto plazo financiación urgente para tapar esos agujeros inevitables.
 
En ese momento es cuando se plantea el problema de la salida de la UE y del Euro. Esto origina inmediatamente un problema tanto mayor cuanto con más improvisación se hayan preparado las cosas. En fin, el nuevo estado deberá crear una nueva moneda, lo que genera un agudo problema de confianza. Probablemente los mercados no prestarán más que en moneda foránea, como euros, y con una tipo d entere prohibitivo. Esto debería transformarse en una nueva subida de impuestos para cubrir el pago de esa nueva deuda.
 
En suma, el nuevo estado, si no recibe la ayuda especial del exterior,- se supone que no es miembro del FMI, y que legalmente ya no es de la UE-, y aunque recibiera condiciones muy suaves de la UE para hacer la transición, se encontraría con un tipo de interés mucho más alto, un colapso de sus mercados tradicionales, una caída de su PIB por capita, sobre el que el recaería una presión fiscal notablemente superior. Sobre esa base, los siguientes años hasta la normalización no serán fáciles.


A todo eso no ayuda el aire festivo y demagogo con el que se presentan los secesionistas, pues el choque emocional entre el Disneylandia que han prometido y la realidad va ser duro y amargo. La salida será echar la culpa a España, lo que será el germen de un conflicto entre ambos alimentado mientras la frustración se sostenga. Esa frustración será la base de una reorientación de los conflictos internos hacia objetivos externos legendarios, como la gran Cataluña, y cosas así. En otras palabras, la secesión no será el final de las frustraciones tan artificiales como hábilmente jugadas para conducir a sus paisanos al suicidio.
 

11 comentarios:

interbar dijo...

Los que esperen una negociación que evite esos males, tras las elecciones, pueden irse olvidando. Al final habrá que intervenir y cuanto antes mejor.

Miguel E. dijo...

Yo no estaría tan seguro, interbar. ¿Rajoy interviniendo? Jajajajajajaja.

¿Y de qué manera? ¿No impone la enseñanza en español para los españoles residentes en Cataluña que así lo solicitan y va a imponer el que no se produzca la secesión en cuatro provincias a la vez? Jajajajajaja. ¿Rajoy comandando tanques y/o Mozos de Escuadra y/o Guardias Civiles y/o todo a la vez frente al Golpe de Estado? Jajajajajajajajaja. ¿Y sobre 4 provincias? JAJAJAJAJAJJAJAJA.

Y Soraya en la retaguardia, supongo, por si al Presidente le da un soponcio de tanto trabajar, presta a sustituirle. Jajajaja.

¿Y el Rey? Yo no confío en que Felipe emule a su padre de hacer falta...

Para todo eso que muchos esperan hace falta patriotismo, esto es, amor por España, de lo que carece hoy en día la clase dirigente. ¿U os pensáis que todos son como Suárez? De esos hay muy pocos. Y ya no Gobiernan (y no hablo de franquistas, no me malinterpretéis; hablo de políticos constitucionalistas que quieran a su país y no de simples burócratas que actúan como máquinas a las órdenes de Bruselas; ejemplo; si un experto me asegura que el euro es perjudicial para España yo me salgo por el bien de mis compatriotas...¿alguien de éstos lo haría?).

Lo mejor de todo es que, según la corriente de pensamiento dominante, el fascista es Mariano, ¡que es precisamente el que no está haciendo nada! Lo progre, al parecer, es ROMPER la igualdad entre los ciudadanos (¿dónde está aquello de "libertad, IGUALDAD y fraternidad"?; los nacionalistas catalanes son el nuevo primer y segundo estado; el resto de España no llega ni a cuarto estado; la Revolución debería hacerse contra ellos...).

Yo creo que Rajoy espera que la Unión Europea le solucione la papeleta pero si repasase sus apuntes de Derecho Internacional Público y si alguien le enseñase un poquito de Derecho Comunitario se daría cuenta de que si espera eso se quedará colgando de la brocha cuando le retiren la escalera.

Alea jacta est.

Y los augures no creen que la suerte esté del lado unionista, precisamente.

P.D. Creo que lo dije una vez. ¿Alguien ha visto la última peli de Torrente? Fijáos en el contexto más que en la historia en sí. Ése es el futuro de España. Y si no, esperad a que pasen las Generales.

Anónimo dijo...

Hablando de Rajoy
http://www.elmundo.es/enredados/2015/09/22/5601404f268e3e54548b4588.html

www.MiguelNavascues.com dijo...

Rajoy es único, no por eso más preciado.
Pero lo de Alsina me parece preocupante. Se saca de la manga una cosa que no existe. Ahora resulta que el que no quiere ser español, sigue siendo español por cojones. Decía Antonio Cánovas, en un momento de pesimismo, que "es español el que no puede ser otra cosa". Pues no. Ahora resulta que si no quiere caldo, dos tazas.
Calero que sería la aoluxion. Cataluña de independiza, hay una gran alegría, una gran fiesta, y el día de la resaca les dicen: no, Uds siguen siendo españoles. Por cojones. No me jodas, Alsina.

