"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

viernes, 14 de febrero de 2014

Iliquidez e insolvencia

En "Dinero don o son estado" presentaba al dinero y su inevitable relación con el estado. En "Ciclogénesis" me centraba en el dinero como guente de desequilibrios. Aquí hago un análisis de la liquidez como base fundamental de la solvencia de la economía. Sin dinero, la solvencia vuela. Una buena parte de este artículo complementa al anterior de la Ciclogénesis".

¿ El dinero es crédito? Es el crédito dinero? El dinero es por definición liquidez. La liquidez máxima. El crédito es capital. Pues es un inmovilizado a un determinado plazo. Sólo al final de ese plazo se recupera todo el capital y el rendimiento del préstamo. El crédito no es leído, al ser un inmovilizado... O. O lo era hasta hace poco. Hoy es fácilmente convertible en un bono y puede ser vendido, recuperándose la liquidez. Lo que a su vez permite volver a prestar ese fondo.

Pero el problema sigue ahí: la distinción entre liquidez y capital; como sigue ahí la distinción en problema de liquidez y problema de solvencia. Siempre se ha dicho que un problema de liquidez es transitorio, que puede solucionarse mediante un préstamo a corto plazo, o liquidando alguno de los activos. Si una entidad o una persona tiene un activo A y un pasivo P en equilibrio pero escasa liquidez L en relación a sus activos, L/A, no tiene más que que cambiar la composición de su activo de menos a más liquidez, vendiendo un activo An y sustituyendo lo por la liquidez cobrada.

Esto es posible para una empresa en medio de una fase cíclica alcista. Es un problema individual, que tiene solución no sistémica. Si ella sólo es la que tiene el problema, al vender su activo para recuperar liquidez en el mercado de An, puede que lo haga con pocas pérdidas o incluso con ganancias, si el mercado es amplio y profundo. Apenas sufrirá su nombre comercial. Es una empresa solvente, en el sentido que tien sus pasivos cubiertos por unos activos sólidos y vendibles.

De nuevo nos encontramos aquí con la "falacia de la composición". Una empresa no tiene repercusión en las demás; pero si la crisis de liquidez se extiende q toda la economía, entonces sucede algo inesperado: los sólidos balances de que presumían todas las entidades se desmoronan, porque todas quieren hacer lo mismo que hace una: vender algunos activos, pero como todas van a intentar vende, todos los activos se desmoronan. Entonces, es obvio que hemos pasado de un prolema de iliquidez a un problema de insolvencia: todos los activos que valían exactamente igual que los pasivos, ahoran valen una fracción (y siguen cayendo) mientras que los pasivos siguen valiendo lo mismo.

En esencia esa es la explicación de la crisis, con todas las complejidades que quieran añadir de ingeniería financiera. Por supuesto, el problema será más grave cuando además algunos activos (pisos) están sobrevaluados, pues caerán mucho más abruptamente cuando empiece la búsqueda de liquidez. Pero los activos más sólidos también se ven arrastrados, porque la dudas se amplían a todo, y la necesidad de liquidez sigue aumentando.

Un problema de liquidez individual no es preocupante. Un problema de liquidez general se convierte rápidamente en un problema de solvencia general. Ese problema lo seguimos teniendo, por lo que los leves signos de recuperación que dicen que ven algunos en la economía real se ven amenazados.

Por lo tanto, es erróneo intentar arreglar la crisis atacando sólo el problema de solvencia sin atacar el de liquidez. Esencialmemte es lo que ha hecho Europa: se ha despreocupado de la iliquidez, y se ha centrado, y escatimando recursos, en reparar la solvencia de los gobiernos y de la banca. Eso, sin un banco central activo que ponga en el mercado la liquidez fugada, no tiene apenas sentido. Sobre todo si hace recaer el coste de rehacer la solvencia bancaria sobre la solvencia del gobierno. El gobiernos se gasta mm de euros en rescatar a la banca, y a la vez la banca se dedica a comprar sólo bonos públicos. Un pacto con el diablo, pues no es una situación sin riesgo, y mientras el sector privado no recibe crédito porque nadie ha encauzado la liquidación de sus pasivos. Encima, el gobierno se ve obligado a subir los impuestos, lo que es una verdadera pedrada sobre los balances privados.

Esto, en una economía real en recesión, acentúa la recesión. A su vez, la recesión impide generar renta al sector privado para pagas sus deudas, privadas y fiscales. La baja inflación contribuye a ello. La deflación define ya un escenario aún más peligroso: el PIBN cae o se estanca, mientras las deudas privadas siguen en pie. El aumento de impuestos up aumenta las fuerzas recesivas, pues es una carga adicional sobre las deudas privadas.



No hay comentarios: