Si es así, tal vez deberíamos estar mucho más preocupados por las implicaciones éticas y sociales del crecimiento material que es más rápido de lo que los humanos pueden absorber espiritualmente. La angustia sobre la IA se centra principalmente en la desigualdad y el futuro del trabajo. Pero como los escritores de ciencia ficción nos advirtieron durante mucho tiempo, las amenazas potenciales que surgen del nacimiento de las formas de "vida" basadas en el silicio son realmente aterradoras. Es difícil saber quién tiene razón: ni los economistas ni los científicos tienen una gran trayectoria en lo que respecta a hacer predicciones a largo plazo. Pero en este momento, y dejando de lado la posibilidad de una batalla existencial entre el hombre y la máquina, parece bastante plausible esperar un repunte significativo en el crecimiento de la productividad en los próximos cinco años. Considérese que los principales componentes del crecimiento económico son el aumento de la fuerza de trabajo, el aumento de la inversión (tanto pública como privada) y la "productividad", es decir, el producto que puede producirse con una cantidad determinada de insumos, gracias a nuevas ideas. En los últimos 10-15 años, los tres han sido tristemente bajos en las economías avanzadas. El crecimiento de la fuerza de trabajo se ha desacelerado bruscamente, debido al descenso de las tasas de natalidad, y la inmigración no ha compensado incluso antes de Trump America. La afluencia de mujeres a la fuerza de trabajo jugó un papel importante en el impulso del crecimiento en la última parte del siglo XX. Pero ahora eso se ha cumplido en gran parte, aunque los gobiernos podrían hacer más para apoyar la participación femenina en la fuerza de trabajo y pagar la equidad. Del mismo modo, la inversión global se ha derrumbado desde la crisis financiera de 2008 (aunque no en China), lo que ha reducido el crecimiento potencial. Y el crecimiento de la productividad medido ha disminuido en todas partes, cayendo aproximadamente a la mitad en los Estados Unidos desde el boom tecnológico de mediados de la década de 1990. No es de extrañar que las tasas de interés reales mundiales sean tan bajas, con altos ahorros posteriores a la crisis que se traducen en un suministro más pequeño de oportunidades de inversión. Aún así, la mejor opción es que la IA y otras nuevas tecnologías eventualmente tengan un impacto mucho mayor en el crecimiento de lo que lo han hecho hasta ahora. Es bien sabido que a las empresas les puede tomar mucho tiempo reimaginar los procesos productivos para explotar las nuevas tecnologías: los ferrocarriles y la electricidad son dos ejemplos destacados. Es probable que la recuperación del crecimiento mundial sea un catalizador del cambio, generando incentivos para que las empresas inviertan e introduzcan nuevas tecnologías, algunas de las cuales sustituirán a la mano de obra, lo que compensará la desaceleración en el crecimiento de la fuerza de trabajo. Con las secuelas de la crisis financiera desapareciendo, quizás la IA comience a ganar impulso, y la tendencia del crecimiento de la producción estadounidense puede mantenerse fuerte durante los próximos años (aunque, por supuesto, también es posible una recesión). El probable aumento correspondiente en las tasas de interés globales reales será complicado para la guia de los banqueros centrales. En el mejor de los casos, podrán "montarse en la ola", como hizo famoso Alan Greenspan en la década de 1990, aunque es probable que esta vez haya más inflación. La conclusión es que ni los responsables de las políticas ni los mercados deberían apostar por el lento crecimiento de la última década que lleva al próximo. Pero eso podría no ser del todo bienvenido. Si los científicos tienen razón, podemos lamentar el crecimiento que tenemos.
