"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

miércoles, 20 de abril de 2016

España, acelerador de partículas de subvención

Leo un jugoso artículo de Juanma del Álamo sobre la disparatada creatividad española para poner subvenciones en los objetos voladores menos identificados (OVNI). Pronto se dota la subvención, luego se deja caer donde sea. A posteriori s le pone un nombre a cuál más hortera. La lista es infinita, si tenemos en cuenta que estas subvenciones  son "abiertas" es decir, renovables hasta la eternidad. Me deprime, porque soy keynesiano, pero no puedo serlo en mi país. No puedo recomendar una política de inversión pública financiada por créditos baratos. España está llena de hormigón abandonado al sol. Nos hemos gastado ya todas las inversiones de los próximos 200 años. En fin, lean lo que subsidiamos ahora, en tiempo de crisis...
Una apuesta, ¿acabamos como Cuba o como Venezuela?

Nuestros políticos se están dejando la vida para tratar de mejorar nuestras existencias a golpe de talonario. En pocos días hemos conocido que el Ayuntamiento de Madrid ha presentado un proyecto de obras de 1.300 folios, entre cuyas iniciativas consta un nuevo sistema de riego que será amortizado en cuatrocientos años.

También es posible que para mediados del milenio la Junta de Andalucía haya encontrado algo que hacer para los 1.800 empleados que reconoce tener "mano sobre mano". El que tuvo mucho trabajo fue Pablo Carbonell, al que el alcalde de Cádiz pagó 48.000 euros por su pregón del Carnaval, lo típico de un país en el que, según dicen, la gente se muere de hambre. Algún mal pensado podría intuir que es una contrapartida de Carbonell a cambio de su apoyo a Podemos, pero nosotros no somos así.

Cazar en grupo da buenas oportunidades. No es necesario ni el sigilo, es mejor la distracción. No hay riesgo alguno de resultar herido, aunque la supervivencia está en juego año tras año. Tras observar a su presa con detenimiento, lanzar un buen cebo parece la opción más sencilla. Se trata del ser más hambriento de la naturaleza: la ONG, el sindicato o la fundación, siempre a la caza de la indefensa subvención.

Lo importante es tener un proyecto con nombre largo y enrevesado y que alguien lo considere imprescindible. ¿Quién no pondría dinero para apoyar la Viabilidad del sistema silvopastoral roble-cerdo celta en la Galicia Atlántica o para la Conservación in situ y ex situ de la gallina valenciana de Chulilla?

Las comunidades autónomas deben mantener su identidad en términos culturales, lingüísticos y aviares. Así que, solamente en 2015, gastaremos 24.000 euros en la conservación de la levantina gallina, la primera de raza autóctona de la región. Nueva victoria del nacionalismo que impone la inmersión gallinácea frente a la pasividad, e incluso colaboración, del Estado español.

Mientras se rompe España, veamos otra subvención necesaria: Elaboración de snacks de nueva generación con compuestos bioactivos de algas y garrofín. Son apenas 110.000 euros. Si usted no es hipster o aficionado a MasterChef, es probable que no conozca qué es el garrofín. Son las semillas del fruto de la algarroba, de cuya producción somos líderes mundiales. España, siempre a la vanguardia en todo lo aburrido.

También es verdad que es infinita la superioridad moral del que come gusanitos de algas frente al que come patatas fritas. Así que a la larga hay negocio. Además, este proyecto recibe una nueva subvención complementaria llamada Validación de los beneficios del snack de nueva generación (130.000 euros).

Elaboras los snacks y luego validas sus beneficios añadiendo más dinero. Miren, este asunto de los snacks de algas es una genialidad porque, cuando se terminen las ayudas, los responsables tendrán que pedir una nueva subvención para investigar cómo conseguir que dejen de saber a mierda. Y así va pasando la vida.

Usted pensará que exageramos con esto de las subvenciones reincidentes. De acuerdo, veamos otro ejemplo que hemos investigado: el lenguado senegalés. ¿Quién no lo ha comido alguna vez? Por ejemplo, en 2006 concedimos una beca para que cuatro investigadores estudiaran el comportamiento reproductivo del lenguado senegalés.

En 2011, subvencionamos a tres universidades del sur y al CSIC para que estudiaran los ritmos de reproducción del citado bicho. En 2014, hasta se publicó un pequeño libro sobre el tema. Y en 2015 hemos gastado medio millón de euros en estudios (de nombre demasiado largo) relacionados con el pececito de marras. Empiezas a investigar al lenguado de Senegal y no sabes cuándo parar. Lo queremos saber todo. Y es que estas cosas se retroalimentan, como el lenguado que se muerde la cola (peor metáfora hasta el momento).

Que nada se quede fuera

Hay muchas más cosas que usted y yo pagamos con gusto con nuestros impuestos y que aparecen silenciosas en el BOE. Ahora deben ver la luz. Por ejemplo, subvencionamos investigaciones para la Mejora de la calidad y resistencia del calabacín (hasta que consigamos que sea duro como una barra de acero), para el Bienestar y salud de conejas reproductoras (esperemos que con un aumento en sus días de baja por maternidad), para la construcción de Puentes transportables (de gran utilidad si entramos en guerra) o para la Impresión de fotos desde el móvil en un instante(totalmente inútil incluso en tiempo de paz).

En el transcurso de nuestras investigaciones hemos hallado un truco que usan algunos emprendedores. Si usted está intentando cazar una ayuda estatal como las que hemos visto y el nombre de su proyecto no resulta atractivo, le recomendamos que use el inglés, que da más caché a todo. Veamos un ejemplo: Internet-of-Things Management Platform and Applications based on Connected Things.Tome 58.000 euros, se lo pido por favor.

Por supuesto, seguimos subvencionando asociaciones de empresarios, el cine (74 millones en 2016, más lo que surja) o asociaciones deportivas, incluida la de ajedrez. Condenamos desde aquí que se apoye un juego monárquico y tan poco paritario, en el que, salvo la reina, todas las fichas son hombres (las torres son necesariamente asexuales). Reclamamos desde aquí la inclusión de peonas o la retirada inmediata de las ayudas públicas.

Pero no solamente financiamos deportes machistas e investigaciones llamadas al éxito. También tenemos la costumbre de financiar reuniones, reuniones celebradas por los motivos más aburridos que podamos imaginar. Las opciones son infinitas: vean el emocionante Simposio Internacional de manejo integrado de plagas de solanáceascelebrado en Quito, vibren con el apasionante quintoEncuentro Internacional de Cucurbitáceas celebrado en Cartagena, Murcia, o tiemblen de emoción con la palpitante vigésima Jornada Frutícola de Mollerussa. Por cierto, localidad, esta última, que ya cuenta con el Museo de Vestidos de Papel más importante de España.

Llueve sobre mojado cuando recordamos que Cataluña ya se llevó los Juegos Olímpicos no hace tanto tiempo. Y ahora celebran la Jornada Frutícola. ¿Cuándo le tocará algo a Madrid? Muy mal, Montoro.

No nos desviemos llevados por la envidia. En todos estos alucinantes encuentros que hemos visto (reales, lo juro) usted y yo hemos participado con un generoso donativo de decenas de miles de euros. Y en otros muchos a los que jamás podremos ni querremos asistir.

Imagínese por un segundo las diapositivas de melones, el tono plano y el aspecto gris de los ponentes, los ronquidos entre el público asistente mientras presentan los últimos avances en el mundo del pepino y el calabacín. Todo ello antes de asistir a un generoso catering a base de empanada de cebollino y jugo de berza en el que los invitados comentan con entusiasmo el hermoso aspecto del pimiento rojo de la tercera diapositiva, tumbado como La maja desnuda.

'Ayuda' al exterior

Asomemos la cabeza fuera de nuestras hortofrutícolas tierras. Miren, subvencionamos tantas cosas en otros países que parece increíble que siga habiendo problemas en el mundo. Gastamos unos 1.500 millones de euros anualmente solamente en Ayuda al Desarrollo.

Aunque usted no lo sepa, desde el sofá está colaborando con el proceso de descentralización de Panamá (30.000 euros), con la reforma judicial de Paraguay (13.200 euros) y con el empoderamiento de los jóvenes de Jerusalén Este para que se conviertan en agentes del cambio (76.000 euros). Cualquiera diría que estamos poniendo dinero para crear un Podemos en Jerusalén, pero esperemos que no sea así.

