"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

domingo, 18 de agosto de 2013

Rajoy no es Lincoln

Hay una Carta del Director, de PJ Ramírez, en El Mundo de hoy, que te deja los ojos ojoplaticos.

Según la venal carta del causante directo del mayor daño hecho al gobierno y al PP, al que odian sin fisuras todos los militantes y toda su mesnada periodística (vaya papelones, Herman Tertcht, Isabel Durán, Jaime González, etc), resulta que Rajoy seria un trasunto de nada menos que Abraham Lincoln. Tócate el níspero.

¿No hizo trampas Lincoln para aprobar la enmienda que abolía la esclavitud mientras ocultaba que había una delegación de los sudistas para acordar La Paz? Lincoln mintió para retrasar esa noticia, a riesgo prolongar la guerra con ello, pero sobre todo debía aprobar esa enmienda, porque sino todo es esfuerzo bélico hubiera sido vano.

Lincoln tenía un sentido de la importancia de cada cosa, y mintió al Congreso pues temía que éste no aprobaría la enmienda abolicionista si se enteraba que La Paz era posible e inminente. ¿Pero qué sentido hubiera tenido una paz para dejar las cosas igual que antes de la guerra, con el derecho a poseer esclavos en vigor? Sin la mentira de Lincoln La Paz hubiera sido una rendición, una vuelta al punto cero, porque los nuevos congresistas sudistas no hubieran aprobado la abolición.

Cualquiera puede ver la rectitud moral de esa mentira. Su fin era aprobar la abolición para siempre, que eso se aceptará en el Tratado de paz. Era una mentira arriesgada para su imagen, por lo que no se pude hacer el juicio de PJ Ramírez, poco menos que lo hizo para elevar su ya agrandad figura. Lo hizo porque la alternativa era ensuciar la memoria de tantos muertos que habían luchado por sus ideales. Y no es lo mismo una paz en el que el perdedor acepta que ha perdido y que la abolición (si no es noble esta idea...) es un hecho.

La guerra es de por sí innoble, sin barreras morales, sucia, inmiserdorde. Si encima se le pone un final borroso, en el que se vuelve a la situación previa a cinco años de muertes y vidas truncadas, el político que lo permita es simplemente un chapucero y un traidor.
PJ Ramírez se acoge a una ficción tirada por los pelos: el buen fin, el fin superior, que justificaría la mentira de Rajoy en el Congreso el 1 de agosto, es que la economía ya está saliendo de la crisis, que al fin el modelo impuesto por Europa funciona, y que eso justificaría cualquier mentira para permanecer en el poder y garantizar que no se descarrila la bonanza económica.

Primero, no hay tal recuperación. Los datos que cita PJ no confirman nada. Una relajación de la prima de riesgo, más que nada producida porque el tipo de Bund alemán ha subido 50 puntos básicos, no es un brote verde. Estamos en agosto, y sabemos que los fondos están huyendo de los países emergentes, y han encontrado más cálido refugio aquí. Los problemas institucionales europeos siguen en pie. Y si por acaso sí tenemo una recuperación, no será mérito de Rajoy.

Rajoy no es Lincoln, todo lo contrario. Es un funcionario "rata", que ha ocultado cosas para su beneficio. No tiene más nivel moral que ése. Lo que es peor, es que ha dejado meridianamente claro que sus fines políticos y crematisticos se mezclan indecorosamente, tan indecorosamente como para pensar que la política es el medio para llegar al final de la legislatura sin que se descubra de quién son esos millones que tiene Bárcenas en el extranjero. Esto condiciona, se quiera reconocer o no, lo que queda de legislatura. El gobiernos se va a ver acosado para cualquier decisión impopular que nos pidan de Europa. Ayer supimos que la deuda ha subido escandalosamente de nuevo. Cerrarse en la mentira no promete una estabilidad política mínima.

Porque aquí hay un agujero negro enorme, y es que nadie en su sano juicio puede pensar que ese dinero es sólo de Bárcenas, que le ha ido sisando al PP sin que éste se diera cuenta.

Lo malo es que el PP fue votado por una inmensa mayoría no por su ideología, sino por ser la única baza regeneradora que quedaba. Por lo menos estos serán más limpios que el Psoe, decíamos (decían, pues yo no les voté, ni a nadie). Mariano Rajoy se ha cepillado esa baza, la ha laminado con sus sobresueldos, su manera de conceder licencias mafiosamente (¡los defensores del liberalismo económico!), y su desgobierno que ha agudizado lao problemas sin que haya aportado nada cambio.

Cuando se vaya dejará un erial, una España más dividida y enfrentada y me temo que sin recuperación. Mariano Rajoy no es Lincoln. Es un especialista en aplazar decisiones que le puedan torcer su camino a un retiro áureo, con un Buen fondo dorado de pensiones en Suiza. Es un eslabón más en la trama de intereses que han montado los partidos con los enjuagues de la Máxima Autoridad, de la que tampoco podemos esperar nada bueno. Todos están en un modo: ocultar, mentir, trampear, todas las instituciones agarradas por do más duele, unas y otras dependientes de la cúpulas de los partidos.

Así que no veo yo ningún fin noble y superior que justifique la mentira para que este demoledor sistemático de la nación siga dos años más. Si, desde luego, si fuera cierta la normalización económica todos cerraríamos los ojos y haríamos borrón y cuenta nueva. Pero esa normalización requeriría un crecimiento prolongado del 3%, y eso no se ve ni harto de vino.


sábado, 17 de agosto de 2013

El mercado del oro y los bancos centrales

Una bonita e instructiva historia sobre el mercado del oro y el papel en él de los bancos centrales. Con qué técnicas operan y con qué fines. Gratitud de Víctor Hernán.

Parte 1.

Querido Miguel: pido disculpas por no explicar suficientemente algunos puntos; en muchas ocasiones doy por supuesto que todo el mundo está al corriente de ciertos detalles.

Sobre los triunfales anuncios como "Europa deja atrás la recesión" y todo eso, sí han llegado a mis oídos, pero si tenemos en cuenta que en cuatro semanas hay elecciones en Alemania; unas elecciones cruciales, no sólo para Merkel y el establishment alemán, sino también para la pandilla de Golfos apandadores próximos al Manneken pis. Son golfos pero no tontos y conocen bien el punto indomable, casi salvaje, que conservan los germanos de la vieja Sajonia, que nunca fueron romanizados completamente. Ya tienen bastante con ese forúnculo en su culo llamado UKIP, como para ahora les salga otro en el otro carrillo. Pues bien, doy por descontado que todo lo que oigamos y veamos de aquí a las elecciones es pura PROPAGANDA, y como en mis días de retiro he perdido las gafas con filtro de factor total AP (anti-propaganda), prefiero hacer como que ni veo ni oigo. Fíjate que estos montajes son globales; estos días no hay entrevista económica en Bloomberg, CNBC, dónde sea, que la cabeza parlante no pregunte al entrevistado si invertiría en Europa.

Para explicar las particularidades del préstamo o leasing de oro de las reservas nacionales tengo que remontarme a los 80 tras el hundimiento del precio del oro y la elevación a las nubes del tipo de interés americano por Paul Volcker.

Todo comienza con una brillante idea nacida en el Banco de Inglaterra. Con trescientos años de historia a sus espaldas, los funcionarios de la Old Lady han desarrollado, además de un gusto exquisito para el buen vino de Oporto (como afirman ciertas malas lenguas), un extraordinario dominio de la política monetaria, en particular del oro como parte del sistema monetario que, unido a su natural pragmatismo, les hace insuperables en su oficio. Así, dieron a luz una idea para burlar la sobada crítica "el oro no produce interés" prestándolo a ciertos Bancos a cambio de un interés fijado durante un plazo determinado. Se creó la London Bullion Market Association (LMBA) como mercado para esos préstamos y para negociar el oro, los bancos miembros de la LMBA, que se suelen denominar Bullion Banks y actúan como creadores de mercado. Su número se ha ido reduciendo (en consecuencia, aumentando su poder) hoy día creo que tan sólo quedan seis: Barclays, ScotiaMocatta, Deutsche Bank, HSBC, JPMorgan y UBS. De esta manera nació un excelente negocio: el Carry Gold Trade, que consistía en el préstamo del oro por parte del BoE o de otro banco central a un Bullion Bank, la venta de ese oro por parte del Bullion Bank a los inversores o a la industria y la reinversión del dinero obtenido en deuda soberana. En unos tiempos en los que, por ejemplo, el 10-años americano estaba al 9 por ciento, el negocio era excelente: ganaba el banco central, ganaba el bullion bank y tutti contenti. Claro que el negocio tenía riesgos; al tomar el oro prestado y venderlo, el Bullion Bank tomaba el riesgo de que subiera de precio y que, si tuviera que recomprarlo, perdiera dinero. Por supuesto, el Banco central también tomaba un riesgo: que el Bullion Bank quebrara y no devolviera el oro, pero este riesgo ni se consideraba entonces, ¿cómo iba a quebrar un Bullion bank?



Parte 2.

Además, estaban las consecuencias inconfesables:

Primera consecuencia: para el Banco central la explicación anterior (obtener unos réditos por una reserva que no producía nada) tenía una venta fácil pero, en realidad, el préstamo servía para inundar el mercado con oferta de oro y mantener su precio controlado, cosa que a los Bancos centrales siempre les ha gustado ya que esconde el envilecimiento progresivo de la moneda. El mecanismo era sutil (sin duda producto de un 20-years old tawny): el oro prestado se vendía, con lo que aumentaba la oferta pero seguía figurando en el balance del banco ya que era una propiedad "cedida temporalmente". De hecho, la mayoría de los bancos centrales (salvo el de Portugal y alguno más) ni declaran ni dan explicación de tales operaciones, o las dan mucho tiempo más tarde.