"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James
sábado, 3 de marzo de 2018
Robotización vs Factor empresarial y Animal Spirits
viernes, 2 de marzo de 2018
Por qué España sí está saliendo de la crisis - según JM Rallo
En este sentido, hace bien Trichet en comenzar a subir los tipos de interés. Al margen de esa inflación de las materias primas que está generando Bernanke y que bien debiera convertirse en la tumba del monetarismo, hay una razón de mucho peso para subirlos: los tipos bajos no sólo promueven el endeudamiento de los agentes solventes, sino que también frenan el desapalancamiento de los insolventes. Ahora somos una sociedad mayoritariamente insolvente, por lo que necesitamos de tipos de interés altos para incentivar la amortización anticipada de una deuda con la que se han financiado inversiones que nunca volverán a ser rentables (si digo “suelo”, los promotores inmobiliarios –y las cajas– me entenderán).
jueves, 1 de marzo de 2018
Reflexión
Ahora rememoro aquel primer año que fue la época más dichosa de Foxfire aunque por entonces no lo sabíamos, una nunca lo sabe cuando le está pasando.Vivir es algo inmediato, una navega a toda vela, avanzando febrilmente. Hasta que todo está a salvo y consumado y muerto y una puede decir, como si despertara de un sueño: «Sí entonces era feliz, sí ahora que todo está acabado veo que entonces era feliz.» ¿Quizá sea ésta la ventaja de morirse?
Una gran prosa
De junio de 1976. Segundo viaje al Rosellón con mi amigo Mercader de Figueras. En su coche. Emprendemos la marcha a las once de la mañana. Muy caluroso. Insoportable. Pasamos la frontera de La Jonquera con la mayor facilidad. Antes de llegar a L’Enclusa —delante, mirando al norte—, conocida como El Suro dels Trabucaires87 (en el Rosellón, al corcho lo llaman siuro), nos desviamos a la izquierda del establecimiento sobre la carretera de Maurellàs y Ceret. Esta carretera atraviesa en esta época un auténtico paraíso terrenal: las viñas, los huertos y las hortalizas, los árboles frutales, las lechugas, las cosechas tempraneras, son una auténtica maravilla. La carretera es fresca y sombreada: las OP de este país han respetado todos los árboles. En nuestro país todo lo arreglan destruyendo; en Francia, conservando todo lo conservable. Durante el último viaje a esta zona, tuve ocasión de convencerme, una vez más, de que el Rosellón es un país mucho más tradicional que el mío —lo cual, solo de pensarlo, hace que se me caiga el alma a los pies—. El Rosellón es un país que aún está lleno de payeses, que cultivan la tierra de un modo admirable. En nuestras comarcas, dentro de poco, no va a quedar ninguno. Claro: el Rosellón posee un sistema de riqueza prodigiosa que proviene de las aguas que bajan de las montañas del Canigó, que florecen durante todo el verano, primavera y otoño. No existe ningún rodal de la Cataluña histórica que disponga de esta proyección de riqueza. Para nosotros, que vivimos en el norte de las tierras gerundenses, el Canigó es la llave de nuestro clima. Para el Rosellón, el Canigó no solo es la llave de su clima, sino el fundamento de su riqueza extremadamente consolidada y positiva. Los tres ríos del Rosellón: el Tec, la Tet y el Agli, que mosén Verdaguer, gran conocedor del Rosellón, comparó con las tres cuerdas de un instrumento de música. ¡Qué prodigio! La tradición, la riqueza, los payeses, ¡esto es un país!Pasamos Maurellàs, pueblecito agrario, muy agradable y limpio. Cuando pienso en los viejísimos pueblos del Ampurdán, tan abandonados, tan mal administrados, tan dejados de la mano de Dios, se me cae la cara de vergüenza. De Maurellàs vamos a Ceret: la carretera sigue siendo fresca y admirable: el pequeño paraíso terrenal prosigue. ¿Y si este paraíso tan pequeño fuera el grande? Quiero decir, todo lo que nos permite nuestra oscura inteligencia. «Quién sabe si todavía podremos comer dos o tres cerezas de Ceret», le digo al señor Mercader. «Podremos dar gracias... —me contesta—. Mire los cerezos del margen de la carretera y lo comprobará.» En efecto: ya quedan pocas. ¡Las cerezas de Ceret! ¡Qué delicia, Dios mío! Las cerezas de Ceret —las mejores de Francia—son ligeramente más gruesas que las nuestras, son algo más oscuras, pero tienen la fuerza de la piel y la carne, exquisita, de su interior. En esas llegamos a las afueras de Ceret. La población ha crecido mucho y muy