"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

miércoles, 12 de julio de 2023

La guerra subterránea

Ahora las cosas son más así complicadas. Entonces, en la segunda gran guerra y después, ser espía tenía un fuerte aroma a romanticismo. Romanticismo que abarcaba el heroísmo, el peligro, el amor tan intenso como breve, aparte de las consecuencias colaterales: muertes y ejecuciones en el campo de batalla. Fueron los tiempos de la guerra fría, Rusia soviética contra Occidente: sobre todo USA y Gran Bretaña.
Lo que no se podía ni imaginar estos, es que la tradición se cocinara en sus propias sedes, y que grandes espías occidentales (bueno, británicos. Pues EEUU tardó más) fueran traidores que se vendieron a la URSS de Stalin por pura ideología. Los “cinco” de Cambridge, nombrados

Kim Philby (nombre en clave: Stanley), Donald Maclean (Homer), Guy Burgess (Hicks), Anthony Blunt (Johnson) y, también casi con seguridad, John Cairncross (Liszt). Blunt llegaría incluso a ejercer como asesor artístico de la Reina. (El Mundo)


Le hicieran un agujero enorme en sus dispositivos de espías. Los cinco eran ricos, famosos en sus círculos de alta clase. Fue la jugada maestra de Stalin: reclutar, no a gente con necesidades monetarias, sino justamente a los que menos lo necesitaban, y por ello menos sospechosos de estar vendiendo secretos a a su peor enemigo. 
Por eso tardaron tanto en descubrirlos, aunque las evidencias eran muchas. Pero ¿cómo sospechar que los más guapos, listos, y ricos espías “al servicio de su High Majesty” iban a ser los traidores? De hecho a medida que fueron delatándose, no los pudieron prender y juzgar por Alta Traición, dado el escándalo nacional que se hubiera desatado. Hubiera sido como declarar que en el entorno de la reina y las capas sociales mas altas habían infiltrados  que tomaban nota en los cócteles o cenas de la High Society, enviando además toda la información secreta que pasaba por sus manos a la KGB. O sea, una declaración de incompetencia de toda la cadena de mando durante 20 años. Hubo purgas, pero también siguió larvada la traición.
La guerra del espionaje la ganó, sin duda alguna, el Este, principalmente Rusia, pero tampoco fue manco el agujero que hizo en Alemania Occidental  & aliados la Otra Alemania, la del Este. En 1972 tuvo que dimitir el canciller de Alemania Occidental, Willy Brandt, porque su colaborador más íntimo, Günter Guillaume, supuesto refugiado del Este, estaba espiando para la RDA y la URSS. 

(Brandt y su “espía preferido”, Günter Guillaume. Foto Wikipedia)
La esencia del espionaje no ha cambiado: se espía porque el enemigo lo hace. Tienes que contrarrestar eso.Cuánto más complejo es el mundo, más necesitas saber qué se está cociendo en los países amenazantes, al menos en sus planes estratégicos. Para ello infiltras a los tuyos en sus ambientes más protegidos, y no puedes asegurar que no se convierte en espías dobles.
El servicio secreto de Israel, el Mossad, tiene un gran prestigio, demostrado en muchas y soñadas  “misiones imposibles”.
Ahora bien, la ventaja la llevará siempre Rusia, porque tiene menos que responder de sus fracasos y es libre de ejecutar al que se descubre dando información al enemigo, o cometiendo errores. Rusia empezó antes, además. En la Segunda Guerra Mundial ya esperaba a sus aliados occidentales, mientras éstos lo consideraban país aliado. Tomaron una gran ventaja para la guerra fría. 
La bomba nuclear de la URSS fue gracias al espionaje soviético en EEUU, que se incorporó tarde al espionaje y contraespionaje. Cuando se quiso dar cuenta, los rusos habían conseguido anular el monopolio del arma estratégica. 
Ahora se ha sumado China, que es de esperar tenga su propio sistema.
El espionaje es la guerra previa a la guerra, en el sentido que no hay líneas morales: todo está permitido en el nombre del patriotismo. Cualquier nación que se precie lo ejercerá, con más o menos eficiencia. 

lunes, 10 de julio de 2023

¿Debate o pelea de gallos?

No voy a asomarme al debate de hoy entre Feijóo y Sánchez. Me niego a creer que ese espectáculo de pelea de gallos ensangrentados, matándose a picotazos y arañazos, sea de alguna importancia en mi vida. Espero que el sentido de mi vida y la de los demás no dependa de un espectáculo tan lejano al verdadero sentido que pueda tener la política en este momento. 
No me refiero a que la política sea o no transcendente. Tampoco invito a los demás a no verlo. Que cada cual piense y haga lo que quiera. Lo que me niego a aceptar es que el nauseabundo espectáculo sea decisivo como nos quieren vender. Y si lo es, mal estamos. 
¿No prohíben las peleas de gallos? Pues con mayor razón, este espectáculo para simples, en el que la gente se va a regocijar de la sangre, la simplificación superlativa y la victoria/derrota de uno u otro, por otra parte intrascendente; pues ninguno tendrá la más mínima oportunidad de exponer sus razonamientos, ni comunicarlos claramente, si no es distorsionados por la pasión y las instrucciones de los asesores, los únicos se benefician del espectáculo fríamente, nublando la realidad como siempre hacen. 
Aquí a lo que se juega es a una lucha de mentiras agresivas de uno a otro bando y a una distorsión enorme de la realidad. Lo que quede en pie tras la la pelea será una mentira, gane quien gane. 
Si lo ven Uds, que lo disfruten, pero no se dejen engañar.

Sobre la adicción oculta

“Con la lluvia, la temperatura descendió y, estando todavía encendido el fuego de la chimenea, me acerqué a él como única solución momentánea posible. En el campo, el único sistema para combatir el aburrimiento es andar, divagar, mirar el paisaje, distraerse con las pequeñas —o grandes— cosas que uno va encontrando. Pero cuando llueve y la temperatura es desapacible, uno se acerca al fuego instintivamente y con un libro en la mano se pone a leer —hasta donde es posible—. 
En este mundo tan complejo hay muchísimas personas que no han nacido para leer. Hay otras —una pequeña minoría— que leen pase lo que pase y en todos los tiempos de su vida. Cuando son jóvenes leen todo lo que se les presenta, las cosas más inverosímiles. Cuando llegan a una cierta edad continúan realizando esta forma de su espíritu. Ahora se publican muchos libros —como nunca se habían publicado—. El negocio de la venta de papel impreso —negocio a veces favorable, a veces contrario— es inenarrable. Cuando se ha nacido en la predisposición para leer, uno desearía acercarse a todo lo que se publica. Es imposible. Por otra parte, hay papeles que caen de la mano, que son ininteligibles, plúmbeos, aburridísimos. 
Yo formo parte de esta cofradía. Me gusta leer. Probablemente, la única cosa que me ha apasionado en la vida ha sido leer. He pasado una cantidad desorbitada de horas leyendo. De esta cantidad, la mayoría de las horas han sido perdidas. A mí me ha gustado leer libros que, por una razón u otra, a veces por una razón enormemente trivial, me han enseñado algo, como me ha gustado hablar con las personas que me han subrayado algún matiz de la vida. Lo demás me ha interesado poco, francamente. Pero soy incapaz de protestar si ante un libro o una persona no encuentro lo que hubiera deseado.
Siempre creí que una de las cosas más difíciles de la vida es llegar a disponer de un grado de expresividad real e inteligible para las personas acercadas a ella. Es muy complicado y, en general, de una práctica imposible. Así pues, habiéndose puesto a llover en la tarde del lunes de la última semana de Cuaresma, me acerqué al fuego, con el primer volumen de las obras de Antón Chéjov, publicadas por la Pléiade de París.”