Estamos apoyando todo lo bueno por todo el mundo. Las partidas de gasto se cuentan por miles. Veamos con detenimiento algún otro ejemplo interesante: la Ejecución del proyecto de gestión de conflictos rurales y salvaguarda de los espacios pastorales en las regiones de Maradí y Tahoua (que vienen a ser como el Villarriba y Villabajo de Níger). A la resolución de estas graves disputas pastoriles aportamos nada menos que 300.000 euros en 2015, que el Ministerio de Ganadería de aquel país africano distribuye con inteligencia y profesionalidad.

Imaginemos que dos pastores discuten por unas tierras: el problema se soluciona repartiendo la subvención a partes iguales y dejando pasar el tiempo. Al año siguiente vuelven a surgir conflictos (o se hace que surjan) y hasta Níger viaja de nuevo la salvadora subvención. Asunto resuelto y nosotros dormimos con la conciencia tranquila.

Cambiemos de continente. En el último trimestre de 2015 los españoles subvencionamos una Encuesta de Prevalencia y características de la violencia contra las mujeres en Bolivia.Para su realización España entregó 300.000 euros al Ministerio de Justicia del país andino sin los que la encuesta no podría haber sido realizada, claro. Es un gasto muy superior al que suponen la mayoría de las encuestas electorales hechas en España, un país cuatro veces más poblado y con unos costes laborales muy superiores. Parece un exceso, pero es un dinero muy bien gastado.

Y es que buena parte de las subvenciones que realizamos llegan justificadas (es un decir) después de que hayamos realizado una encuesta previa que también hemos financiado nosotros. Los resultados de la encuesta arrojan a nuestra cara nuevas necesidades y como país responsable y perroflauta que somos, acudimos a resolverlo con nuevas ayudas.

Se elabora un informe, que también financiamos nosotros. Se realiza una presentación del informe (que subvencionamos, claro) y en los años posteriores se manda más dinero para resolver aquello que denuncia el propio informe. Encuesta, informe, presentación, solución de los nuevos problemas. El sistema funciona y el mundo sigue girando.

Y no piense que las presentaciones son baratas. Veamos solamente un ejemplo de 2015: la presentación del informe Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer y su aplicación en Palestina nos costó 280.000 euros. ¿Casi 300.000 euros para presentar un informe? Esperemos que el cuerpo de baile y los fuegos artificiales fueran buenos.

Huelga decir que de todo lo que invertimos en el exterior buena parte no llega nunca a emplearse en aquello para lo que se había asignado. ¿Qué control puede haber en Níger, Bolivia o Senegal sobre el dinero, por ejemplo, destinado a poner en orden la ganadería de un pueblo? Seamos serios, allí hasta las ovejas son corruptas.




Literatura alegre y desenfadada

De Arcadi Espada robo está increíble sorpresa mañanera (cosas en la que me iba la vida cuando era joven; el tiempo se come todo, se nos come): 


Un querido amigo en cuya pericia confío me advierte que es mala la traducción de Gimferrer del verso de Pound.

No se entiende la imagen. Los pétalos están caídos sobre la rama, no salen, ¡como brotes!, de la rama.

O sea:

The apparition of these faces in the crowd; Petals on a wet, black bough.

"La aparición de esos rostros entre la muchedumbre: pétalos en una rama negra y mojada."

El traductor francés lo pilló:

"L'apparition de ces visages dans la foule; des pétales sur une branche noire et mouillée".

Luego mi amigo se anima y me deja esta canción en torno al Campari que es una delicia.


Esta es la letra en francés:

Campari Soda

Je reprends un Campari Soda
Loin sur moi la mer des nuages
Le ventilateur ronronne doucement
C'est comme si j'existais pas

Par le hublot je vois des turbines
L' avion se balance doucement dans l'air
Le copilote dit au microphone
"On your left you can see
Bälpmoos in the dust."

Je reprends un Campari Soda
Loin sous moi la mer de brouillard
Le ventilateur ronronne doucement
C'est comme si j'existais pas

Je reprends un Campari Soda
Loin sous moi la mer des nuages
Le ventilateur ronronne doucement
C'est comme si on n'existait pas

Y su versión rápida y española:

Campari Soda

Me tomo otro Campari Soda

Debajo de mí el mar de nubes

El ventilador ronronea suave

Como si yo no existiese ya


Por la ventanilla veo dos turbinas
El avión se mece en el aire
El copiloto dice por megafonía:
"On your left you can see
Málaga in the dust."

Me tomo otro Campari Soda
Sobre el mar de niebla voy
El ventilador ronronea suave
Como si no existiese hoy


martes, 19 de abril de 2016

Valoraciones desde Alemania del Brexit

El presidente del IFO  Clemens Fuest, el instituto económico más importante de Alemania, hace una  interesante valoración del coste del Brexit, nada halagueña para Alemania, por cierto. No creo que llegue a producirse -el gobierno británico ganará el referéndum, pese a su terroríficas campaña- pero estoy con jovencito de que el Brexit sería un palo más duro para la UE y el uso ue para GB.

... To begin with, Brexit would change the way multinational companies make investment decisions. The UK could face an exodus of foreign firms, as companies seek to retain a presence in the EU. But there is no reason to believe they would necessarily move to Germany; many US multinationals, for example, would likely relocate to Ireland.

At the same time, the EU as a whole – and Germany in particular – would become less attractive to investors. The UK would be free to loosen regulations and lower taxes in order to attract investments for which a foothold in the EU is not necessary. This, too, could reduce investment in Germany.

Second, while some believe that Brexit would cause Frankfurt to rise in importance as a financial center, that outcome is highly uncertain. Today, London is Europe’s dominant financial center, even though the UK is not a member of the eurozone. This suggests that proximity to the European Central Bank is not an important factor in the success of a financial industry.

To be sure, the EU would come under growing pressure to use regulatory measures to take business away from London, but whether that would work is an open question. Already, Deutsche Börse and the London Stock Exchange have announced that a planned merger will go ahead, regardless of the outcome of the Brexit referendum.

Even if London’s importance as a financial center does decline, some of the business will be picked up by centers outside Europe, such as New York or Hong Kong. And the business that does migrate to the EU could just as easily be snapped up by rivals to Frankfurt, such as Paris.

Third, German exporters are likely to suffer. In 2015, the surplus from trade with the UK topped €50 billion ($57 billion), with German exports totaling roughly €89 billion, or 3% of German GDP. Only France and the United States bought more German goods. Any disruption to bilateral trade would be felt across the country.

Exactly how trade and capital flows would be affected depends on the exit arrangements negotiated between the EU and the UK. If the UK were to remain, like Norway and Iceland, part of the European internal market, the economic damage would be limited. Unfortunately, however, this is unlikely.

Non-EU countries that have access to the European Single Market are also required to comply with most European regulations – which is exactly why the UK wants to leave the EU. Moreover, some European decision-makers might want to make sure that Brexit causes as much pain as possible, to deter others from following the UK’s example.

By declaring its intention to leave, the UK would trigger Article 50 of the EU Treaty, which stipulates a two-year deadline for reaching an exit agreement. If no agreement is signed before the deadline, EU membership simply expires. A minority of 35% of the votes in the European Council would be enough to block an agreement that minimizes the economic costs of Brexit.

Finally, Brexit would be a severe setback to European integration. The EU’s remaining members might agree more easily on common policies regarding internal and external security and foreign policy; but, for Germany, it would become harder to champion free trade and oppose protectionism...



Grecia petará de nuevo, seguro

Ejemplo perfecto de lo que decíamos en el post anterior. De nuevo runrún sobre las eternas negociaciones sobre GreciaGrecia quiere una quita/reestructuración de deuda, que por supuesto es impagable. Una deuda cercana al 200% de PIB... El FMI está de acuerdo en que la deuda griega es impagable, pero Schaueble, ministro de finanzas alemán, dice que ni hablar: es perfectamente posible pagar la deuda integra. No quiere corrimientos de tierras, contagios ni nada precido a que otro país del euro pudiera tomar ejemplo. 
Este es un ejemplo perfecto del fracaso del euro y la escisión de la UE en dos zonas cada vez más distantes: una zona acreedora, como Alemania al frente, y una zona deudora. Unos no quiero dejar que sus bancos no cobren, antes se cortan la mano, y otros, sencillamente, no puede pagar, pues su economía es incapaz de generar la renta para dar de comer a su población y además pagar la deuda. 
La imposibilidad se ve en la sustancia que se está negociando dentro del último rescate (mejor dicho penúltimo, porque guía volverá a explotar): se está intentando que Grecia acepte una reforma de su sistema fiscal, según el cual actualmente el 55% de los griegos no pagan impuestos. 