Miguel E. dijo...

Podríamos hacer como quisiéramos; punto 10.1.

http://www.dipublico.org/3378/nacionalidad-de-las-personas-naturales-en-relacion-con-la-sucesion-de-estados-1999/

Si les damos la nacionalidad a un Estado que surge de lo que era España es porque queremos.

Yo no sé qué asesores de D. Internacional Público tiene este tío. Y seguro que no son mileuristas...

www.MiguelNavascues.com dijo...


Es lo que pensaba. En fin

www.MiguelNavascues.com dijo...

Él Rey. Él Rey quiere Passat desapercibido. Como su madre. Nada de decisiones. NDa de conservar la corona. Como su bisabuelo, se rendirá antes de q cante el gallo. Tercera Republica.

Pablo Bastida dijo...

Aparte de vosotros apenas oigo a nadie más hablar del tema, todos creen que no llegará la sangre al río porque al final se impondrá el seny o algo así. Gran error que nace de una curiosa contradicción: con lo gordos que nos caen los catalanes (seamos honestos, no podemos ni verlos), los admiramos; los vemos como superiores, más listos, más sensatos, más trabajadores (justo justo como ellos se ven a si mismos).
La realidad es que son una especie de Atenas de nuestros días, con inmigrantes en lugar de esclavos. Durante más de un siglo, oleada tras oleada de ignorantes, sumisos españoles han acudido a su tierra a ganarse el pan haciendo los trabajos duros y humildes que ellos no querían hacer, permitiendo a los nativos dedicarse a desarrollar su creatividad y perseguir metas más elevadas: cantautores, artistas, grupos teatrales, deportistas, políticos... Como los contemporáneos de Tucídides, los catalanes han terminado por creer que simplemente se lo merecen.
No conozco ningún ejemplo en la Historia de secesión de la región más rica de un estado consolidado; de las más pobres, todas las que quieras: Noruega de Suecia, Eslovaquia de Chequia, Irlanda de Gran Bretaña. A lo mejor a nosotros nos convenía independizarnos de Cataluña.
La secesión catalana es el equivalente de la expedición a Siracusa de los atenienses, emprendida como Tucídides cuenta por mera avaricia del populacho. Seguimos campando por el mercado español, pero nos quedamos con todos nuestros impuestos; seguimos cobrando nuestras pensiones del estado español, pero no pagamos la deuda del estado español, y encima el Barcelona sigue jugando la liga española por huevos. No está nada mal para una mierdecilla de 7 millones de habitantes, ¿verdad?
P.D. Para los pesimistas: acordaos de como terminó la expedición de Siracusa para los atenienses.

Miguel E. dijo...

A mí no me caen mal los catalanes sino los independentistas. Y no admiro esa región mucho más que otras, la verdad. Por otro lado, tampoco estoy de acuerdo (y me ofende) con lo de que los ignorantes del resto de España fuimos allí a servir; hubo de todo (ignorantes y no) en todos los polos de atracción (no sólo Cataluña).

Y, hoy en día, los ignorantes para mí son los independentistas...

Pablo Bastida dijo...

Lo siento mucho pero es un hecho objetivo que los españoles somos un pueblo ignorante, propenso a la mediocridad, a desconfiar del que destaca. Ahora no menos que hace 100 años. He vivido con el dolor de saberlo la mayor parte de mi vida adulta. A todo se hace uno.

www.MiguelNavascues.com dijo...

Bueno, hay una inclinación. Pero no creo que nunca se haya dirigido a los catalanes. Los catalanes no son distintos, salvo que han alimentado un sentimiento que viene del fracaso del carlismo, un sentimiento fuertemente arraigado en las élites. Es decir, el sentimiento de superioridad venia del conservadurismo más católico y absolutista. Más absolutistas que la corona, que había derivado hacia el parlamentarismo.
Cuando fracasa el carlismo, desaparece, las élites quedan desamparadas. Y aoarece Mosen Jacinto Verdaguer, que les enseña la verdad está en el el catolicismo catalán. Es decir, da un giro del absolutismo español católicos, al catalaniamo como expresión de ese catolicismo superior. Cuando lo ve Sabino Arana ( que se educó en CAT) se queda hechizado y lo copia.
El caso es sentirse superiores. El carlismo era expresión de superioridad. Alfonso XII y Canovas acaban derrotándole. Los restos se dividen entre los ultra vaticanistas y los nacionalidtas. Un nuevo huevo de serpiente ha sido puesto. Con el tiempo, eso bajó de la elite a las masas: los charnegos. Es un gran alimento del sentimiento diferencial que algunos necesitan imperiosamente. Ese sentimiento que se aloja en todo patriotismo, que en España no existe.
Que el origen del nacionalismo-separatista vasco y catalán viene del (frascaso del) carlismo no me cabe ninguna duda. Antes del carlismo no exitia.despies del carlismo aparece. Lo demás son pamplinas. Lo demás son embelecos y mentiras.
Es decir, Albert Boadella tiene razón, cuando dice que no hay un hecho diferencial. Es una monserga, un veneno, una mentira.