Segunda consecuencia: era imposible que no se despertara la codicia de los Bullion Banks ya que se encontraron con el completo dominio del mercado del oro: poseían información que nadie tenía y que no compartían (luego explicaré esto) y podían manejar los precios a su antojo. Si uno estudia los charts del oro desde 1987 hasta 1999 se aprecia con claridad desde la creación del LBMA una tendencia a la baja del precio que se hace escandalosa entre 1995 y 1999, en que el oro pasa de 400 a 250. Estos fueron los años en que los Bullion Banks cogieron confianza, eran los Amos del Universo, podían tomar prestado cantidades casi ilimitadas de oro y ponerlo a la venta hundiendo los precios a su gusto para recomprar barato. Para hacerse una idea, se estima que en 1999 el saldo de oro prestado era de 5000 toneladas, eso en un mercado en que la producción a anual de las minas es del orden de 2700 toneladas. Sobre la información privilegiada a que me refería, imaginemos este caso: un Bullion bank quiere tomar prestado oro, recibe distintas ofertas de varios Bancos centrales especificando sus condiciones, al fin escoge la que mejor le cuadra por tasa de interés y plazo, pero ya tiene una información que nadie posee, ni siquiera los Bancos centrales: conoce las disponibilidades de oro factible de ser prestado gracias a las ofertas de las que no ha hecho uso. Otra posibilidad, si un Bullion bank ha tomado prestado 200 toneladas de oro que se van a vender mañana a la apertura de Londres hundiendo el mercado, eso lo sabe él y puede aprovechar que el oro cotiza prácticamente 24 horas, en el Globex, en Hong Kong, en Dubai, etc. para hacer lo que en argot se denomina front running.

Si la información sobre los préstamos de Banco central a Bullion bank es de risa, la perfecta ocultación se logra poniendo por medio de swaps entre bancos centrales. El swap de oro entre dos bancos centrales es una operación que, como la anterior, nace llena de buenas intenciones y se pervierte pronto. No es más que un préstamo de divisas con garantía colateral del oro de la reserva. Un banco central, digamos A, que esté corto de una divisa, puede pedir una cantidad prestada a otro B a cambio de un interés con la garantía de XX toneladas de oro de su reserva. Esta operación entre Bancos centrales no exige ni siquiera el movimiento del oro, que suele estar depositado en custodia en Londres o Nueva York ni se contabiliza como una disminución de las reservas de A ni un incremento de las de B, sino como un aumento de efectivo y una deuda monetaria para A y una disminución de efectivo y un préstamo a cobrar para B. Si, tras el swap, B presta ese oro que tiene en garantía al Bullion bank C, el oro acabará vendido en el mercado mientras que en la Caja fuerte de B habrá un papel que diga "IOU XX toneladas, firmado C", mientras que en la de A hay otro papel que dice: "XX toneladas de nuestro oro lo tiene B". Así, otra vez, tutti contenti.


Parte 3.

Todo este montaje se ha ido poniendo en peligro durante dos décadas debido a la increíble demanda que tiene su origen en los particulares en Asia y en los bancos centrales de los países emergentes que ven el dólar como un abuso de poder por parte de los americanos y sueñan con liberarse de su yugo. La demanda REAL de oro es imposible de estimar con precisión, ya que no podemos estimar cuánto oro de las reservas ha sido vendido. Pensemos que durante casi diez años, no sólo se ha prestado el oro para su venta, sino que se ha vendido directamente por parte de los Bancos centrales. Hace tres años, tuvo mucha gracia una partida de 150 toneladas que el IMF amenazaba con poner a la venta; cada vez que el IMF anunciaba que la iba a vender, el precio bajaba; así estuvo jugando a amagar y no dar por un tiempo; al fin, en cuanto se decidió a sacarlo a la venta, de un golpe, el Banco de India dijo "trae pa cá" y se quedó con todo el paquete con gran cabreo de otros bancos centrales.

Desde 2002 la impresión general es que los préstamos se ha reducido, bien sea porque los bancos centrales occidentales se hayan asustado de la posible quiebra de algún Bullion bank (pese a su apoyo incondicional) debido a un típico squeeze de cortos, bien sea porque ya no tengan nada que prestar.

Hace unos meses, Alemania, ante la presión de la opinión pública, pidió a la FED la repatriación de 300 toneladas de las más de 1200 que tienen depositadas en USA (cosas de la Guerra fría), la respuesta de la Fed (que ha dado mucho que hablar y más que pensar) más o menos fue: "despacio y buena letra, os lo devolveremos poco a poco de aquí en siete años", de ahí a decir ad calendas graecas no hay más que un paso. Este pasado jueves, el precio subió 40 dólares en un parpadeo sólo por el rumor de que otro banco central había pedido la repatriación.

La posibilidad de un squeeze me parece real y es otra de las cosas que vigilo continuamente.



P.D. Tras vender el Bullion bank el oro que le han prestado, lo normal es cubrir la posición comprando una call en el mercado de futuros, con lo que estamos en pleno juego de los espejos (lo que hubiera disfrutado Orson Wells con todo esto!) donde un squeeze se puede llevar por delante a media Humanidad, ya que si el que vendió la call no puede satisfacer el contrato, el Bullion bank tampoco y el Banco central se queda a la Luna de Valencia. Eso, suponiendo el caso más simple de sólo tres eslabones de la cadena que, como hemos visto, puede ser bien larga gracias al juego de mete-saca, es decir de compro-vendo o vendo-compro.


La ley de Say y su papel crucial en la economía clásica

La ley de de Say dice que toda oferta (vendida) produce su propia demanda, porque el dinero cobrado no tiene rentabilidad: tanto el asalariado como el empresario irán al mercado correspondiente a gastarlo. Lo pueden gastar en consumo, en bienes de capital, o en activos financieros (ahorro) que financian a otros los bienes de capital. Lo que no hay es interrupción entre el cobro del salario, o la venta, y el gasto en otro mercado, sea este real o financiero. No hay, por lo tanto, elección: se sabe lo que se quiere consumir y no consumir, y eso es el ahorro que en todo caso va a comprar activos. No hay atesoramiento de saldos dinerarios estériles.

Esa es la ley de Say en esencia. El dinero es un velo que ayuda a mover las transacciones, pero nadie quiere tener más del tiempo necesario para cobrar y vender, porque es estéril.

Ahora sabemos que eso no es cierto. Friedman admite que hay periodos cortos en que la desconfianza desvía la demanda hacia el dinero, lo que reduce la velocidad de circulación y contrae la economía. Puesto que la demanda ha caído. Pero el Banco Cantral tiene poder suficiente para aumentar la liquidez en circulación u compensar lo que se ha quedado en los bolsillos. Si la velocidad de circulación cae, porque la demanda de lividez ha subido, el aumento de la oferta por parte del emisor es suficiente para restablecer la confianza. El banco central puede volver a colocar el tipo de interés en el tipo natural, que es el tipo a largo que mantiene la senda de máximo crecimiento igualando el ahorro y la inversión. Friedman creía en el tipo de interés natural de los austriacos, lo adoptó sin reticencias. Las temporales turbulencias monetarias desvían el río de mercado del natural, pero se puede restablecer en poco tiempo la igualdad. A ese tipo, el ahorro y la inversión se igualarán de nuevo a su máximos potencial (que no es el de pleno empleo, pues eso depende de la flexibilidad salarial).

Keynes prolonga un poco más la agonía y la agrava. El BC puede verse impotente para alcanzar el tipo natural si la demanda de liquidez se hace insensible al interés. Esto pasa cuando la incertidumbre se sobrepone a todo, y la gente desdeña una rentabilidad que conlleva el riesgo de perderlo todo. No es una elección entre distintas inversiones con sus rentabilidades, es una elección entre el dinero líquido, no rentable, y todas las demás colocaciones posibles. Por mucho que el BC inyecte dinero en los bolsillos de los agentes, estos lo retienen y no lo gastan, así como los bancos lo retienen en forma de reservas y no prestan. Esta elasticidad infinita de la demanda e dinero es tanto más pronunciada en el tiempo cuanto más deudas hayan quedado del periodo anterior.

A la gente le da igual la rentabilidad de otros activos si no confía en que vuelvan a su nivel de antes, o al menos se muevan en ese sentido. El BC puede llegar a emitir al cero %, que la demanda de atesoramiento seguirá siendo infinita, porque el coste de financiación de la inversión tendría que ser negativo para realmente estar interesado el empresario en ampliar capital. La rentabilidad estimada de capital en el futuro ha caído fuertemente por la caída en la confianza. Hemos pasado de una fase de decisiones graduales y jeraquizadas a otra de ina sola elección: liquidez. El ahorro puede aumentar mucho porque la gente este asustada ante sus deudas, pero eso no va a financiar activos de riesgo, sino activos líquidos cuasi dinero. La brecha entre el ahorro y la inversión puede durar indefinidamente. La caída de los precios de la activos que representan la inversión productiva no se restablecerá repentinamente.

Friedman es un clásico pragmático, que acepta durante cortos periodos de desconcierto de los agentes que llevan a la deflación, y eso aconseja durante un corto periodo una política expansiva del BC.

Keynes dice que los periodos de equilibrio con depresión y desempleo pueden ser prolongados, y que el BC no es omnipotente para arreglarlo. No dice que sea contra productivo (cosa que muchos keynesianos dicen) sino que es insuficiente.

En esta crisis los hechos ha apoyado más a Keynes que a Friedman. La politica monetaria expansiva, donde la ha habido, ha sido torpedeada por la política de austeridad fiscal; por lo menos en un sentido, se ha demostrado que la política de dejar los estabilizadores automáticos y contraer tan brutamente el déficit público hubiera ayudado a la política monetaria.

Pero la diferencia crucial entre unos y otros es la creencia en las fuerzas equilibradoras, que se basan, desde Say, al racionalismo de los agentes y al funcionamiento de los,mercados. La ley de Say garantiza la neutralidad del dinero, que quiere decir que no afecta a los precios relativos, que son los importantes. Los mercados se "conjuran" para volver al equilibrio a través de los ¡cantos de sirena" de las turbulencias monetarias, que mueven el nivel de precios, pero deja ver a su través los precios relativos y lo salarios relativos de equilibrio.