With Greece currently facing a primary deficit of 1-1.5 per cent of gross domestic product this year the IMF is arguing for a less ambitious target. But it is also concerned that Greece’s government is still avoiding long-term reforms, particularly to its tax system. Some 55 per cent of households in Greece pay no tax, against an average of 18 per cent in the EU, Mr Thomsen said

Viendo estas cifras, Grecia petará otra vez, seguro. con esa estructura, con esas deficiencias, nadie se puede hacer la ilusión de un pagará la deuda íntegra.  

El duro e incierto camino hacia la Unión m Europea plena

¿A qué se parecería una Unión Europea plena? es decir, una Europa con un solo gobierno, no disfuncional, un Parlamento no disfuncional, una justicia común, (hasta ahora inexistente), en la que, por razones de mínima eficacia, todos deberíamos hablar una lengua común (probablemente el inglés) aparte de nuestra lengua vernácula... Y la moneda común, claro. Ah! Y su ejército común, claro.

Se parecería muy poco a lo que hoy llaman UE. Una vez alcanzada la "normalidad" de funcionamiento, sería una gran nación hegemónica. ¿Pero cuánto tiempo tardaría en culminarse el objetivo final? serían los costes personales de las generaciones sacrificadas soportables? 

Porque mientras no se alcanzara un nivel mínimo de normalidad, los sacrificios serían incalculables. 

Es claro que desde esa solución óptima, los problemas de hoy serían fácilmente resueltos. Pero hoy tenemos los problemas, pero no esa solución institucional que permitiría verlos como gestionables, absorbibles.

Ah! Sin embargo, los problemas de hoy son tan inmanejables con las instituciones de hoy -y no van a congelarse en el tiempo hasta que pasen décadas y cristalice la Gran Unión Europea- son tan desafiantes, que es fácil ver que están poniendo palos en las ruedas de proceso de avance hacia la Unión Final. 

Es así porque dichos problemas -el económico-social y los refugiados- no sólo han demostrado el fracaso de la UE, sino que además han generado fuerzas políticas muy fuertes contra ese mismo grandioso proyecto. 

¿Quién tiene razón? ¿los burócratas que en su Manifiesto de los Cinco Presidentes quieren aherrojar cada vez más las libertades de cada país, para avanzar por la vía rápida del decreto hacia ese camino lleno de incertidumbre, o los que se oponen desde partidos extremistas que amenazan con acabar con las democracias nacionales, única que funcionan en Europa? 

No lo sé. Desgraciadamente, una cosa alimentaba la otra: el desasosiego social alimentaba los partidos no democráticos. Lo único que sé es que la crisis de los refugiados se ha intentado paliar (que no solucionar) de manera chapucera cargando el muerto a los paises fronterizos, que son precisamente los ex países del Este de Europa, y que han irritado a sus habitantes con la UE. Esos países, ante el aluvión, se ha declarado en rebeldía de la UE, lo que da una idea de la fragilidad de de los lazos burocráticos. De modo que hay líneas rojas que la UE se ve obligada a respetar, en contra de sus principios. 

En cuanto al problema económico, hemos comprobado el fracaso del modelo que se ha intentado aplicar a la crisis. Ese modelo de austeridad fiscal y, tras varios años, de expansión monetaria, no ha acabado con la amenaza deflacionista. 

De todas formas, las estructuras fiscales tan diversas que hay entre los paises hace difícil ver cómo se podría haber articulado una solución fiscal-monetaria común. No hay ningún manual de economía donde se contemple un escenario tan borroso de diversidad política, y social, que admita sin rechinar una solución única satisfactoria para todos. 

Y en cuanto a los problemas de estructura, no se ha avanzado un ápice en su modernización, ni durante la post crisis, ni menos durante la burbuja previa. Es difícil, o imposible, con las tasas de paro y la desafección creciente que hay. Ahora mismo es impensable que salga un gobierno en España bastante fuerte como para legislar en todo el territorio nacional, y menos en temas tan sensibles, a los que se oponen tantas fuerzas sociales. 

Desde este punto de partida, que nadie me refutará (ni siquiera nadie del panglossiano Instituto Elcano), resulta difícil imaginar por donde se va a abrir la vía de avance hacia la Utopía. Pero pensemos un poco en lo que representa ese camino. Los optimistas dirían que, con sólo iniciarlo, ese camino hará surgir fuerzas positivas que ahora están dormidas por culpa de no haberse iniciado antes. Es decir, que las grandes masas de trabajadores desplazados de un lado a otro del continente, en busca de un salario mejor, se hará con alegría ilimitada; que el cierre de empresas improductivas será aceptada sin rechistar porque el numero de empleos aumentará a nivel de la UE. ¿Quién puedo creerlo?

Porque hay que suponer que una vez Europa sea una nación, forzosamente tendría que haber una gran redistribución de los factores productivos hacia sus zonas de mayor eficiencia. Es lo que dice la teoría de las Áreas Monetarias Óptimas (Mundell). Y lo que dice, además, es que tiene que haber flujos fiscales compensatorios desde las zonas con superávit fiscal cíclico a las zonas deprimidas (Kenen), lo que supone un embrión de política fiscal común opuesta a el ordoliberalismo de que cada uno tenga la de cuentas equilibradas y con es ya está. Se requiriría pues, un cambio radical de actitud de los paises del Norte, pero dicho cambio es cada vez más difícil por la oposición creciente de partidos nacionalistas, que recogerán la frustración social evidente. 

Y mientras, ¿qué pasa con las ingentes deudas del Sur contra el Norte? Parece que la teoría de los acreedores es que primero se pagan esas deudas, cueste lo que cueste en tasa de paro e inestabilidad social, y luego se podrá endeudar cada país según el Pacto por la Estabilidad y el Empleo, qu al parecer sigue en vigor, pero no sé si con otro nombre. Para justificarlo, se alude a la teoría sin padre ni madre que dice que la consolidación fiscal incentiva la inversión, lo que se ha visto notoriamente falso en estos años. 

En resumen, no veo posible un camino desde el presente hasta la Gran Unión son enormes fricciones y conflictos. Es más, no sé si vale la pena sufrirlos y sacrificar varias generaciones para no llegar a ninguna parte. Es claro que el resultado final es atractivo, pero el camino es fuertemente repulsivo... Y con final incierto.

lunes, 18 de abril de 2016

La Paz, según Otegui. Forjando mitos

Ayer nos sirvieron la entrevista de de Jordi Evole al ex militante de ETA Arnaldo Otegui, que nada más salir de la cárcel ha iniciado su carrera hacia la Lendakaría. 
Lo primero: Evole es un gran periodista, no deja indiferente a nadie. Podemos repudiar su punto de vista, su demagogia, a veces con sangre y todo, pero cuando se enfrenta a un miura como Otegui no deja de entrar en todos los rincones posibles. 
Otegui demostró ser un gran componedor de leyendas, que ha manipulado el pasado con gran habilidad, que tiene labia, cierta solidez que no tiene  nigun político español - ya quisiera Pablo Iglesias que su verborrea vacía se aproximara a la de Otegui en su capacidad de convencer y de decir algo coherente de la realidad.
En otras palabras, Otegui será posiblemente Lendakari, y eso quiere decir que el PNV, si no hace algo inesperado, habrá perdido la hegemonía, la que le queda. Otegui está creando un mito más potente y fresco que el desgastado del PNV. 
Otegui ya no es de ETA, pero sigue hablando por ella, aunque pone mucho cuidado con marcar las distancias. Él es un "Hombre de Paz", que quiere ganar por la "democracia" lo que ya no tiene sentido buscar con las armas. Su discurso es ese, exactamente: ocupar un papel que nadie hasta ahora ha sabido llenar. Un papel que cuando lo llena un actor idóneo para ese papel, te das cuenta que es el actor el que ha descubierto donde estaba el lugar perdido, el que todos buscaban y nadie acertó a encontrar. Y es que entre los Sortus y los Bildus, Otegui destaca como un gran estratega, pese a las mentiras, a la manipulación del pasado. Pero manipular el pasado todos lo hacen, pero pocos lo hacen bien. 
Y Otegui parece que ha vencido a su pasado con holgura. Además, en el resto del "estado" podría suscitar dudas, pero entre los vascos y las vascas no lo creo. La verdad no importa. Se trata de fabricar un mito, una historia del terrorismo más o menos heroica, de la que no se pidan cuentas, pues era una guerra. Se llora, se muestra uno compungido por lao muertos, pero no se condena, como dejó claro en la entrevista, eso ni hablar. Lo dijo bien clarito: no sabes quién se puede sentir dolido por un reproche de ese tipo, que cada uno haga con su conciencia lo que le mande su conciencia, el pasado es el pasado, y lo que queremos es hacer el futuro. Para empezar, hay un respetar a loa verdugos, que tuvieeon grandes problemas de conciencia que no conviene avivar. Y de paso contar la historia de los años de plomo de forma que ilusione a los vascos y a las vascas, que tienen la conciencia revuelta con tanta sangre. Hay que resolver esto colectivamente, hay un convencer a la gente que es un pueblo vencedor, no vencido, y a eso ha venido Otegui, a llenar ese vacío que nadie había visto. 
O sea, que es listo. Sabe que la verdad es endeble, y hay que aplastarla. Sabe que si el "Estado" se hace con al versión oficial de la historia, habrán perdido y los vascos y las vascas no levantarían cabeza. 
Hay que reinventar el Mito para ganar la historia. Pero no es un hipócrita como Iglesias, que no cree un ápice de lo que dice. Otegui está convencido de su discurso, y le llevará lejos. 
"Cuando la leyenda supera a la realidad, se publica la leyenda", decían el "El hombre  que mató  a Liberty Valance", de John Ford. Es la leyenda la que forja pueblos y naciones, no la verdad matemática. Unos se aprovechan  de ese rebufo, otros quedan descolgados. España no tiene  leyenda a la que agarrarse. Eso también lo sabe Otegui. Por eso ha dejado el camino militar, agotado, y ha iniciado un nuevo camino, pero el político,  el de aunar voluntades en torno al rescoldo de una nueva y pimpante historia ilusionarte. Tiene todas las bazas en la mano. 
Que le vamos a hacer. 
Por cierto, vean la entrevista. 



domingo, 17 de abril de 2016

Cycle of Credit Booms

“Consider the past quarter century: a credit boom in Japan that collapsed after 1990; a credit boom in Asian emerging economies that collapsed in 1997; a credit boom in the North Atlantic economies that collapsed after 2007; and finally in China. Each is greeted as a new era of prosperity, to collapse into crisis and post crisis.” MARTIN WOLF (“We Are Trapped in a Cycle of Credit Booms,” Financial Times, October 8, 2014,)


Horarios, jornadas

Siguiendo la tendencia hacia a la hecatombe, los partidos han empezado a ofrecer lo que llaman "racionalización de horarios", a lo que Rajoy, el último de los mohicanos, se ha apuntado a la orgía,  prometiendo que la gente no trabajará más tarde de las seis de la tarde. Y todos felices. 
La única racionalización de verdad sería la que aumente, o al menos no afecte, a la productividad. Esto es así porque, aunque casi nadie lo dice, sin aumento de productividad no hay aumento de renta que distribuir entre empresa y trabajadores. Por lo tanto, de la productividad depende no sólo el salario real del trabajador, sino la capacidad de invertir, aumentar la plantilla, mejorar los salarios. 
La economía es ineludiblemente un proceso de decisiones intertemporales. Esto quiere decir que hay que estar siempre pensando en el futuro. Las decisiones sobre el presente deben incorporar un calcula de las consecuencias para el futuro. 
Si él gobierno de turno decide arbitrariamente regular los horarios, manipular la jornada laboral, etc., se está tomando frívolamente la cuestión. 

La productividad es un resultado del ámbito empresarial, por lo que, en principio, el gobierno debería legislar lo que es común a todas las unidades de producción, y dejar que cada una se organice con sus trabajadores. La productividad del trabajo se obtiene de dividir el producto obtenido por la cantidad de (personas, u horas), trabajadas. 

¿Y qué ha pasado con la productividad en España? pues lo que se llama en este documento del BdE "una paradoja", un "puzzle". Durante los años buenos, de la burbuja, languidecía, y desde la crisis, al revés que en los demás países, ha rebotado. Puzzle. Para desmarañar el puzzle, los autore usan muchas fórmulas y mucha matemática, pero no dan con la clave. 

Pero no puede ser de otra forma si vemos el gráfico que compara el PIB com el empleo. Hasta 2008, el PIB y el empleo, de tiempos inmemoriales, iban a la par. Los "desmarques" de la productividad eran difíciles, pero eran explicables. 
En 2008 hubo un cambio de método en la elaboración del PIB, nunca bien explicado, que se tradujo que que mientras el PIB caía una unidad el empleo caía tres. Bastante difícil de creer, pero con el resultado de que la productividad (PIB/empleo) aumentara mucho más que en los demás países (europeos y EEUU). Vean el gráfico de Mario Saavedra:



Lo cual hace doblemente sospechosa la estimación del PIB. Porque observen lo que decimos: nada más y nada  menos que, en la crisis, en los demás paises el PIB cayó más que en España, acorde más o menos con la caída del empleo, pero en España se produjo un milagro: de repente nos hicimos los más eficaces del mundo. Es decir, con la inversión en equipo y tecnología cayendo a pico -lo que quiere decir con menos capital y tecnología que antes- y con menos trabajadores que nunca, el PIB aumentaba con grácil potencia. 

Por lo tanto, la cifra de PIB, o  de productividad, no es totalmente fiable, por no decir nada fiable. Está inflada por lo menos, a ojo de buen cubero en el gráfico, entre un 20% y un 30% (mientras el empleo cae 30, el PIB cae 10). 

Todo lo contrario, yo creo que España es un gran agujero negro del despilfarro, de la improductividad de las AAPP, de la deuda, y parece una farsa que el gobierno diga que "va a reducir los horarios". Hemos caído tan bajo en la astracanada que ya ni siquiera se puede pedir un poquito de seriedad, por favor. Vamos al precipicio sin remedio. 

O nos toman por tontos, o somos tontos. Pero cuando algo no cuadra, no pué ser, y además es imposible. No puede ser porque el ladrillo y su empleo caigan a plomo, la productividad de lo que queda en pie aumente un 30%. No veo nigun motivo. No lo veo. No me lo creo. Voilá. 

sábado, 16 de abril de 2016

Más historias del oro. Cómo feneció el último Patrón Oro, en 1071

La historia económica se olvida fácilmente; nadie (y menos la gente corriente)  tiene interés en conocerla y menos en revisitarla. La gente corriente está muy lejos de sospechar lo que le afectan a su vida corriente decisiones y avatares que para ella todo lo más es un titular de periódico que ha visto en alguna parte, quizás en el suelo de la calle. Incluso para el  economista es difícil encontrar fuentes donde poder consultar sucesos importantes que se esfumaron rápidamente de la escena pública. La economía, por qué no decirlo, es un peñazo, a no sea que el narrador te convenzna que si le haces caso vas a ganar dinero fácilmente. De ahí las grandes crisis, inevitables, porque el mundo no va a cambiar, aunque vaya al cine a ver "Margin Call" y diga que la ha entendido. 
Es curioso, porque las noticias económicas suelen ocupar un lugar privilegiado, pero pocos las entienden. Yo mismo bostezo cuando veo una noticia sobre una determinada empresa, o país, si no está bajo mi radar de interés. 
Como nos explica Yuval Noah Harari, en "Sapiens: de animales a dioses: una breve historia de la humanidad



El Homo Sapiens es primero, un ser que habla, y uno de sus intereses máximos en usar el habla es cotillear. La economía se presta poco al cotilleo, al menos que la lencería fina entre en acción. Pero entonces mejor ir a las revistas del cuore. 

Pero bueno, al grano. Me propongo recuperar la historia de la muerte del último Patrón Oro que existió, el diseñado en Bretton Woods en 1944,  a punto de acabar la IIGG, y que duró hasta 1971, agosto, cuando Nixon decidió desligar al dólar de su conversión obligatoria en oro a 35 dólares la onza. Para ello me voy a apoyar (es decir, voy a saquear) en el excelente artículo de de David Glasner  una fuente de total garantía en estos temas. 

Ya digo de antemano que los personajes son poco atractivos para el cotilleo: Nixon, De Gaulle, como comprenderán, no eran dados a líos de faldas ni escaramuzas de ningún tipo, sobre todo el segundo, que amaba solo a Francia y además iba a misa y comulgaba todos los domingos. Y al otro solo le interesaba el poder. 

El sistema monetario Internacional de entonces era el patrón oro de Bretton Woods, diseñado para que fuera más flexible que el de los años veinte, cuando el Patrón-oro fue la causa de la Gran Depresión, como vimos hace unos días  En 1944 se decidió que el sistema girara en torno al oro, pero a través del dólar. El $ fijaba su precio en oro a 35 $ onza, y a su vez las demás monedas fijaban una paridad respecto al dólar (la libra jugo papel de reserva al principio, hasta que tuvo que devaluar). La flexibilidad venia de la posibilidad, en casos de "dificultades transitorias", de que un país devaluara y recibiera ayuda del FMI. Estas devaluaciones, junto la inflación creciente de EEUU,  fueron haciendo mella en la competitividad del dólar que, como moneda de reserva equivalente a oro, no podía devaluar sin hundir todo el sistema. Era cuestión de tiempo que la confianza en el dólar se perdiera, en un corrimiento de tierras que empezó a deslizarse en 1968, con la ayuda inapreciable de De Gaulle: 

 However, President Charles de Gaulle of France, having overcome domestic opposition to his rule, felt secure enough to assert French interests against the US, resuming the traditional French policy of accumulating physical gold reserves rather than mere claims on the gold held by someone else.  By 1967 the London gold pool, a central bank cartel acting to control the price of gold in the London gold market, was collapsing, as France withdrew from the cartel, demanding that gold be shipped to Paris from New York.  In 1968, unable to hold down the market price of gold any longer, the US and other central banks let the gold price rise above the official price, but agreed to conduct official transactions among themselves at the official price of $35 an ounce.  As market prices for gold, driven by US monetary expansion, inched steadily higher, the incentives for central banks to demand gold from the US at the official price became too strong to contain, so that the system was on the verge of collapse when Nixon acknowledged the inevitable and closed the gold window rather than allow US gold holdings to be depleted.

En 1971, el $ se había debilitado y era cuestionado por las razones antes dichas. Había presiones crecientes vendedoras de dólares, lo que hacía cada vez más difícil a EEUU mantener la paridad sin agravar la recesión interna, pues tenía que subir los tipos de interés para mantener la demanda de dólares, cuando la FED y el gobierno jugaban a bajarlo de cara a a las elecciones. Es más, Nixon se atrevió, en contra de sus promesas, a implantar la congelación de salarios y precios, aunque al final no tuvo más remedio que declarar cerrada la ventanilla del oro y suspender la paridad oficial. 

Having been persuaded that there was no acceptable alternative to closing the gold window — from Nixon’s perspective and from that of most conventional politicians, a painfully unpleasant admission of US weakness in the face of its enemies (all this was occurring at the height of the Vietnam War and the antiwar protests) – he decided that he could now combine that decision, sugar-coated with an aggressive attack on international currency speculators and a protectionist 10% duty on imports into the United States, with the even more radical measure of a wage-price freeze to be followed by a longer-lasting program to control price increases, thereby snatching the most powerful and popular economic proposal of the Democrats right from under their noses.  Meanwhile, with the inflation threat neutralized, Arthur Burns could be pressured mercilessly to increase the rate of monetary expansion, ensuring that Nixon could stand for reelection in the middle of an economic boom.

Con ello pensaba recuperar la iniciativa interna, con una política electoralista de expansión monetaria, que se suponía no sería inflacionista gracias al control de precios y salarios. Pero no contaba con que, en plena campaña de 1972, le estallara en la cara el caso "Watergate", que  le supuso el oprobio del "Impechment" del Congreso y su expulsión de la Casa Blanca. Fue un escándalo mundial que, sin embargo, despertó la admiración por la transparencia de la Democracia en EEUU, tan denostada por la guerra de Vietnam, perdida irremediablemente de cara a la opinión pública. Desde el Watergate", tomado como ejemplo de periodismo por todos los periodistas jóvenes del mundo, puede decirse que ninguna democaria occidental se sintió ya indemne contra el escrutinio. 

En 1971 dejó de existir el Sistema Monetario Internacional. Desde entonces, los regímenes de cambios han sido libremente fijados por los gobiernos. El fracaso del Bretton Woods, y los fracasos de todos los intentos de fijar los tipos de cambio (crisis de los paises latinoamericanos, SME, crisis asiática, crisis de Argentina, crisis de Brasil, crisis del euro, papel de China en la crisis de 2008...), han probado hasta la saciedad que un tipo de cambio fijo sólo se sostiene temporalmemte. Tarde o temprano atrae hacia sí las contradicciones que él mismo va generando (excesos de flujos de capital, inflación deflación interna, desempleo, crisis financieras), hasta que sucumbe con grandes daños. Una vez instaurando un régimen de cambio fijo, nunca se encuentra el momento propicio para suspenderlo. Se teme la reacción de los mercados, pero ésta es más virulenta cuanto más se espera. 

El problema con los tipos de cambio fijos es que son mercados en los que ofertan y demandan dos tipos de operaciones: las comerciales y las de capital. Éstas son las más importantes, las que imprimen inestabilidad y volatilidad al mercado. Si se quiere estabilizar dicho mercado, sin encarecer los costes financieros, es necesario controlar ciertos movimientos de capital. Pero aún así, con controles de capital, Bretton Woods feneció. 

Observaciones

Del diario de Harry Kessler,



El pensamiento es siempre algo derivado, secundario frente a lo no expresado, no pensado, es decir, frente a lo meramente percibido, sentido, supuesto, es un intento de captar lo individual, único, que nunca ha estado ahí y nunca más llegará de nuevo a la existencia, en la forma convencional de la palabra, es una especie de álgebra muerta, que ha de posibilitar calcular y trabajar con lo vivo. Pero si ya se pierde mucho del sentimiento vivo y único al emplear signos muertos y convencionales, si los signos no representan exhaustivamente el sentimiento, lo mismo que una sección del hombre no representa a un hombre entero, ¡qué grande no será la discrepancia entre el resultado del cálculo, es decir, del pensamiento, y la vida! 

Es constitutivo del artista el hecho de que sus vivencias se desarrollan como símbolos, de que él las percibe sub specie aeternitatis, ahí radica su capacidad de mover también a otros con su representación. Es cierta la afirmación de que todas las acciones humanas proceden del egoísmo, pero no pasa de ser una tautología si su significado es que el hombre siempre sigue siempre precisamente el impulso más fuerte. Y si con ello se pretende decir que el fin de todas las acciones es siempre la ventaja propia del que actúa, eso está en contradicción con los hechos. Es decir, tal afirmación o bien es incorrecta, o bien tiende a expresar que cada acción ha de entenderse como resultado de la lucha entre las pulsiones humanas, y en este caso es una mera aplicación del principio de razón suficiente. Y entonces no veo qué puede significar esta doctrina para la valoración moral de las acciones humanas. Pues, si yo digo que alguien se deja torturar por su fe, porque esto le resulta más agradable que negar su creencia, con ello no he explicado todavía por qué razón él encuentra más agradable lo primero y no lo segundo. Por tanto, todo se ha reducido a que el signo de interrogación se ha puesto en otro lugar, pero la pregunta misma no ha recibido la más mínima aclaración o respuesta; y en el mero cambio de la pregunta no hay nada que me impida atribuir la otra decisión a otra índole de carácter y conceder la preferencia a mi antojo bien a éste, bien al otro carácter; pero lo que carecería de sentido sería decir que, de acuerdo con la versión de Rochefoucauld, ambas formas de acción son tan sólo formas de aparición de una misma propiedad del carácter, el egoísmo...


... 
Al examinar el carácter del Renacimiento no se puede olvidar nunca las inmensas posibilidades que en esa época abrieron la cólera, la crueldad y la venganza; recordemos, por ejemplo, a Gian Giacomo Medici, il Medeghino; donde afloran esas cualidades surge el tipo del hombre violento, en Italia en el Renacimiento, en Francia durante la Revolución, y actualmente en América o en Sudáfrica. Eso es una observación interesante en torno al capítulo de la relación del carácter del individuo y sus hábitos con el carácter del Estado, o de la sumisión de la individualidad personal en su evolución respecto de la individualidad general de la sociedad, de la que forma parte todo individuo. El peligro de la forma anárquica de sociedad es que en ella se agruparían con solidez asociaciones temporales en lugar del Estado, las cuales tiranizarían al resto de individuos indefensos; o sea, el peligro consistiría en que el individuo caería en manos de la tiranía ilimitada de bandas de delincuentes, en lugar de depender del poder de un Estado que lo arropa con determinadas garantías. En este sentido el anarquismo sería casi más peligroso que el socialismo para el desarrollo de las individualidades particulares.

The new normal

De Mohamed  El-Erian, en su libro 



The global financial crisis that shook virtually every country, government, and household in the world in 2008–09 gave way to a frustrating “new normal” of low growth, rising inequality, political dysfunction, and, in some cases, social tensions—all despite massive policy interventions on the part of central banks and transformational technological innovations. 

Now this new normal is getting increasingly exhausted. For those caring to look, signs of stress are multiplying—so much so that the path the global economy is on is likely to end soon, and potentially quite suddenly. As we approach this historic inflection point, unthinkables will become more common and insecurities will rise, especially as it becomes clearer that, rather than transition smoothly and automatically, the current path could give way to one of two very different new roads. 

The first promises higher inclusive growth and genuine financial stability. But, in stark contrast, the second would see us mired in even lower growth, periodic recessions, and the return of financial instability. Fortunately, there is nothing predestined about what will come after the exhaustion of the new normal. The road out of the upcoming “T junction” can still be influenced in a consequential manner by the choices that we make, as households, companies, and governments...

... “Like ancient doctors, who tried to explain the causes of diseases while knowing nothing about germs or bacteria, academics sought to describe the functioning of developed economies while ignoring the financial sector and the risks it contained.” F ERDINANDO G IUGLIANO

Una imagen del socialismo español

(Gracias a Guillermo Otaño)

viernes, 15 de abril de 2016

Hacia la Unión Europea completa. Realidad versus discurso oficial

Francesco Saraceno tiene razón: los discursos oficiales del BCE siempre señalan lo bien que vamos a ir el año que viene... Y llevan así más de siete años anunciando la buena nueva. En el último informe del BCE , en la presentación oficial de Draghi, tenemos una buena dosis de autobombo: las cosas van mejor gracias a la política del BCE. Sin embargo, al final del discurso, último párrafo, Draghi suelta la siguiente andanada:

Except, that in the foreword, president Mario Draghi used a sentence that has been noticed by commentators, obscuring, in the media and in social networks, the rest of the report. I quote the entire paragraph, but the important part is highlighted

2016 will be a no less challenging year for the ECB. We face uncertainty about the outlook for the global economy. We face continued disinflationary forces. And we face questions about the direction of Europe and its resilience to new shocks. In that environment, our commitment to our mandate will continue to be an anchor of confidence for the people of Europe.

Es decir, "2016 no va a ser un año menos desafiante que el anterior. Nos enfrentamos a renovadas fuerzas deflacionistas. Destacan las letras en cursiva: Hay dudas de la fortaleza de Europa ante nuevos choques. En este entorno, nuestro compromiso continuará siendo ser el ancla de la confianzadel pueblo europeo". Uy, el pueblo europeo, ¿quien será?

Pero antes de llegar ahí Draghi hace firme confesión de fe en el Manifiesto de los Cinco, que es, como ya hemos comentado en otra ocasión, el compromiso de los Cinco Presidentes de la UE (Consejo, Comisión, Parlamento, BCE, Eurogrupo) en reiniciar la marcha definitiva hacia la Unión Política Total. 

Debo ser un mal europeo, porque soy escéptico ante estas solemnes palabras. Es una reedición de Maastritch, de cuando empezó a dispersarse Europa. Fue comprometerse en al Unión Total(itaria) y empezar a ir las cosas mal. Renovar un sueño fracasado no es un buen augurio, sobre todo cuando no ha conseguido con sus políticas que las cosas vayan medianamente bien. 

Vamos a ver: no hay que ser un lince para ver que el euro ha sido una losa para muchos países. Primero fue el amplificador, cuando no la causa, de la burbuja en el Sur con préstamos del Norte. Esto dividió a Europa en dos, el Norte acreedor de un Sur que repentinamente ve que está endeudado, y que el coste de su deuda ha subido, gracias a los buenos oficios del BCE de Trichet. Luego el Euro fue el gran impedimento de la recuperación post crisis, que todavía no se ha presentado. 

Si seis años después que EEUU y RU, Draghi comienza su política monetaria expansiva, de adquisiciones de deuda pública. ¿Tan buenos resultados ha dado, que ahora se ve obligado a intensificarla? 

A mí Draghi me cae bien. Ha hecho más por salvar el euro, que estaba al borde de la muerte cuando él llegó, más que nadie. En 2012, con la crisis de los bonos, imparable, con una primas de riesgo de pesadilla, que hacían imposible la refinanciación de los paises deudores, que obligó a rescatar a tres paises, uno de ellos tres veces, el euro estaba en coma. Draghi lo salvó. Para ello se enfrentó a Merkel, a sus ministros, y a sus peones en el BCE. Si llega a perder el pulso, posiblemente el euro no existiría. 

Sin embargo, al salvar al Euro, Draghi reforzó la estructura del poder tan nefasta para Europa. Hubo un pacto entre esas fuerzas y Draghi, evidente cada vez que abre la boca: "te vamos permitir que juegues al QE, pero tú te haces militante de la política de austeridad fiscal, y cada vez que hables de lo bien que lo haces, recuerda a esos que llamas "pueblo" que las deudas se pagan, y que los déficits se controlan". No tuvo más remedio que aceptarlo. 

Sin embargo, eso no ha solucionado un ápice el problema de las deudas en Europa, porque la Zona Euro sigue escindida en dos, los acreedores y los deudores, privados y públicos. 

Si Europa fuera un país, las deudas serían en su mayoría débitos de unos europeos frente a otros europeos, es decir, deudas internas, que no es lo mismo que deudas en la misma moneda. Esto último, deudas entre países de distinto gobierno, en una sola moneda, beneficia sólo al acreedor. El deudor, si es de un país débil, que no puede crecer en esa moneda lo bastante para devolver su deuda, está condenado a verla aumentar siempre que su crecimiento de PIB sea inferior al pago de intereses y al aumento del nominal de la deuda. "Cuando se crea una moneda, o se crea una nación, o se crea un problema", como dice Nick Rowe. Y es que la escisión de Europa en países acreedores y países deudores que  el euro en Alemania valga más que el euro en Grecia. Simple credibilidad, o falta de ella.

Así, España ha visto aumentar su deuda pública/PIB pese a la notable tasa de crecimiento en los dos últimos años. El último dato, de febrero, es una deuda oficial de más del 100% de PIB.

El crecimiento débil impone la lógica envenenada de la UE de que hay que subir los impuestos y recortar gastos para ingresar más, lo que es un tiro por la culata, como se ve en Grecia, de la que se habla poco, pero que está teniendo crecimiento negativo otra vez. El aumento de los impuestos agrede al crecimiento decisivamente. 

Por lo tanto, el Manifiesto de los Cinco es de una lógica aplastante: el Euro debe sobrevivir. Para que sea un moneda de todos, Europa debe ser un país. 

Pues suerte, pero es aquí donde yo no puedo dejar de ser escéptico. Imposible, me digo, además, me sospecho que los poderes reales no quieren. Y los poderes emergentes anti euro, cada vez más descollantes, no quieren. El Brexit no es más que una manifestación civilizada de esa resistencia, que aumentará cuanto más se "avance" en la Unión. 

Demasiados intereses opuestos en juego. Demasiadas perspectivas opuestas en juego. Demasiados caracteres nacionales vivos, unos más que otros. 

Eso me sugiere que no se logrará democráticamente tal unión. Tendría que ser traída por un liderazgo muy fuerte de una de las partes. Pero será necesario doblegar muchas voluntades opuestas, que buscarían unirse para impedirlo. No creo que se llegue tan lejos. 

Un libro de Espe

Esperanza Aguirre ha publicado un libro. Un libro de desahogo contra su partido y Mariano Rajoy, que la ha ninguneado y estrujado hasta dejarla como un alta de cerveza en la carretera. 
Cuando un político escribe un libro, hay que  preguntarse, ¿lo ha escrito él o un negro? Yo he leído algunos artículos de Aguirre, y no dudo que tiene la capacidad suficiente para escribir un libro. Y en él se desahoga. 
Dice que un partido sin ideología es como un pollo sin cabeza. Mariano Rajoy decidió vaciar el PP de ideología, dejando como supremo fin la eficacia. ¿La eficacia en qué? Eso es lo malo. Cuando no hay objetivos, se es eficaz en lo que salga al paso, y de paso tienes que aceptar los objetivos de Merkel, mismamente.  
La verdad, puede uno verse tentado de pensar que Rajoy es muy inteligente: al ver el estrecho cauce que deja Europa para ejercer de gobernante nacional, ha decidido dejarse de gilipoll-heces (ideologías), y ser lo más eficaz posible en aplicar las órdenes que vienen de Alemania (por algo se llama Ordo-liberalism a la doctrina económica alemana: Ordeno-Mando). Eso sí, Rajoy se ha aplicado a, por una parte, fingir sometimiento, y por otra, buscar costuras en el entramado para hacer trampas y cumplir a medias. Desde este punto de vista Rajoy ha demostrado una lucidez casi cegadora. Incluso ha conseguido que le envidien en Europa por sus cifras. Aunque ahora tiene un problemilla con el déficit que le (nos) va a costar caro, porque el que venga detrás no tendrá el cúmulo de relaciones subterráneas que Rajoy y sus boys han conseguido en Europa, la elasticidad con la que se aplican las órdenes. Rajoy y es como un viejo sargento que le ha tomado la medida al mando, y la transmisión de órdenes hacia abajo se suaviza. 
Porque sí, esta es la realidad política. No hay margen para hacer política nacional, la verdad. Una vez robado el fuego de la impresión de moneda, no puedes hacer política fiscal, ni comercial, ni financiera, salvo las que ordenen desde el Norte. Entonces, ¿para qué la ideología, si lo único que puedes hacer es el postureo? En realidad no puedes elegir entre política social versus política industrial, por ejemplo, sino sólo cumplir extrictamente la cuentas que te han hecho. Muy poco o ningún margen para vender un programa electoral autónomo que no sea falso de toda falsedad. 
La única ideología posible es el Euro. De ahí que otras ideologías que se han quedado en la cuneta, sean recogidas por partidos anrisistema. Qué desastre lo que nos ha hecho Europa. 
Doña Esperanza Aguirre se equivoca. La única libertad de acción de verdad es hacer con más o menos entusiasmo lo que te Ordena el Ordoliberalism. La única diferencia está en el entusiasmo. A lo mejor doña Esperanza critica a Rajoy porque le ve con poco entusiasmo, ella le pondría más: ella sí que controlaría el déficit. Porque ella posee esa curiosa doctrina de que un nación es como una familia, que milagrosamente gasta lo que ingresa, no tiene que comprar casas, llevar a los hijos al colegio, pagar gastos extras inesperados... De esas familias quedan cada vez menos: los ingresos laborales no son como antes, seguros, sino efímeros y volátiles. Con esa doctrina, tan cursi como falsa, que por cierto, Rajoy también la recita, quiere criticar a Rajoy y encontrar un agujero por el que colarse ella. 
Espero haber demostrado que daría igual. 
Estoy convencido de que Europa, al secar de contenido el ejercicio del poder, sin sustituirlo por otras fuentes, es la culpable del vacío en el que nos encontramos. Es la culpable de la mediocridad que achacamos a nuestros políticos: son mediocres porque tiene que serlo. Son simples trepadores inanes. 
Aqui el único cambio real es que se hiciera con el poder Sanchez-Pablemos, en un gobierno a la portuguesa (paella valenciana, le dicen); pero no queremos eso, ¿verdad? No queremos ser abrasados como Grecia, ¿verdad? Pues no lo descartemos, porque Europa ha empezado hace tiempo su cuenta atrás. Desde 1992, Maastritch. Primero fue el euro. Luego la crisis en la que el euro tuvo gran culpa (en la burbuja anterior). Luego la nefasta política del BCE de Trichet. Luego las limitaciones evidentes de un BCE único sin un gobierno correlativo ("cuando se crea una moneda, o creas una nación o creas un problema." Nick Rowe). Luego las chapuzas de intervenciones en países que tenían más deuda después del rescate que antes. Y ahora la crisis de los refugiados, que Europa, se ponga como se ponga, no puede digerir.
Seamos optimistas. 

jueves, 14 de abril de 2016

El oro: por qué causó la Gran Depresión

Krugman tiene un post contra el candidato republicano Ted Cruz, porque éste es firme partidario de restablecer el patrón oro.
 (Antes de seguir, no se preocupen: no tiene ninguna posibilidad de hacerlo, caso de que llegue a la Casa Blanca: ninguno de los principales países del G7 y del G20 le apoyarían; y es muy improbable que un país se imponga a sí mismo una regla monetaria sin la cooperación de los principales países. Sería un suicidio.)
Krugman tiene bastante razón en sus argumentos contra el patrón oro, pero Glasner le pone los puntos sobre las íes, pues dice que comete algunas ligerezas en su argumentación. 
En todo caso, vale la pena una visita al debate, que seguramente gana Glasner, pues es un gran experto en la historia del Patrón Oro y el papel central que jugó en la Gran Depresión del veintinueve (se suele poner esa cifra, año del Crack bursátil, pero la verdad es que la Gran Depresión es lo que vino después, en los años treinta). 
Pero tanto Krugman como Glasner coinciden en lo principal: el Patrón Oro, restaurado en la Conferencia de Génova de 1922, fue la causa de la gran contracción monetaria que causó la Gran Depresión.  El pecado de Friedman fue obviarlo es su explicación "tan detallada" de los hechos, grueso error que ha empezado a reparase en la economía académica, pero no totalmente. 
¿Por qué fue el Patrón oro la causa de la Gran Depresión-Deflación? 
Pensemos en lo que hace la gente, todos nosotros, cuando hay una crisis y cunde el pánico: todos buscamos convertir nuestros activos, sean los que sean, en liquidez. Esa demanda ilimitada de liquidez hace caer a plomo los precios de todo lo que es suceptible de venderse, sea lo que sea, hasta depósitos bancarios incluidos. Si la demanda de liquidez no es satisfecha por el único que puede hacerlo, el banco central, se produce lo que llamó Irving Fisher (en la única teoría que para mí sigue plenamente vigente), una Debt-Deflation: una deflación que agudiza el problema de la deuda acumulada, pues la caída de los precios multiplica el valor de la deuda por un múltiplo igual al porcentaje de caída. 
En 1930 (como en 2008), se había acumulado una gran cantidad deudas, no sólo de especulaciones previas, sino de antes: las deudas de la Primera Guerra Mundial. La caída de los precios a tasas superiores al 30%, provocaron una subida real de la deuda en un tercio. Cuando empieza una dinámica así, lo malo es que se retroalimenta, pues aumenta el deseo de obtener liquidez. 
Ahora, ¿que hicieron los bancos centrales en esa dinámica? La alimentaron. Es más, dice Glasner, la originaron, en realidad. En vez de hacer lo contrario que la gente, los bancos centrales se pusieron a demandar liquidez, su liquidez, que era el oro. Se pusieron a competir entre ellos para acumular oro, sobre todo el Banco de Francia, y luego la Reserva Federal. La escasez de oro provocó una caída de la cantidad de dinero mundial, lo que trajo la Deflación. Esa política de acumular oro, que era la base monetaria de entonces, agravaron enormememte los problemas de países como Alemania, con indemnizaciones de guerra ya impagables de por sí. Francia, la principal acreedora de Alemania, se estaba disparando a su propio hígado, pues su acumulación de oro aumentaba el riesgo de impago de Alemania. Alemania acabó denunciando la deuda cuando llegó Hitler, el cual no llegó al poder, en las urnas, sino por el malestar económico incontenible que había causado el GEO, Gran Error Oro. Hitler era un error histórico, una consecuencia no deseada de los grandes errores cometidos por la grandes potencias desde La Paz de Versalles, denunciadas por Keynes en su profético libro de 1919 "Consecuencias económicas de La Paz". El último gran error que llevó a la Segunda Guerra Mundial fue la restauración del patrón oro. 
[Plausibilidad: una demostración de la plausibilidad es que una deflación en un país no tiene por qué extenderse a los demás, si éstos no cometen el mismo error.]
Ahora hay que rematar la historia preguntándonos, ¿por qué esta vez no ha habido una gran deflación como aquella? la respuesta viene por sí misma. Porque los bancos centrales, liderados por la FED, han hecho  una política contraria a la que hicieron entonces. Si hubiéramos "gozado" de un patrón oro, es posible que la deflación habría sido similar, y la depresión consiguiente, también. 
Sin embargo, en Europa no hemos evitado el peligro del populismo, porque el Euro no ha dejado de funcionar como un patrón oro, hasta que Draghi llegó al BCE. Desgraciadamente, Europa se ha tendido una trampa a sí misma: queriendo evitar los graves conflictos de entonces, ha originado una situación social de riesgo para la Democaria Europea. 

miércoles, 13 de abril de 2016

El erróneo modelo de los bancos centrales

Los bancos centrales están en pleno desconcierto. Lo estuvieron en cuando dejaron formarse la burbuja que acabó en la crisis, y lo han estado desde entonces. 
Como explica Joseph Sitglitz, manejan un modelo erróneo -si es que manejan alguno. (Si, qué quieres eran, no es santo de mi devoción Stiglitz, pero incluso a veces el más sabio hace un borrón, o la verdad es la verdad, la diga Agamenon o la diga si porquero).
Los bancos centrales siguen enganchados al monetarismo más clásico; el de Friedman, no el de Keynes que Friedman alabó una vez. ¿En qué consiste? en un modelo simplón que se centra en una única variable, el tipo de interés como determinante del nivel de actividad. (Este error lo han heredado los Market Monetarists, que son aún más simplones.)
Si la inflación bajan más dela cuenta, basta bajar el tipo de interés para reponer la tasa óptima de aumento de los precios. Si la inflación es negativa, habrá que bajar los tipos de interés a zonas negativas. Así, los tipos de interés reales (nominales menos inflación), llegarán a bajar lo suficiente para que la inversión empresarial remonte. 
Aquí hay varios errores encriptados. Primero, como dijo Keynes, la inversión empresarial no depende del tipo de interés. Depende de las expectativas que tenga el empresario de sus ventas y su beneficio en el futuro. 
Segundo, tipos de interés hay muchos. Unos afectan a la  economía real, otros no. Los tipos de interés reales que afectan a la economía son a los que presta la banca, sobre todo a las PUMES y al consumo, y como dice Stiglitz, es muy posible que en vez de bajar suban cuando el Banco Central fuerza a la baja los tipos oficiales, porque el margen de rentabilidad de los bancos se ve comprimido. Los bancos, todavía en proceso de capitalización y liquidando deudas, na van a dar más facilidades porque le penalicen con tipos de interés negativos sus reservas mantenidas en el BC. Disparo por culata: al bajar los márgenes de la banca, la obligan a exigir más interés y colateral por sus préstamos. 
Tercero, las grandes empresas están sentadas en un océano de liquidez, que no invierten en capital productivo por que no ven en futuro precisamente con optimismo, dada la deflación (volumen de ventas dudoso). 
No es que haya que subir los tipos de interés o o aligera son locos dicen; es que los BC deberían darse cuenta que entre ellos y los inversores hay unos intermediarios, que son los que crean el dinero. El dinero nuevo se crea cuando un banco da un crédito. Si el dinero que crea el BC se queda en las cajas de los bancos, y no se moviliza pese a que lo penalicen con interés negativo, no hay aumento de la liquidez. Este es el mayor error de los monetaristas y de los BC: dar por hecho que aumentar las compras de bonos por parte los BC aumenta la liquidez. 
Sin embargo, la política de QE y tipos negativos no ha movido un ápice la inversión, al revés. 

"It hasn’t. In many economies – including Europe and the United States – real (inflation-adjusted) interest rates have been negative, sometimes as much as -2%. And yet, as real interest rates have fallen, business investment has stagnated. According to the OECD, the percentage of GDP invested in a category that is mostly plant and equipment has fallen in both Europe and the US in recent years. (In the US, it fell from 8.4% in 2000 to 6.8% in 2014; in the EU, it fell from 7.5% to 5.7% over the same period.) Other data provide a similar picture."

La traslación a los tipos bancarios ha sido tímida, lo que hace que con la deflación, los tipos de préstamos bancarios reales en realidad ha subido. ¿Quién pide un préstamo a tipos reales más altos que lo que prevé que aumentará su renta, cuando ni siquiera sabe si la tendrá el año que viene? 
A esto hay que añadir el proceso de desendeudarse de las juergas del pasado. Para que ese proceso sea eficaz, hay que crecer. La primera razón para crecer, es devolver con más facilidad las deudas. 
Se dice que la deuda de uno es un activo de otro: por ello, el que es acreedor puede seguir consumiendo e invirtiendo con la renta que percibe de sus préstamos. Pero a partir d un nivel, toda deuda se hace impagable si la renta del deudor no es suficiente para ello. El paro contrae la renta de los hipotecados, se declaran en suspensión de pagos, los bancos ven aumentar sus morosos, reducen el crédito... 
Todo esto ha mejorado algo, pero no del todo. La banca europea sigue siendo un misterio, y desde luego penalizar sus activos con tipos negativos no es la solución. 

Si no hubiera Panamás, habría un gran Gran Hermano

¿Se han imaginado en qué mundo viviríamos si no hubiera Panamás, es decir, paraísos fiscales? Pues piensen un poco. Ahora que toca hacer la declaración de la renta, haga un sencillo ejercicio: sumen lo que les toca pagar de IRPF en la declaración, sumándole la retenciones que le han ido haciendo a lo largo del año. Sumen a eso lo que ha pagado de IVA, aplicando un % IVA medio a lo que ha ingresado menos lo que ha ahorrado (= consumo anual). Si no ha ahorrado, más fácil. 
Le dará un soponcio. Bien, pues tenga por seguro que esa cantidad sería sensiblemente mayor si no hubiera paraísos fiscales. Los gobiernos europeos y la burocracia Europea se sentiría mucho más libre para aumentar la carga fiscal a las fuerza productivas, y menos proclive a controlar los gastos innecesarios. 
Hay una leyenda contra los Panamás, pero los Panamás hacen de freno a la presión fiscal europea. Europa es incapaz de controlar sus gastos más injustificables. En vez de eso, cada vez que hay elecciones dicen que van a acabar con el fraude fiscal de los ricos, pero los ricos encuentran siempre un punto de fuga para poner su dinero a buen recaudo, fuera de las garras de Montoro. Entonces, lo que hacen los gobiernos es sangrar a los que no pueden huir con su dinero, nosotros. 
En suma, en vez de controlar los gastos incontrolables y sin sentido, aumentan la presión fiscal. 
Supriman en su imaginación los paraísos fiscales. Nadie podría escaparse de Hacienda. Entonces los gobiernos tendrian vía libre para subir la presión fiscal sin tasa. Menos motivos aún para controlar los gastos depilfarradores. 
Los gastos despilfarradores son los que electoralmente son rentables. Por ejemplo, el gasto duplicado y triplicado de las CCAA. Enseñar a un niño cuesta seis veces más en Cataluña o en Valencia que en Madrid. Son los culpables de la desviación del déficit. Con la llegada de Podemos y otros partidos a ciertas comunidades y ayuntamientos, estos gasto se han multiplicado notoriamente. 
Con Panamás, los gobiernos tiene un motivo para no subir demasiado los impuestos. Sin Panamás, viviríamos en un gran Gran Hermano. 
Uds, dirán, ¡pero eso es una falacia! Si los ricos estuvieran cercados, no habría fraude fiscal, no habéis déficit! 
Permítanme, por favor. Si los "ricos", es decir, todos, estuviéramos cercados (si ellos lo están, ¡nosotros más!), no habría límite al gasto. El único límite sería el coste de la deuda, pues un aumento excesivo obligaría a hacer recortes, o a subir los impuestos. Y estos nunca se subiría solo y exclusivamente a los ricos, porque no sería suficiente; para empezar, no habría ricos, cada ve menos. Nos habríamos acercado a una sociedad socialista, dictatorial (no hay democracia política si no hay democracia económica), sin ricos, todos pobres, salvo los burócratas, que tendrían prebendas sacadas penosamente  de la escasa productividad que quedara. 
La historia de las sociedades socialistas lo demuestra. El igualitarismo lleva a la pobreza. La socialdemocracia debe ser productiva para subsistir, y eso exige un control del sector público.