"How can I know what I think until I read what I write?" – Henry James


There are a few lone voices willing to utter heresy. I am an avid follower of Ilusion Monetaria, a blog by ex-Bank of Spain economist (and monetarist) Miguel Navascues here.
Dr Navascues calls a spade a spade. He exhorts Spain to break free of EMU oppression immediately. (Ambrose Evans-Pritchard)

lunes, 6 de febrero de 2017

La gala (o las cuentas) del cine ¿español?

La gala fue un homenaje narcisista. De ellos a ellos mismos frente al gobierno, referencia constante a Satán, que no abre la bolsa. Y es que sin unos pedigüeños. Les gusta mendigar, pasión española desde las órdenes mendicantes. ¿No les dará vergüenza? 
No sólo eso, sino que pretenden decir que generan riqueza a base de hacer unas cuentas cínicas. Leo en Santiago González

"...Luego, el vicepresidente de la Academia afirmó que es el cine español el que subvenciona al Estado: "Las salas españolas recaudaron en 2016 más de 605 millones, lo que ha hecho ingresar por IVA al Estado 105 millones. El presupuesto del Estado para el cine ha sido 77 millones. Es decir que la Administración ha ingresado 28 millones más de lo que ha gastado en el séptimo arte. No somos un sector que vive del Estado. Generamos riqueza". Las películas que recaudaron 605 millones fueron todas las que se estrenaron, españolas o extranjeras. El 21% suman 127 millones, no 105.

2016 fue un buen año para el cine en general, pero de los 605 millones sólo el 18,1% fue para películas españolas, 109 millones, que ingresaron por IVA 23. Los 54 que faltan hasta 77, los pusimos entre todos a escote. Ojalá supieran hacer cuentas."

Es decir, seguimos pagando y ellos siguen insolentemente besándose a sí mismos en su narcisismo pensando que les debemos algo. Ana Belen, por ejemplo, 50 años de pedigüeña. ¿No le dará vergüenza? ¿Quién les dejó apropiarse de la etiqueta "cine español"? Ni se consideran españoles - véase al bobo impertinente de Trueba, que se ha quedado sin Goyas - no tiene orgullo de artista, puesto que su objetivo principal es mendigar. 

domingo, 5 de febrero de 2017

Guerra de divisas

La Zona Euro tiene un superávit exterior exuberante, como se ve en la imagen: 

 

3 billones de euros, o lo que es lo mismo, 3,1% del PIB de la zona. No parece una cifra excesiva, pero parece imparable. 
Gran parte de este excedente se debe a Alemania, que ha alcanzado la increíble cifra de 300 mm, un 9% de su PIB. 
Ambos superávits son consecuencia de una cotización del euro evidentemente infravalorada, lo cual, a su vez, es debido a la política monetaria de Draghi de Expansión Cuantitativa. 
De eso se ha quejado Schauble, ministro de finanzas alemán, para replicar a Peter Navarro, asesor en comercio exterior de Trump, cuando acusa a Alemania, China, y Japón, de ser desleales al forzar con su tipo de cambio una competitividad exagerada. 
Sin embargo, Alemania no tiene poder sobre el euro. Es más, siempre ha dicho que no le gustaba la política de Draghi, aunque la aceptaba como necesaria para los demás países del euro. Echan la culpa de su superávit a Draghi, pero esto tampoco es verdad: Alemania podría hacer una política de inversiones públicas que aumentara la demanda, y de paso elevara la demanda de la zona. 
En todo caso, esta "distorsión alemana" - y europea -, va causar acciones de EEUU que no van a ayudar a solucionar el problema. Estaría bien que EEUU presionara por la vía diplomática a los alemanes para que aumentaran su gasto interior, pero ya sabemos que Trump primero dispara y luego ya se verán las consecuencias. 
Tanto Alemania como La Eurozona deberían aumentar el gasto interno. Quizás si lo hiciera Alemania, podría actuar de locomotora del resto de países con excedente. Pero no debemos esperar nada por ese lado. Alemania ha sido reiteradamente censurada por la Comisión por su excesivo superávit exterior, que según las normas internas, no debería ser muy superior al 3%. Pero Alemania hace oídos sordos. No entra dentro de su dogma económico que sea culpa suya. Lo que deberían hacer los demás es imitarla, dicen, lo que es una aberración. Si todos los paises de la Eurozona la imitaran, la contracción económica sería apoteósica. Todos gastaríamos menos en los demás, lo que contraería la producción en todos. 
Las cifras de comercio exterior de Alemania son una injuria a la UE y al euro. EEUU no parece que le disgustara cargarse la moneda única con la ayuda de Le Pen y otros, en su visión neomercantilista, incitada por el mercantilismo alemán. Esta es la típica situación que temía Keynes: países disparandose unos a otros en una guerra comercial en la que todos perderían. Para Keynes un desequilibrio entre dos paises es responsabilidad de los dos, no del deficitario, upa son los dos los que deben actuar. Una forma de actuar es disponer de un tipo de cambio libre que haga de contrapeso. Otra forma, si se ha decidido tener un tipo de cambio fijo entre los dos, es acordar políticas compensatorias - expansivas en el país superavitario, contractivas en el deficitario - si las relaciones de ambos son normales. Si se decide tener un tipo de cambio fijo, es porque le encuentran ventajas, y los inconvenientes son subsanables. Ya vemos que en la Zona Euro no rige esto. 

sábado, 4 de febrero de 2017

Ruido sofocado de sables en el Banco de España

El Banco de España sale mucho en los papeles, últimamente, pero no por sus decisiones propias de la Entudad, sino por motivo de los conflictos internos con su cuerpo de inspectores (Representados por su potente Asociación de Inspectores). 
Ernesto Ekaizer dedicaba una columna a las posibles interpretaciones interesadas de las normas por Banco de España durante la crisis, con el fin de ocultar la gravedad de la situación. 
Días antes, Fernando Balciela hablaba de los rifirrafes entro el BdE y sus inspectores, a cuenta de la nueva entidad supervisora europea, del BCE (llamada MUS por sus siglas en español), entidad que no parece estar muy contentar con los inspectores, a la par que ellos con ella. 
Días después, en El Mundo, nuevo artículo, esta vez de Carlos Segovia, en el que se desvela que el cuerpo de inspectores acusa directamente a sus superiores (es decir, BdE) de 

La Asociación de Inspectores del Banco de España acusa a sus superiores de filtrar ilegalmente a Bankia un informe interno de la Inspección sobre un posible caso de blanqueo entorpeciendo la investigación.

Finalmente, demos cuenta de que El País le dedica hoy un editorial reclamando que se aclaren estas acusaciones tan directas de los inspectores a sus superiores. 
No son nuevas estas desavenencias entre la Asociación de Inspectores y sus superiores. Yo publiqué un post en 2013 (de gran seguimiento) "El problema de hoy", en una que debió ser de las primeras cartas publicadas por los inspectores. Pero de los artículos citados se deducen dos causas de conflictos para el cuerpo. Una es con el MUS, la entidad europea dependiente del BCE, y otra con la cúpula del BdE. 
A la primera se refiere el artículo de Balciela, y el problema de fondo es un desajuste de criterios a la hora de enfocar las inspecciones, que según los inspectores el MUS se centra demasiado en el capital de las entidades, y no en los activos y su composición. Aparte de eso, el MUS ha acusado a los inspectores de no dar un buen nivel de inglés, por lo que algunos puestos - que estaban reservados a miembros del cuerpo - en el nuevo MUS han sido cubiertos por inspectores que viene del sector privado. 