Hay un tipo de interés natural que equilibra el deseo de ahorro con la demanda de inversión, lo que hace que no haya saldos estériles de fondos sin usar a ese tipo natural.

La ley de Say es crucial en el equilibrio clásico. Sin ella, aún con el impulso de los agentes a ser racionales y aceptar el mejor precio para todos -el precio que vacía los mercados- sin ella, como digo, podría haber interrupciones u cortacircuitos entre distintos mercados que llevara a exceso de oferta y demanda no satisfechos que desviaran los precios de su nivel de equilibrio. Pero no mucho tiempo, porque las fuerzas equilibradoras son superiores a largo plazo, no hay, por lo tanto, movimientos acumulativos de caídas de producción y empleo.

Un lindo cuento de hadas. Su debilidad está en los espectaculares resultados que obtiene, pero en un mundo paralelo en el que domina el análisis normativo -cómo debería de ser- no el positivo - cómo es-.

¿Existe realmente esas fuerzas equilibradoras? Existen fuerzas, que a veces parecen comportarse en ese sentido. Pero Minsky dice que, cuanto más equilibrio aparente, más apetito por el riesgo se desarrolla, lo que empieza a desarrollar una afición creciente por la especulación. Pero es difícil valorar hasta que punto el desarrollo de un nuevo producto, el crecimiento constante, la ausencia de inflación y también de paro, es especulación o la explotación de una nueva fuente de riqueza que todos desean rozar.

Las fuerzas de la economía no son equilibradoras por sí mismas, sino que conllevan dentro ciclos que dan origen a fases de caídas acumulativas.

Con la ley de Say no hay posibilidad de ciclos si la oferta monetaria es constante. Las deflaciones son buenas porque ajustan el valor real de los saldos monetarios (Pigou). El nivel de precios se relaciona con los saldos monetarios, es el precio de esos saldos. Si el nivel de precios sube, el valor de los saldos baja, la demanda cae, los precios bajan hasta que los saldos reales vuelven a su valor original. Eso no perturba el ajuste de los precios relativos.

Por lo tanto, en una economía de trueque no hay ciclos. Hay cambios de suerte de unos y otros, debido a a choques tecnológicos. Es la visión de los clásicos, viejos y nuevos, una economía con dinero pero como si no existiera. Un dinero que hace su papel pero que nadie quiere. Es un "Velo" que permite ajustar los precios y vaciar los mercados, y luego de nuevo todos los días lo hace,

viernes, 16 de agosto de 2013

Sin solución

Hace seis meses hablaba de Hobbes en relación a la situación política española, tan podrida. Desde hace tantos meses, la situación, desde ese punto de vista, no ha hecho más que empeorar. Hobbes es el mayor teórico de la história sobre la justificación del Estado. Su vigencia actual se debe a su visión sobre la naturaleza humana, quizás exageradamente pesimista, pero, aún así, mucho más realista que cualquier ideólogo de hoy, de la derecha o de la izquierda. Hobbes explica la necesidad de un Estado para que la sociedad sea habitable. Aquí nos estamos quedando si Estado.

Hoy he comido con amigos y hemos comentado el tema. Conclusión: no hemos sabido ver una solución factible. No es que la clase política sea más corrupta que en otros países; es que cuando se llega al nivel de evidencia alcanzado, lo normal es que el gobiernos de turno se vaya. Seguramente en Francia, por poner un ejemplo, hay incluso más corrupción que aquí. Pero hay mecanismo que obligan al que se ha pillado en falta a ahuecar el ala.


Seguro que la mayoría de los españoles piensan así: lo que no piensan es que no hay mecanismos establecidos para poner colorado a un gobierno que ha cobrado sobresueldos de una red corrupción establecida por ellos, y, además, se ha llevado sl vapital remanente a paraísos fiscales (porque es difícil creer que el tal Bárcenas sea tan listo y su partido tan tonto como para haber escamoteado para sí mismo lo que se ha demostrado que tiene en cuentas bancarias foráneas).

Como el partido de la oposición también está pringado hasta las cachas de corrupción, la solución más sencilla y menos traumática sería la que yo llamo "a lo M. Thatcher": el grupo parlamentario del PP se reúne, decide "dimitir" al gobierno, convoca unos candidatos que quieran ser presidente, y elige a uno. Así fue como Thatcher fue desfenestrada y sustituida por John Major, en apenas unos días. John Major poco después se presentó a las elecciones y ganó por amplia mayoría.pr supuesto, todas las instituciones apoyaron esta solución rápida y eficaz.

Pensemos ahora si esto es posible aquí. Creo que el 99% opinaría que no. Sin embargo, sería mucho más sano, limpio y barato que convocar elecciones, que nadie va a ganar, y acabar en un gobierno de coalición que sumaría los huevos podridos de uno y otro partido. Pero el grupo parlamentario. ¿Qué es? Un sumiso grupo de indocumentados que dan vergüenza ajena que hayan llegado hasta ahí. Los veo, los oigo y me descompongo. Un parlamentario de hoy está muy por debajo de lo que fueron los parlamentarios de las Cortes Constituyentes, donde los indocumentados eran pocos y, de ellos, muchos tenían al menos una leyenda de lucha antifranquista.

Los gritos de indignación son estériles si no hay mecanismos de desinfección política, que no tiene que ser exhaustiva, sino que renueve la confianza en el nuevo gobierno. Si este gobierno pretende acabar su mandato como si nada hubiera pasado, lo que salga de las elecciones va a ser muy parecido al desgobierno.

Cuerpo a tierra

Ya tenemos en Egipto lo que buscaba Obama: una democracia a la americana. La manía de creer que lo  tuyo es perfecto y que si lo instalas en el mundo, éste será perfecto. No sé si fue un intento de demostrar a los Republicanos que se podía implantar la seguridad y la paz sin guerra, pero el resultado ha sido peor que catastrófico. Ahora se ha arrepentido, y está ayudando al gobierno militar, pero no le han gustado las matanzas, y empieza a hacer mohines de asco ante tanta sangre.
Mientras, Michelle, su encantadora y fascinante esposa, se dedica a hacer vídeos muy graciosos de mantener la forma, con un humor que te tronchas de risa.
No pasa nada, Egipto está muy lejos de la Casa Blanca. Más lejos aun está de Europa, y de España, como todo el mundo sabe. La baronesa de la Comisión, cuyo nombre no consigo recordar, se ha matado literalmente para imponer La Paz. Ha estado ahí las 24 horas al dia peleando con los Hermanos Musulmanes, y con el gobierno, pero nada, no han sabido apreciar sus desvelos.
Se predice una guerra civil. No lo creo, porque el ejército no parece dividido. El ejército es (o era) el dueño de la riqueza del país, y eso une mucho. Los HHMM son de armas tomar, pero a la larga no podrán con un ejército armado y que no quiere soltar el poder. Lo que sí es de temer es mucha sangre, porque unos son fanáticos y los otros saben cual es su objetivo.
Según nos cuenta el hijo de Vargas Llosa en el Mundo, el ejército de Mubarak era tan tonto que represaliaba a  los grupos sociales laicos y no a los HHMM, a los que cedió determinados servicios sociales. Yo es que no sé si existen esos grupos sociales laicos y liberales, que desean la democracia. Seguro que hay gente así, gente que ha viajado o ha estudiado fuera. A mi me parece que la presencia de los HHMM en esa sociedad pobre y oprimida es enorme, y queda poco huwco para poder mantenerse al margen de un poder militar omnímodo y la insidiosidad de los grupos islamistas.
Pero incluso muchos de los que estudian fuera, como sabemos, se convierten en los más islamistas.
En todo caso, esos grupos laicos van a quedar crujidos por la guerra entre unos y otros por el poder.
El que pueda, se irá fuera.
Como dice Enric González en El Mundo, muy buena jugada la de Obama hace dos años pisando el avispero. Quién le mandaría. El Nobel de la Paz. Cuando veas que se acerca un premio Nobel de la Paz, te conviene tirarte cuerpo a tierra. 

jueves, 15 de agosto de 2013

Flujos de ida y vuelta

En inglés de The Corner;


Over to Sober Look, here and here, these financial bloggers talk about the immediate future: the US economy appears set to keep recovering and growing, the deflation threat vanishes and the Federal Reserve will sooner than later stop injecting liquidity via its Quantitative Easing programme–buying sovereign debt and creating money as a result.
There are signs that the markets have already discounted the US central bank, the Fed, turning the cash tap off. The yields investor demand from 10-year US bonds have reached over 2.7%, far from the 1.6% bar where they were before the Fed began to suggest a change of policy
Treasuries’ yields during the week.

The Fed’s monetary programme has had an inevitable effect on emerging economies, which were the most to benefit during the crisis and have showed tensions or capital outflows before than anyone else. Also, as a proof of further stress, the price of national currencies have been hit in Brazil, Turkey and others. Investors now dump their excess of bond holdings and as a consequence push exchange interest rates down.
Yet, here in Europe we are enjoying a good time. Risk premiums have fallen, and with them, the cost of credit. One reason for this could be that investors are leaving emerging markets and coming into European funds. But, although it has been an unexpected move to certain extent, those who have already celebrated the euro comeback might be deluding themselves: investor confidence has changed gear because European peripheral risk at this point looks safer than, let’s say, Brazil’s. These alterations in capital flow directions often are mysterious and are always susceptible to be influenced by geopolitics and even the weather, rather than actual improvements in economic fundamentals.
The environment has undoubtedly become rosier for the European Union. But the true motive is out there, it’s an external factor rather than the consolidation of an eventual recovery. What is clear is that we should take as much advantage as possible to accelerate our efforts to grow.