Josep Pla, “Calendario sin fechas”.

NOTA: en febrero, publiqué esta cita de un autor del que no me acuerdo:

El vicio más adictivo 
Ah, pensé al ver la esquina de un libro que asomaba entre los pliegues de las sábanas, ¿cómo no me habré dado cuenta? El pobre hombre padece la adicción más peligrosa que existe.

Me volveré loco si no encuentro pronto al autor. 
(Creo que es una cita de Myron Bolitar, personaje de Halan Coben, pero no sé en qué novela.)
Me ha sacado de la inopia “doña” Teresa, gracias mil. El libro es la mejor novela de estos tiempos, 
“Autopista Lincoln, de Amor Towless, que tiene un excelente “Un caballero en Moscú”. Muchísimas gracias!

sábado, 8 de julio de 2023

Esa España loca, esa España Negra, esa España muerta

Nos cuenta Garcia Domínguez en el tweet citado que, en Cataluña, más de la mitad de la población no sabe que el presidente de su Generalitat es un tal excelentísimo monsieur Pere Aragones. Generalitat que primer sistemáticamente, insidiosamente, la ley de la enseñanza del 25% de español en los colegios. Ley que se pasa por el forro de sus caprichos monsieur Aragones, con la complacencia del gobierno español y, hay que decirlo llorando, de esos catalanes que están el riesgo de que les desgajen de España.
https://twitter.com/jg_dominguez/status/1677227182689533956?s=21
Hay que joderse. Los españoles prefieren vivir el minuto que ver el huracán que les puede caer encima. España sigue siendo un país ciego, o loco, y por ello vendrán tiempos convulsos, negros, y al final la muerte.
Aquí se suele decir que bah, nunca pasa nada. Debe ser que consideran una guerra civil un asunto menor. Es.

martes, 4 de julio de 2023

Idea de la guerra

La guerra de Ucrania nos está mandando un aviso tenebroso. Me temo que, sin quererlo, todos estamos implicados en esta guerra que yo espero que se contenga en la geografía en la que hoy tiene lugar.
Detesto la guerra con todas mis fuerzas. Casualmente, acabo de leer un libro que habla de la guerra, aunque no sea su tema central. Casi mejor, porque las descripciones del protagonista son subjetivas, y por ende, reflejan mejor el destrozo de la guerra en el alma de los hombres que no tienen más remedio que ir. Un destrozo para toda la vida, que el paso del tiempo no puede curar, pues el olvido es imposible. Durante toda la vida, con más o menos intensidad, se recuerdan obsesivamente las horrendas imágenes a las que se ha tenido la mala suerte de asistir. 
El libro se llama “Oona y Salinger”. El autor es un escritor francés, Frédéric Biegbeder. Yo lo he leído en francés, pero está traducido. Trata de la relación, breve y truncada por la guerra, que tuvieron Oona O’Neill y JD Salinger, antes de que ambos se hicieran famosos por muy diferentes razones. Ella era la hija de Eugene O’Neill, premio Nobel de literatura, y él llegaría a ser un gran escritor, de un solo libro, del que se llegarían a vender decenas o centenares de millones de ejemplares: El Guardián entre el Centeno, supongo que les sonará. 
Ese amor apasionado lo truncó la guerra, pues Salinger fue reclutado en el año 1942 cuando EEUU declaró la guerra al Eje. Por su dominio del francés y el alemán, fue formado en el contraespionaje, en el que a su vez formó y aleccionó a centenares de nuevos reclutas. Eso le evitó algunos riesgos físicos, pero los horrores que cuenta que vio inducen a pensar que hubiera preferido morir antes que guardar indeleblemente esas imágenes. 
No voy a reproducir ninguna, pero sí que cuando participó en el desembarco de Normandía, el Día D, en una las últimas arengas a los soldados, el jefe de la unidad les dijo- cito de memoria - “cuando desembarquéis los de la segunda oleada, no os paréis a ver los heridos y muertos de la primera, pues seréis liquidados sin remedio. Mejor pasad por encima de ellos, así no caeréis todos. Los del primer ataque sabían que iban a morir. Se inscribieron el el casco “ave cesar, los que van a morir te saludan”.
¿Cómo podían aguantar de pie, sin dormir, 50 horas, viendo alrededor a sus compañeros  caer tronchados por las balas y las dinamitas? todos iban adecuadamente colocados, dopados, con anfetaminas y alcohol, que les quitaba el miedo y les sostenían físicamente. Todos los ejércitos tenían su farmacia donde no faltaba las ni las anfetas y el vodka. Se llamaba el “cóctel báltico” a la combinación pastilla y snarp, usado por los alemanes.
A Salinger la dos guerra le truncó tanto su vida, que fue incapaz de escribir algo sobre ella, salvo en las cartas que le escribía a su amor Oona, quien por su parte rompió con él y siguió su vida, y cuando tenía 17 años se casó con Charles Chaplin, casi 40 años mayor. (lean el libro, si quieren saber más.)
Acabada la guerra, Salinger fue incapaz de volver a ser normal, y se refugió en el centro un cerrado de un bosque. Así, hasta el final de sus días.despies de Guardián, no volvió a publicar nada.
La guerra me parece una monstruosidad, iba a decir inhumana, pero trágicamente es lo que ha hecho el hombre con más denuedo y frecuencia. Dudo que haya un sólo año de la historia en que no haya habido una guerra en algún rincón de mundo.Ergo la guerra es más que humana, humanísima. Debemos aceptar que está arraigada en el genoma humano. 
Me metería a pacifista, si no fuera por que todos los más pacifistas que he leído han sido vitalmente fracasados y no han conseguido nada. Nadie les ha hecho caso. 
Poco antes de 1914, Norman Angels Publicó “La gran ilusión” que pretendía mostrar que la guerra no tendría lugar precisamente por la enorme cantidad de bienes que se habían acumulado en La Paz, que serían destruidos, dejando a lo suyo países miserables destrozados. Fue un best sellers que no tubo ningún efecto pese a su amplia difusión. En realidad estaban todos de acuerdo con él, pero la I WW fue una concatenación de decisiones neutras, pero todas juntas llevaron a una guerra de grandes matanzas mundiales.
Vean por ejemplo a Stefan Zweig, o su amigo ROMAIN ROLLAND... Igual que los ilusorios   intentos tras La Paz de formar organizaciones - Sociedad de Naciones, ONU, etc - para evitar otra guerra... que siempre llega tarde o temprano. Esa es la historia de la humanidad. 
Los pacifistas raramente han podido parar o siquiera frenar una guerra cuyos mecanismos psicológicos y materiales parecen cobrar autonomía un amplió vez puestos en marcha. Lo suyo que ya se han encarrilado a ella ya están programados para seguir adelante, pase lo que pase. Además hay tratados internacionales firmados, que pautan las primeras decisiones, no necesariamente directamente al frente, sino a un paso más que recorre la cadena que, fatídicamente, desemboca en el campo de batalla. Se llama la cadena de mando. La cadena de mando del enemigo tiene por obligación reaccionar a esa propuesta que ha llegado a la mesa, en la que más los presentes se enfrentan a un escenario muy distinto. Su decisión tendrá que ser la más dura pues sino, el enemigo deduciría un signo de debilidad. Habrá discusiones, pero será el jefe de mayor categoría el que debrá ponerse en la posición decisiva, difícilmente amistosa, pues el riesgo de transmitir imagen de debilidad o dubitativa al enemigo obedece alentar a éste a atacar antes.
Eso hace desarrollar una lógica infernal que favorece los acontecimientos que luego, tras la exterminación, serán lamentados. 
Pero los señores de la guerra son instruidos así. No tienen una lógica alternativa. Muchos no quieren la guerra, pero ellos pertenecen a una cadena de mando que sólo en caso de insubordinación, severamente castigada, puede interrumpir la férrea lógica... que volverá a funcionar en cuanto se solucione el pequeño desbarajuste y se repare el eslabón interrumpido.
Todo esto no quiere decir que no haya guerras justificadas, como la defensa contra un ataque alevoso. Cuando Churchill no quiso rendirse a Hitler, sabía que éste iba a intentar invadir y aniquilar Gran Bretaña, pero tenia la fundada sospecha que hitler no cumplía su palabra: era inútil firmar con el una paz con puntos falsos.
Sí, hay guerras justas que sin inevitables. Las guerras justas no evitan, sin embargo, las muertes, atrocidades mentales y físicas, que pueden ocupar para toda la vida el alma herida.