Pero, lo que más parece molestarles es que, pese a sus presunciones de gran cuerpo y difíciles oposiciones, en el MUS no les tienen en gran aprecio. Ni cuentan con ellos en la sede del BCE. Tan frías son las relaciones que la responsable del MUS, la francesa Danièle Nouy, no se cortó un pelo durante una visita a Madrid en la que se reunió con los inspectores. Ni hizo el menor esfuerzo por ser simpática, algo imperdonable en Madrid donde hay que cuidar las formas y ser bienqueda. Con ese aire altivo, seco y desapacible tan típico de los parisinos, Madame Nouy no solo desestimó todas y cada una de sus quejas sino que les reprochó no saber inglés. “El que no sabe inglés en el siglo XXI es como un analfabeto” dijo la francesa, escamada poro los problemas que los ‘iletrados’ (en idiomas) inspectores españoles le están creando a la hora de trabajar con los inspectores del MUS, la mayor parte, claro, procedentes de otras nacionalidades de la eurozona.

 

Un tema grave porque el responsable en el MUS de la supervisión en un país no puede ser nacional de ese Estado. La comunicación así se hace imposible. Y genera problemas de funcionamiento insuperables.De ahí la irritación de la francesa. En Frankfurt sencillamente no se entiende que funcionarios de tan alto rango puedan ir por la vida sin saber lo básico de inglés cuando cualquier taxista o camarero en Alemania lo domina.

 

Lo peor es que sus insuficiencias en inglés les han bloqueado a los inspectores españoles sus expectativas de ir a trabajar a la sede del BCE. Estaba previsto que, al menos, entre 60 y 100 inspectores pudieran acceder a puestos de inspección en el MUS, mucho más bien pagados que los suyos propios, que no están mal remunerados que digamos. Pero, los sueldos de entrada en el MUS están entre los 60.000 y los 120.000 euros, esto además de un 5% en ayuda para vivienda, 325 euros mensuales por hijo y hasta 500 euros para escolarización por cada uno de ellos y ayudas para expatriados que alcanzan el 16% del sueldo. Sin embargo, esos puestos los han estado cogiendo profesionales más jóvenes, llegados de la banca o las auditoras. Y ahora a los inspectores no solo estos chicos les han comido el queso sino que tienen que recibir órdenes de ellos, jóvenes de la edad de sus hijos. ¡Y todo por el malhadado inglés! 


En cuanto a los confrontamientos con sus superiores, la cosa alcanza más profundidad, por cuanto se trata de reiteradas acusaciones de los inspectores (véase mi post citado) de dudosa diligencia - por no decir otra cosa - en la gestión de la información elaborada por la inspección en su trabajo. Es de lo que se ocupan los otros dos artículos, de Ekaizer y Segovia
El primero acusa a los responsables de la inspección, de

La Dirección General de Supervisión del Banco de España maquilló la regulación (normas y circulares contables) al estallar la crisis en 2008 para mitigar y diferir el reconocimiento de la gran morosidad, y sus consiguientes pérdidas, derivada de la expansión crediticia que alimentó la burbuja inmobiliaria desde las entidades financieras. Entre otras iniciativas, un grupo de trabajo interno denominado Comité Técnico de Coordinación (CTC) dio instrucciones a los inspectores para que no se exigiera el cumplimiento de la legalidad vigente a las entidades supervisadas en las operaciones relacionadas con la refinanciación de préstamos hipotecarios y de consumo. El CTC prohibía a los inspectores la entrega por escrito a las entidades de esta y otras posiciones, que solo podían ser comunicadas a los bancos de manera oral. El Banco de España justificó este miércoles que el objetivo era "homogeneizar la aplicación de las normas".

El Comité Técnico de Coordinación, según ha confirmado este periódico, que ha tenido acceso al contenido de sus trabajos y a las instrucciones dictadas, es un grupo creado dentro de la Dirección General de Supervisión del Banco de España al que concurren los llamados coordinadores ejecutivos de los cuatro departamentos de inspección. En sus reuniones se analizan problemas detectados en los contactos con las entidades financieras. A su vez, el CTC formula recomendaciones a los inspectores sobre distintas materias. Muchas de ellas, sobre todo a partir de la crisis financiera de 2008, sobre las normas contables vigentes.

En suma, durante la etapa del gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez (más conocido como MAFO), se dio por supuesto que la crisis iba a ser corta y se intentó meter debajo de la alfombra la gravedad de la situación de la banca - Cajas especialmente-, por el procedimiento de diferir las consecuencias esperando que la situación se aliviara. Por lo tanto, se ocultó por varios medios a la población algo que luego casi se convierte en un rescate del país, y que luego costó- sin sumar los avales y otras minucias - 40 mil millones de euros al erario público. A menos que se recupere ese dinero, vendiendo algún día los activos rescatados,  no se saldará deuda contraída. 
En cuanto al último artículo, dice Carlos Segovia, 

La Asociación de Inspectores del Banco de España acusa a sus superiores de filtrar ilegalmente a Bankia un informe interno de la Inspección sobre un posible caso de blanqueo entorpeciendo la investigación.

«Hay riesgos de que en virtud de esa información facilitada se haya podido interferir con otras inspecciones o investigaciones en curso que pudieran estar realizando simultáneamente otros organismos públicos». Así lo asegura la asociación que representa al grueso de la Inspección del Banco de España en un grave comunicado interno al que ha tenido acceso EL MUNDO. 

La asamblea general de la asociación facultó el pasado 18 de enero a su junta directiva a entablar acciones legales [Hay que decir que la Asociación de Inspectores del BdE está facultada para emprender acciones legales incluso contra sus superiores] contra la Comisión Ejecutiva del Banco de España, que preside el gobernador, Luis María Linde, por presunta violación de las normas internas al pasar a Bankia un informe confidencial sobre una inspección no concluida...

Contraviniendo, en opinión de los inspectores, la norma de que a la entidad inspeccionada no se le debe transferir información derivada del trabajo de inspección.
"Algo huele a podrido en el reino de Dinamarca", hubiera dicho don William. 
No son estas las únicas desavenencias aparecidas en las crónicas de los medios. Y no parece que vayan a ser las últimas, por el tenor de la causa de fondo que se adivina detrás de los cortinajes. El País, en su Editorial de hoy, pide que se terminen con estas disonancias que perjudican a la Entidad. Bien, pero no depende de un tratado de paz, me parece. Hay demasiadas transgresiones, sobre todo desde la crisis, en que gobierno (Zapatero) y BdE (MAFO) se fueron por los cerros de Úbeda esperando que la crisis escampara pos sí sola. Se tapó información, se permitió la salida a bolsa de Bankia, se perjudicaron a miles de pequeños ahorradores con ligereza manifiesta. Yo espero que los inspectores, despolitizados y buenos profesionales, no dejen de informarnos de algo que no sabríamos sin no fuera por ellos. Esperemos nuevos acontecimientos.