bien. No hay ninguna casa con muchos pisos —la desgracia de la miseria de nuestro país.Claro que en este tema del crecimiento todo es muy relativo. Cuando decimos que Barcelona ha crecido ya podemos abrir el paraguas porque el pedrisco se nos viene encima, y crecer en estas monstruosidades urbanísticas significa hablar de cientos de miles de personas más. La pura locura. El crecimiento de Ceret, naturalmente, es más razonable. Las estadísticas dicen que en 1836 Ceret tenía 3.302 habitantes, y en el censo de 1968 aparecen 5.437 vecinos. Este crecimiento pausado da tiempo a todo: a conservar intactas las viejas calles y las plazas adorables, a mantener activos los árboles frutales y los ruiseñores, y a levantar con sensatez y mesura unas nuevas edificaciones muy bien vigiladas e incluso una pizca de la obligada industrialización. ¡Adorable Ceret! Tiene la coquetería de ser el primer productor pirenaico de cerezas con unas mil quinientas toneladas, y presenta una notable cosecha de vino, con una cooperativa de los pueblos de alrededor, que hacen el acreditado vino dulce de Sant Ferriol.Diríase que en Ceret se ha desarrollado el veraneo, tanto de Francia como de España —la línea de la frontera por Maçanet de Cabrenys está a un paso—. Debe de haber guías y todo, cicerones charlatanes que cuentan la historia vivida por Ceret. ¡Figúrense! La firma del Tratado de los Pirineos. En 1660 se reunían aquí los comisarios encargados de fijar la nueva frontera franco-española. Todo el Rosellón perdido por Cataluña, una de las jugadas más siniestras de la siniestra historia del Imperio español. Nos tomaron el pelo. ¿Es así como lo cuenta, bajo la fuente de los nueve chorros, el cicerone que da pan a las ocas turísticas? Hace más de cincuenta años que llegué a Ceret por primera vez, y recuerdo que andaba por la carretera solitaria con la maleta en la mano y me paraba de vez en cuando a escuchar el canto de un ruiseñor. ¡Qué entrada más buena! Fuimos al café a tomar un aperitivo para que el señor Mercader conociera el establecimiento en el que tantas horas pasaron Manolo Hugué, la Totote, el maire de la población, Aribau (la pronunciación era Aribó), Picasso, Sunyer, Derain y todo aquel grupo de artistas de París que durante la guerra del 14-18 se fueron a Ceret y convirtieron en famosa a la población. De todo aquel grupo de energúmenos hambrientos, quien mejor comía y quien vivía rodeado de envidias era el maire Aribó, que padecía de gota y en el café ponía siempre una pierna encima de otra silla. En Ceret hay una subprefectura que aún permanece en pie; en los años de aquella guerra —y siempre—el subprefecto sabía lo que pensaban y lo que decían los artistas: eran pacifistas, antimilitaristas, socialistas, comunistas. Gracias a Monsieur Aribó, el subprefecto se olvidó de aquellos personajes, que siguieron despotricando como de costumbre. Monsieur Aribó fue un radicalsocialista y un gran buen hombre. Manolo me había dicho muchas veces que a Monsieur Aribó, lo que decían aquellos artistas, todos premillonarios, le entraba por un oído y le salía por el otro —cuando le decían algo, se entiende. Al fondo del café veo a tres o cuatro personas mayores que todavía toman el aperitivo y tienen la amabilidad de dejarse interrogar. Todos se acuerdan de Manolo y la Totote —que son los únicos de aquella tropa que han dejado un vivo recuerdo en Ceret—. Eran realmente drôles, ¿comprende usted? ¡Pues claro que lo comprendo...! Luego pregunto: ¿dónde se puede comer algo en Ceret? Como no sea en casas particulares, no hay ningún sitio. De todas formas, habrá que comer... Vamos a Amélie o a Les Mes... El poeta Brasés, ¿está vivo o está muerto? Está vivo, pero ya no hace de barbero. Está jubilado. Ahora es el hijo quien hace de barbero... El escultor Vives, ¿está vivo o está muerto? Está muerto. Aribó debió de morirse hace muchos años... Sí, muchos años. Haviland, de Limoges, ¿está vivo o está muerto? Está muerto, se murió de miseria. Había sido muy rico; se murió más pobre que las ratas. ¿Y el pintor Brune, que hizo el museo? Se murió hace años. Y ustedes, ¿qué tal van? ¡Cómo quiere que vayamos, pardieu! Muy bien. Estamos jubilados. ¡Todo lo paga el Estado! ¡Es la cucaña! ¡Ya puede ir soplando la tramontana y nevando en el Canigú! De todas maneras, ya veremos los años que dura...El señor Mercader considera que tenemos que ir a Amélie