En Sober Look, aquí y aquí, nos hablan del futuro de inmediato. El futuro inmediato, por lo que die en el primer post citado, esta escrito: la economía americana sigue creciendo, las probabilidades de deflación se esfuman, u por lo tanto la FRd dará fin a su peogranma de QE pronto.

Hay signos de que el mercado ya ha descontado ese frenazo, pues los rendimientos de los bonos del Tesoreo a 10 años se han instalado en un margen entre 2,65% y 2,7%, muy lejos del 1,6% en el que estaban antes de que la la FED empezara a sembrar dudas.

Rendimientos bonos del Tesoro en la semana
En el segundo post, nos hablan del ineludible efecto que esto ha tenido en los países emergentes, que son los mayores beneficiariarios de la laxitud de la FED durante la crisis, y los primeros en mostrar tensiones - es decir, salida de capitales- a la primera señal de fin de la relajación monetaria. La primera y continúa señal de stress ha sido la aguda e precisión de las monedas de países como Brasil, Turquía, u otros países emergentes, como pueden ver en los gráficos del post citado. Los inversores se cubren contra un encarecimiento del dinero vendiendo los excesos de bonos de esos países, lo cual presiona a la baja sus tipos de cambio.

En Europa, sin embargo, estamos viviendo mejores días. Los bonos han subido y las primas de riesgo ha bajado. Es posible que ambas cosas estén relacionadas, y que los movimientos de salida de esos países se estén traduciendo en unas entradas considerables de fondos en los países europeos. De ahí la mejora de lao mercados de deuda europeos.

Esto no creo que haya de interpretarse como una reflotación definitiva del euro. Sin embargo, hay que reconocer que no se esperaba. Los mercados han reestimado el riesgo comparado entre una colocación en Barsil y España o Italia, y han preferido esto último. Estos cambios de preferencias y de flujos migratorios son misteriosos, tanto en un sentido como en otro; en todo caso, van a relajar las tensiones en el euro, aunque, por mucho que diga el gobierno, no se debe a un renacer de la confianza en él, sino a factores exógenos que no domina, pero que le vienen muy bien, como la subida del rendimiento de la deuda alemana (¿por qué?), que aporta mucho mas de la mitad de la reducción de la prima de riesgo.

Siempre se quieren explicar estos flujos y reflujos en base a fundamentos, pero la verdad es que no es fácil. La importancia de la política monetaria está ahí, por mucho que los fundamentalistas la quieran negar. Ahora se empeñan en UE el futuro de esas regiones es rosáceo, porque si tal o cual fundamentó se ha consolidado. Y la verdad es que lo que ha cambiado, y bastante definitivamente, es las expectativas sobre la FED.



Breve ensayo sobre la razón

No somos racionales. Una mitad de nuestro cerebro es, afortunadamente, emocional. La felicidad no viene de la razón, sino de la parte emocional. La razón no es más que un mecanismo imperfecto que no ayuda a sobrevivir.

Durante siglos, la filosofía occidental entronizó la razón, desde Platón a su apogeo, que fue la Ilustración francesa en el siglo XVIII. Entonces se decidió que todo podría ser gobernado por la razón, podía modular se una sociedad perfecta porque el hombre es racional. Y con la razón rodó problema es soluble y todo conflicto diluible. Lo único que impide alcanzar esa sociedad perfecta es el oscurantismo de la religiones y las falsas creencias, que podían ser fácilmente desmontadas aplicando la razón.

Descartes fue el gran propagador de la razón como suprema faceta del hombre. Newton, con su modelo cósmico de la ley de equilibrio en el universo, deslumbró a los filósofos de la siguiente generación, los Ilustrados. Ñes hizo creer que la sociedad podría modelizarse asii. Hubo sin embargo dos tipos de Ilustración: la británica, mucho más analítica y escéptica sobre las capacidades de la razón (Hume fue el paradigma de esta rama, con su escepticismo sobre la existencia real de la relación causal, que no era para él más que la observación de dos hechos seguidos), y la francesa, mucho más propagandística, política, y constructivista, como decía Hayek.

Las peleas y final ruptura entre Hume y Rousseau son el paradigma de esa distancia entre ambas ilustraciones, una pragmática y que delimitó el alcance de la razón, y otra implacable contra todo lo que no fuera de origen racional.

Esa entronización de la razón fue lo que acunó los movimientos sociales del siglo XVIII, hasta el estallido la Revolución Francesa, cuyo desarrollo demostró que el márchamo racional servía para cualquier delirio sangriento. Un siglo antes, Inglaterra había solucionado sus problemas políticos con un cambio de dinastía que había sido el comienzo de una prosperidad y de un desarrollo que se etiquetó por la historia como la primera "Revolución Industrial". La base había sido la liberalización de la empresa privada, hasta entonces dependiente de una licencia real a cambio de dinero.

Leyendo a Acemoglu (El origen de la riqueza y la pobreza...), y también a Nial Ferguson (Imperio Birtwnico), que aporta detalles importantes, se comprende el gran salto económico que dio Inglaterra desde 1688, cuando se fugó Jacobo, y fue sustituido por Guillermo de Orange. Si hay un ejemplo de "Bandido inteligente" (Mancur Olson) que se da cuenta que le conviene que sus súbditos sean libres porque la recaudación fiscal será mayor, ese es sin duda ese príncipe transplantado de Holanda a Inglaterra.

También se dio cuenta de que los réditos coloniales, que hasta entonces había monopolizado su Holanda natal, serían mucho más jugosos si ambos países se fusionaban: se fusionaron la compañías de ambos naciones que explotaban el comercio con las indias, y desde entonces la de Inglaterra se benefició de una mayor sabiduría y experiencia empresarial, lo que la hizo crecer. Pocas décadas después, fue Inglaterra la que dominaba todo el tráfico con la India.

Liberalismo y domino marítimo, fuerza e inteligencia, en contra de lo que creen los pazguatos liberales, que sólo sueñan con una humanidad que dejas suelta y se pone cortésmente a comerciar. El componente militar es una segunda pata muchas veces olvidada, porque sin él no hubiera habido Imperio. Eso sí, Inglaterra prefirió la astucia a el heroísmo, enfrentando a las tribus rivales y apoyando a la que más le convenía.

La libertad de comercio sólo es posible bajo la protección militar.

Mientras la Revolucion Francesa se ahogaba en su propia sangre, hasta que llegó Napoleón, Inglaterra dominó el mundo. Sabía muy bien como utilizar la razón a su favor. Napoleón se lo puso difícil, pero una vez liquidado, ya nada pudo parar la expansión del mayor imperio de la historia.

La Razón como paradigma filosófico sufrió un duro revés en el XIX, siglo de reflujo y de hastío de tanta sinrazón razonada. Siempre se había creído que había una conexión, o bien divina, o bien natural, entre la razón y la naturaleza. Kant, que partía de Hume, desmonto esa creencia como indemostrable, pues nosotros tenemos un raciocinio condicionado a priori: no vemos las cosas como son, sino como las podemos ver, en las coordenadas espacio temporales de nuestro cerebro. Lo que cremosa que es objetivo no es más que nuestra subjetividad inevitable de cómo nos llega al cerebro el mundo exterior. Disponemos de filtros por los que nos llega el mundo exterior, que condicionan el "fenómeno" que percibimos. Nunca alcanzamos "la cosa en sí".

"El mundo es nuestra representación", dijo Shopenhauer, dando la definitiva vuelta a la jerarquía platónica, Razón-Voluntad. El mundo es lo que percibimos que es el mundo, que no está gobernado por la razón ni por nada: es un mundo caótico y absurdo en el que domina una fuerza ciega a la que llama Voluntad, y la razón no es más que la sirvienta de esa voluntad, que nos ayuda a conseguir sus fines. La máxima expresión de esa voluntad es el deseo. La fuerza real que mueve al mundo, aunque luego nos engañemos con razonamientos a posteriori que nos muestran un mundo más coherente y sólido que lo que es en realidad.

Shopenhauer fue el predecesor de Freud, el primero en decir que la vida era un absurdo sin sentido teleologico alguno.

El escepticismo naciente trajo varias cosas, algunas positivas. Por ejemplo, Popper, que demostró que para alcanzar la verdad era necesario seguir una disciplina, como hacen las ciencias exactas, de formular hipótesis contrastables con los hechos. La razón por sí sola no es nada, es engañosa, si su argumentación lógica no se ve corroborada por los hechos. Por eso el científico veraz es humilde, formula sus conjeturas de la manera más clara posible, y lo hace de manera que puedan ser refutadas por otros. Lo definitivo no es que la hipótesis sea confirmada, sino que pueda ser refutada. Si no lo es, esa hipótesis explicativa de un fenómeno estará vigente hasta que llegue otra más potente en su capacidad explicativa.

En su "La sociedad abierta y sus enemigos" (libro de crucial indluencia en todo el siglo XX), Popper propone una sociedad en la que las decisiones políticas se basen en ese método de conocimiento, de argumento y refutación, sociedad , obviamente, que no se ha visto consolidarase.

La razón depende de una cultura, de unas creencias sociales compartidas. Cuando hay un consenso dilatado en esas creencias, la sociedad es estable y próspera (no creo que haya estabilidad sin prosperidad). Eso consenso no se refiere a las distintas ramificaciones de la razón, como la científica, la filosófica, etc. Se refiere a un consenso básico credencial que nadie pone en cuestión.

Cuando no es así, la razón se fracciona en mil y un orígenes distintos, y la sociedad se tensa. Estamos en un momento incierto en que la gente se siente desorientada, se rompe el sutil pero frágil consenso que sostenía todo el entramado social. Estallan conflictos que nadie es capaz de sofocar. Si se fija uno, se ve la conexión entre esos conflictos aparentemente distintos en varias partes del globo. Es el vacío social que los enlaza a todos. La gente en la mayor parte de mundo se ha quedado sin futuro, y eso produce una angustia colectiva indominable.

miércoles, 14 de agosto de 2013

Monetización o Default

Les recomiendo el artículo de Evans-Prichard sobre Japón. La deuda de Japón llega al 240% del PIB. Es impensable que esa deuda se pague. ¿Cuál es la política del gobierno de Abe? Que el Banco de Japón se coma esa deuda: una política de "represión" de deuda, que la monetice, aunque el actual gobernador del BoJ se niega a usar esa expresión.