viernes, 3 de febrero de 2017

Geoestrategia. Riesgos tangibles

Jeffrey Sachs es un economista de larga data, que conoce muy bien el mundo y sus problemas económicos y políticos. En "Navigating The New Abnormal" (título sugerente), ofrece una entrevista en la que da su visión del mundo actual y qué va a significar Trump en él. La entrevista es altamente recomendable. Sus conclusiones no son precisamente rosáceas. Yo me encuentro totalmente de acuerdo con él. 
Acusa a EEUU de haber cometido errores geostratégicos en los últimos años que han empeorado el equilibrio del mundo. Primero, está la fatal política de acorralamiento a Rusia, llevando las fronteras de la NATO hasta sus mismo borde, y eso que se ha evitado que Ucrania y Georgia entraran en el organismo. Pero los paises bálticos en la NATO son error y un riesgo innecesario. 
Segundo, está la nefasta política de Obama en la primavera árabe, una invitación a descabalgar a los regímenes que eran más o menos estables. Y tercero, la decisión de Obama de apoyar a Arabia Saudí y Turquía en el derrocamiento - fallido - de Assad en Siria, con las consecuencias para Europa de la masa de refugiados que, EEUU siendo el principal causante, no quiere recibir. Según Sachs, esta decisión de Obama - de larga tradición americana de creer tener el derecho de decidir quién gobierna en un país -, es en su opinión en contra de la legislación internacional. 
De todas formas, Sachs dice que es imposible para una nación acoger a una masa tan grande de inmigrantes, por muy refugiados que sean. Cree que una nación debe tener fronteras, y que éstas sean puertas selectivas de entrada, no la puerilidad de que se abran de par en par. Ni Europa ni ninguna nación en el mundo tiene la capacidad suficiente para acoger riadas de inmigrantes sin poner en grave riesgo la existencia de las instituciones nacionales y de la nación misma. 
Para él, la solución única del problema sirio es dejar de atacar a Assad, restablecer La Paz y que los sirios refugiados puedan volver a sus casas. No cree que Trump este por la labor, pese a haber hablado de ello en la campaña, pues sus ideas han cambiado de dirección varías veces, y le ve como alguien peligroso para La Paz mundial. 
No quiere ni imaginarse un conflicto en un país báltico con Rusia. Eso sería causus belli para EEUU. 
Está en contra del apoyo a Ucrania de Occidente, y su intento de meterlo en la OTAN. Hay causas que, sean justas o no - y la de Ucrania está por demostrar que lo es - ponen en peligro La Paz mundial. 
Echa la culpa de la agresividad creciente de Putin a la política de haberle dejado sin una zona intermedia de seguridad, llevando el potencial belicismo hasta sus mismas puertas. 
¿Por que Europa acepto seguir esa línea de conducta? euroa no tiene la potencia militar ni para intervenir en Oriente Próximo ni en Ucrania, y frívolamente, hemos seguido a Alemania, que ha seguido a EEUU, en la aventura de acorralar a Rusia. 
Con Trump las cosas no van a mejorar probablemente, dice Sachs. Cree que EEUU, desde hace años, se ha salido de los rieles de la gran nación que fue, hasta el punto que se declara partidario de cambiar del régimen presidencialista uno parlamentario. 

jueves, 2 de febrero de 2017

El poder del Homo Sapiens: el basamento ficticio

Abraham Lincoln dijo que no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo. Bien, esto es una ilusión. En la práctica, el poder de las redes de cooperación humana depende de un delicado 
equilibrio entre la verdad y la ficción.
De "Homo Deus", Yuval Noah Harari.

 

Vivimos en un mundo basado en una tupida red de ficciones que compartimos todos. Todos hemos creido en algo a lo largo de la historia, sean dioses, angeles, o ideas como la Democracia y los derechos humanos; o lo contrario, las razas. En obvio que hoy esto no está de moda, y el que se empeñe en decir que no es demócrata y que cree en el poder absoluto y la sociedad estamentada, no va a tener mucho éxito en la vida. Será un inadaptado. 
Durante siglos, milenios, las religiones han jugado el papel, ficticio, pero fundamental, sobre el cual era organizada la sociedad más o menos eficazmente. La religión de cada pueblo era la moldura en la que se justificaba lo que pasaba. Que la justificación fuera a posteriori y falsa, para el que tenía el poder no importaba, siempre que él siguiera en el poder. Aunque no sólo el poderoso se afiliaba a esa moldura holística: muchos miembros de la sociedad sabían que su posición en el mundo, si algo la apreciaban, era deudora de esa base credencial. Incluso esta base, religión o lo que fuera, podía servir de consuelo al que no se beneficiaba un ápice; al revés, era una víctima de ella. 

"Un funcionario del antiguo Egipto podría decir: «Nuestro sistema [de faraones dioses] funciona. Recaudamos más impuestos, excavamos más canales y construimos pirámides más grandes que nadie en el mundo». Y era cierto: el Egipto faraónico era el número uno del mundo en impuestos, irrigación y construcción de pirámides. Pero ¿es esto lo que realmente cuenta?...
Esto es verdad hasta cierto punto, pero pasa por alto una dinámica histórica opuesta. A medida que las burocracias acumulan poder, se hacen inmunes a sus propios errores. En lugar de cambiar sus relatos para que encajen con la realidad, pueden cambiar la realidad para que encaje con sus relatos...
Las redes cooperativas humanas suelen juzgarse a sí mismas con varas de medir de su propia invención." (Harari)

Hay miles de ejemplos en la historia sobre la victoria de la mentira colectiva sobre la verdad. Pero resulta que la ficción es vital para sostener a la sociedad tal como se ve ella misma. Aquí no triunfa el criterio científico de la prueba y error. Si hay error, se tapa, se esconde, y se sigue, mientras se pueda. 
Un ejemplo es la Gran Mentira de las sociedades comunistas. El Marxismo ejerció en este caso de basamento religioso, que se mantuvo en vigor todo el tiempo que interesó a las capas sociales superiores, lo cual hizo su fracaso más estruendoso. 
Otro ejemplo es la gestión manifiestamente errónea de la UE actual, que sin embargo es reiteradamente defendida y aprobada por los organismos europeos (Las redes cooperativas humanas suelen juzgarse a sí mismas con varas de medir de su propia invención). La UE no deja de ser otra ficción que ha sido muy útil para mantener La Paz en el Continente, pero evidentemente ha alcanzado un nivel de ineficiencia problemático, porque no se le ve una salida fácil a la distopia creciente entre países acreedoes y deudores, que es en lo que se ha convertido el tinglado. 
Las religiones han perdido fuelle en ese papel, y han venido a ser sustituidas por creencias laicas, como la democracia como valor absoluto - aunque cada uno la interpreta según su conveniencia. Pese a su trágica historia, los partidos comunistas se proclaman demócratas. Pero, como hemos dicho antes, poco tendrían que hacer en esta sociedad si no se adscribieran a las creencias más generalizadas.
Sin embargo, la democaria es una creencia útil pero que se deriva de una religión, la Cristiana, que establece que cada ser humano es un individuo único con un alma inmortal. Toda la Declaración de los Derechos Humanos de la ONU, síntesis de la transliteración de las creencias Cristianas al laicismo, y base de la organización política de nuestras sociedades libres, se iría al garete si se pone en duda la existencia de la individualidad del ser y del alma, depositada en unos solemnes Derechos Humanos. 
Por suerte, somos capaces de mantener ficciones que se contradicen unas a otras, como la religión y la ciencia, sin grandes problemas, al menos durante cierto tiempo. Por ejemplo, Harari, en el libro citado arriba, dice que la existencia del alma es incompatible con la teoría de la Evolución de Darwin. Sin embargo, en nuestras escuelas conviven ambas, o si no conviven la enseñanza de los Derechos Humanos con la Selección de las Especies (ya la palabra especies es un principio de negación de la individualidad). Empezando por la ONU, no hay organismo  prestigio que no propague a la vez el darwiniwmo y los Derechos Humanos.
Por lo tanto, la teoría de la Selección de las Especies, hipótesis científica, ¿cuántos la han comprendido en realidad? Así, además de argumento científico demostrable, hace el papel de creencia perfectamente compatible con los Dogmas del cristianismo o los del modernismo (humanismo) que vivimos hoy.
La ficción es vital, pero no la diseña nadie: es fruto de una evolución interrelacionada con el desarrollo de otras variantes culturales, como la misma ciencia, o como otras ficciones que a veces sorprenden por su arraigo y virulencia, como el nacionalismo - en franca contradicción con el humanismo laico.
Sin la ficción sería imposible dar sentido a una sociedad. Pero no garantiza la felicidad de todos. Es más, sería difícil interpretar la felicidad, o lo que la gente entiende por eso, a la luz de sus creencias ideológicas - democracia, humanismo, derechos humanos, Europa, el Euro... ¿hay una felicidad colectiva, forjada en el sentimiento de pertenencia grupal? ¿No es más importante mantener la espacios privados para la felicidad individual? 
El Homo Sapiens se distingue de los animales por esa capacidad de tejer ficciones que agrupan a millones o miles de millones de personas. Eso le ha llevado muy lejos a lo largo de la historia. No es que haya que obligar a la gente a creer en esas ficciones: él mismo se las encuentra establecidas y las aceptara como dadas, o quizás se rebelará contra ellas con el afán de imponer otras. Ese sí que es un posible sentido de la democracia: que esas luchas de ideologías - de creencias- se hagan sin derramamiento de sangre, como decía Karl Popper. Esto convierte a la Democracia en una idea moral consecuencialista, pero creo que el consecuencialismo es inevitable para no errar por el mundo eternamente bajo creencias erróneas y dañinas. 

miércoles, 1 de febrero de 2017

Alemania nos gana todavía en competitividad

​De Paul Krugman saco este gráfico (datos FMI) que habla bien a las claras del problema del euro. El euro no puede funcionar si resulta que, desde que se creó, Alemania sigue ganándonos en competitividad a los españoles. 