porque me quiere enseñar Palaldà, que yo no conozco. Amélie-les-Bains —dicen que las aguas son excelentes—es una ciudad magnífica. Ceret es mayor y más bonito. Amélie es más moderno. Hay algunos buenos hoteles, el Casino, el río que atraviesa la población, toda la parte modernísima. Una casa de arquitectura actual, de catálogo, extrañísima. «No comeremos en Amélie —le digo al señor Mercader—. Es demasiado lujoso, demasiado caro. No son mis precios.» Vamos a Palaldà, que está encima de Amélie, hacia el sur. Población curiosísima. Vieja pero muy bien conservada. Calles estrechísimas. Los nombres de las calles escritos en catalán —no de ahora, sino de hace muchos años—. Una iglesia muy vieja, con una torre, probablemente románica, restaurada equivocadamente, a mi parecer. La gente, amabilísima. ¡Qué pueblecito para quedarse en él, para vivir allí tranquilamente! Visto Palaldà, atravesamos de nuevo Amélie-les-Bains y Ceret y llegamos de este modo a Maurellàs. En esta población cogemos el camino de Les Illes. La carretera departamental es estrecha, admirablemente asfaltada, muy bien señalizada para transitar por ella por la noche, con unas curvas tan bien trazadas que no causan la menor molestia. De Maurellàs a Les Illes hay doce kilómetros. Nos hallamos ante una jungla vegetal prodigiosa, frondosísima. Es el bosque más espeso que he visto en el Pirineo de este país. Al principio es un bosque de encinas. Después, hasta la frontera española, es un extensísimo bosque de castaños. La soledad es total. Nada de tráfico. No se ve casa alguna en ninguna parte. Perdón: hay una gran casa, llamada el mas Blanca, que, si no ando equivocado, sirve para alojar subnormales. Nada más. Cuando la curva de la carretera pasa sobre una arroyada, la temperatura, filtrada por una vegetación adecuada, es una delicia. Vamos subiendo hasta casi seiscientos metros. Como todos los grandes bosques, el espectáculo es algo monótono y en este momento verdísimo, pero tanto la dignidad de las encinas, primero, como la calidad de los castaños, más adelante, forman un espacio magnífico. En un momento dado, sobre la divisoria, aparece un espacio pelado y abrupto. «¡ Debe de ser España!», dice el señor Mercader. En efecto. La frontera pasa por la divisoria. Llegamos a Les Illes. De Les Illes a La Vajol, que es el pueblo más próximo a la frontera, no hay mucha distancia, y el trayecto se hace en parte por carretera y en parte a pie. En Les Illes, en verano, habrá unos cincuenta habitantes, pero la localidad tiene dos hoteles. Nos acercamos al Hotel dels Trabucaires y pedimos de comer. La gente es amabilísima. Pasamos al comedor, que, para mi gusto, es un poco demasiado folclórico y abigarrado. En el comedor hay siete personas, que están comiendo. Comemos primero una lechuga fresquísima, con pimiento verde y tomate; después, unas truchas de río, con almendras, que tienen el defecto de haber estado en la nevera un día más de la cuenta; y finalmente un gigot d’agneau insuperable y un flan de la casa sin rival posible. Cuando ven que somos del otro lado, aparece uno de los recuerdos más vivos de la gente del hostal: el recuerdo del doctor Dalmau de Girona, que pasó allí buena parte de la guerra civil y ha dejado de su estancia una atracción vivísima. Su hijo, el doctor Dalmau, es hoy, después de una vida muy navegada, médico de Palamós y gran amigo mío. La gente del hostal me dice que el doctor Dalmau de Girona, que era diputado de Esquerra, hablaba siempre con el párroco de Les Illes. ¡Lo que han cambiado las cosas! Ahora hay mucha más hipocresía.Después de comer, emprendemos la marcha hacia Perpiñán, por Ceret. Al señor Mercader le aguarda allí mucho trabajo. Tiene que comprar unos kilos de buey, quesos, unas botellas de whisky Johnnie Walker para su restaurante. Como el calor, a medida que vamos bajando, se va volviendo insoportable y bochornoso, le propongo que al llegar a Perpiñán lleve el coche a un garaje subterráneo, con la seguridad de que no voy a moverme de su interior. Es lo que hacemos. El señor Mercader emprende su negocio y yo me quedo en el garaje subterráneo, si no fresco, pasablemente fresco, y sin gente. Cuando vuelve, vamos a cargar lo que ha comprado y emprendemos la marcha hacia La Jonquera y Figueras. Contrariamente a lo que ocurre la mayoría de los días de la vida, que uno los pasa adormilado, el de hoy ha sido vivísimo.
