"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

viernes, 21 de agosto de 2015

Rebatiendo a Rogoff: Euro is not a OMA

En El País, encuentro un artículo de Keneth Rogoff, sobre los problemas de deuda en Europa y las distintas soluciones propuestas.

En lo único que coincido con él es que la solución disciplinaria aplicada hasta ahora es un absoluto fracaso.


La propuesta de Rogoff se basa en que el probema de las deudas europeas no es un problema de competitividad y liquidez (Krugman) , sino de solvencia; por ello, lo único eficaz hubiera sido mas inflación (totalmente de acuerdo) y una quitas de deuda, aunque no aclara bien quienes serían los que asumirían las pérdidas. Las deudas privadas parece que deberían ser asumidas por los acreedores privados (bail in) y las deudas públicas, mediante:

Naturalmente, los gobiernos nacionales habrían tenido que recurrir a fondos de los contribuyentes para recapitalizar los bancos europeos septentrionales que prestaron demasiado a la periferia –en particular los de Francia y Alemania– y habrían sido necesarias transferencias para recapitalizar los bancos de la periferia, pero al menos la opinión pública habría entendido entonces la realidad de la situación, mientras que los bancos reestructurados y recapitalizados habrían estado en condiciones de comenzar a prestar de nuevo.
Lamentablemente, demasiadas autoridades de economías avanzadas se dieron el lujo de creer que semejantes políticas heterodoxas son solo para los mercados emergentes, cuando en muchas ocasiones los países desarrollados han recurrido a políticas heterodoxas para reducir las deudas pendientes. La reestructuración de la deuda habría brindado a Europa la posibilidad de volver a empezar que necesitaba. Es cierto que suponía un riesgo, como ha señalado el economista jefe del FMI, Olivier Blanchard, pero habría valido la pena.
Entonces, ¿cuál es la vía para avanzar? Una integración europea más profunda, normas más estrictas en materia de capital primario necesario en el caso de los bancos y unas reformas estructurales más profundas, pero de cosecha propia, son elementos fundamentales, desde luego, para cualquier solución. Aún se necesita urgentemente una mayor ayuda a la periferia europea.
Es decir, ninguna mención, porque no corresponde, al problema de fondo del euro que es el de la competitividad. Si he entendido bien la crítica que hace de Krugman, estoy de acuerdo con Krugman. Es decir, estoy de acuerdo en que el problema básico del Euro es que no es un Área Monetatia Óptima. El problema de la deuda esta originado en la gran afluencia de créditos desde que se creó el euro, bajo la falsa creencia de todo miembro del euro ya no quebraría. Sin embargo, el euro ha impedido un ajuste cambiario que es el complemento que siempre se ha utilizado en los rescates de países emergentes. Como decía el otro día Martin Sanbu, no es igual un rescate con o sin libertad cambiaria, porque la economía se pone a funcionar más rápidamente si además de las reestructuraciones de deuda puede ajustar sus precios internos para que la inversión directa encuentre atractivo volver a invertir en él.

Estoy de acuerdo que a falta de libertad de cambios en el euro ha de ser sustituido por algo. Ese "algo" es un tabú para Alemania: un gran sistema de transferencias de Norte a Sur, lo que es aceptable en EEUU, que es una Nación, pero no en Europa, que no lo es. Muchos creen que un día lo será. Siento decir que no, que lo más que llegará a ser es un dominio nada democrático de Alemania sobre el resto, que no se llamará colonia por no ofender. Pero lo que no veo es una fusión de naciones y parlamentos y judicaturas y policías en un centro equidistante que no exista más que en el magín de algún loco.

El tercer rescate de Grecia es ya una ilustración de lo que será una Europa más unida. Una Europa en la que te dicen hasta los lápices que pueda comprar y a quien se los debes comprar. Es decir, una colonización de una cultura sobre las demás.

Rogoff dice que el problema no es de competitividad. Bien, pues entonces que explique el insultante superávit del 8% de PIB de Alemania. Cuando un país o una zona tiene ese superávit incesante, es que el resto del mundo tiene un déficit incesante. Si se perpetúa esta situación, es que falta un mecanismo de ajuste, y ese mecanismo no es, por supuesto, la devaluación interna del modelo liberal. Y ese desequilibrio no es sostenible si no hay un dominio militar del país excedentario.

Ese era el modelo del patrón oro: si querías mantenerte en el sistema oro, y tenias dificultades de BdP, debías contraerte internamente, pero el país de contrapartida debería expandirse simétricamente. Aquí asistimos a la negativa de Alemania a que sus alemanotes gasten más en el exterior. Si tuviéramos tipos de cambio libres, la peseta se hubiera devaluado y el marco alemán se hubiera apreciado mucho, lo que hubiera acabado con esta asimetría insultante.

De hecho, Europa es ya, ahora mismo, un dominio férreo. Las normas económicas viene de fuera porque el euro fortalece a unos y debilita a otros. Los países del sur son cada vez más dependientes de los fondos del Norte. Esa dependencia se podría reventar rompiendo el euro.

Es decir, siguiendo a Krugman, hay un problema de competitividad que SÍ afecta a la solución de las deudas, por muy bueno que fuera - y eso no lo niega Krugman- una quita de deudas. Pero en el modelo ha de incluirse la enojosa asimetría de activos y pasivos, que ha causado el euro y que impide ahora solucionar. La devaluación interna ha de ser borrada y vilipendiada como una trampa saducea sólo conveniente para Alemania, la gran ganadora del euro.

Suprimir variables fundamentales del modelo lleva a conclusiones erróneas.

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