Pero no hay otra expresión. Es más no hay otra salida.

Los gráficos que ofrece E-P, que son de BNP Paribas, explican muy bien la situación y la política de Abe.

En el de arriba, se ve còmo el BoJ ha empezado a comprar deuda desde que llegó Abe u la trayectoria si sigue con esa política.

En el segundo, cómo se reducirá la deuda en % de PIB según cuanto aumente la inflación, suponiendo u tipo de interés a largo plazo del 2%. (El tipo de interés actual a 10 años es del 0,7%.)

Un 1% de inflación llevaría la deuda al 280% de PIB en 2030.


Un 5% de inflación reduciría la deuda al 160% de PIB en esa fecha.

¿Hay un coste? Claro que lo hay: una redistribución de riqueza de los acreedores a los deudores. Aquellos son lo que detentan la deuda; estos son los japoneses en general. (La deuda de Japón es principalmente interna.) pero también es una liberación para las futuras generaciones.

"Is there a cost to this? Sure. It is an internal redistribution of wealth within Japanese society from creditors to debtors (debtors in this case being the state). It is an inter-generational transfer. Those retiring in five, ten, or fifteen years will be poorer: but the burden on those who are now young children will be less onerous."

¿Puede sostenerse durante mucho tiempo está "compresión" de la đeuda? No es probable que el mercados de bonos se despierte y exija mayores tipo de interés a medida que aumenta la inflación?

Las respuesta de E-P es:

"Probably, yes. But what is absolutely certain is that Japan was heading for an almighty smash-up under the old BoJ policy of deflation, paralysis, and broken will. High debts and deflation are a calamitous mix.

Japan has to pick its poison. Abenomics is surely the sweeter brew."

No pierdan de vista lo que pasa en Japón. Primero, cualquier fracaso de esa estrategia llevaría al hundimiento total del país. Segundo, observen que el dilema es entre monetizar a deuda, o ejecutar un Default. Los países del euro se parecen levemente a Japón, sus deudas no son tan elevadas, de momento. Tampoco lo era la japonesa hace 10 años: tenian una deuda/PIB como la de algunos paises europeos ahora. La deuda aumenta principalmente por falta de crecimiento. A partir de una deuda PIB, dilema: monetización o default.

 

Vocación de servicio público

Federico Jiménez Losantos en su blog, resume el caso Bárcenas-Rajoy en un titular:

"Cuantiosos fondos procedentes de comisiones vinculadas a adjudicaciones públicas que Luis Bárcenas habría depositado en cuentas bancarias situadas en Suiza."

Así es, exactamente. No puede ser otra cosa, diga lo que diga el fiel y servil esclavo Federico Quevedo, que ve así la cosa:

La conspiración pincha en hueso

Tengo que reconocer que la obsesión casi enfermiza que prodigan el diario El Mundo y su director, Pedro J. Ramírez, por Rajoy tiene también su mérito. Es difícil encontrar un día detrás de otro una mentira a la que agarrarse para poner en entredicho la palabra del presidente del Gobierno, pero ellos lo hacen con una enorme profesionalidad. En ese punto eran importantes ayer las declaraciones de dos exsecretarios generales del PP, Francisco Álvarez Cascos y Javier Arenas, ante el juez Pablo Ruz, porque de las mismas podían confirmarse o desmentirse definitivamente muchas de las insidias que durante este tiempo se han ido divulgando sin el menor pudor por parte de determinados medios de comunicacion y por la oposición que les sigue el juego.

Con un par. Un par de ojos cegados por la pasión, es lo que quiero decir. La pasión nos ciega, y a son Federico le ciega su amor incontinente por el PP. Los suyos, sus hordas. ¡Qué buen Escudero si buen señor hubiera!

Yo creo que es un dilema de probabilidades e improbabilidades.

Es improbable que los millones que escondía Barcenas en numerosos bancos fueran suyos, hurtados al PP. Muy improbable. Es más probable que sean los "Fondos de Pensiones" de toda la basca del PP. Lo que debería hacer el juez es indagar el "Origen y aplicación de fondos" como se dice en contabilidad.

Don FJL hace un resumen muy plausible. Son fondos de sobornos por concesiones de obras a empresarios amigos. Esos fondos pagaban sobre sueldos - eso está archiprobado, señor Quevedo-, pero el resto se "aplicaba" a cuentas bancarias ocultas. Y no es probable que Bárcenas sea el único propietario, por muy bien que se le diera la sisa. Menudo monstruo de maldad, a la par que menudos gilipollas que nos gobiernan, si eso fuera así. Pero las tiernas relaciones de Rajoy con Bercenas y su esposa desvelan que no, que no podría ser así.

Así la cosas -en términos de probabilidades- ya es muy dudoso que está basca nos gobernara con alguna vocación de servicio público. Ante esas reservas para cuando se fueran de la política, es difícil creerles en que tuvieran alguna vocación noble. Y menos ahora, que están cercados, acorralados, y su única vocación es salvar el pellejo como sea, mintiendo, sobornando, removiendo policías, intentando remover jueces, etc.

Por eso no pueden estar ni un minuto más detentando las palancas del poder. Todo tiene un límite. A mi me preocupa antes que nada la estabilidad. Pero la estabilidad difícil se puede defender con lo que sabemos ya de esta pandilla. Y lo malo es que no se salva ni uno.

Lo divertido del caso es que los perrillos que más ladran defendiendo a sus amos no han cobrado probablemente. Pero son los que más cerriles se muestran, como Federico Quevedo.

martes, 13 de agosto de 2013

¿Qué hubiera dicho Milton Friedman hoy del euro?

No se sabe muy bien por qué, en los blogs económicos ha habido una gran concentración de interés en torno a la vigencia de Friedman. El último, Mark Toma, aquí.

Ya dije que el más atinado para mi gusto fue el post de Krugman, Más que nada porque resumía muy bien a Friedman y lo que él considera sus límites (Sus límites son la falta de respuesta a laTrampa de la Liquidez). El más irrespetuoso creo que es el de Glasner (quizás el que lanzó la primera piedra en esta oleada de debates sobre Milton Friedman).

Bueno, pero eso no son más que "cotilleos" de segundo orden. Lo importante es si Friedman hubiera aprobado como suficiente lo que ha hecho Bernanke y qué hubiera dicho de la situación de euro. Aquí nos tropezamos con un problema: en EEUU, según los más acérrimos defensores de Friedmam (los Merket Monetarists), lo que ha hecho la FED no se puede considerar suficientemente Friedmaniano, pues no se ha logrado que el PIBN crezca a su mágica tasa del 5%.

Hay que decir que Friedman nunca se refirió a una regla monetaria que fuera el PIBN (el becerro de oro idolatrado por esta "escuela"), por lo que es difícil fijar posiciones. Lo que si es verdad, es que Friedman hubiera apoyado el QE de Bernanke, aunque, ¡ojo! No sabemos hasta qué punto. Lo que no hubiera desaprobado es la política fiscal contractiva impuesta por los republicanos. Él era sobre todo defensor de la política monetaria suficiente, y odiaba la política fiscal: olía al azufre keynesiano.

Pero hay matices que se han revelado en esta crisis que no sabemos qué posición le habrían hecho tomar. Por ejemplo, su famosos artículo (citado aqui millones de veces), sobre Japón, no hace ninguna alusión al problema bancario, que fue determinante en el hundimiento de Japón. Según Friedman, era suficiente que el BoJ comprara bonos públicos en el mercado para revivir la economía (el título era: "Reviving Japan"). Para los keynesianos esa palabra -suficiente- es lo que les diferencia del monetarismo: el BC no puede hacer nada cuando se alcanza la Trampa de la Liquidez (sobre eso, recomiendo la lectura del post de Krugman citado. El BC no es suficiente porque tiene que convencer a los agentes de que va a ser heterodoxo, un gamberro monetario, lo que con el Banco de Japón es difícil. Además, Krugman, ya en 1998, sí hace alusión al problema bancario como canalizados de la política monetaria).

Tampoco sabemos lo que hubiera recomendado para el Euro, aunque había predicho que no iba a funcionar bien, basándose en la Teoría e la Areas Monetarias Optimas. Pero una vez ante los hechos, que han desvelado problemas que nadie preveía - uno de los cuales es la debilidad de la banca- no creo que haya nadie que sepa qué hubiera pensado. Según los MM, hubiera aconsejado que el BCE fijara un objetivo de crecimiento para el PIBN de la zona, ¿pero qué significa el PIBN de la zona? Una vez le pregunté a Scott Sumner, el Pope del movimiento, si no era relevante que la velocidad de circulación fuera tan diferente en los países del euro. Me dijo que no. Me temo que estos piensan en el euro de manera bastante simplista. Friedman creo que lo hubiera tomado como un signo de que dichos países no tiene un unidad de mercado, y que por lo tanto, faltan las condiciones para la plena eficacia de la política monetaria.

La velocidad de circulación es clave para la eficacia de la política monetaria. Desde luego, un objetivo en forma de una tasa de aumento anual del PIBN puede dar lugar a excesos de crecimiento en el Norte que no se traduzca en mayores inversiones en el Sur. Yeso es lo que hemos visto hasta ahora, que pese al creciente crédito de Alemania sobre nosotros, no se traduce en inversiones hacia lao países necesitados.

En todo caso, si cruzamos la opiniones escépticas de Friedman sobre el euro con su posición monetaria, no creo que su respuesta fuera tan simple como que el BCE expandiera sus activos y emitiera dinero. No creo, al menos, que lo considerara suficiente.