miércoles, 28 de febrero de 2018
Según algún seudo economista, sí hay dinero para aumentar las pensiones
En concreto, “La renta de un hogar formado por un cabeza de familia de 65 años o más era en 2014 más de un 10% superior al de 2008. Por el contrario, en el resto de hogares, el descenso ha sido de entre el 14% y el 28%. Es decir, el colectivo de jubilados ha sido el único que no ha sufrido los embates de la crisis.”
“Así pues, Sr. Eme Punto Rajoy, tiene más razón que un santo: no hay dinero. Pero igualmente Vd. nos está tomando el pelo. Porque Vd. tiene el poder de crear dinero. Le voy a explicar cómo puede crear dinero. El gobierno crea dinero cuando gasta. Basta con darle a un botón y -¡presto!- el gobierno ha creado el dinero. El 97% del dinero tiene forma electrónica; es un mero apunte contable registrado en un ordenador. Ese dinero se crea cuando un funcionario del Tesoro le da a una tecla de un ordenador. Supongamos que un jubilado tiene derecho a una pensión mensual de 1.000 euros. Todos los meses un ordenador de la Tesorería de la Seguridad Social genera una orden automática de transferir 1.000 euros desde su cuenta a la del jubilado. Ya ni siquiera es necesario que lo haga un funcionario, ya ve Vd., Señor Eme Punto. Lo que sale de la cuenta de la Tesorería son ceros y unos. Lo que entra en la cuenta del jubilado son ceros y unos. Lo siento por los tecnoutópicos del bitcoin. El dinero digital fue inventado hace décadas. ¡Y es más seguro que un Bitcoin! ¿Qué es lo que recibe ese jubilado? Un crédito fiscal que el jubilado u otra persona a la que le transfiera ese dinero del estado podrá utilizar para saldar sus impuestos en el futuro. Sí, Señor Eme Punto, es así de sencillo. Así que le voy a explicar cómo puede usted conseguir ese dinero para subir las pensiones. Vaya al Congreso de los Diputados y proponga una ley para acabar con ese engendro llamado "Factor de Sostenibilidad de las Pensiones". A continuación haga un decreto para que las pensiones suban al menos tanto como los precios. ¿Ve como es fácil encontrar el dinero? Sólo tiene que reconocerles más créditos fiscales a los jubilados. El jubilado puede optar por ahorrar sus créditos fiscales (difícil, las pensiones no dan para tanto) o gastarlos y entregárselos a otro contribuyente que le deba más dinero a Hacienda. Cuando un contribuyente paga sus impuestos ese crédito fiscal se cancela, se destruye. ¡Abracadabra! Vd. tiene ese poder, Señor Eme Punto. Así que lo que ha dicho me indica dos posibilidades sobre Vd.: Vd. es un ignorante porque no sabe cómo funciona nuestro sistema monetario. Vd. es un mentiroso Lamentablemente me da la impresión de que Vd. es ambas cosas a la vez.”
martes, 27 de febrero de 2018
El famoso cuadro de ARCO
lunes, 26 de febrero de 2018
El ajuste por medio del tipo de cambio, ¿inmoral?