 

Eso es el ajuste vía deflación interna: un fraude. De nada ha servido la enorme contracción de la demanda y del empleo en España para que luego Alemania siga siendo más competitiva que nosotros, en términos de precios relativos (deflactor del PIB). Si por lo menos Alemania hubiera impulsado su gasto interno y sus precios y salarios... pero Alemania es unidireccional. 

La teoría que justifica al euro es una falsedad. Nunca iba a funcionar. Ahora, bajo circunstancias excepcionales - caída del precio de la energía, política monetaria ultra expansiva - España ha reaccionado al alza. Pero esas circunstancias no son eternas, y no han originado más que una reacción pasiva de la economía española, como explicaba el otro día brillantemente Miguel Buesa: crecimiento por transpiración, no por inspiración; es decir, no por aumento estructural de la productividad, sino por aumento de la demanda y del empleo de baja calidad. Y eso era precisamente una de las excusas del euro: que ajuste vía tipo de cambio no servía de nada, porque se eludía la verdadera reforma... 

La Constitución de Europa

Curiosa historia de la UE contada por Emilia Landaluce sobre la grisura y dejadez conque se hizo la Constitución de la misma. 

En cierta ocasión, le pregunté a Giscard D'Estaing si la novela en la que fabulaba sobre los amoríos de un político francés con un trasunto de Lady Di, había tenido más éxito que su anterior obra. "¿A cuál se refiere?". Le contesté: "La Constitución Europea". "Afortunadamente no hay ningún referéndum convocado sobre mi novela". En 2005, España aprobó la Constitución Europea con un 81,65% de los votos. Sin embargo, en algunos feudos conservadores en Madrid (Salamanca, Chamartín, Chamberí) el porcentaje de noes superó el 30%, un hecho sorprendente considerando que el PP había hecho campaña por el sí. 

Los meses previos a la redacción de la Constitución fueron apasionantes. Giscard sabía que si en el preámbulo se hacían referencias a la herencia grecorromana y a la Ilustración, habría que incluir algo sobre las raíces judeocristianas de Europa, una cuestión para la que no hace falta ser creyente o siquiera lector de Christopher Dawson, sino que basta pasearse por cualquier pueblo de 500 habitantes. Y ahí está el campanario. Ya saben que muchos somos ateos gracias a Dios

La Constitución Europea de Giscard quedó aséptica: ni herencia grecorromana, ni Ilustración... ni por supuesto raíces judeocristianas. No se trataba de un ejercicio de inclusión sino que una vez más primaba la sumisión al respeto. No es de extrañar que aquel proyecto tan ilusionante encallara (Francia y Holanda votaron no en sus referendos) y diera paso al Tratado de Lisboa, de corte burocrático y gris. Quizás éste fuera el primer aviso de la preocupante crisis que hoy atraviesa Europa. Muchos socios andan descontentos por la exclusión de la cruz del escudo del Real Madrid para comercializar una marca de ropa en el Golfo Pérsico, algo que de momento ningún jeque ha requerido a marcas con este símbolo en su escudo (como Alfa Romeo). ¿Es que los Rolls no tienen el Espíritu del Éxtasis [una mujer desnuda] en el capó? El Madrid se llevará 52 millones, pero quién sabe si en alguna de esas pachangas que se juegan por el Golfo alguien prohibirá a Cristiano que se santigüe cuando meta gol.


martes, 31 de enero de 2017

Tiene toda la razón

José María Domínguez cuando dice, en "Puede ganar Le Pen": 

Hasta que irrumpió en escena la generación de los que andan por los treinta, esos y esas que darían un brazo y parte del otro por poder ser yanquis, los españoles, los españoles leídos por ser precisos, siempre soñaron con Francia, que era su ideal. La paradoja es que nosotros queríamos parecernos a los franceses y, al final, crisis del euro mediante, resulta que van a ser ellos los que se acaben mimetizado con los españoles. De hecho, el genuino drama de Francia es que cada día se parece más a España. E igual que en la Península Ibérica el grueso de la industria autóctona ha tenido que ser desmantelada por exigencia expresa del euro, a Francia le ha ocurrido algo no tan distinto. Incapaces, al igual que nosotros, de igualar la productividad de la industria germánica tras perder el escudo protector del franco, también ellos se han visto forzados a ir desmantelando poco a poco su tejido industrial. Un simple dato estadístico basta para ilustrarlo: en 1982, cuando aún el viejo Mitterrand presidía la República, el déficit comercial de Francia con la entonces RFA era de 28.000 millones de francos.

Treinta años después, y en francos constantes, ese mismo déficit se ha multiplicado por cuatro, nada menos que por cuatro, hasta sumar 108.000 millones. Lo dicho, en el fondo, españoles y franceses no somos tan distintos frente a la implacable aspiradora alemana. Francia necesitaría una moneda que valiese un 20% menos que el marco alemán. Pero esa moneda, ¡ay!, no existe. Por eso se está desintegrando el Partido Socialista tras su paso por el Elíseo. Por eso le ocurrió lo mismo antes a Sarkozy. Y por eso puede ganar Le Pen dentro de cinco meses. Porque, aquí, allí y en todas partes, el corolario de la desindustrialización es idéntico: el canto del cisne de la clase media. Tras la industria se van, y para no volver, los buenos empleos indefinidos, los salarios decentes, el acceso a la vivienda, los proyectos vitales consumados y las jubilaciones dignas. Porque, tras la desindustrialización, lo que llega en todas partes, igual en Francia que en España, es el desclasamiento. Por eso, igual allí que aquí, la ira. Le Pen puede ganar.

El euro es el veneno que ha infectado a Europa de desintegración. Francia no es ni norte ni sur, pero necesitaría una devaluación de un franco que no existe. ¿Puede ganar Le Pen? es igual, si no gana , el problema no se va a arreglar. Y si gana tampoco, porque su anti eurismo es zafio, tipo Trump. 
Nosotros, a remolque. 

lunes, 30 de enero de 2017

Recomendar

Recomendar encarecidamente el artículo de Miguel Buesa sobre la economía española. Claro, sencillo, transparente. 

Cataluña y sus Hechos consumados

En el New York Times  hay un artículo sobre las amenazas que se ciernen sobre Europa en este año que acaba de empezar. La lista es, creo, completa. Incluye el Brexit, Grecia, Turquía (como amenaza de que nos dé la espalda), los neonacionalismos... en fin, ya se ha hablado más o menos de todo esto, y más o menos no se pueden tomar a la ligera, sobre todo porque van a descollar todos juntos. 
Pero lo que más me interesa de artículo es su breve mención a Cataluña como un problema para la Unión Europea, 

Will Catalonia leave Spain?