En otras palabras, creo que los MM simplifican excesivamente a MF y de paso le traicionan.

Ahora bien, yendo al núcleo de la cuestión, ¿es suficiente la respuesta monetaria a los profundos destrozos de la crisis? Yo creo que la respuesta es no. Una prueba indirecta es que nos podemos preguntar ¿qué hubiera pasado si Bernanke no se involucra en salvar al sistema financiero del colapso que hubiera arrastrado a todo el mundo? En eso hay un consenso: hubo muchos fallos e improvisaciones, pero el resultado rozó el óptimo. Se salvó una crisis financiera que hubiera arrastrado al mundo, y con un coste desdeñable para el contribuyente USA. Una cosa que no ha aprendido Europa, que por cicatear dinero, ha amplificado el problema hasta el punto de ser casi inabordable, o sin casi.

Naturalmente, seguimos sin saber con certeza lo que MF hubiera diagnosticado hoy de la situación de los países del euro. Pero creo que podemos razonablemente saber lo que no hubiera dicho. No creo que considerara suficiente la acción monetaria el BCE, para países tan divergentes y sin un verdadero mercado común en servicios clave como el Trabajo. Hubiera apoyado - eso seguro- las reformas liberalizadoras, pero se hubiera mantenido exceptivo sobre la unificación del mercado de trabajo ante las barreras culturales que la frenan. Ante la propuesta reciente de rebajar los salarios en España un 10%, creo que hubiera recurrido a su artículo de 1953 "The case de Flexible Exchange rate", este sí de plena vigencia actual. Hubiera dicho: si quieren que los salarios se ajusten, devalúen, es la única forma.

lunes, 12 de agosto de 2013

Puto-phone

Mañana dejo Berlín y vuelvo a Madrid. Una cosa que se me había escapado, es que aquí los jóvenes y las "jóvenas" no está todo el puto día ensimismado en el móvil. ¿Qué hacen? Pues hablan entre ellos, aparte de hacer otras cosas juntos. Juro que no he visto esa escena tan común en nuestro decadente país de grupitos de jóvenes o jóvenas o ambos ensimismados en el puto-phone.

Hace como un mes escribí en "El futuro" un artículo sobre cosas que me crispaban. Una era esa obsesión con el cacharrín pegado a las narices. Decía entonces:

"La tecnología cambia hábitos. Una estampa. Hoy, tomando el aperitivo en un chiringuito. Llega una familia -él, ella- yo lo que parecen cinco hijos, todos adultos, es decir, mayores de dieciocho. Entre esa edad y digamos treintaitantos.

"Se sientan. Piden de comer, e, inmediatamente, cada uno de los hijos sacan su phone y se ponen, ceñudamente, con enorme aplicación, a mirar fijamente cada uno su aparato, como los monos cuando se escarban la pulgas. Lo de los monos he de decir que me surge de que van todos los cinco medio vestidos, con camisetas de tirantes, es decir, el sobaco al aire y no depilado, bien peludo, por el contrario.

"Una escena habitual, me dirán Uds. Yo estoy hasta los mismísimos de verla en variadas circunstancias: playa, barrio, parada del autobús, metro, taxi, tren, etc.

"Me llaman la atención dos cosas: la pérdida de la estética (sobacos peludos al aire, barbas sucias, cabello mal arreglado, no arreglado, arreglado mal, o yo qué sé... Por supuesto, pantalón corto) y la pérdida total de la comunicación directa con el entorno. Esto es literal: les da igual el sitio, la comida, que más bien parecen circunstancias transitorias, lo que les importa es el silencio de los demás que les permita meterse en faena, escarbar la pulgas al aparato que se consideró un día una aportación tecnológica increíble a la humanidad. Y lo es, sin duda."

Bueno, pues esto no le he visto en Berlín, ni poco ni mucho ni nada. Gran error mío pensar que era generacional y global. Pues no: aquí se divierten de otra forma. No tengo una teoría al respecto. ¿No conocen en Berlín los últimos avances electrónicos? Puede. ¿Será que aquí los jóvenes y jóvenas son más independientes de la publicidad? ¿ o es más bien que tiene que aguantar menos a sus padres, siendo su presencia lo que fuerza que los nuestros se sumerjan en el puto-phone? puede ser. Puede ser que nuestros jóvenes y jóvenas sean tan dependientes económicamente de sus padres que son ellos los que les pagan el vicio-phone, y tienen que demostrarles que les gusta. Por supuesto, aquí hablan y quedan por móvil: yo lo he visto: es decir, hablan, no están embobados con el puto whatassap, tuiter o FB. Ni siquiera en el metro o autobús.

¿O será una cuestión de costes? Puede. Aquí son muy ahorrativos, ya lo he dicho. Allí, como pagan los papás...

No sé, me desconcierta mucho. Resulta que no somos todos iguales. Es decir, en España somos todos iguales, ensimismados en nuestra mismidad telefónica, y aquí son tan borricos que no saben lo que es eso. Pues la verdad, parecen más espabilados y felices, pero a lo mejor me equivoco, no quiero poner mi mano en el fuego.

La devaluación competitiva

El otro día se me escapó un gazapo. Decía que ahora los ajustes que no se han hecho vía devaluación (que se han intentado hacer vía desinflación interna) tendrían que ser mucho mayores que hace cinco años. Es decir, que en cinco años han empeorado las cosas; que las mejoras son ficticias; que una devaluación entonces del 20% sería ahora totalmente insuficiente...

¿Cómo puede ser ésto con las aparentes mejoras que se han paladeado cual champán catalán del bueno? ¿No son las exportaciones y el saldo exterior mejores, y no es eso a lo que más afecta el tipo de cambio? Si las exportaciones e importaciones van mejor, entonces habrá que devaluar menos no?

Pues no. Siento discrepar, pero no. La desinflación intena no ha funcionado. Para que funcionara, tendría que ser continúa, pues una vez alcanzado un nivel de competitividad, hay que ir a por otro. ¿Por qué? Porque los competidores no se paran a esperarnos. Ni China, ni Alemania ni EEUU, no Japón, ningún país emergente, se para a contemplar cómo los países del sur de Europa siguen con su penosa desinflación interna competitiva. Ellos sigue a su rollo, que es exportar, y una veces se ayudan del tipo de cambio y otras no.

Por lo tanto, ellos tienen un instrumento más eficaz y rápido que nosotros, además, por supuesto, de que eso les ayuda en su estabilización interna.

¿Por que creen que los locos que nos gobiernan de verdad dicen que tenemos que reducir los salarios un 10% de golpe? Porque el duro camino seguido hasta ahora, de reducción salarial, no ha sido es suficiente por lo que he dicho: lo de demás países del mundo tienen un grado más de libertad, un grado muy importante, que es un Banco Central y un tipo de cambio.

¿Y por qué ha sido insuficiente? La desinflación competitiva baja a la vez los salarios nominales y las rentas de todos, trabajadores y empresarios. El aparente éxito reposa en una caída brutal de la emanada interna, que contrae las importaciones. Es es el aparente éxito de la mejora del saldo exterior. Algunos sectores exportadores consiguen aumentar el margen de explotación gracias a los menores salarios, pero la contrapartida es un aviada e importaciones que refleja una caída del consumo y de la inversión. Por eso estamo ahora con un PIB inferior al que se alcanzó en lo peor de la crisis.

En otras palabras, el ajuste parcial que se ha conseguido ha sido principalmente de cantidades, de cantidades de demanda interna que se han derrumbado. No ha sido un ajuste vía precios, de abaratamiento exterior de las exportaciones y encarecimiento de la importaciones -lo que podríamos llamar un ajuste fino y rápido- si un ajuste a martillazos.

Pero hay más, y más importante. El tipo de cambio es una variable financiera. No sólo modula y equilibra los precios internos y externos. Determina el precio del capital interno para los inversores extranjeros. Y hoy, un euro depositado en España. Grecia, o Chipre, no es lo mismo que un euro depositado en Alemania.

Además de las exportaciones e importaciones, el tipo de cambio es función de la tasa de paro, como demostró la crisis del SME en 1992-3. Entonces escribí un artículos en el BdE sobre la ineludible influencia del paro en la debilidad del tipo de cambio siguiendo los trabajos del canadiense Williamson. Pero es perfectamente intuitivo: cuanto más paro hay, menos fuerza tiene el gobierno y el BC para defender la paridad subiendo los tipos de interés internos.


Es decir, financieramente, tenemos una riqueza nacional denominada en euros, pero eso no inspira una confianza cerrada. Porque el euro español tiene un riesgo de dejar de ser euro. Y más cuando ya se sabe que en caso de quiebra de un Banco, los desperdicios los pagarán parte de los depositantes. Es decir, es difícil depositar la nómina de la empresa o su cuenta de explotación en un banco español, si éste, caso de ser rescatado, se tragaría esa cuenta.

El euro no es igual en Alemania que en cualquier país de Sur de Europa. Por una parte, no se confía en el euro de, digamos, Grecia, o España, pero por otra parte no se le deja devaluar, que es lo que se hace con una moneda en la que no se confía: se la cambia de precio, se rebaja éste, para que vuelva a ser interesante tenerlo y comprar con ella.

Esta rigidez del euro que está en su constitución conlleva un riesgo mayor que el de devaluación, pues ésta es por definición imposible: el riesgo de ruptura. El riesgos se que, por falta de mercado de lao,diferentes euros que en realidad hay, en vez de graduar el ajuste con un cambio de precio quiebre un país, y otros en cadena,pr incapacidad de pago: es decir, por quiebra. Esto ya ha pasado en los países rescatados. Si no lo fueran, hubieran suspendido pagos.

Y por lo que cuenta el artículo del Spiegel, Alemania no está haciendo lo suficiente para no llegar al límite del Armaggedon.