España desconstruyéndose a sí misma
Soraya, a modo de Cristóbal Colón: “Tierra!
domingo, 25 de febrero de 2018
Leyes anti discriminación. Empresas al basurero de la historia
La última amenaza que se cierne sobre la empresa acaba de dar la cara este jueves con la aprobación, en el Congreso de los Diputados, de una tal ley de igualdad retributiva o salarial que, planteada por Unidos Podemos, ha contado con el respaldo de todos los grupos, incluido el sorprendente Ciudadanos, y la abstención del PP. La iniciativa, un atentado a la libertad de empresa y la autonomía del empresario en la toma de decisiones que son de su competencia, implicaría cambios en el Estatuto de los Trabajadores, la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público, la Ley General de la Seguridad Social, y la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social. Defendida por la portavoz Irene Montero (o Montera), el proyecto de Podemos rivaliza con otro de idéntico tenor presentado por el PSOE, hasta el punto de que los Pablemos, muy ofendidos, han acusado a las huestes de Pedro Sánchez de haberles “copiado”. Se trata de ver quien queda primero en la feria de las vanidades del populismo rampante.
La iniciativa podemita establece que los representantes de los trabajadores tendrán derecho a “tener información en sus nóminas de la retribución media y mediana abonada en la empresa, desglosada por sexo y en atención a la clasificación profesional”, obligación que afectará también a las Administraciones Públicas. Impone a las empresas la realización de auditorías salariales que deberán contener una “evaluación adecuada de los puestos de trabajo, análisis, diagnóstico, actuaciones concretas y monitorización”, con sanciones que en caso de incumplimiento podrían rozar los 200.000 euros. Tanto PSOE como Podemos coinciden en apreciar la concurrencia de “discriminación retributiva, cuando exista una diferencia salarial entre hombres y mujeres superior al 20%”. El proyecto reclama la creación de “unidades especiales” de inspección de trabajo en materia de igualdad de género en cada provincia, fija una serie de “infracciones graves”, y obliga a crear un registro del horario laboral para contabilizar las horas extraordinarias. El trabajador a tiempo parcial, supuestamente ocupado en su mayoría por mujeres, tendrá los mismos derechos que el de tiempo completo. También contempla la creación de una “Dirección General para la Igualdad Retributiva” dentro de la secretaría de Estado de servicios sociales. Entre otras cosas.
sábado, 24 de febrero de 2018
Lo que ha quedado atrás
De la P a la Pa
jueves, 22 de febrero de 2018
La insidia soberanista frente a la debilidad del Estado
Al parecer, nadie les ha explicado aún a los de Rivera que, dentro de la Europa tolerante e ilustrada, los únicos raritos en ese asunto son ellos. Así, en todos los países plurilingües de la Unión Europea, en todos, lo habitual y normalísimo es que existan dos o más redes escolares paralelas, una para cada lengua en función de la preferencia de los padres.
Sucede en Gales, donde los padres son libres para decidir si el idioma vehicular de la instrucción de sus hijos será el inglés o el galés. Sucede en Finlandia, donde también los padres pueden optar entre centros públicos –o concertados– que imparten la docencia en finés y otros centros no menos públicos o concertados que lo hacen en sueco. Sucede en Eslovaquia, país en el que la población de lengua materna húngara igualmente dispone de la posibilidad de escolarizar a los niños en centros estatales cuyo idioma docente sea el húngaro. Y sucede aquí al lado, en Andorra, donde cabe optar entre tres tipos de centros educativos, los que usan con preferencia el catalán, los francófonos y aquellos en los que se estudia en español. Mas volvamos a Iceta. Porque el primer secretario del PSC va a tener mucho trabajo si habla en serio. Y es que, aunque él simula no saberlo, resulta que los niños catalanes están divididos en las aulas por razón de la lengua desde hace muchos, muchísimos años. Así, a los niños pobres se les sumerge sin mayores miramientos en el sistema público, obsesivamente monolingüe en catalán. Y punto. En cambio, a los niños de las clases medias, los que integran el grueso de la clientela de los centros privados concertados, se les tolera bajo cuerda un régimen mucho más laxo que combina catalán y castellano en proporciones que varían según la orientación ideológica de los titulares de cada centro.
Y a los niños ricos, los ricos de verdad, los únicos que se pueden permitir las matrículas de los colegios internacionales de élite que tanto abundan de un tiempo a esta parte en Barcelona, a esos se les consiente directamente que orillen el catalán, rebajándolo a la categoría de asignatura maría. En la Escuela Italiana, el lugar donde estudian los hijos de Junqueras, los alumnos no oyen una sola palabra en catalán hasta que cumplen 12 años, instante en el que, poco a poco, empieza a introducirse una parte del currículum en ese idioma. En el Liceo Francés ocurre otro tanto de lo mismo: el catalán tiene, en la práctica, la consideración de una simple asignatura. Pero es que en el Colegio Norteamericano de Barcelona ni eso. En ese carísimo centro, quien no quiera estudiar catalán, simplemente no lo estudia. Ahí existe la opción de estar exento de la lengua regional sin mayor problema. Eso sí, hay que pagar. Y mucho. Lo dicho, va a tener trabajo el líder del PSC.
miércoles, 21 de febrero de 2018
La recompra o “buyback” de acciones de la propia empresa
De hecho, las compras de sus propias acciones por parte de las empresas parecen haber jugado un papel en revertir la corrección reciente del mercado bursátil (lo cual es de agradecer). La mesa de recompra de Goldman Sachs disfrutó su semana de mayor actividad tras la carnicería de febrero, mientras los directores financieros aprovecharon la caída del 10% del S & P 500 y el final del apagón, según David Kostin, estratega jefe de acciones de Goldman Sachs. . Si bien el gobierno de EE. UU. Espera que los recortes de impuestos del año pasado generen una gran cantidad de inversiones, los primeros signos son que principalmente servirá para revivir las recompras y los dividendos luego del leve desplome de 2016-17. Si bien las estimaciones de consenso para "gastos de capital" - jerga corporativa para inversiones en fábricas, tiendas, oleoductos y otros activos - han aumentado en un 3 por ciento para 2018 desde que se aprobó el impuesto, las compañías S & P 500 han anunciado recompras de $ 171 mil millones desde Diciembre, según el Sr. Kostin. Cisco es un buen ejemplo. El grupo de tecnología anunció la semana pasada planes para usar $ 25 mil millones de los $ 71 mil millones en efectivo que mantiene en el extranjero para comprar nuevamente sus propias acciones, elevando su programa general de recompra a $ 31 mil millones. Eso equivale a aproximadamente el 14 por ciento de la capitalización de mercado completa de Cisco.Las expectativas de que los recortes fiscales se reciclen abrumadoramente en los mercados han ayudado al índice de recompra S & P 500 -que consiste de las 100 empresas estadounidenses que recompran la mayor parte de sus acciones- a superar al mercado bursátil en general este año, después de la mayoría de 2015 -17, notas de Oxford Economics. Eso puede ser una mala noticia para las esperanzas de un boom económico impulsado por la inversión. Pero para los inversionistas en alerta sobre la inminente era de una política monetaria más estricta, esta actual generosidad corporativa será un tónico vital.
lunes, 19 de febrero de 2018
EL genial Walter Bagehot
sábado, 17 de febrero de 2018
La próxima vez, no habrá una FED que nos salve. Jugamos sin red.