The regional parliament of Spain’s semiautonomous Catalonia region voted in November 2015 to begin a process to achieve independence in 2017 — an outcome the Spanish government has vowed to block. But the secessionists, buoyed by the Brexit referendum, say the momentum of nationalist movements in Europe is on their side. Whether they will succeed remains unclear at best.


planteamiento con el que estoy completamente de acuerdo: el avance del process tarde o temprano va a ser un reto para Europa, que tendrá que definirse y no esconder la cabeza bajo el ala como hace Rajoy. Es curioso: éste se escuda en Europa para no hacer nada, y Europa reza para que el caso no estalle, pero el caso va a estallar porque ya ha llegado demasiado lejos. 
Tan lejos como para el affaire de este fin de semana con la denuncia del juez-senador Santiago Vidal, y la aceptación descarada de Oriol Junqueras de que, efectivamente, poseen datos fiscales "como todas las demás CCAAA". La disputa, por si no la conocen, es que Santiago Vidal ha "confesado" que los separatistas manejan datos fiscales privados que les servirán para edificar la próxima Hacienda de la Cataluña independiente. Esto es muy grave y perturbador. Es una muestra de que Cataluña, un buen año, que puede ser el próximo, presenta al cobro a los catalanes - residentes, por lo tanto, el Cataluña - la factura fiscal del Impuesto sobre las Personas Físicas, así como sobre sociedades, así como IVA y demás impuestos que crean conveniente. ¿Qué harán los catalanes: pagarán dos veces, una al estado español y otra a Cataluña? ¿Qué hará la mitad que votó en contra en las últimas elecciones plebiscitarias de la independencia? ¿Obligarán a los catalanes a elegir a quién pagan los impuestos? Sabemos seguro que los fanáticos pagarán a la Generalitat y se declararán en rebeldía al Estaso Español. Con pocos que sean, el cirio está montado. 
En otras palabras, como dice Pablo Planas, un golpe de estado a base de hechos consumados.
Hechos consumados. La estrategia hasta ahora de los independentistas ha sido la de hechos consumados sin dejar de hacer grandes alardes de referéndums, etc, pro esto de los datos personales de los impuestos es terrorífico. 
La mitad de la culpa la tiene Rajoy, aunque sea el único político en defender de palabra la unidad de España. Porque ante los hechos consumados, no hay más que una respuesta: la firmeza. Artículo 155 de la Constitución española. Estrategia: defender los derechos legítimos de los catalanes no independentistas, que son más de la mitad. 
Aquí sólo hay uno a quien tomar en serio, que es Esquerra Republicana de Oriol Junqueras. Los demás, la Cup y Convergencia, son cosa pasada. 
En todo caso, esta amenaza seria pan comido para España y Europa juntas, si es que Europa existiera. Pero Europa está desbordada. Prefiere esperar a que los problemas estallen y luego convocar cumbres para meterlos debajo de la alfombra. Presidente, es su turno. 

PSOE, Podemos

Estoy hasta las meninges del lío interno de Podemos. No sé si creérmelo, la verdad. Veo salir en la Sexta a los dos contendientes muy seriecitos, diciendo exactamente lo mismo. No se puede inferir nada que les distinga del mantra habitual de Unidad, Transversalidad, y todas esas palabras huecas que usan los partidos cuando se pelean. ¿Transversalidad? Cómo no, si verticalidad es una palabra tabú. 
En el otro partido de izquierdas, las cosas han retrocedido otra vez a que Pedro Sánchez se presenta. Si no le frenan, volverán a la casilla de salida, y el PP saldrá reforZado. Éste, mientras, gobierna y va tirando, que no es poco. 
Puede haber elecciones anticipadas si estos cabezas huecas siguen jugando a la revolución de papel y a Mariano le conviene. Ellos mismos se destruyen. Yo apuesto a que ganará la batalla interna PI, pero si no es así, Podemos se va al garete  - de lo que me alegraré mucho. Podemos es Pablo Iglesias. Sin él sería otra cosa. Errejón sería un fracaso. Pablo es el único capaz de convencer a sus huestes que va a traer el paraíso bolivariano a España. Pablo Iglesias y Podemos son uno y lo mismo.

domingo, 29 de enero de 2017

El muro lo pagarán los useños

El muro de México, que el alocado D. Trump había mandado construir financiado por la imposición de una tarifa del 20% sobra las importaciones mexicanas, lo pagarán irremediablemente los americanos - aunque los efectos sobre México no serán desdeñables. 
Los productos que EEUU importa de Méjico sin tarifas arancelarias son muy demandados tanto por el consumidor americano como por las empresas, que encargan fabricar parte de sus imputs a un coste menor al otro lado de la frontera. Ergo, el primer efecto es un encarecimiento de dichos productos y un bajada en la capacidad de compra de los americanos. 
Además, es una conculcación de los tratados internaciones, particularmente el NAFTA, tratado de libre comercio del Atlántico Norte, que incluye a Méjico, EEUU, y Canadá. Por lo tanto, la medida no dejaría de tener efectos en Canadá, aunque sólo sea por la interrupción de la cadena de montaje que seguro que se ha formado entre los tres paises, que abarata además el coste en los tres. Esto, antes de que se haya renegociándose el NAFTA, ¿o es una forma de condicionar la negociación onclumplirlo previamente. 
El NAFTA, que impulsó Clinton, fue un éxito en sus objetivos de reducir la inmigración ilegal mexicana, al desviar parte de la producción local a México, con costes e producción más baratos, lo que no dejó de mejorar los salarios en México gracias a la mayor demanda de trabajo. De manera que los tres paises se beneficiaron del NAFTA, aunque, por supuesto, algunas franjas de población siempre pierden sí o saben ajustarse a la nueva situación, 
Otra ventaja que sacó EEUU es que aumentaron las exportaciones a Méjico, y estas pueden verse seriamente dañadas si Méjico responde con una medida similar - que sería lo más lógico. Nos encontraríamos pues que el intento de que el muro lo pagara México le saldría a EEUU el tiro por la culata. Hay un chiste que circula por ahí: el muro lo levantará Sacyr, Trump pasará la factura a Méjico, que no pagará... con el resultado ya conocido que el gobierno español rescatará a Sacyr y el muro lo pagaremos los españoles...
Bueno, es un chiste. Pero un chiste que ejemplifica que los impuestos no los paga nunca el sujeto pasivo, sino que éste intentará trasladárselo a la parte más débil de su entorno, que generalmente son los asalariados y los consumidores, sin ser conscientes de ello. 
Por eso muchos economistas de derechas e izquierdas proponen gravar con el cero% a las empresas, pues siempre van a transferir hacia arriba (consumidores) y o hacia abajo (trabajadores) cualquier impuesto.
La política proteccionista de Trump va a romper todas las cadenas de producción supranacionales, sin fronteras, que han aumentado el empleo y la productividad y han abaratado el coste de la vida. Romper eso no repondrá los empleos perdidos por los que han votado a Trump, y hará perder el suyo   a millones de personas en el mundo. 
 

viernes, 27 de enero de 2017

Reagan, un antecedente de Trump

Como dice Krugman, podemos vislumbrar lo que pueden dar de sí los primeros años de Trump gracias a lo que hizo Reagan, que tiene un fuerte parecido con lo que Trump promete. Reagan era un liberalizador, y un anti déficit, pero la verdad es que hizo lo contrario de lo que pregonaba, y lanzó el déficit público y la deuda a un gran nivel, por su política de aumento del gasto militar y su reforma a la baja de los impuestos. Vean el le primera figura el despegue de la deuda/PIB en los años de Reagan.

 

En el gráfico siguiente vemos que esto tuvo una serie de efectos que pueden muy bien reproducirse con Trump:

 