Por eso creo que la devaluación que fuera suficiente hace cinco años sería hoy ridícula.

domingo, 11 de agosto de 2013

Rand, Hayek, Friedman, Krugman y el liquidacionismo

En Krugman, varios artículos a cual más sabroso sobre Friedman, la Trampa de la Liquidez, y si Friedmam es asimilable por los republicanos de hoy, es decir, Rand Paul Ryand a la cabeza. Se ríe Krugman porque Ryand Rand dice que Friedman no es Austriaco, pero que es una pena que esté muerto, porque podria haber sido candidato a la FED por un gobierno republicano. Krugman dice que no sabe Ryan Rand hasta que punto Friedman no era austriaco ("But I’ll bet he had no idea about the extent to which Friedman really, really wasn’t an Austrian.")
En todo caso, Paul Ryan Rand Paul da escalofríos en su entrevista para Bloomberg, de la que cito:

You’re a big reader of Austrian economists such as Friedrich Hayek and Ludwig von Mises, who don’t believe in stimulus and say the economy can return to health only through austerity.
You can stimulate prosperity by leaving more money in the hands of those who earn it. If you want to stimulate the economy in Louisville, leave more money in Louisville and send less to Washington. My plan has a 17 percent flat tax with very few deductions, and it would leave $600 billion in the economy. But it would work better than a government stimulus because of the Milton Friedman proposition that nobody spends somebody else’s money as wisely as they spend their own. I think you’d have a boom like you’ve never seen in this country.
Who would your ideal Fed chairman be?
Hayek would be good, but he’s deceased.
Nondead Fed chairman.
Friedman would probably be pretty good, too, and he’s not an Austrian, but he would be better than what we have.
Dead, too.
Yeah. Let’s just go with dead, because then you probably really wouldn’t have much of a functioning Federal Reserve.
Krugman cita un párrafo de Friedman, del que resulta difícil asimilarle como austérico (o austérico). Y luego se refiere a algunos intentos de separar a Hayek de los liquidacionistas, lo que es aún más chusco, claro. Es verdad que hay un texto por ahí, que cité en este post, en el que Hayek se refiere a la Gran Drepresión como un no liquidacionista, pero tampoco es muy convincente; además, es muy a posteriori de los hechos.
Y desde luego, desde una postura, en el momento de la crisis, como la que cita Krugman, es la fetén de la teoría del Ciclo Austríaco,

And, if we pass from the moment of actual crisis to the situation in the following depression, it is still more difficult to see what lasting good effects can come from credit expansion. The thing which is needed to secure healthy conditions is the most speedy and complete adaptation possible of the structure of production to the proportion between the demand for consumers’ goods and the demand for producers’ goods as determined by voluntary saving and spending. If the proportion as determined by the voluntary decisions of individuals is distorted by the creation of artificial demand, it must mean that part of the available resources is again led into a wrong direction and a definite and lasting adjustment is again postponed. And, even if the absorption of the unemployed resources were to be quickened in this way, it would only mean that the seed would already be sown for new disturbances and new crises. The only way permanently to “mobilize” all available resources is, therefore, not to use artificial stimulants—whether during a crisis or thereafter—but to leave it to time to effect a permanent cure by the slow process of adapting the structure of production to the means available for capital purposes. (10) And so, at the end of our analysis, we arrive at results which only confirm the old truth that we may perhaps prevent a crisis by checking expansion in time, but that we can do nothing to get out of it before its natural end, once it has come.
En la que lo importante es la proposición de bienes de inversión en relación a su estructura temporal, y a los bienes de consumo, teoria que nadie ha comprado nada más que dentro del estrecho círculo austriaco, y de la que se deduce indubitablemente el liquidacionismo. Como dice Krugman,
If that’s not liquidationism, I’ll eat my structure of production.
Por cierto, esta extraña teoría no sé como se puede encajar con el marginalismo, en el que al menos Hayek se encuadra. Pero esta habilidad de saltar de un marco conceptual al vacío cuando les pete es propio de los austriacos. Son tan arbitrarios como un mono de la selva, y como ellos se traicionan a sí mismos.

Un domingo en Berlín

Aquí, en Der Spiegel, un artículo muy crítico sobre Alemania y el euro (gracias a Pablo Bastida). Muy buen artículo, con gran objetividad, sobre las responsabilidades que elude sistemáticamente Alemania.

Es una pena que la política no esté a la altura del pueblo llano. Hoy he pasado un domingo excelente en Berlín. Berlín, con buen tiempo y una bicicleta, es una ciudad increíblemente poco urbanita, como si estuviera hecha para goce único de las familias y demás bichos en perfecta armonía. Berlín está lleno de barrios tranquilos, llenos de parquecitos, de casas de tres a cuatro pisos, en los que apenas pasa un coche de vez en cuando. Es como si dieran la espalda a ese centro político tan contundente como feúcho del que les hablé hace poco.

Con una bici todo está a mano. En un parque desgalichado (como casi todo aquí) se celebra un mercadillo en el que se mezclan gentes de toda Europa. Oigo hablar español, italiano, inglés y francés, aparte de alemán, claro. Algo de ruso también me parece que se oye. Como todos los mercadillos, hay poco que comprar barato, pero la mezcolanza de tanta gente relajada, dominguera, sin prisa, es una incitación a dejarse llevar. Una mujer argentina expresa perfectamente lo que se siente: "y ahora, hay que ir a casa a comer, ¡jódete!"

Nosotros no tenemos que ir a casa. Nos vamos a otro parque, este más pequeño, de una manzana, rodeado de casas envidiables por su posición frente al jardín arbolado. Aquí se respira más tranquilidad aún. Me dedico a ver jugar a un niño con su padre a tirarse el disco. La madre, a pocos metros, está sentada el el césped, ensimismada en la lectura de un libro. Se ha colocado al sol en esa postura que sólo la mujeres pueden tomar: de lado, como una "écuillère" en su caballo, o como la sirenita de Copenhage, con la espalda inverosímilmente recta. El pelo cobrizo le cae por la nuca hacia un lado. Lleva un vestido cómodo, amplio, con los hombros al aire y las piernas en medias de las que llamo de celosía.

Nunca verás a un hombre leer así. Es cosa de mujeres, una de tantas cosas que hacen parte de su encanto. En esa postura, con la espalda recta, lee. Está concentrada. El niño intenta hacerle una foto, pero ella ni se inmuta. Una vez se pasa el dorso de la mano por la boca y la barbilla, con esa manera inverosímil que tiene ellas de hacerlo cuando un cabello se les suelta y les hace cosquillas. Lo hace sin dejar de leer, sosteniendo el libro en la otra mano, ensimismada. Mientras, el niño y su padre se paran a ver si ella les mira. Pero está concentrada. Los tres hacen una estampa dominguera perfecta. Mi curiosidad insaciable me incita a no perderla de vista; espero a que se levante a ver si de pie es digna de la figura que tan grácilmente ha compuesto

No. De pie pierde mucho. Pero no creo que haya muchas que lean tan grácilmente sentadas en el césped de un parque. Se van los tres. Nosotros también: ya es hora de comer.

Vamos a comer en una de tantas terrazas, miles, que hay en esta ciudad. Siempre hay una a mano. Es casi lujurioso sentarse bajo un sol casi primaveral que adormece pero no quema, a comer una salchicha y beberse un par de cervezas, que son suaves y entran bien. De cada sitio me he ido con pena, y ahora estiramos la comida con un postre y un café, y luego otro, para no movernos de ahí. Todos los ruidos en esta ciudad están perfectamente armonizados: los pájaros, las voces, los artistas callejeros, y los pocos coches que pasan, quizás con silenciador. No crean que no hay conciertos callejeros, pero sólo los oyes si te acercas. Las bicis son las que no paran de pasar llevando chicas que no sabes donde las fabrican tan guapas e incontables.

Berlín: tranquilidad, ruidos aparentemente coordinados entre sí, parques, terrazas, bicicletas. El pueblo parece en perfecta simbiosis con el entorno. Se encuentra uno a gusto un domingo en Berlín.

Me da por soñar: ¿sería posible la unión de los pueblos por debajo de los políticos, como si estuvieran encerrados en una jaula para loros locos, y nosotros libres sin hacerles caso? Una utopía.

 

Debilidad rajoyana

(En The Corner versión en inglés)

Rajoy otra vez pillado en una gruesa mentira... dice que cuando él llegó al gobierno, Bárcenas ya no estaba en el partido. Pero El Mundo de hoy hace pública la nómina de Bárcenas cobrada meses después de que Rajoy tomara posesión. Eso que Cospedal llamó una indemnización a plazos. Rajoy declaró solemnemente:

«Cuando yo llegué a presidente del Gobierno, el señor Bárcenas ya no estaba en el partido». Mariano Rajoy mantuvo en su discurso del pasado 1 de agosto ante el Congreso de los Diputados la apariencia de que, en cuanto los primeros indicios de corrupción empezaron a consolidarse, el Partido Popular dejó de cobijar a su ex tesorero, que después ha resultado ser el guardián de sus peores secretos.
Frente a esa pretensión, EL MUNDO publica hoy una nómina emitida por el Partido Popular a favor del ex tesorero Luis Bárcenas fechada meses después de la victoria electoral.
Lo que es una mentira en toda regla: Una nueva vía de agua en la misma avería, que se va agrandando. Una nueva debilidad.
Lo que siento es que esto quiere decir que se va a arrugar en cualquier problema que se le presente. Por ejemplo, la verja de Gibraltar. La crisis de Gibraltar sería una ocasión para arreglar esa convivencia incomoda con una plataforma de evasión de impuestos y otros tráficos ilegales que benefician sólo a los llanitos y nos perjudica a nosotros. Sobre todo porque RU esta actuando latosamente: sacar la escuadra es un movimiento torpe, porque. ¿Qué va a hacer a continuación, disparar?

España lo está haciendo mejor. Está haciendo incómoda la vida a los llanitos aplicando la ley que el mismo RU ha firmado. Y puede ir aumentando gradualmente la presión sin amenazar con tanques y aviones. No es el momento del estéril patrioterismo; no se trata de reconquistar Gibraltar. Se trata de enderezar ciertos malentendidos que les permite a ellos fastidiarnos bastante bajo la mirada benevolente de Londres.

