"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

domingo, 14 de abril de 2013

Ojalá les salga bien

Japón ya está cosechando críticas por su NPM (nueva política monetaria). Mismamente, de Obama, que le ha dicho que ha ver si se va a pasar en su política de devaluación del yen. Sin embargo, Bernanke ha dado la franca bienvenida a la NPM japonesa. ¿Quien tiene razón? Descontando que la crítica de Obama es sobre todo para apaciguar los grupos de exportadores internos, el caso es que cada ves que un país decide salir del pozo salen críticas de los demás, que temen que se les descuadre su competitividad. Brasil critica a EEUU, EEUU critica ahora a Japón. ¿Quien tiene razón?

En la imagen, la Posición de inversión internacional (PII) de Japón en los últimos casi treinta años. Como ven, los activos frente al exterior de Japón no hacen más que crecer (columnas azules) y los pasivos (amarillas) no hacen más que bajar. Japón no ha registrado un déficit de balanza de pagos comercial desde hace al menos treinta años. Su PII debe ser de las más fuertes el mundo.

Por otro lado, Japón tiene una deuda pública del ¡240% del PIB!. Esta deuda está poseída mayormente por acreedores japoneses,así que no hay problema de riesgo de imago exterior. Japón lleva 20 años de deflación, con el resultado de un PIB nominal estancado desde entonces. En parte, es la causa de que la Deuda/PIBN haya subido tanto: el denominador no ha crecido en veinte años. La combinación de un creciente activo neto exterior, un PIBN estancado, un excedente comercial continuo, demuestran un exceso de ahorro interno sobre la inversión interna. Un ahorro capaz de financiar el déficit público y encima invertir en el resto del mundo. Algunos dicen que es debido al envejecimiento de la población, pero el exceso de ahorro no tiene por qué acumularse en activos muy líquidos en vez de financiar inversión productiva, que cree empleo y crecimiento.

Que tanto ahorro se vaya a financiar activos exteriores, cuando la economía propia está estancada, y la inflación es cero o negativa, señala a un problema keynesiano, de desconexión entre le ahorro y la inversión, ese problema que la economía clásica no registra como problema, pues el exceso de ahorro bajaría los tipos de interés y eso alentaría la inversión. Pero no sucede, y no sucede en más de veinte años. Los tipos de interés están muy bajos, el tipo de la deuda a largo plazo está por debajo el 1%. Pese a eso, y a que la deuda haya alcanzado un 240% del PIBN los ahorradores prefieren meterse en los bonos. Total, la deflación va a elevar los tipos de interés reales por encima del nominal, así que es una inversión segura y rentable en términos reales.

Eso es la trampa de la liquidez. La gente prefiere mantenerse en liquidez o cuasi liquidez sin riesgo, con una rentabilidad real asegurada.

Lo que se propone ahora el Banco de Japón, es crear una inflación del 2% permanente, y para que la gente lo crea (ha sido un banco deflacionista en veinte años) ha dicho que va a duplicar su activo en un año. Esto último es para darle la vuelta a la credibilidad deflacionista que tiene. A lo mejor no necesita llegar tan lejos, pero se compromete a acumular activos hasta que la inflación se estabilice en el 2%. El esfuerzo que haya que hacer depende de la rapidez con la que gane su credibilidad inflacionista.

Entonces la gente ya no estará tan gusto con sus bonos. Se verá a obligada a buscar otras rentabilidades, que sólo encontrará en la economía productiva. Tampoco esperara tanto para consumir, si los precios van a subir constantemente. El PIBN crecerá, y si la deuda pública no aumenta, la deuda/PIB se reducirá. Hay un problema, y es que también subirá el tipo de interés nominal de los bonos, lo que encarecerá la deuda. Ai la inversión despunta, puede crear un efecto expulsión. Eso me parece que obligará a hacer un política de consolidación fiscal a largo plazo, para que el tipo no sea más alto que el crecimiento del PIBN.

Si la inflación es del 2% y el PIB real crece al 3% , el PIB nominal lo hará al 5-6%, holgura suficiente si los tipos a largo plazo no llegan a ese nivel. Pero eso, claro, es contingente, depende de un montón de cosas externas que no caen bajo el control del gobierno. Y el yen de devaluará al principio, sí, pero a largo plazo, si el esquema funciona, probablemente se revaluará, por la entrada de capitales exteriores en busca de una rentabilidad nueva u solida. Lo más urgente para Japón es reducir su ratio de Deuda PIB. Ha escogido el camino opuesto a los mandatarios del euro. Es decir, en vez de optar por reducir la Deuda nominal, han optado por crecer el PIB nominal. En otras palabras, al contraio que Alemania, ha decidido reducir su crédito al exterior a favor de más demanda interna. Ojalá les salga bien. No sólo por ellos, sino por nosotros. Su anuncio fue positivo para las bolsas europeas. Ya dijimos que esta NPM ofrece al a euro nuevas oportunidades, aunque dudo que las aprovechen.

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