"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

martes, 26 de mayo de 2015

El perro del hortelano no va a ceder

Lo que pasa con Grecia es ahora muy interesante para España, que ha dado un salto de gigante hacia una situación "a la griega", con Podemos amenazando con formar parte del próximo gobierno. Vayan quitándose la venda de que "España no es Grecia": desde luego no lo es, pero puede llegar a serlo. El problema de Grecia es su deuda impagable, que alcanza 180% de PIB. Pero es que la española. La de verdad, no es menor de 144% de PIB (vean el cuadro del BE).
Porque lo malo de Rajoy no es sólo que nos vende un recuperación de chichi-nabo, sino es que, además, la ha conseguido a base de endeudarse al ritmo de 50 mm € por año.

La izquierda antisistema se frota las manos con los resultados obtenidos, que prometen un suculento asalto al poder (cielo) en las generales de noviembre.

Miremos a Grecia para ver hacia donde vamos. Grecia está en una trampa financiera: ha creído que podía chantajear con la idea de que podía declararse en quiebra y no pagar su deuda. De ahí algunos han inferido que Grecia tendría que salir del euro. Recuperada su soberanía monetaria, después de un periodo de penurias, saldría adelante (razón: aquí).

Pero eso no va a pasar de ninguna manera. Europa no va a consentir que pase tal cosa, como ya ha dicho Guindos, el "perro del hortelano". Legalmente no existe la salida del euro. Si un país quiere salir del euro ha de pedir su salid de la UE, palabra mayores.

En realidad Grecia, con su "brillante negociación" (basada en las teorías del fallecido Nash) se ha colocado en una situación perdedora. Cada vez recibe menos recursos, y cuanto más amenaza con no pagar los vencimientos de su deuda, menos recursos tiene: los griegos salen despavoridos, retiran su dinero de los bancos, y no pagan los impuestos. Por lo tanto, el gobierno de Syria/Podemos va a suspender pagos antes frente a sus ciudadanos (funcionarios, pensionistas, proveedores), que frente a los acreedores exteriores.

Como explica Anatole Kaleky, la UE puede, con la ley en la mano, impedir que Grecia salga del euro. Y si Grecia quiere emitir un pagaré como moneda interna, la UE puede decretar que las deudas internas y externas sólo se liberan en euros. Eso forzaría a declarar suspensión de pagos del gobierno frente a sus ciudadanos. Que es como acaban estas historias de secuestro de soberanía monetaria, dicho sin mala intención.

If Greece defaults, the EU will be legally justified and politically motivated to insist that the euro remains its only legal tender. Even if the Greek government decides to pay wages and pensions by printing its own IOUs or "new drachmas," the European Court of Justice will rule that all domestic debts and bank deposits must be repaid in euros. That, in turn, will force a default against Greek citizens, as well as foreign creditors, because the government will be unable to honor the euro value of insured deposits in Greek banks.
Las consecuencias serian un "zas en toda la boca" de Syriza:

So a Greek default within the euro, far from allowing Syriza to honor its election promises, would inflict even greater austerity on Greek voters than they endured under the troika program. At that point, the government’s collapse would become inevitable. Instead of Greece exiting the eurozone, Syriza would exit the Greek government. As soon as Tsipras realizes that the rules of the game between Greece and Europe have changed, his capitulation will be just a matter of time.
Una crueldad, sí, pero legal. ¿Lo harían? (Ayer se lo preguntaba Krugman). No me cabe la menor duda. Mientras el objetivo prioritario de la UE sea defender el euro, y lo puedan hacer sin poner dinero, lo harán, aunque crujan al país. Porque le estado para Grecia seria aún peor que el rescate inflingido. No pueden consentir que Grecia craquele al euro, y no pueden consentir que un gobierno de extremistas les robe el bocadillo.

En otras palabras: no se esperen un Grexit, porque no lo va a haber. Y vayan pensando qué haría Podemos en esas circunstancias, que ya no son tan extrañas. Ya ha empezado el baile de subvertir el Estado de Derecho: nada menos que el Tribunal Supremo ha tenido que salir al paso de los propósitos de expeopiación de Carmena en Madrid y Colau en Barcelona: es una potestad exclusiva del gobierno. ¿Pero y cuándo Pablo Iglesias II gobierne? Lo primero que hará será cargarse la Constitución de la casta, y lo segundo declarar la III República bananera.

Nos queda mucho por ver y asombramos. Como decía Murphy, lo que puede ir a peor, va a peor.

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