Los dos mandatos de Reagan se caracterizaron por un fuerte déficit fiscal (línea azul), que aumentó la demanda interna e hizo crecer fuertemente el PIB (línea negra). Ese fuerte crecimiento interno relanzó  el déficit exterior, reforzado además por una gran apreciación del dólar (línea verde de puntos), impulsada por la entrada de capitales. Se hablaba entonces de los twin deficits por la magnitud del déficit fiscal y exterior. El crecimiento del PIB real llegó a alcanzar un 7,5% en 1983.
Mientras, los demás países adelantados languidecían, por lo que en 19985 se produjo el Acuerdo del Plaza  por el que los paises de G-7 tomaban una serie de medidas internas y externas para frenar la subida del dólar (se aprecia en el gráfico la súbita caída del dólar en esas fechas). En 1987, dos años después, a los paises del Plaza les pareció excesivo la devaluación del dólar, que llegó a alcanzar el 50% frente al yen, e hicieron un nuevo acuerdo, el Acuerdo del Louvre de 1987, por el que se decidió invertir la política cambiaria de los bancos centrales para frenar la caída del dólar. Sin embargo, como se ve en la imagen, el dólar siguió cayendo hasta principios de 1988 y se quedó en un bajo nivel hasta 1991.
Lo que hay que resaltar aquí es que la política de Trump de aumentar el déficit fiscal (ha anunciado 1 billón de inversiones en infraestructuras) y de recortar los impuestos a las empresas, va a lanzar la demanda interna, lo que aumentará el PIB. Esto, irremediablemente, aumentará la demanda de importaciones, y por lo tanto el déficit exterior. ¿Nos encontraremos con un escenario como el de Reagan? en esto de los Twin Deficits, es algo más que probable. 
Lo que pasa es que las promesas de Trump contienen otro elemento, el proteccionismo, que podría frenar algo o mucho el déficit exterior, además de atraer dinero a las arcas del gobierno, por el aumento de los impuestos a las importaciones. En todo caso esto no pasará inmediatamente. Lo que sí que veremos seguro será una gran subida de dólar, por la atracción de capitales que producirá un gran crecimiento que aumentará la rentabilidad de las empresas. ¿Permitirá Trump el nacionalista que los capitalistas no americanos se apropien de las empresas nacionales? Nótese, en todo caso, que su intención de penalizar a las empresas americanas que inviertan fuera refuerza el argumento de grandes entradas de capilares y revalorización del dólar. 
Lo que venga después depende de la reacción de los actores a estos hechos probables. Trump hasta ahora ha sido impulsivo y ha mostrado una gran rapidez para firmar cualquier papel que dictamine fastidiar a los demás, como el muro de Méjico, que ha dicho va a financiar con el gravamen a las importaciones de dicho país. La fijación con Méjico es para hacérselo ver, pero desde luego que Méjico tendría todo el derecho del mundo a responder de una u otra forma. 
No sabemos cómo reaccionará a la subida del dólar, al aumento del déficit, etc, pero seguramente será por la vía del arbitrismo sin negociar, y con resultados que pueden ser un boomerang para su propio país. Además, hay cosas que han empeorado desde los años ochenta, como el nivel de deuda, cifrado ahora en un 110% del PIB. Esta deuda tendrá que aumentar necesariamente para financiar el aumento del déficit. Otra razón para revalorizar el dólar, porque esa financiación es entrada de capital. 

miércoles, 25 de enero de 2017

Krugman versus Trump

No se pierdan el frío y clarividente alegato de Paul Krugman contra el nuevo presidente de EEUU. Magistral. 
Claro, que todo es opinable. Hoy, Roberto Centeno (voluntario en la campaña de Trump) escribe un artículo sobre las bondades que Trump va a traer a EEUU y al mundo en general. Puede que Centeno tenga razón en algunos de sus críticas a Obama, sobre todo en política exterior. Cuenta una historia que si es verdad es para agradecer que Obama se vaya para siempre:

Y en el summun de los disparates, Obama ordenó la realización de ejercicios militares en Lituania y Estonia, en las fronteras mismas de Rusia, como si buscara un incidente. Maniobras en la que los riesgos de colisión entre aviones de EEUU y Rusia han sido enormes, algo que los comandantes operativos han evitado (“probablemente” a sugerencia de su antiguo jefe, el mítico y condecorado general James Mattis, nuevo secretario de Defensa, ya que aún no podía darles órdenes). Esa ruptura se hizo clamorosamente patente el pasado día 4 en la base militar Myer-Henderson Hall en Arlington en su discurso de despedida a la Fuerzas Armadas, en la que la mayoría de los asientos estaban vacíos.

Obama ha tenido un papel oscuro, sino siniestro, en la primavera árabe y la guerra de Siria. Casi deja caer a Egipto  manos de los Hermanos Musulmanes. Pero las cifras son clarísimas: su política económica ha logrado el pleno empleo. Krugman dice con razón que qué va a pasar cuando el paro empiece a subir, pues no puede bajar más. Esto, a pesar del proteccionismo programado,  que, vía retaliations, no puede más que sumir al mundo en una contracción del PIB; aparte de la más que probable subida del dólar. Es posible que esto sea algo lento en desarrollarse, y que este año sea de gran crecimiento mundial. Pero es posible también, dada la transparencia con la que Trump agrede a sus ciudadanos y a los demás países, sin respetos mínimos por las reglas de la diplomacia más elemental, que surjan más pronto que tarde expectativas pesimistas sobre la economía mundial. Dado su narcisimo incontenible, como lo llama Krugman, la única ventaja del personaje es que no oculta nada, cumple su palabra, y que lo más que podemos desear es que no alcance un segundo mandato. Trump es un signo de los tiempos que vivimos. Su estética de pesadilla, desde su peinado a su obsesión por el color oro, que ha puesto en las cortinas del Despacho  Oval, es una muestra perfecta del "todo vale" de hoy en día. Desgraciadamente estoy de acuerdo con Krugman, que nos quedan por ver cosas mucho peores todavía. 

martes, 24 de enero de 2017

Réquiem por la socialdemocracia europea

Como sabrán de sobra uds, la socialdemocracia española está de capa caída. El PSOE, antaño hegemónico de la izquierda, es un partido hecho trizas y sin cabeza visible que inicie su reconstrucción. El mismo panorama tenemos en el resto de Europa, en Francia por ejemplo, donde Manuel Valls ha caído en las primarias pese a ser primer ministro. Manuel Valls ejemplifica, condensa perfectamente, el motivo de este trompazo de la mitad de la estabilidad europea: un ministro socialista que a mitad de legislatura se pone a hacer políticas de austeridad y recortes de derechos laborales - aunque ha fracasado estrepitosamente contra la jornada de 35 horas. 
Y es que hoy, en Europa, bajo el dominio de la ideología de austeridad y política de la oferta, junto con la falta de válvulas de escape como la flexibilidad cambiaria, no hay margen para hacer políticas sociales de izquierdas. Y lo malo es que la izquierda misma se puso la soga al cuello cuando se alió con la derecha democrática para promocionar y lanzar el euro. Creía que la nueva moneda iba a permitirle  manipular el tipo de cambio de toda Europa bajo gobiernos de izquierdas, preparada lo que ha resultaos es que se ha quedado sin campo de juego para poder ofrecer y desarrollar políticas de bienestar. No sé quién asesoró tan mal a la social democracia, pero la verdad es que daba escalofrío ver a todos juntos, derecha e izquierda, desfilar bajo la bandera del euro que les iba a cortar necesariamente las alas de acción de gobierno.
Una vez consolidando el euro, y con la aversión alemana a frivolidades fiscales, ¿que espacio queda para un partido de izquierdas? Exactamente el mismo que el de un gobierno de derechas: la política de oferta, es decir, flexibilización laboral y superávit fiscal. 
Es verdad que hay otras políticas de oferta además de estas dos grandes líneas, como las describe aquí Hermann Simon. Política de formación de la clase trabajadora, de carácter dual - como él mismo dice - es decir, teórica fuera de la empresa y práctica en ella, una de las fuentes de de aumento de la productividad a largo plazo tan necesaria para un país. Pero el PSOE por ejemplo está muy lejano a esto, como lo está por cierto el PP. Leamos lo que responde a la pregunta de si a España le falta mucho en ese camino: 

El éxito de la industria exportadora germana se debe a muchos factores. El primero es la ambición de muchos empresarios. Eso les llevó a una fuerte especialización. Como esa focalización implica un mercado pequeño, el siguiente paso ha sido alcanzar un gran mercado. Es decir, vender en todo el mundo.  Para ello, crearon fuera filiales propias. Otra premisa de liderazgo es innovar constantemente y estar cerca del cliente. Y para esto se necesita personal altamente cualificado y fiel a la empresa. Son estrategias que se pueden aprender. 

En España he observado que muchos empresarios están satisfechos con su éxito local. Pero en el mundo global esa actitud puede resultar peligrosa. La clave es combinar la especialización y la internacionalización, sin olvidar la formación de los empleados. Creo que la industria española se ha opuesto a implementar el sistema de formación dual, que permite completar la formación teórica con la formación práctica en la empresa. Y eso es fatal. Una de las razones del elevado paro juvenil en España tiene que ver con la escasa implicación de la empresa en la formación dual. (Cursivas mías.)