Yo espero que sean capaces de ir subiendo la presión, y que estos piratas del Caribe de poco monta noten que no son tan autónomos como creen. Nos necesitan más que nosotros a ellos, empezando por el Aeropuerto.

Si de verdad lo que le interesa a RU es la privilegiada posicion del Peñón para la defensa estratégica (en lo cual podemos estar perfectamente de acuerdo) , que lo demuestren controlando a los gamberros que viven ahí, haciendoles cumplir las leyes europeas y británicas.

La debilidad de Rajoy tiene desgraciadamente otro horizonte: se cierne cada vez más una intervención de la que él se ha vanagloriado haber eludido. No ha sido él quien la ha eludido, ha sido la OMT de Draghi, lo que bajó la prima de riesgo y nos permitió respirar... Y promesas aplazadas que no se han cumplido. Lo de reducir los salarios un 10% parece una broma pesada, pero puede ser el primer globo sonda que nos mandan para medir la ineludible intervención.

sábado, 10 de agosto de 2013

Esquemita

Supongamos la economía representada en tres partes, que son los cubos del dibujo. El rojo es las familias, que restan su servicio de trabajo a los del cuadro verde, las empresas. Por ello reciben una renta, el salario. Esta es la parte real de la economía, simplificada, claro.

El cubo azul es el sector financiero, que absorbe de lao otros dos depósitos, y con ellos fábrica dinero con ayuda del Banco Central. Es dinero son los depósitos de los clientes, que respeta a otros clientes por un tipo de interés, que es su ingreso principal.

Estos tres cubos están conectados por los mercados: el de trabajo, el de bienes, y el del dinero.

Todo esto es muy simple, pero tiene un propósito: explicar las diferencias más importantes entre la economía neoclásica y la Keynesiana.

(Neo)Clásica: los precios de los mercados en cada cubo se ajustan cuando hay un exceso de cantidades. Un exceso de producción en el cubo verde hará caer el precio de lo que se produce. Eso hará caer los salarios, porque si no habrá despidos. La caída de los salarios hará caer la demanda de consumo, lo que hará vajar los precios.

En el cubo azul la oferta es el ahorro, y la demanda la inversión productiva. Una caída del consumo traerá un aumento del ahorro. Ese aumento del ahorro hará caer el tipo de interés. Eso aumentara la inversión hasta que se vuelvan a igualar la oferta de ahorro y la oferta de inversión.

De modo que se ha producido una caída salarial, que ha llevado a una caída del consumo, pero eso es bueno pues el consumo no satisfecho ha traído un aumento del ahorro, lo cual a su vez hace aumentar la inversión.

Se ha producido un trasvase casi perfecto (casi porque puede haber fricciones temporales) de las preferencias en el tiempo: la gente en su conjunto ha decidido consumir menos ahora por hacerlo en el futuro, y eso le aporta una rentabilidad, que surge de la productividad de la nueva inversión. Gracias a ese aplazamiento de consumo presente por el futuro, la economía crece. En el futuro, habrá más producción y más bienes disponibles, y más renta para consumirlos.

No hay exceso de ahorro (deficiencia de consumo): el tipo de interés "natural" equilibra la conexión entre consumo>ahorro>inversión, aunque puede haber fricciones transitorias.

Es importante también que lo mercados que conectan a los sectores o cubos son autónomos: no necesitan equilibrio de los otros para equilibrarse. El mercado de trabajo depende del salario. Si el salario es perfectamente flexible, no habrá paro más para los que no quieran trabajar a ese salario.

Lo que permite esa autonomía y esa conexión entre mercados es el dinero. El dinero cumple la ley de Say. La Ley de Say Dice que, como el dinero es estéril (no rinde) sólo se detentará mientras se decide en qué se gasta: consumo o inversión. Pero no estará largo tiempo en manos de la gente, porque es una pérdida neta. La Ley de Say garantiza que nunca hay excesos de demanda o de oferta en ningún mercado mucho tiempo.

Por lo tanto, la economía tiene fuerzas naturales endógenas que abrevian las desviaciones del "equilibrio".

La economía Friedmaniana es así, pero reconoce que a corto plazo se pueden producir problemas en el mercado de siendo que exigen una acción del Banco Central. Son embargo, salvo esos casos, la economía en su conjunto tiende al equilibrio.

La economía Keynesiana no reconoce ninguna tendencia al equilibrio. Primero, el tipos e interés puede equilibrar el ahorro y la inversión fuera del pleno empleo. Segundo, esta situacione de desempleo no se arregla con bajadas salariales, que lo prometo que haría serīa bajar el consumo. Tercero, esto puede nublar las expectativas de los empresarios y trabajadores y hacerles esperar menos ingresos y menos ventas, y una mayor incertidumbre sobre que hacer con sus precios y salarios, que no son tan flexibles (aunque no hubiera sindicatos): en suma, los unos y los otros se guardan su disminuida renta, lo que hace que en la fase siguiente disminuya más, y eso qe fue el pesimismo.

Eso aumenta el ahorro más allá de lo que diga el tipo de interés. Hay una variable nueva que es la apreciación subjetiva del riesgo, que puede hacer que las primas exigidas para arriesgar el dinero suban en flecha.

Keynes decía: primero se decide cuanto no se consume (se ahorra) de la renta, pero después hay que decidir en qué se deposita ese ahorro entre los instrumentos disponibles, ente los que está el dinero. Lo lógico es que, cuando la incertidumbre se dispara, aumente el ahorro, y de él aumente la parte más líquida.

Por lo tanto, el ahorrador no está interesado en llevar su dinero a producir, sino que lo atesora. Ídem las empresas, que ven que el tipo de préstamos ha subido en flecha y, en cambio, su rentabilidad futura ha caído por los suelos.

Por lo tanto, los mercados que antes eran autónomos y fluidos, ya no lo son. Los tres cubos se desconectan -el dinero no fluye de uno a otro-, pero además dentro de cada cubo no funcionan los ajustes de precios.

Para unos los movimientos de precios dominan, y el ajuste al equilibrio se alcanza. Creen en las fuerzas endógenas, suficientemente potentes para restaurar el equilibrio, al que se tiende siempre. Las alteraciones son transitorias.

Para Keynes si no se hace nada, la economía se contrae más y más, hasta llegar a una situación peolongada de alto desempleo y caída general de la producción. El problema básico es monetario, pero puede estar fuera del alcance del Banco Central restaurar la confianza y generar expectativas como las que había en los buenos tiempos. Si hay deflación, el BC no puede bajar el tipo de interés real hasta donde sería eficaz para restaurar el apetito por el riesgo inversor y creador de empleo.

Como dijo Minsky - partiendo de Keynes - no creía que hubiera una tendencia natural al equilibrio. Es más, el equilibrio prolongado adormece el miedo al riesgo y potencia las burbujas especulativas. En la esencia de los ciclos están estos cambios de psicología, que determinan las rentabilidades de la inversión a largo plazo, que pueden caer fuera del pleno empleo por tiempo indeterminado. Estas oleadas contagian al final a todo el mundo, y si en las fases alcistas todo el mundo quiere aprovechar la ocasión de hacerse con un piso (por ejemplo) en las fases bajistas nadie que iré saber nada de invertir. Prefieren guardar el dinero.

Friedman decía que esto se arregla con el aumento de la oferta monetaria por el BC, hasta que la gente sienta que le sobra el dinero, se convence de que no va a faltar, y se anima a gastar. En esta posición, como dice Krugman, hay un deseo de proteger los mercados, en el sentidos de que basta con la política monetaria para restaurar el equilibrio.

Es decir, para Friedman en el cubo azul reside el problema, y el BC tiene la llave. No considera que la banca está afectada por los mismos problemas que los otros cubos. También cambian sus presencias de liquidez, y eso contrae el crédito, aparte de de otros problemas patrimoniales, que aquí no hemos considerado para no complicar la exposición.

 

El desgaste de las teorías

Un artículo excepcional de Krugman sobre Friedman, qiue establece los límites del monetarismo para entender la economía actual en su Depresión.

Es un artículo contra Friedman, pero no en contra de su importancia, sino en la pérdida de importancia de su nombre. Hoy, los conservadores no le consideran de los suyos.

En eso, Friedman fue, como dice Krugman, un pragmático. Defendía a los mercados, pero reconocía que sólo con los mercados no se conseguía salir de determinadas crisis. Su análisis de 1930 sigue siendo inaceptable para los conservadores, sus aliados naturales. Sin embargo, tampoco es útil para los moderados, que recurren a Keynes, un nombre más citado en la actualidad que el de Friedman. Friedman ha sido desbancado de la actualidad sobre todo por sus aliados naturales. Si alguien le defiende son los Neo keynesianos, que en realidad nunca dejaron de ser monetaristas con una etiqueta que a Mankiw, su más conspicuo representante, nunca le gustó.

Los nombres brillan, se iluminan hasta oscurecer a los demás, y luego se apagan. Pero la economía es circular, y es inútil declarar el triunfo definitivo de cualquiera. Para mí Friedman tiene más cosas válidas que Lucas, quien originó una deriva de la economía a la que se debe una parte no despreciable de la situación en la que nos encontramos.

No creo en la virtud del punto medio, pero en economía es difícil acertar si no te acojes al paraguas o al salacot que es adecuado en cada momento. Unas veces hay sequía y te conviene éste para no quemarte la piel, y en otros diluvia y necesitas un paraguas. No se puede ser exquisito y puritano sin mirar a las consecuencias socaliales, y para eso necesitas mirar con detenimiento a la historia. La economía sin la historia es una lente embarrada.

Ero siempre se necesita una teoría, un modelo, que engarce lógicamente las piezas. El problema es que las piezas sean un remedo de la realidad, y la lógica que las conecta, también.