lunes, 3 de julio de 2023

Woke ha venido para quedarse

¿Quienes son los grandes referentes intelectuales de la izquierda?

En un absurdo artículo de El País, se encuesta a grandes líderes de la izquierda sobre qué intelectual le ha influido más en su vida. Como dice el columnista, los resultados son absurdo, tanto respecto a la realidad como a la insignificancia actual del intelectual señalado. Hay todavía alguien que jura su Fe por Marx, y otros por una no binaria sexual, lo que me parece un despropósito fundar tu vida sobre un aspecto tan irrelevante. Otros dicen que Gramsci, cuando este señor apenas se ha leído en España ni se ha cotejado su valor en unas elecciones. 

En realidad estamos viviendo una profunda transformación de la izquierda de (como diría el otro Marx - el auténtico -, Groucho), “de la nada a la más absoluta miseria”. 

En 1989 cayó estrepitosamente el Muro de la vergüenza (Berlín), y los comunistas se quedaron sin ideología que vender. Ya no se podían ganar las elecciones  con el viejo y acabado abuelo. El famoso - y engañoso - Eurocomunismo era un trampantojo fenecido también. 

El marxismo, además, como doctrina, estaba llena de fallos clamorosos; pero eso no importa, el problema es que ya no vendía. El comunismo rancio se hundió, y poco a poco fue sustituido por otra cosa, muy pringosa, que irradió de EEUU: el Woke, que está ahora mismo dinamitando las esencias de su país de origen e infiltrándose en la izquierda europea. Ah! Pero no sólo en la izquierda, sino en todos los sectores sociales incluidos los de derechas, puesto que el Woke no es una ideología de partido, sino  una infiltración en toda forma o institución de pensamiento. El Woke ha abrazado y asfixiado al rancio comunismo, transmitiéndole una nueva (y podrida) sangre que lo liquidará totalmente, como otras ideologías del pasado a derecha e izquierda. 

Lo siento, pero veo radicalmente incompatible el duro marxismo con el Woke. 

Aunque cosas más raras se han visto. 

No es la primera vez en la historia que un “despertar” agita las conciencias y determina un futuro. Por ejemplo, el romanticismo, que después de varios giros, fue la base sentimental que dio origen al nazismo. Al menos es lo que dice Isaías Berlin, el gran especialista en los heterodoxos. 

No debemos menospreciar estas cosas que nos auguran amargos amaneceres...

Detrás de los movimientos más absurdos, banales, desdeñados por ilógicos o pueriles, duerme su largo sueño el huevo de la serpiente, esperando su momento. La historia es así.


sábado, 1 de julio de 2023

La lucha contra la inflación

Como se ve en el gráfico abajo, si deflactamos los tipos de interés de la deuda a 10 años, por la inflación del IPC subyacente (a), resulta que la zona Euro no ha logrado que subiera el tipo de interés real - al contrario- mientras que EEUU sí lo ha conseguido, logrando recuperar la confianza en la FED.
Esto nos da una clara advertencia: EEUU está más cerca que Eurolandia en vencer la inflación, cosa en lo que además está cada día más cerca, pues ya está en el 3% y su inflación subyacente en el 5%. 
 

Eurolandia en cambio tiene una inflación total y subyacente más altas, y con un tipo de interés real (crecientemente) negativo, siempre hay más incentivo para que la demanda suba. No es suficiente subir los tipos nominales si la inflación sigue siendo más alta.
El solo hecho de que la curva de tipos de interés reales sea cada vez más negativa es un mensaje de que no se ha ganado ni una batalla contra la inflación. 
Por lo tanto, el BCE debe mantener la guardia alta, pues tiene muchos países miembros con inflaciones de dos dígitos, mientras que otros, como (oficialmente) España, se acercado al 2%. Eso aumenta la disparidad entre los países regidos por el BCE, un problema si se acercan problemas del sistema bancario - que parece se han disipado. A cambio, la economía nomse ha enfriado tanto como se esperaba en el primer trimestre, aunque técnicamente los países de euro están en recesión. Ahora se pronostica que ésta será breve y ligera... Pero ahí sigue la inflación, de la que muchas rentas no se han podido proteger: los componentes que más han subido son los más importantes para las rentas más bajas, como la alimentación.
Con todo, España ha sido más afortunada, pues ha logrado una inflación del 1,9%, con uma subyacente del 5,9%, todavía más alto de lo conveniente.
Hay que decir que hace tres mese las expectativas para hoy eran que habría una fuerte recesión inducida por una crisis bancaria, de la que vimos algunos conatos en el primer trimestre con varios grandes y mediados bancos quebrando. Se tomaron medidas profilácticas y parece que surtieron efecto. Las catástrofes previstas no se han producido. Las expectativas negativas se han reducido mucho, centrándose en una posible middle recession. Los agoreros, como el famoso Nouriel Roubini, han tenido que plegar velas y comerse sus sombríos pronósticos que, yo confieso, los asumí. Una prueba más de que  la Economía no ha  avanzado mucho desde Adam Smith, a pesar de la dosis letal de matemáticas que le han insuflado.  Y menos un en el sector financiero, que es un arcano cerrado para nuestros modelos.  

(a) la inflación subyacente es el IPC restando los componentes más volátiles, como alimentación y energía.

viernes, 30 de junio de 2023

El mar tranquilo de...

Leyendo a..., me he encontrado esto:

Hay rincones del mar en estas calmas soleados o sombreados que aparecen de una tal tersura, de una limpidez tan prodigiosamente filtrada, de una inmovilidad tan grande que el agua parece un cristal sólido. La superposición de capas de agua parece aumentar en términos de estática obsesión la claridad del fondo. Azules en la superficie, verdosas en las zonas intermedias, las aguas del fondo son de una pura cristalinidad. Asomarse a uno de estos remansos es un espectáculo que, quizá por su misma precariedad, transporta de las imágenes constantes. La arena del fondo está rizada en curvas suaves. Las matas de algas, verdinegras, se mueven dulcemente como si un imposible viento las agitara. Las lisas, a bandadas, nadan, sonambúlicas, rozando las curvas de la arena. A veces, una de ellas se tumba un momento sobre la arena y la plata brillante de su vientre da un destello brillante. Los erizos de mar contraen o erizan sus puntas de un negro azulado. Los pequeños salmonetes, como siempre, están inmóviles en el fondo cálido del agua. Las rocas del remanso señalan, en miniatura, una geografía grandiosa por la que culebrean extraños —pequeños cangrejos, gambas, pintarrajeados— minúsculos animales... Todo parece vivir y moverse dentro de un silencio grave. El agua es caliente. A veces, un soplo de viento riza la tersa superficie y un pedrusco rosado del fondo, pulido y suave, llega a tener por reflejo del viento un pálpito de color de piel rosada... Cuando pasa una nube lejana, su sombra se arrastra un momento por el fondo inmóvil del agua. Las plantas acuáticas parecen sorber la luz que cae a chorros y contraerse ligeramente con el paso de las sombras fugaces. Este es el tiempo de junio, las calmas de mar en junio, aunque estas calmas son siempre de escasa duración y como resultado de un milagro. La naturaleza no tiende al acuárium. La materia se fatiga de su mismo placer, la naturaleza parece aburrirse soberanamente de su propia calma, como si se intoxicara de su propio olor, el mar vuelve a su incesante forcejeo, a sus continuados y ciegos —inútiles— embates. La paz remansada ha existido un momento —y quizá no ha existido más que en nuestra imaginación—. Se levanta un ligero vientecillo, se deshacen las lejanas neblillas azuladas, las pequeñas olas levantan un ligero espumarajo y una vela latina, hinchada como una mejilla joven, pasa a lo lejos, alada y rauda. La calma se pierde... ¿Ha existido? ¿Ha sido un recuerdo, una ilusión, un deseo proyectado hacia fuera por evasión o fatiga insoportable? 
10 DE JUNIO DE 1944

jueves, 29 de junio de 2023

Feijóo se explicó

Por fin conocemos un poquito mejor a Feijóo, que resulta ser un señor normal que lleva treinta años ejerciendo de político en España y Galicia, con gran éxito de gestión. En Galicia gobernó 4 legislaturas seguidas. En suma, es un político contrastado por un currículum perfectamente meritorio, garantía para darle una oportunidad de que deshaga los entuertos acumulados por Sánchez, que no son pocos y sí muy graves para nuestra convivencia democrática. 
¿Votarían Uds a un señor que, como Sánchez, ha metido mano en tribunales, leyes, estadísticas básicas como el índice de precios, las cifras de paro, la contabilidad nacional (PIB), ha gobernado emitiendo una cantidad de deuda inexplicable más que por intereses suyos particulares, ha inculcado la Constitución, y, en fin, ha dejado el marco institucional democrático hecho un pringue?
Feijóo viene - si la gente no vuelve a votar al mentiroso obsesivo compulsivo-, a arreglar todo lo que ha deshecho y roto Sánchez como un niño mal criado que rompe los juguetes según se los dan, y coge rabietas olímpicas si no le suministran más. Por ejemplo, disfrutó como un enano con el Falcon, hasta que se cansó, y alquiló otro más guay que era de una rica y famosa familia. El Falcon se le quedó pequeño. Ha volado muchos más días que los tres anteriores presidentes juntos. 
Esperemos que los augurios  se cumplan, y podamos mandar a este vitriólico sujeto a su casa. Es más, yo propongo pagarle unas vacaciones indefinidas en una isla en pacífico, por donde pase una barca correo una vez al mes. Bueno, mejor al año. Los únicos momentos relajados que nos ha concedido MI YO ha sido cuando se iba de vacaciones.
Estoy haciendo un sesudo estudio para explicar por qué razón hay tanta gente que, como obnubilados, le siguen votando. Ya presentaré mis conclusiones si es que las alcanzo.

miércoles, 28 de junio de 2023

Vamos en volandas hacia el tercer mundo

 España lleva 20 años sin aumentar su productividad (incluso perdiéndola), que es la clave de bóveda de la economía de una sociedad. España perdió el tren de la revolución tecnológica de los noventa, aquella que permitió a ciertas economías, como EEUU, dar un gran salto en productividad además de ganar empleo. El empleo que se perdió en actividades ya obsoletas se ganó con creces en las nuevas actividades punteras, y la tasa de paro bajó por debajo del 4%. Otras economías se desenvolvieron bien en ese cambio de modelo, y su aumento de capacidad de movilización de recursos los dotó de más renta para atender a los grupos sociales que no se habían enganchado a ese tren. 
Como dicen los catalanes con su golpe de estado de 2017, “lo volverem a fer”. quiero decir que España, indefectiblemente, se perderá la oportunidad de subirse a la siguiente ola de progreso, porque aquí estamos obsesionados con dos temas bien asentados en nuestra mente colectiva. 
Uno es la sacralidad del problema distributivo, una sinrazón que nos han infiltrado en la escuela, y es que lo que deben hacer los políticos es igualar las rentas que perciba la gente, independientemente de su aportación a la renta total. Por eso hay tantos izquierdistas en España. Incluso los grupos independentistas son todos de izquierdas, lo que no permite predecir una economía sana en caso de que lograran la independencia. De hecho, en renta per capita y otros baremos internacionales, como en nivel educacional, Cataluña está muy por debajo de otras comunidades y otros países. Todo por la nefasta política de la inmersión lingüística, que como era de prever, daña enormemente el nivel de comprensión de los alumnos.
Otro mantra que nos impide meternos en el nuevo pelotón de los países avanzados es el de la tendencia centrífuga de nuestro estado cuasi federal, o mejor dicho, más allá de federal, en el que la delegación de políticas estatales ha sido subastada sin prevención en función de los intereses de los gobiernos de turno. Es decir, no sólo el independentismo, sino el poder real delegado a las 17 Comunidades, impide la coordinación mínima para hacer una política de temas básicos (educación, sanidad, asistencia social) que no sea muy cara y mal gestionada, además de fuente de desigualdad. 
Es claro que nos hemos acostumbrado a insensateces como que la política educativa haya sido transferida a las CCAA, y recibamos con indiferencia noticias reiteradas de sus efectos , como en lo comentado ante de la educación catalana y su fracaso. Fracaso de todos, porque, en primer lugar, el estado central ha sido incapaz de defender los derechos de los castellano parlantes, curiosamente la mayoría de los catalanes. De paso, la Constitución, como en otros temas graves, salta por los aires en su defensa del español como lengua común de todos. 
A todo esto, hay que sumar la venalidad de los últimos gobiernos socialistas, que han jaleado e incentivado estas debilidades del Estado porque les convenía para mantenerse en el poder. También hay que referirse a la debilidad manifiesta de los gobiernos no socialistas. En las últimas décadas, hemos asistido a un constante avance del desgaste de la Constitución y otras instituciones por la fuerza de los más hechos de los que desean acabar con el régimen parlamentario actual. 
El el gráfico, la productividad multifactorial de España desde los años cincuenta.



Como ven, España hizo un excelente trabajo entre el año1959 y 1989, con un aumento de productividad de más de 100%. Eso facilitó, sin duda, la Transición política a la Democracia. Desde entonces, la productividad no sólo no ha aumentado, sino que ha ido cayendo lentamente hasta un -9% acumulado, en tres décadas (1989-2019) que determinan una tendencia, que viene de larga data, muy preocupante. 
Porque los factores condicionantes que han propiciado esta decadencia, que hemos desarrollado antes, están tan enraizados que no se ve cómo se podrían corregir. 
Por eso digo que España, país tercermundista cuando empezó su carrera ascendente, corre el riesgo a volver a ser un país desenganchado de los demás países occidentales; incluso muchos países del Este de Europa, antiguos miembros del Pacto de Varsovia, lo están haciendo mejor en su normalización económica. 

domingo, 25 de junio de 2023

El desastre de Mérida

La batalla de Mérida (capital de Extremadura) entre el PP y Vox ha dado un inesperado aliento a Sanchez, que ha visto un resquicio en los malos augurios electorales del 23 de julio. 
Ambos, PP y Vox, han de ser culpados por el ruido mediático generado inesperadamente, cuando las cosas iban tan bien en una campaña que la gente percibía como una ocasión para quitarse de encima a la “Pesadilla Sánchez” - quien, en su desesperación, había empezado una innovación electoral como hacer de entrevistador a sus ministros (sic). 
Lo de Mérida ha sido un impulso inesperado que se debe agradecer a una señora emponderada, llamada Guardiola, representante del PP en Extremadura, que casualmente, cuando habla, parece mismamente Irene Montero. Dice, cito de memoria, “que no puede pactar y gobernar con un partido (Vox) que tira a la basura la bandera de la LGTBI+”. ¡Como si la tal bandera fuera representante de algo que no sea aberraciones jurídicas como las leyes dictadas por este gobierno!
Yo no prohíbo que cada cual ejerza su libertad sexual como le venga en gana, como liberal que soy. Estoy en contra de que se haya confundido esa Libertad con la obligatoriedad de ser homo, trans, lesbiana, etc, y adoctrinar a los niños con imágenes explícitas de cualquier sexo para lo que no están preparados. Una cosa es la libertad de y otra la obligación de desnaturalizarnos y utilizar y desvirtuar a la infancia.
Es lo que están haciendo desde el gobierno y otras autoridades en manos de estos desalmados que no creen en la infancia, ni la familia, ni la patria potestad, a la que quieren sustituir por la apropiación estatal de dicha infancia. Y han recorrido mucho trecho de ese camino.
Por eso me deprime que una sujeta, en teoría de un partido centrista como el PP, supuesto defensor de un orden natural milenario, abra la bocaza para defender lo mismo que, p ejem, Irene Montero, la promulgadora de una ley que ha beneficiado penalmente a más de mil violadores. Y todavía no ha perdido perdón. No es su estilo. Ni el de su marido (o lo que sea), Pablo Iglesias “Pablenin”, más tóxico aún que ella. 
En otras palabras, doña Guardiola ha conseguido alinear el PP con Podemos, levantando sospechas entre sus electores, quienes supongo la castigarán en 23 de julio y en la más que segura repetición electoral en Extremadura.
En todo caso, el desconcierto que ha impulsado esta señora es muy difícil de diluir, pues muchos, como yo, habrán congelado la imagen del brazo que ya iba a depositar la papeleta PP en la urna.
Porque, claro, indagas un poco en el entorno social de esta señora, y resulta que está en manos de sujetos muy afines a los círculos podemitas, lo que te lleva a preguntar: ¿habrá más casos así en el PP?
Extremadura, la region más pobre de España, ¿se puede permitir el lujo de votar a una señora que no habla de infraestructuras, ferrocarriles, escuelas, etc, sino de los derechos de los LGTBI+...? Algo no encaja aquí, con el PP infiltrado por una recua de exotéricos  Woke y Queer, que, obviamente, no puede ni quiere ponerse a solucionar los graves problemas de Extremadura, a la que yo creo que desprecian. 
A ver, Feijóo, cuando hicisteis las listas de las eleciones del 28 de mayo, ¿no pudiste quitarte de encima a eta grupete que mejor estarían en Podemos? No has querido verlo hace ya tiempo? ¿No te llegan los rumores de Mérida? Pues son poco más que 300 km a Madrid. Será que te has rodeado de incompetentes.
No sé, no lo entiendo. ¿Cuantos más te van a salir ranas como ésta alocada? En fin, tú verás. Me parece que eres lo que necesita España en este momento tan difícil. Un gestor eficiente y sofocar los movimientos de independencia (aunque en esto has mostrado poca o ninguna actitud). Espero que haya suerte y que esto sea puntual y gestionable. Aunque me temo que en España hay tantos poderes, tantos candidatos, y tan mal sistema electoral, que es de esperar que estas sorpresas sucedan frecuentemente. 

sábado, 24 de junio de 2023

Más claro agua

Tres post más atrás, he tenido un breve debate con Miguel E sobre si son muy parecidos, o incluso iguales, los gobiernos del PP y del PSOE. 
Yo mantenía que no. No me entusiasma la actitud blandengue que siempre ha mostrado el PP con independentistas-separatistas, ni otras concesiones a lo que ya, sin ningún esfuerzo, podemos llamas enemigos de nuestro régimen democrático. Pero hay algo que ha demostrado el PP: inclinación al rigor económico en sus gestiones nacionales y regionales. 
En este gráfico represento la evolución de saldo financiero público (todas las administraciones) en porcentaje del PIB. Creo que su resumen es bien claro:
Cuando el PP ha llegado al gobierno (nacional y regionales: 1996-2004/2012-2018), ha hecho un notable esfuerzo para reconducir los déficits financieros creados por el PSOE tras su paso por el poder.



El gobierno de Felipe González (1982-1996) gastó a manos llenas para contentar a sus bases y cargos locales afines que le tenían buen agarrado por lo más íntimo. Su déficit alcanzó hasta el 7,5% de PIB dos veces y no fue capaz de equilibrarlo en todo su mandato.
Tuvo que llegar Aznar en 1996 para recuperar un saldo equilibrado, y reducir así notablemente la deuda pública (gráfico siguiente). Fue un gran logro, que además nos abrió las puertas al euro.
Aznar se retiró en 2004, llegando al gobierno el desastre Zapatero, que aumentó el déficit hasta -12,5%, cargando la deuda/PIB, que recogió de Aznar en menos de 40% de PIB, a más de 100% de PIB.
El siguente esfuerzo de consolidación lo hizo Rajoy, que no logró reequilibrar las cuentas, pero sí reducir el déficit notablemente, del -7,5% al -2,5%. 
Sánchez, alegre gastador, aumentó el déficit al -10%, para que de nuevo el PP de Feijóo repare las condiciones financieras.



En la deuda/PIB vemos las consecuencias, la herencia acumulada, que nos ha dejado esa dilapidación de nuestros dineros. Cuando murió Franco, había una deuda menor al 20% de PIB. Felipe González “consiguió”, afanosamente, ponerla en el 85%. 
Aznar la bajó al 40%, de las bajas de la UE. Mi Yo, un gran escalador, ha superado todos los límites, llegando cerca de 120%. Esperemos que se vaya.
Resumen: el PSOE ha sido Gran despilfarrador, y ha tenido que venir el PP para hacerle de lavandera y restablecer la normalidad. ¿Qué hubiéramos visto si el PSOE no hubiera cedido el poder de vez en cuando?

viernes, 23 de junio de 2023

El ruido de la rúa

Cuando transito por las calles, me esfuerzo por recabar información sobre opiniones electorales, pero no. A la gente parece que le trae al fresco el tema. Eso sí, cuando alguien habla, lo hace apasionadamente y a voces. Sobre todo los de una avanzada edad, porque los jóvenes (hasta los cuarenta) no dicen nada. Parece que ya han dictado sentencia y ésta no va a revocarse ni aunque haya un terremoto. 
Aunque jóvenes cada vez quedan menos. Hay muchos añosos, algunos que parecen zombis, pobremente vestidos y una facha descuidada. No sé si hay una tara detrás, en su historia. Hay unos que todos los días me piden un pitillo. Debe ser que en casa no les dejan, o que no quieren comprar. En todo caso son raros. Van andando como desestructurados, brazos colgando, desganados. Varios llevan tirantes, que no logran sujetarles los pantalones, y se les ve la tripona. 
A lo mejor es la calle, que es especializada en zombis. Pero cuando voy al centro, por donde pasan muchos turistas, tengo que decir que todos me parecen muy feos. Parece ser que el turista, ahora, es de clase baja, que come de pie, andando, señal de que no tiene dinero para sentarse en una terraza, aún que sí es un banco público. En todo caso van muy deprisa, se nota que tienen que cumplir el circuito marcado. No me levanta el ánimo el espectáculo. A mí me gustaba antes sentarme en una terraza y ver pasar la gente. En la terraza del Bellas Artes, muy bien colocada. Pero yo creo que todo se ha envilecido. No le saco jugo. 

miércoles, 21 de junio de 2023

Una tal Guardiola

En España estamos en proceso de elecciones generales, que se celebrarán el 23 de julio, a la vez que se están formando gobiernos locales de las elecciones habidas el pasado 28 de junio. Curiosa fecha la del 23 de julio, designada por Sánchez, a conciencia e intencionadamente, en pleno estío y la gente pensando en las vacaciones. 
El objetivo de estas elecciones, para los que defendemos la democracia y las instituciones que la enmarcan, debería ser echar de La Moncloa a “pesadilla Sánchez”, que ha maltratado de raíz leyes e instituciones que permiten el funcionamiento de nuestra democracia. Sánchez ha asaltado el poder, y si no ha podido conquistarlo del todo, sí que ha dejado la judicatura muy inclinada a la izquierda extrema, de modo que se ponga a su servicio cuando vuelva a ganar, y gobernar con sus amigos terroristas, separatistas, y los beodos y beodas podemitas, que con sus leyes de Iguadad”, o igual da. Estos no ponen reparo a decir que el “régimen” del 78 hay que derribarlo. 
Pero estoy empezando a ver patinazos y meteduras de pata de los partidos de derecha, PP y Vox, que han conquistado poderes regionales antes ocupados por el PSOE, han enseñado que pueden ganar el las generales, pero ahora están mostrando flancos débiles que no me gustan nada. 
Hoy me he quedado congelado al saber que una tal Guardiola, candidata del PP en Extremadura en las elecciones locales, ha lanzado por esa boquita que elle se niega a pacta gobernar con Vox (con lo que el parlamento ha quedado en manos del PSOE), porque ella además avala y aplaude lo que ha hecho Irene Montero con sus leyes demenciales, del “Sí es sí”, “Ley Trans”, y demás aberraciones de ideología Woke adoptadas por la izquierda del PSOE, antaño socialdemócrata, hogaño neocomunista, aliado, como he dicho, con los Etarras que mataron a más de ochocientos españoles, y de otras especies no menos mortales para España.
Porque, a la postre, no se trata más que de eso, de acabar con la nación, desmembrarla y debilitarla para hacerse con todo el poder. 
El camino ya está comenzado y sólo falta que los catalanes vuelvan a declararse independientes por segunda vez (la anterior fue en octubre de 2017), con los buenos auspicios de que Sánchez ha eliminado el delito de sedición (of course, con los votos de los interesados): éstos ya no tienen más que empujar la puerta legalmente...
En fin, que yo pensaba votar al PP de Feijóo como paso necesario para frenar ese tren descarrilado que es España. Ahora bien, si hay más elementos com la tal Guardiola en el PP, no voto. No voy a votar a gente que esconde en su regazo opiniones a favor de las leyes del Podemos, como esta sujeta que no sé de donde sale, pero sí que su jefe Feijóo la apoya. 
Y eso sí que no. O hay explicaciones más plausibles, o esto le va a generar una fuga electoral al PP que puede ir en ascenso, hasta permitirle al golpista Sánchez recuperarse y ganar. Requiero una explicación de Feijóo (no de la tal Guardiola, que por mí se vaya al cuerno) sobre estos desafueros inquietantes de un partido con debilidades no vistas hasta ahora, que empiezan a asomar y invitan a sospechar que habrá otras nauseabundas eclosiones del mismo tipo. 

martes, 20 de junio de 2023

El camino de la productividad

El párrafo reflejado abajo define perfectamente el liderazgo que ha mantenido EEUU hasta hoy. En él queda meridianamente claro da diferente cuitura empresarial que hay entre EEUU y Europa. 

EEUU mantiene, porque es natural a él, una relación perfecta entre los centros de creatividad (universidades, p ej) y las empresas deseando transformar las ideas en productos rentables. Aquí eso lo vemos como un pecado. Bien, a cada uno según sus gustos.

Pero ellos resuelven mejor, día a día, la conversión de la creatividad en productividad, sin alharacas ni injerencias de los poderes públicos. Estos se llevan su parte en los impuestos, que por cierto, son mucho más bajos que en Europa: menos de 30% de presión fiscal, frente a más del 40% nosotros, hasta el 50% de algunos. Otro pecado desde nuestro punto de vista, nuestra cultura “del buen gusto”.

El caso es que a EEUU le ha ido bien - como a los países que han seguido esa línea -, en productividad. Porque la productividad depende al final de la creatividad y de elegir bien qué producto creativo es financiable y rentable. Puede ser el mismo creador que obtenga la financiación y lo explote, o puede ser una empresa que apueste por el proyecto. El acierto es sostener la cadena invención-financiación-inversión-producción innovadora: éxito de mercado, ingresos que cubran los costes de financiación, salarios y beneficio. 

Todo eso se da porque hay un fondo cultural que propicia la naturalidad de tales procesos. Se han intentado modelos alternativos en otras partes, pero no ha funcionado. 

Un racionamiento aparentemente sencillo pero inimitable. Lean la opinión de Alberto Sangiovanni, por cierto, italiano, porque esa es otra: EEUU no hace ascos a los extranjeros, que en su país de origen morirían asfixiados, y allá son calurosamente recibidos, en pie de igualdad, por lo que aportan.Muchos se naturalizan. 


(Texto: El Mundo 19 junio 23)

Hay una cosa engorrosa con la productividad y Europa. Nos es un concepto sospechoso. Preferimos pensar antes en el reparto que en el producto. Tenemos la costumbre de primero repartir, cargar impuestos, y luego inventar, crear, producir. Pero algunos dicen, ¿producir, trabajar, para qué? No es mejor que cada uno se contente con lo que tiene y, eso sí, recortar diferencias?

Con ese planteamiento, el producto a repartir es cada vez más pequeño. Cada vez hay menos para lujos, pero también para bienes sociales, como sanidad y educación, que se van empobreciendo. Un ejemplo: España lleva 20 años sin aumentar la productividad, y casualmente, su sistema sanitario y educacional son valorados cada vez más bajo en los estudios internacionales. Es como ese mito que dice que los mejores médicos están en 🇨🇺 Cuba. 

Si nosotros no queremos seguir el camino, no pretendamos recoger los frutos.


domingo, 18 de junio de 2023

La economía en las elecciones

Hay momentos en que el estado de la economía es decisivo, o no, en unas elecciones. Si la gente ve que la economía va bien, hay poco paro, los jóvenes encuentran trabajo, no le exigirán al incumbente-candidato ningún coste , y serán otras cosas las que decidirán el resultado. El candidato de la oposición tendrá muy difícil la victoria.
En el caso opuesto, en que la economía está en recesión, los impuestos son lesivos, hay una deuda enorme, y mucho paro, entonces el candidato de la oposición tendrá muchos votos de los descontentos. Fue ese el caso de la segunda legislatura de Zapatero, que entregó una “tarjeta económica” tan infame que tuvo que dimitir de presidente de gobierno y pasarle el mochuelo a Rubalcaba, para que éste recibiera el bofetón de las urnas sin anestesia. 
Pero a día de hoy estamos en otra honda. Estamos en una honda en la que la economía a corto plazo no va mal del todo. Todavía estamos creciendo y, gracias a los enjuagues estadísticos de la señora Yolanda Díaz, hay menos paro que nunca, la inflación ha bajado; aunque no para los bolsillos de los asalariados y rentas bajas, pues la inflación de productos de alimentación y primera necesidad siguen mostrando una inflación vigorosa. La pérdida de poder adquisitivo de millones de personas, de ninguna manera compensada por los caramelos que va lanzando Sánchez desde su carroza electoral, distante y altanero. Esos caramelos, junto con las contrataciones a dedo de altos cargos, asesores, y otros chupópteros, y las decisiones arbitrarias de un Calígula entregado a su super Ego, ha elevado la deuda pública a niveles extemporáneos. La Deuda/PIB ha subido incesantemente, creciera el PIB o no.
Sin embargo, no creo que esto tenga mucho relieve en las elecciones. La gente no sabe de economía más que por información parcial o sesgada, y no tiene ni idea de qué es eso de la deuda y cómo nos afecta. 
Tampoco es sensible a cuestiones cruciales que se están jugando en estas elecciones (y las que vengan). Esa indiferencia es una barrera difícil de saltar, y sólo reducidos grupos de entendidos se hacen cargo de cuestiones cruciales para nuestro futuro, como el bajísimo nivel educacional español, la tendencia secular a la caída de la productividad, la inadecuada cualificación de los trabajadores a lo que demanda la industria productiva, cuestiones que nos diseñan un panorama sombrío. 
Sombrío porque España lleva fallando en estas cuestiones varias décadas. No años, décadas. España, coincidiendo con gobiernos mediocres, tanto de un lado u otro del espectro electoral (dos legislaturas Psoe, una legislatura Pp, y esta legislatura agonizante nefasta para estas cuestiones), no ha visto aumentar su productividad. Se ha distanciando de la mayoría de los países que antes estaban aún por debajo, países en los que ha habido, de una manera o de otra, un pacto de Estado para atender estas necesidades, que desgraciadamente no calan hondo en los electores. En la imagen, el PIB per capita comparado con la media del área euro y con Irlanda, o Singapur, países ejemplares que hace tiempo decidieron coger ese tren de la modernización. Podríamos mostrar más oasis de éxito, como Polonia.





No, no parece que estas cuestiones de calado vayan a pesar en el ánimo del elector. Primero porque hay propuestas absurdas, excéntricas, que tienen sus votantes y que obligan a “bajar el listón” de todos los partidos. El voto es incoherente con asuntos de largo horizonte temporal, seguro que aburridos en los actos electorales. 
Segundo, este país no tiene conciencia del común (entre otras cosas porque tiene separatismos que quieren hundir a la Nación), por lo que es difícil que se forme un consenso amplio que empiece a dar soluciones colectivas con visión de futuro. Un ejemplo: hemos tenido en el régimen constitucional 5 leyes de educación. Los partidos han sido incapaces de alcanzar un acuerdo para hacer una ley duradera, y el Estado debe ser, necesariamente, creador del ámbito institucional para un sector en el que la oferta podría ser privada y pública, privada a subvencionada, o el mix que se decida, pero lo menos sectario posible. 
Estas elecciones tienen un objetivo principal, que es arrancar del poder al sujeto que ha organizado un ataque sistemático y peligroso a las instituciones democráticas. Pero cuando se apague el fragor de la lucha electoral, habrá que plantearse cuestiones cruciales, cuyo objetivo debería ser un acuerdo de Estado para acabar con las insensateces que nos lastran y que han hecho tambalear la Democracia. Resumen, salvo en el primer periodo, la Democracia en España no se ha traducido en una prosperidad con futuro. Es triste, pero nuestros gobernantes no ha tenido altura de miras.

sábado, 17 de junio de 2023

Josep Pla

La naturaleza no conoce la discreción, ni aquel punto de hipocresía indispensable para ir tirando...

jueves, 8 de junio de 2023

Socialismo no es Libertad

Izquierda derecha, izquierda derecha, un dos tres! Decía la bobalicona y alegre canción de los sesenta, la yenca. No sé cómo pasó la censura... 

El caso es que gracias a Franco, que cultivó que él era el paladín de Occidente contra el Comunismo, la gente se quedó con la copla de que no había más alternativa a Franco que la izquierda. Ésta, por lo tanto, abarcaba la democracia y la libertad. 

Hay muchos que todavía no se han enterado, que ya es hora, de que la Democracia no ha nacido con la izquierda, que siempre la ha visto con suspicacia, porque eso del derecho de Propiedad, en fin, en fin. 

La socialdemocracia nuca se ha apeado de esa suspicacia contra la libertad, y hoy los vemos aliados con el movimiento okupa, avanzadilla de las nacionalizaciones y del comunismo centralizado. 