Pero esto no depende de una ideología, sino de la cultura que explica por qué a Alemania le ha ido tan bien en la crisis, y por qué se niega a realizar políticas fiscales de ayuda a Europa del sur. Da la impresión de que a Alemania no le interesa perder su gran ventaja adquirida en el mundo, que le ha permitido independizarse de la suerte del resto de Europa. En otras palabras, Alemania no va a acceder fácilmente en las peticiones de más unidad europea, que es lo único que podría dar margen a una política fiscal unida y homogénea. Aunque, sinceramente, no veo que funcionara a satisfacción de todos, sino más bien como una potencial fuente de divisiones sobre los objetivos y los medios. Alemania tiene un modelo económico-social muy especial, que no es capitalismo puro, y que dispone de tres o cuanto piezas  de engranaje de la parte laboral, patronal y estatal difícil de imitar en un contexto cultural diferente. 
En todo caso, con el euro, con las limitaciones fiscales y la reglamentación europea en vigor, no hay terreno de juego para la social democracia... a menos que hiciera una gran reconversión de sí misma e intentara "socializar" las políticas de oferta que son las únicas disponibles, lo cual requeriría nuevos liderazgos, grandes batallas internas, un largo proceso, pero con objetivos que no son los que ahora se plantean en las discordias actuales. En otras palabras, un nuevo PSOE desde el secretarios General hasta el último militante. 
¿Quiere decir esto que el PP tiene él gobierno asegurado? No se puede asegurar nada en el estado de fluidez extrema en la que está el mundo. No se puede asegurar nada en el Mundo ni en Europa. Rajoy es un personaje sobre todo adaptativo, que se ha amoldado bastante bien a Europa, en la que se maneja con soltura. Pero Europa no está asegurada en su estado actual. Europa tiene amenazas de dentro y de fuera. De fuera, Trump se va a desentender de la defensa de Europa, lo que es una tragedia. De dentro, sus enemigos populistas siguen creciendo. El Brexit es un enigma de futuro. Rajoy sin la Europa actual no sería nada. ¿Y España?

lunes, 23 de enero de 2017

Turbulencia Trump

Donald Trump le ha faltado tiempo para demostrar que no iba de farol en sus amenazas de poner el mundo patas arriba: ha firmado la  solución de EEUU del TTP, Tratado de Libre Comercio del Pacífico, desdeñando de un plumazo a países como Japón y Australia. Ha anunciado que va a renegociar el NAFTA, Tratado de Libre Comercio con Canadá y México. Por si acaso alguien dudaba de donde dirige sus dardos cargados de odio, ha ordenado suprimir las traducciones al español de todas las páginas de Internet de la Administración Federal. 
Ha regañado sin ningún miramiento a las empresas de EEUU que estén pensado en invertir en el extranjero, pero no ha dicho cuál será su reacción cuando los billones de dólares invertidos en EEUU por empresas extranjeras decidan marcharse. ¿Por que lo harán? Muy fácil: el proteccionismo trumpiano, que ha dicho que es su principal objetivo, va a elevar los costes de producción en un país cada vez más cerrado, lo que es una invitación a marcharse. 
Parece deseoso de que sus actos demuestren que cree en lo que dice y que no vale la pena reflexionar un poco antes de tocar el delicado mecanismo comercial que se empezó a montar con Clinton, en 1993, cuando éste firmó el NAFTA. Ya he dicho que EEUU tiene motivos para considerarse perjudicado por China, pero China no está en el TTP que Trump ha anulado de un plumazo. 
El proteccionismo salvaje de un solo país contra todos no puede más que desastibilizar el escenario internacional, sobre todo cuando tratados como el TTP tienen un alto componente estratégico. 
Trump cree que este proteccionismo que no se ha visto desde los años de entre guerras, va a devolver al pueblo americano su antigua prosperidad. Eso es imposible, sobre todo porque el cambio tecnológico habido desde que las manufacturas de EEUU se perdieron impiden volver a aquellos tiempos. Lo único que va a conseguir es encarecer la vida de los americanos, que es un resultado cierto del proteccionismo: encarece las materias primas, los costes de producción, los precios de consumo, e incita a los trabajadores a pedir aumentos salariales por encima de la productividad, en un escenario de estrechamiento de los mercados no sólo de importación, sino también de exportación: no es esperable que los productos americanos sean recibidos con alegría en el resto del mundo. 
No pintan bien las cosas para los demás. 
Falta que cumpla su promesa de deshacer la OTAN y dar y dar una patada en el trasero a la UE... que es lo que está deseando Putin, al parecer el que será su aliado más íntimo. 
Y esto el primer día de sentarse en el despacho oval. EEUU ha sido desde el fin de la II Guerra Mundial el abanderado del libre comercio internacional. Ha sido también el guardián del orden internacional (algo que sé que a muchos les produce horror, pero imagínense que la Guerra Fría la hubiera ganado la URSS), lo que este sujeto está dispuesto a desmontar, lo cual sólo puede perjudicar a sus compatriotas.  
Un cambio de alianzas en el tablero internacional demasiado virulento. Un cambio de visión demasiado radical para que no traiga consecuencias muy negativas para todos. 

sábado, 21 de enero de 2017

Lucas versus Trump. Historia de las ideas económicas en un Twitter

A propósito de las intenciones de Trump de protección contra las importaciones, una vieja frase de Robert Lucas: 

Lucas : In economic policy, the frontier never changes. The issue is always mercantilism and government intervention vs. laissez faire and free market.

Si amigos. A eso se viene a reducir la historia de las ideas económicas. 

viernes, 20 de enero de 2017

Inquietante discurso de Trump

  • Donald Trump ha inaugurado su mandato con un discurso (que pueden leer íntegro aquí) del que se vislumbran cosas inquietantes. Hay que destacar sus promesas de más proteccionismo contra las importaciones, mayor dureza contra la inmigración, y grandes dosis de populismo. Para populismo, el de Donald. Nada que ver con nuestros populistas, simples comunistas zarrapastrosos que nos quieren convertir en un soviet tercer mundista (oigan a Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento de Madrid, diciendo que "hay que feminizar la administración" (sic)). Populismo fetén, el de Trump. Con todos sus defectos, yo lo prefiero, aunque algunos perfiles son francamente amenazantes para el resto del mundo.El plan de Trump es utópico. Devolver a los americanos-víctimas de la globalización lo que ésta les ha quitado. Como ya dije aquí, imposible. Eso se perdió para siempre. Las industrias que perecieron por culpa de la globalización no se recuperarán jamás, y menos con tarifas a la importación. Por otro lado, EEUU es el rey de la nueva tecnología, a la que Trump no ha mencionado siquiera en su discurso. Parece que para él esto es anecdótico. No es de extrañar, si escuchamos a Coppola su opinión sobre lo dos hombres clave en el diseño del plan:


    Trump's trade agenda was set out in Peter Navarro & Wilbur Ross's paper (pdf) of September 2016. Peter Navarro's most famous work is the documentary "Death By China" which essentially blames China for all America's woes. Wilbur Ross is a businessman who made a fortune from buying up and restructuring manufacturing businesses, some of them protected by George Bush's trade tariffs. Both of them are unashamedly protectionist, labelling countries running large trade surpluses as "cheaters" and "manipulators" and demanding that the rules of international trade be changed to benefit America at their expense. Both of them have been appointed to top trade jobs by Donald Trump. 

    Mmmm... dos sujetos que parecen mirar al pasado... Pero intentar recuperar una industria periclitada poniendo en peligro la potencia única de las empresas que gobiernan el mundo de la tecnología, es suicida. Porque es obvio que si se excede en su proteccionismo sobre las manufacturas de otros países, habrá "Retaliations", y están recaerán sobre las industrias punteras americanas. Las mismas consecuencias o similares tendrá intentar que vuelvan a repatriarse empresas nacionales transplantadas a otros países, por el poco amable sistema del palo (castigo fiscal) y la zanahoria (recompensa fiscal), según se avengan o no a volver a reinstalarse en el suelo patrio. Todo esto suena muy inquietante para el resto del mundo. Como hay otros focos de anti globalización en marcha (la pelea de Brexit versus UE), el resultado puede ser traumático para según y quién le caiga la pedrea. Pero es inevitable pensar que el PIB mundial se encogerá, ineludiblemente. Menos PIB, más paro mundial. Otra de las promesas estrella de Trump me convence más: gastar dinero público en rehabilitar las empobrecidas y abandonadas infraestructuras. Es curioso que ahora los republicanos salgan con esto, cuando se han negado en redondo durante el mandato de Obama, pero como ven, las cosas de la política son igual de cínicas en todas partes. ¿Que puede dar de sí la combinación de más déficit público, más impuestos sobre importaciones, una rebaja impositiva a las empresas...? En mi opinión, todo esto junto ha de traer un aumento de la demanda interna, lo que aumentará la demanda de importaciones (Lo normal es que el aumento de la demanda prevalezca sobre la subida de impuestos a las importaciones), que sin embargo soportarán más impuestos: esto tendría que aumentar la inflación, por el mayor coste interno de las importaciones que se trasladaría a precios internos. Aquí entraría cuál será la reacción de la FED, según esta presión inflacionista rebase ciertos límites, pero con reacción de la FED o no, los tipos de interés aumentarán. Habría que ver cómo afecta a la deuda pública la suma neta de rebajas impositivas y aumento de la inversión pública, a coste de interés mayor, pero tarde o temprano saltaran las alarmas. Lo que pasa es que los Republicanos controlan ambas cámaras, por lo que habrá más tolerancia a la deuda. En suma, Trump promete dos cosas incompatibles, que es aumentar la demanda y reducir el déficit exterior, complicado con un plan agresivo de protección contra determinados países, que replicarán también con proteccionismo. Un sudoku complejo con sus derivaciones en el tiempo nada fáciles de predecir. Habrá un impulso inicial a la economía mundial, que luego puede verse desinflado a medida que se caliente la guerra comercial. ¿Hasta dónde llegará esta amenaza? Hay que decir que Trump no tiene razón, pero tiene razones en señalar con el dedo a los chinos (y otros países de la zona), cuya política comercial ha sido de piratería. Los chinos deben rectificar su esquema económico ahora que es una potencia mundial. Pero Trump no debería iniciar el sólo una guerra contra todos. Debería saber quiénes son sus aliados, y hasta ahora cuenta con un Reino Unido a punto de romper con la UE y parece ser que Rusia. Amenazar antes de tiempo no es aconsejable, y es lo que ha hecho hasta ahora. Su discurso de hoy no le desmiente. Amenazador, retador, y populista. Y, desgraciadamente, potenciador de otros populismo en el mundo.

jueves, 19 de enero de 2017

Norte, Sur, escándalo

De mi amigo Marcus Nunes, este gráfico sobre la diferencia del impacto del euro en la Europa del Norte y la del Sur del euro. En él se compara la evolución del PIB nominal de cada zona (Norte, Sur) respecto a su línea tendencias a largo plazo según la evolución histórica. No hay palabras. Bueno, siempre habrá algún mentecato que se empeñará en asumir que la culpa es suya, o sea nuestra...


 




El paradigma es que no hay paradigma

Empieza Trump su mandato en un mundo dislocado, en el que los gobiernos mundiales - los que pesan en el mundo - se dan la espalda, y los oponentes internos que pretenden quitarles el sillón anuncian que quieren un nuevo paradigma que no tiene una sola cara, ni una sola forma: lo primero que piden es más nacionalismo y menos cosmopolitismo. Trump no ha venido precisamente a frenar estas nuevas fuerzas. Todo lo contrario.
Ante el fracaso de la globalización - que en realidad es el fracaso obligado por culpa de los tramposos como China - se ha erigido el malestar de las clases que vivían de un esquema vital con una visión presente y futura: mis hijos podrán vivir mejor que yo. Si yo soy tornero fresador, tendré una pensión y mi hijo podrá ser ingeniero. 
Todo eso ha saltado por los aires, naturalmente en la crisis, pero ya venía cociéndose de antes, como expliqué aquí, en "Juicio a la globalización". La globalización ha permitido jugadores que han jugado sucio, y no había un árbitro para sancionarlos y expulsarlos. Concretamente, China manipuló durante décadas su tipo de cambio, que fue lo que le permitió arrasar los mercados e invadirlos de sus productos. Esa manipulación - aparte de arruinar la vida de las clases medias trabajadoras de los países desarrollados - le permitió acumular gran cantidad de reservas internacionales, en dólares sobre todo, y ese ahorro exorbitante fue el primer eslabón de la burbuja mundial que estalló en 2008 (como explico en el post "Cuatro narraciones de la crisis"), con la ayuda de un sistema financiero occidental descontrolado y frenético. 
No es extraño que estemos en pleno desconcierto. El desconcierto de Europa es doble, porque al estallido del paradigma global se añade el suyo propio del euro, emblema de una superpotencia que ya tenía que estar haciendo sombra a EEUU, pero que lo único que puede hacer es meter la basura de su disfunción bajo la alfombra, pisotear a Grecia para que no estalle (lean "La tragedia griega: cuanto pude aguantar?"), mientras ve asomarse por las murallas las huestes de Marine Le Pen, e Inglaterra le ha dicho tajantemente que no cederá en los puntos calientes de la inmigración y las fronteras. Inglaterra quiere que su parlamento controle las leyes internas, lo que además de ser lógico, entre otras cosas es un ejemplo ante la desidia de otros, como España, en cumplir una Constitución flojeras que se raja ante cualquier embate. Nadie la respeta, ni los mandatarios, como en las cumbres fuera-de-la-ley de presidentes de CCAA, en un bochornoso espectáculo que nadie cuestiona. Sí, el Brexit tiene más lógica de lo que se admite, pero es que las formas de pensar democráticas están pervertidas. Siempre he dudado que pueda existir democracia sin nación; el cosmopolitismo es por definición superfluo: es la propuesta de dejemos de ser lo que somos para no ser nadie. Pero la nación sigue siendo la pieza clave de la integración en el mundo, como se puede comprobar hoy con el desasosiego reinante, empezando por el Brexit. Nosotros hemos creido que nuestra democracia funcionaba por transfusión desde Europa.
Por cierto, que esa cesión lánguida del poder legislativo a la Europa burocrática le ha costado a la socialdemocracia europea la gran posición hegemónica que tenía. Su apuesta por el libre mercado sin controles, contra natura, pensado que con el euro compensaría todo, le ha salido mal. Rematadamente mal. 
En España, ¿cómo va a haber paradigma si no nos viene dado de fuera? Así estamos que no sabemos qué hacer con nosotros mismos. Ir tirando es lo único que se nos ocurre. Europa no hace ni caso de la cuestión Catalana, y sin embargo puede ser una bomba peor que Grecia, si la pones en la fila de problemas que arrastra Europa. Una Cataluña independiente es un problema mucho peor que Grecia. 
Europa es una disfunción total, donde manda el más fuerte, pero sin autoridad moral. Ese que manda tiene la idea clara de manipular Europa monopolizando su encaje en el mundo, siendo ella la única voz cantante (para Trump -según nos dice Gideon Rachtman -, la UE es "el vehículo de Alemania en el mundo") pero el mundo se está "desestructurando", y Trump viene con la intención de acelerar el proceso. Así que nos quedaremos colgando de la brocha, unos más que otros.
Se nos hunden los dos paradigmas que han adormecido a España desde la muerte de Franco. El de la internacionalización y el del europeismo pero, chitón, no lo sabemos todavía. Tendremos que esperar a que otros nos digan lo que debemos soñar. No esperen que soñemos en una España que construyamos nosotros, que siempre sería un buen principio. No, mejor empecemos la casa por el tejado. Por ejemplo, destruyamos lo que hay y hagamos una confederación de nacionalidades ridículas. Y dialoguemos mucho, mucho, que eso siempre hace pasar el tiempo.