Repito: sin creen uds que no habrá otra crisis, incluso más grave que la de 2008, desengáñense. El mundo está totalmente desequilibrado, y encima Trump ha echado gasolina al fuego con su programado déficit fiscal de 1 billón de dólares en diez años, lo que llevará la deuda otra vez por encima del100% del PIB. El mundo está demasiado conexionado para que esto no tenga consecuencias.Lo que salvó al capitalismo en 2008 fue la intervención épica de la Fed para apuntalar el papel comercial y los mercados de valores respaldados por activos, y para evitar una implosión de la industria del mercado monetario. Supuso $ 1.5 trillones de préstamos de emergencia para detener el círculo vicioso. Los eventos se movieron con la velocidad del rayo, en el caos, con visibilidad cero. "La Reserva Federal prestó a instituciones individuales no bancarias cuyo incumplimiento habría sido extremadamente perjudicial para el sistema financiero y el estado de la economía", dijo Stanley Fischer, ex vicepresidente de la Reserva Federal en un discurso en 2016. "Las instalaciones fueron muchas y variadas, y se desarrollaron según fue necesario, porque el sistema financiero de los EE. UU. Es complejo y, a medida que la crisis se desarrollaba, la naturaleza de la siguiente fase fue en gran medida imprevisible. De haber cesado ese flujo de crédito, la severa recesión resultante habría sido mucho más grave ", dijo. El jefe de la Fed de Nueva York, Bill Dudley, ha hecho el mismo argumento, describiendo cómo la institución tuvo que intervenir con "respaldos de financiación" cuando el pánico hizo que las contrapartidas cerraran el crédito a compañías sólidas en 2008.Lamentó que la Fed no pueda proporcionar un interruptor de este tipo hoy. Puede actuar solo in extremis, con un retraso y bajo severas restricciones. Las crisis financieras no esperan que las burocracias se pongan al día. Bear Stearns informó a la Fed un jueves que quebraría ese viernes. Cuando el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Hank Paulson, nogó ña ayuda a Lehman Brothers, y a su libro de pasivos de $ 660 mil millones, pensó que el impacto podría ser contenido. En cuestión de días, el colapso había engullido a la mayor compañía de seguros del mundo, AIG, y luego amenazó con engullir todo lo demás. "Dejar ir a Lehman Brothers fue como tomar un avión a 40,000 pies, apagar los motores y dejarlo caer al suelo en una ciudad. Luego, me sorprendió que causara destrucción masiva ", dijo un sobreviviente de Lehman. Una vez que la bomba explotó, las ondas de choque globales fueron instantáneas y violentas. Fue la Reserva Federal la que salvó el sistema financiero europeo, evitando una reacción en cadena de los incumplimientos cuando los mercados de financiación en dólares del resto del mundo - eurodólares - se congelaron y se hizo casi imposible renovar los créditos en dólares a tres meses. El Banco Central Europeo y sus pares no podrían crear los dólares que se necesitan desesperadamente para apuntalar los mercados interbancarios de Europa. La Reserva Federal respondió avanzando líneas de swap de liquidez en dólares estadounidenses a los bancos centrales del otro lado del océano, eliminando todos los límites durante el salvaje fin de semana del 14 de octubre de 2008. Los swaps totales aumentaron a $ 580bn. La Fed puede, en principio, seguir haciéndolo hoy, sujeto a la aprobación del Secretario del Tesoro de EE. UU. Y, por lo tanto, de la Casa Blanca de Trump. Mi pregunta es si la Fed de hecho vacilaría -y por cuánto tiempo- bajo las restricciones políticas implícitas del Washingto trumpiano.
Jugando a perder la vida
viernes, 16 de febrero de 2018
Ahorro, inversión, tipos de interés. La brecha creciente entre el Euro y EEUU
jueves, 15 de febrero de 2018
El PIBN como objetivo monetario, una entelequia
miércoles, 14 de febrero de 2018
Los precios de enero en EEUU confirman los temores de más subidas de tipos de interés
Los inversores esperan que el banco central de Estados Unidos eleve las tasas de interés al menos tres veces este año, con el próximo cuarto de punto potencialmente en marzo, y ahora hay casi un 20 por ciento de posibilidades de al menos cuatro aumentos en 2018, según a los cálculos de Bloomberg a partir de los precios de los futuros de los fondos federales. A principios de enero, el mercado de los fondos federales implicaba que los inversores pensaban que había aproximadamente un 10 por ciento de posibilidades de que cuatro tipos de interés aumentaran este año.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años subió a2.862,9%, mientras que los futuros de acciones estadounidenses cayeron, ya que las cifras renovaron las preocupaciones de los inversionistas de que la Reserva Federal eleve las tasas de interés a un ritmo más rápido de lo anticipado. Los datos siguieron a las cifras de salarios a principios de este mes, que fue lo que provocó un repunte en los rendimientos de los bonos del Tesoro y comenzó una caída en las acciones que las llevó a la primera corrección en dos años.
martes, 13 de febrero de 2018
Las bolsas se estabilizan. Un crash está lejano todavía
Gráfico de Gavyn Davies. FT