La gente tampoco se ha enterado del desastre ilimitado que vimos todos (bueno, el que quiso) cuando la caída del Muro de Berlín: miseria, hambre, desabastecimiento y millones de muertos. Eso se olvidó pronto, surgió y se impuso la falsedad del Fin de la Historia. Según esta estupidez, la derrota final del comunismo desvelaba a los ojos de mundo que la larga lucha entre dictadura y democracia había acabado con la victoria de ésta. Todos los pueblos la desearían. 

Pues no, y no sólo eso. Mucha gente no cuestionó sus raídas creencias en el comunismo (nieto de Rousseau), sino que alentó cualquier resurrección de nuevos brotes, que, dando muchos bandazos, y admitiendo nuevos y oscuros complejos (absorbidos por el movimiento woke), han desembarcado en las playas lozanos y dispuestos a conquistar el mundo. 

En España hemos sufrido cuatro años de esa turbia mezcla de acabar con la democracia y con la propiedad privada, aderezada de nuevas consignas identitarias sobre cuántos sexos hay (lo están debatiendo. Creo que vamos por 17), derecho prioritario de los okupas, razias de impuestos sin mesura, derechos de los animales, y otros muchos despropósitos para dar la vuelta a la sociedad como a un calcetín. 

Bien, pues eso ha sido inequívocamente dirigido por el PSOE, a quien todavía millones de gentes lo consideran “demócrata”, y le regalan su voto. 

La gente ha de caerse de burro y de la idiocia en la que están: el PSOE dejó de ser demócrata hace mucho, porque en su historia NUNCA lo fue. Habría que repasar la historia del PSOE en la República, a la que dio un golpe de estado en 1934 y se apoderó de ella en las eleciones de 1936 mediante un pucherazo consentido por un gobierno incapaz. Su objetivo: según Largo Caballero, líder máximo de sus huestes desatadas, para llegar a la dictadura del proletariado por la vía de una guerra civil...

El resto ya lo saben. Sólo los que no se quieren enterar sofocan este escándalo.

En realidad, el régimen que dio origen a la libertad fue el parlamentarismo del siglo XIX. Fue el primer régimen  manifiestamente en contra del poder absoluto y de la defensa de la Libertad con mayúscula, emparejada con el Derecho de Propiedad. No se concebía la libertad sin la protección del derecho intocable de la libertad. ¿Como te ibas a defender de la tiranía si lo primero que hacía ésta cuando venía de frente era expropiarte todos tus bienes?  - Que es el oscuro deseo de Sánchez y sus aliados.

La ruta hasta llegar al parlamentarismo no fue recta y única. Nació a consecuencia de las guerras de religión europeas, que duraron treinta años y devastaron Europa (1618-48). Por una parte, los británicos fueron avanzando, después de la dictadura de Crownwell, hacia la soberanía compartida entre el Parlamento y La Corona, hasta que aquel se hizo con el mando total 1689-). 

Por otra parte, los colonos americanos, desde 1620, empezaron a dotarse de leyes y mandos electos y sujetos a la ley, lo que luego se convirtió en un autogobierno que en 1776 se rebeló contra la metrópoli. Esos pactos iniciales, llamados “Covenants”, fueron el germen de la Constitución americana, modelo ésta de las posteriores constituciones liberales, luego imitada con desigual fortuna en todo el continente. 

Por lo tanto, el liberalismo no nace con la Revolución Francesa, posterior a la americana e inglesa, y que fue presa del terror de sus próceres. La RF dio nacimiento a Napoleón, que arrasó Europa, aunque incorporó a sus leyes unos leves tintes de libertades protegidas, dentro de su carácter dictatorial imperialista. En realidad Bonaparte fue un inhibidor que retrasó la normalización democrática. En lo que sí tuvo efectos palpables la RF fue en la Revolución soviética de Lenin, confesado por él mismo.

En el XIX España tuvo la suerte de tener un régimen parlamentario desde 1876, lo que nos acercó a lo que había en Europa, con muchas deficiencias ciertamente, pero que podrían haberse reformado con tiempo. La nueva izquierda, el Anarquismo y el naciente PSOE, con sus prisas históricas, no esperaron a esa maduración evolutiva. Prefirieron la violencia y las huelgas como armas para derribar a La Corona, aunque colaboraron con la dictadura de Primo (1923-29), lo que les ayudó para fortalecerse y extenderse para cuando viniera la República...

En España la libertad nuca ha tenido muchos defensores. Los que decían se serlo, eran pocos, triturados entre la izquierda y la derecha cerriles. Casi nunca nadie les compró su mercancía. 

Ahora se sospecha más del liberalismo del PP que del del PSOE. Ya hemos visto que éste nunca lo ha sido. Siempre ha puesto por delante su Socialismo marxista, pasando por una dictadura del proletariado. Cuando Felipe González cambió su estatuto para quitar el marxismo (1979), sólo tuvo efectos externos. El runrún del marxismo de la base seguía bien vivo.

 

lunes, 5 de junio de 2023

Sostener el relato pese a todo

La realidad existe.

Como nos explica uno de nuestro mejores columnista, José García Domínguez, la realidad existe, y no reconocerlo le ha costado a la izquierda el batacazo electoral. La filosofía de Kant no negaba la realidad. Lo que decía es que nuestra percepción de ella está condicionada por nuestro marco “a priori” del espacio/tiempo. Pero la realidad existe y se llama así, realidad, y sí, la vemos con las lentes espacio-temporales de nuestro cerebro, pero negarla, como ha hecho la izquierda, produce estrepitosos fracasos. 

Y es lo que les ha pasado a Pedrito y Pablito, que tienen la absurda teoría que lo importante no es realidad, sino el “relato” que haces de ella. Si creas un buen relato, la gente no va a dejar de apoyarte porque le vaya mal. Esto suena un poco a Göebels, el genio máximo de la propaganda, que  es como se conocía antes eso que ahora se llama “relato”. 

Los aspirantes a tiranos tienen una fijación con eso del relato, es decir la propaganda, sean nazis, sean comunistas. Y se la han pegado, han mordido el polvo, esos que hace tan sólo hace 5 años eran la “gran esperanza” de los “oprimidos” por una democracia según ellos “falsa, engañosa y opresiva”. 

De esta manera, un gobierno no tiene que preocuparse por crear empleo, prosperidad, buena educación y sanidad. No. El gobierno debe emplearse en crear un Homo Novo, con una nueva identidad sexual entre las 17 posibles, recién creadas ex nihilo. Tampoco debe preocuparse por la seguridad de sus súbditos (sic), especialmente de la mujeres violadas y maltratadas o de los niños que sufren abusos, cuyos padres ya poco pueden hacer para protegerlos, cuando hay organismos públicos de menores que los prostituye(sic). ¿Que los salarios se ven mermados por la inflación? Se truca el índice de precios, y baja la inflación. ¿Qué la contabilidad nacional dice que el PIB se estanca? Se masajea el PIB y resucita. En fin, relato, relato.

Así no es de extrañar que si hay elecciones, la gente les de la espalda. Será porque la gente quiere relatos acordes con la realidad. 

Pero atención, este energúmeno número uno ha puesto las elecciones en una fecha vacacional y de puente. Tres millones de españoles estarán por las carreteras. No podrán votar, salvo por correo, cuyo mecanismo ya han emborronado sus esbirros. ¿Quieren sostener el relato? Para sostener el relato necesitan una dictadura militar.